Para Chaeyoung no hay nadie en el mundo que tenga el corazón tan grande como el de Mina, o puede que sí, una especie en contra sí que lo tiene más grande que la menor pero por tamaño no por lo que siente, Myoui Mina era la chica más amorosa que ella ha conocido en toda su vida y por las que muchos creen que es una amargada es mentira porque ella no conoce esa faceta de la menor así que para sus ojos es mentira que se trata de una persona de ese estilo, se niega rotundamente a creer que es así.
Siempre que la ha necesitado ha estado para ella nunca con una mala cara por más que su vida no sea tan buena como desearía que fuera, es lo que ha escuchado de sus madres, en embargo, está segura que gracias a ella y todo lo que la ha hecho vivir sabe muy bien que las sonrisas que le regala Mina son demasiado sinceras más de los que de seguro muchos creerán que son.
- Mina -, la llama y esta abre un ojo para verla, está con la cabeza apoyada en sus piernas y se ve tan hermosa con los pequeños rayos de sol que caen como una cascada de oro en su hermoso rostro, su corazón vuelve a latir por esos pensamientos y sonríe un poco haciéndole saber a la contraria que eso provoca en ella, instantáneamente la mayor le responde el gesto con un apretón en las mejillas.
- Dime, linda -, ese apodo era nuevo y si que le gustaba tanto que su cuerpo reacciona a el con mucha rapidez tanta que siente que no sabe muy bien que hacer con todo lo que su ser le está queriendo decir, eso que le esta gritando oara que se dé cuenta de absolutamente todo.
- ¿Por qué estás actuando así conmigo? -, para una triste y confundida Son no era tan bueno que la tratará de esa manera y que lo que estuviera sintiendo la hiciera sentir de esa manera tan extrañada, nunca lo ha sentido antes y ahora todo es tan fuerte que le cuesta mucho saber cómo debe expresar, ni siquiera puede hacerlo con palabras mucho menos con gestos, sus ojos se llenan de lágrimas y la mayor al ver eso se asusta tanto que se sienta para abrazarla.
Cambiando nuevamente de roles a los que siempre les han correspondido.
- ¿Actuar cómo? -, le agarra la mano y se la acerca al pecho, Mina se queda un momento procesando, sintiendo como el corazón de Chaeyoung late tan rápido que siente que se va a salir en cualquier momento, - Chae-Chaeyoung -, le toca también la frente y la contraria aleja la caja con molestia.
- Así me haces sentir cuando me dices esos apodos o haces esas cosas -, la señala al verla sonreír, - ¿Hay algo que me estás ocultando y por eso actúas así? -, Mina no sabe que es a lo que se refiere porque hay dos grandes secretos que no le ha dicho uno por miedo y otro para no quitarle la felicidad porque tiene miedo de transformarla en una persona que no tiene una pizca de lo que es Chaeyoung, es decir alguien perfecto que no le importa nada ni siquiera lo que dice mucha gente a sus espaldas porque es como quiere ser, demasiado auténtica para este mundo.
- Sí te molesta que diga esas cosas entonces no le haré -, la abraza sin responderle a la pregunta y cierra los ojos sintiéndose mal al escucharla llorar, sabe que alguna de las dos cosas que tiene ocultas para ellas son la perdición y que puede llegar a romperse por cualquiera de ellas.
Ambas las pueden separar y no quiere eso, no antes que la que no puede detener se haga realidad.
- No me refiero a eso -, se limpia las lágrimas y suspira, Mina al ver se le rompe el corazón, no es muy común verla llorar siempre se la pasa riendo y haciendo reír a las personas a su alrededor, es como un pequeño ángel que es capaz de llenar de felicidad a todas las personas a su alrededor, - Quiero que me respondas lo que pregunté -.
- No hay nada -, miente y se traga el nudo que tiene en la garganta, - Todo está bien pequeña nada malo está sucediendo -, le acaricia el rostro y la mira a los ojos antes de darle un beso en la mejilla.
- Quiero creerte así que lo haré -, Mina le limpia las lágrimas y le da algunos besos repartidos por el camino de las mismas en sus mejillas.
- ¿No tienes algo que me quieres contar? -, pregunta con la voz rota, lo que menos quiere es hacer llorar a una persona tan noble y perfecta como lo es Chaeyoung, la chica que siempre ha estado para ella porque no solo es ella para Chaeyoung.
Ambas son el apoyo de la otra de mil maneras posibles, incluso algunas no las saben todavía.
- Tú corazón es tan grande como el de la ballena azul -, dice y sonríe en grande al ver los ojos de Mina bien abiertos.
- ¿De cuánto estamos hablando? -, Chaeyoung aprieta los labios formando los hermosos hoyuelos que hacen que el corazón de Mina lata cada vez más rápido.
- Puede pesar hasta seiscientos kilos -, abre las manos intentando sorprender aun mas a la mayor que está boquiabierta por la información.
- Eres demasiado inteligente -, una vez más le revuelve el cabello sacando risas de ambas, - Tengo que irme -, se levanta al ver la hora, - Mañana llegaré más temprano para poder estar contigo más tiempo -, le da un beso en la frente y suspira.
- Por favor porque ya falta poco para que se termine el verano -, Mina abre la puerta y mira la pared frente suyo.
- Si... -, su labio inferior tiembla, - Demasiado rápido pasó el tiempo -, cierra la puerta y comienza a caminar, no quiere irse pero lo mejor es hacerlo para no escuchar a su madre gritar por más que está haciendo lo que ella desea.
Siempre le jode la vida.
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