Finalmente había llegado el momento que el enfermero estuvo queriendo evitar, pero la hora en el reloj no iba a detenerse. Siguió la ruta que le era usual, sentía como si hubieran sido años sin recorrer aquel pasillo.

Para suerte de los guardias, YoonGi les pedía que se quedasen en el piso superior, el ya tenía la suficiente "confianza" para entrar al sub suelo completamente solo. Aun así, los uniformados se quedaban atentos por si algo salía mal.

Abrió la puerta encontrándose con el ocupante sentado en una esquina oscura.

-Hola- Dijo con simpleza.

-Volviste- Afirmo el muchacho.

-Es mi trabajo...-Dejo la caja-... ni te atrevas a hacerme mala cara que te avise con anticipación.

...

-¡No hagas eso!- Reprocho al ver como ponía los ojos en blanco.

-Eres demasiado confiado; no me tienes miedo, eres insolente, casi me encadenas...-Se levantó y se acercó- te vas, me dejas con el sádico de JungKook y luego...-Pero se detuvo a medio camino.

YoonGi no entendió nada hasta que JiMin puso una expresión que el ya conocía previamente, ya no se extrañó cuando el joven empezó a olfatearlo con atención.

-¡Hey!..-JiMin estaba descontento.

"Debí usar más perfume"

- ¡Estuviste de nuevo con ese idiota! Y para colmo no es el único olor.

"Ahí vamos de nuevo" Pensó.

-Escucha, debes entender que no eres el único paciente que tengo... atiendo a cinco en total -Se defendió.

-¿No te das cuenta verdad?...- Vaya... por un momento, JiMin tomo el camino razonable antes que soltar una sarta de insultos o quejas- ese rubiecito quiere algo contigo.

-Ya lo sé... -Oh sí, eso lo sabía de sobra... gracias a ello tenía un pequeño dilema en su cabeza.

-No, tal parece que no...

En la cabeza del joven, las cosas encajaban de manera distinta... cosa que provocaba estragos en sus decisiones...

Y lo peor era que todo habia iniciado con aquella noche donde ese enfermero tuvo el acto "piadoso" de no atarlo con una cadena.

Su cabeza, que llevaba años sin deducir problemas sociales, no estaba preparada para afrontar cada extraña acción de YoonGi; para empezar aun no entendía por que no se lo comía, estaba suelto, sin guardias... y su olor era deseable ¿Qué faltaba? ¿Qué era diferente?

Por otra parte, estaba el hecho de sentirlo como de su pertenencia, sentimiento quizás acrecentado por las memorias de aquel niño que conoció en su niñez, si... quizás por eso era diferente con el. Además, en todo caso sería igual que con JungKook, amigos desde antes y por eso era tolerable.

Pero YoonGi no era JungKook.

Para nada, ambos eran demasiado diferentes; empezando por que hasta ahora la "piedad" con la que nombro esa voluntad para seguir atendiéndolo, seguía fiel a un horario. Ni siquiera su peli blanco ex amigo se dignaba a ser constante...

Su mente estaba dañada, de eso no cabía duda...

¿Por qué entonces podía controlarse mejor que antes? Años encerrado debieron hacer de sus impulsos algo más pasable... o así lo sentía, pero no habia manera de saberlo, no sin arriesgarse a volver arriba.

Se lo dijo a JungKook el día anterior..."No conozco ni mi propia naturaleza..." ya que lo que le hicieron era confuso incluso para él.

-¿Qué estás haciendo?- Se dio cuenta que YoonGi sostenía un objeto y buscaba algo en el techo.

Pero el no respondió si no hasta dar con algo- Aquí esta... -Era el cable que colgaba discretamente en el techo, antes solía ser una lámpara de cono pero en uno de sus peores momentos la había roto y dejado colgando una conexión que adivinaba ya no tendría electricidad.

Cuando vio como enroscaba ese objeto supo de inmediato o que se proponía -Cortaron la corriente hace mucho.

-Lo sé, por eso fui a la caja de fusibles para ver si podía hacer algo - Termino con su tarea y busco a tientas en la pared un olvidado interruptor.

Cuan rápida era la luz, la habitación se ilumino de una suave luz blanca pero dejo ciego al huésped de la celda.

-De verdad que llevas demasiado tiempo aquí, este es el foco con menos voltaje que encontré- Corrió hacia él asegurándose de que estuviera bien.

-Apágalo- Ordeno mientras se cubría.

-Lo siento; pero tienes que acostumbrarte si no jamás podrás caminar bajo el sol, aunque bueno... son pocas las veces que sales -YoonGi recordó aquel amanecer que el día anterior presencio en el bosque.

-Apágalo o romperé la bombilla- Amenazo.

-Ya quisiera verte hacerlo, para cuando puedas abrir los ojos ya te abras acostumbrado...- Se dirigió a la puerta- entonces será inútil que la rompas.

-¡YoonGi! Te lo advierto niño estúpido... en cuanto te vea...

Interrumpió molesto:-¿Qué? ¿Qué me harás? Ya me has herido física y verbalmente, solo te queda comerme y hasta ahora no lo has hecho- Dicho esto azoto la puerta.

En el pasillo, el enfermero suspiro... "Ni siquiera pude preguntarle los nombres" Seguro el doctor le daría más trabajo aquellos días.

AL DIA SIGUIENTE

YoonGi cargaba con un montón de papeleo que debía organizar mientras sus pacientes desayunaban. Efectivamente JungKook le estaba presionando. Por ende, se pasó toda la noche pensando cómo podría extraerle la bendita información a su paciente más difícil, a esas alturas el joven debiera estar imaginando cincuenta maneras de empalarlo por dejarlo semi ciego en su ya difícil estancia.

-Es necesario, es necesario...-Se repetía. "Él no es malo, solo necesita ayuda.... Mmm... aunque no quiera" Concluía cada vez que recordaba como lo trataba.

Podría ser cruel con el, insultarlo, empujarlo, morderlo... etc. Sin embargo el no entendía por qué aquel sentimiento seguía en su corazón; hacia un tiempo que se admitió el interés que tenía hacia JiMin, pero... si veía desde lejos las cosas su mejor opción era mirar hacia otro lado, donde cierto joven rubio evidenciaba con insistencia un mejor camino.

"No quiero, sé que saldré muy mal si sigo así" Tomo el camino hacia la sala de enfermeras.

Se negaba a continuar, el latente peligro latía en su cabeza como una severa advertencia... pero su corazón le decía que tenía un trabajo que terminar ¿A dónde la llevarían sus decisiones? Fue entonces que en medio de su caos emocional, recordó una frase de una vieja película que vio en su adolescencia:

"...el caos del mar conduce a muchos lugares mi niña, quizás te lleve a un mejor destino."

-Ojala- No pudo recordar a que escena partencia aquella frase ya que se vio de pronto con la pila de archivos en el suelo.

-¡Lo siento!- Una voz frente a el hizo que levantara la mirada, alguien había provocado el accidente.

YoonGi no respondió, su acción inmediata fue recoger el desastre. El desconocido lo imito para ayudarlo.

-No... no es necesario que me ayudes- Respondió con sequedad.

-No me fije por donde iba, lo siento.

Demasiada amabilidad era asombrosa para el enfermero, no es que ahí todos fueran fríos o algo parecido pero hacia mucho que no se relacionaba con alguien no relacionado con el hospital.-Ah, gracias- La pila fue recogida, fue ahí cuando YoonGi se tomó el tiempo de observar al visitante. Este llevaba ropa de civil, tenía la piel medio morena y pelo castaño, además de una ligera barba. Le calculaba unos 26 años...

Fue entonces que se fijó dónde estaba ¿Cómo llego a la recepción? Se aconsejó a si mismo estar menos metido en su cabeza para la siguiente. Antes de volver a su ruta el desconocido hablo:

-Disculpa de nuevo, estoy buscando al director del lugar.

YoonGi entrecerró los ojos-¿Para qué?

-Me asignaron a este lugar, ya que me dijeron que transfirieron a uno de sus doctores- justifico.

-¿Quién te envió?-

-¿El sindicato de hospitales? Ellos son los que regulan las transferencias.

-De acuerdo...-el enfermero no estaba muy confiado-... Sígueme.

El camino hacia la oficina del director no fue largo, pero el muchacho no quitaba el ojo de aquel sujeto, un raro presentimiento le dijo que quizá a su jefe no le gustaría tal decisión de sus superiores.

-Aquí es- Índico.

-Gracias.

"No me da buena espina" Pensó. Se dio la vuelta dispuesto a cumplir con sus tareas cuando de nuevo el joven lo detuvo.

-Oye...-Se giró-... ¿Cuál es tu nombre?-

"¿Y a este qué?" Por alguna razón se sentía muy reacio a contestarle. Pero no fue necesario ya que la puerta fue violentamente abierta.

-¡YoonGi! Vaya, estas aquí... ¡Necesito los archivos ya clasificados!- Dios, el Doctor estaba de malas aquel día.

-¿JungKook?- El sujeto hablo, el enfermero prestó atención para cuando el peli blanco se dio cuenta del tercero. Aquel día, el chico conocería otra faceta de su queridísimo jefe...

-¿YuGyeom?

Quien diría que el serio y frío Doctor JungKook se podía sonrojar.

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