Narrador Omnipresente

- ¿Cómo te llamas? - Dijo una suave voz. se dio la vuelta rápidamente, lo vio ahí sentado en el suelo, como la cosa más inocente del mundo.

- Mi nombre es YoonGi, soy el nuevo enfermero - Trato de sonar delicado, era la primera vez que veía a uno de los pacientes, no se imaginó que los dejaran andar solos tan temprano, no había alcanzado a ponerse el uniforme aún, si apenas se había registrado esa mañana.

- ¿Por qué no usas el uniforme? - Dijo con ternura.

- Es que acabo de llegar - noto el pequeño peluche en sus manos.

- A Cosa roja le agradas.

Rápidamente se dio cuenta de quién era.

- Tu... ¿Eres TaeHyung?

- Si

- ¿No deberías estar en el comedor con los otros?

- No puedo ir

- ¿Por qué?- se inclinó para hablarle más de cerca.

- Alguien está en la puerta y no me deja pasar

- Mmmm. - El chico recordó el expediente que leyó de él. No tenía más de 26 años y era un esquizofrénico

- Deja que me cambie y yo te acompaño para que puedas entrar - Le ofreció.

- Suena bien - Por un momento una sonrisa del peli morado ofusco la constante tensión que se veía en su rostro.

- Espérame entonces - se dirigió al vestidor donde marco un uniforme como suyo; al salir busco a su paciente quien miraba atentamente una planta. - ¿Qué haces? - Dijo algo divertida.

- Cosa Roja dice que haga esto.

- ¿Y Cosa Roja no tiene hambre? - Dijo en un intento de llevarlo a desayunar.

- No lo sé... pero yo si.

- Ven conmigo - Dijo ayudándolo a pararse.

- Sabes dónde se encuentra el paciente... - YoonGi trato de recordar, mientras TaeHyung trataba de alcanzar con la boca la cuchara que YoonGi dejo en el aire - ¿HoSeok?

TaeHyung se detuvo he hizo una mueca.

- No, no lo sé.

- Bueno, ya veré si lo encuentro después, debo darle unas pastillas - Dijo preocupado.

- Disculpa...- Otro enfermero se le acerco.

- ¿Si? - Dijo mientras le daba a TaeHyung la cuchara para que se terminara su cereal.

- Tu eres YoonGi ¿Verdad?

- Si

- Mi nombre es SeokJin, vengo porque quiero hablar contigo, uno de mis pacientes ahora será tuyo - Indico el rubio.

- Claro...

Ambos caminaron hasta un rincón del comedor, el salón estaba lleno de pacientes, algunos jugaban como niños, otros comían solos, y varias enfermeras supervisaban el desayuno.

- Veras, te habría dado el expediente yo mismo pero me dijeron que el director ya te lo dio...

- Es verdad - YoonGi recordó al amargo hombre.

- Quería agradecerte. - Uso un tono animado - Yo estaba encargado de 6 personas pero gracias a ti ahora tengo 5 como las demás.

- ¿Cinco?

- Sí, es complicado ya que falta personal pero hacemos lo que podemos - Dijo con entusiasmo y notable alegría.

"¿Qué clase de paciente era del que se libró?"

- ¿Cómo se llama el paciente? - El muchacho estaba interesado en saber de quien se trataba

- Bueno, de eso quería hablarte, no sé si leíste de un "caso especial" en el reporte - El rubio estaba nervioso.

- De hecho si, quería preguntárselo a el Doctor JungKook pero no lo he visto desde ayer.

- Si debes... el tiene la llave para el subsuelo

- ¿Hay un subsuelo?- Estaba sorprendido.

- Sí, yo tenía una copia de la llave pero se la di al director cuando te transfirieron; mi paciente es el único de los de abajo que puede salir

- ¡¿Tienen encerrada a personas aquí?! Además... ¿No los dejan salir? - No se lo creía.

- Shh... no lo digas tan alto...- Susurro - No es algo que se deba hablar en público.

De pronto una luz roja sobre la puerta se encendió y una alarma sonó dejando a YoonGi muy asustado, no sabía que estaba ocurriendo. Luego una voz por los altavoces hablo.

- El paciente de la habitación 70 ha causado un incendio en la sala común, se le solicita a la enfermera encargada acudir inmediatamente

- ¡Diablos! - SeokJin se llevó la mano a la frente - Debo irme, no te preocupes por "evacuar" o algo así, usualmente ese chico no hace más que una pequeña fogata - dicho eso SeokJin desapareció entre los pasillos. YoonGi tenía los nervios de punta.

- No deberías preocuparte - Dijo una voz no muy lejana.

- ¿Eh?- giro hasta ver a un muchacho apoyado en la pared, tenía una expresión aburrida y despreocupación en la voz.

- Esto sucede por lo menos cuatro veces por semana, ese tonto no sabe controlarse.

Parpadeo un par de veces, después volvió a su modo enfermera- ¿Tú quién eres?

- Mi nombre es NamJoon -

-  Ajaja... ya te recuerdo "Su rostro se me hacía conocido" eres uno de mis
pacientes.

- ¿Tú eres el nuevo enfermero?

- Si

- ¿Cuál es tu nombre?- Dijo acercándose un poco.

- YoonGi.

- Hmm... - Lo miro fijamente, como si lo analizara, cosa que incómodo al muchacho - Te conozco de alguna parte.

- Podría ser ¿Cuánto tiempo llevas aquí?

- Creo que 15 años

- ¿Tan... tanto tiempo?

- Sí, desde que tengo 11-

- Entonces no nos conocemos- Dijo aun sorprendido por el tiempo.

- Lo recordare, sé que te he visto antes - Ignoro al chico.

- Bueno, pero tu... ¿Cómo estás hablando tan tranquilo? ¿No se supone que tienes...- Trataba de recordar- ¿Síndrome de Tourette?

- Acabo de tomar la medicación - Se justificó.

- ¿Quién te la dio? - Dijo alarmado, se supone que el es su enfermero.

- Las tomo solo, no necesito de enfermeras - "Que terco"

- Bueno, de hoy en adelante avisame cuando lo hagas, así podré anotarlo en el reporte - Indico con los brazos cruzados, YoonGi ya adivinaba que clase de actitud tendría que tomar para mantener a este paciente tranquilo.

- No te prometo nada - No dejo que el chico dijera algo más ya que se fue a través de uno de los pasillos.

- Bueno, al menos ya se con quién voy a tratar - Dejo salir el aire que retuvo sin darse cuenta, solo restaba buscar al doctor JungKook.

Cuando se terminó el desayuno, muchos de los pacientes volvieron a las habitaciones, otros recibían visitas supervisadas: YoonGi aprovecho ese momento para ir a la oficina principal.

- ¿Doctor? - Asomo la cabeza.

- No hay nadie - Entro por completo, se acercó al escritorio viendo un montón de papeles desordenados encima "Debe estar muy ocupado" pensó.

Camino mirando las gavetas y libreros, varios tenían libros de medicina, otros reportes que seguro habían entregado el día anterior, pero al llegar a la esquina vio un bote de basura cerrado, tenía un tamaño considerable, lo que más llamaba la atención fueron las vendas con sangre que sobresalían de la tapa. Ahí fue cuando vio el equipo inusualmente grande de primeros auxilios justo al lado. - Pero... ¿Y esto? -

"¿Por qué necesita tantas vendas?"

Por un momento YoonGi dudo de su propia seguridad. Salió apresurado de la oficina, era una suerte que el Doctor JungKook no lo haya descubierto, pero ahora tenía muchas dudas.

- ¿No los has encontrado aún?- SeokJin se sentó junto a el en la mesa blanca de la enfermería, este era un breve receso para las enfermeras, antes de acompañar a sus pacientes en el almuerzo

- No, solo encontré a dos de ellos - pasaba aburrido las páginas de uno de los expedientes.

- Antes de que se me olvide, te tengo una buena noticia... El Doctor JungKook dejo la llave del subsuelo en recepción, te acompañare para que conozcas al paciente.

- Te lo agradecería - Estaba a punto de volver a hablar pero la puerta se abrió de golpe.

- ¡Jin, Jennie! ¡HyeJin las necesita de inmediato! - Ambas enfermeras corrieron para recibir instrucciones de la "¿Doctora? Usa bata blanca y no uniforme" - y salieron rápido; después la misma mujer se fijó en el.

- Oh... tú eres el nuevo, ¿Verdad? Yo soy la psicóloga Mina Sharon Myoui. pero tú dime Mina - Se sentó frente a el.

- Un gusto - Dijo en tono suave, noto los rasgos asiáticos y su ligero acento, se sorprendió por lo bien que hablaba coreano.

- ¿Qué estás viendo? - Se asomó la psicóloga.

- A mis pacientes, el doctor JungKook me dijo que estudiara los casos - Dejo entrever el expediente de NamJoon.

- Ese muchacho es difícil, pero si te ayuda en algo... a él le gusta los cangrejos - Dijo guiñándole el ojo.

- Gracias por el consejo - Dijo mientras se levantaba, en ese momento el timbre anuncio la hora del almuerzo.

- ¿Por qué fuiste? - Le pregunto a Jin mientras caminaban por un largo pasillo silencioso, esos eran los almacenes de medicamentos.

- Uno de los pacientes tuvo una crisis, se llama ChanYeol y justo hoy su enfermero no vino... Y al único que dejo que se le acercara fue a mí ya que llevo más tiempo aquí con el después de Baek.

- Ya veo... - Poco a poco entendía la dinámica de trabajo en ese hospital.

- Aquí es...- Se pararon frente a una puerta - Si llegas a trabajar de noche no te asustes si ves guardias, es por seguridad. - Sonrió mientras sacaba la llave y abría la puerta. Ambos bajaron las escaleras y un pasillo no muy grande dejo ver varias puertas con seguros, unas pequeñas ventanas gruesas en la parte superior de la pared dejaban pasar una opaca luz, la tierra del jardín las ensucio desde afuera.

- ¿Dónde está?. - Jin buscaba el ... interruptor - ... Aquí - Y unas lámparas dejaron ver un pulcro piso de mármol y paredes blancas, entonces se escucharon voces.

- No te preocupes por ellos, algunos acostumbran a molestar a quien sea que baje - Dijo Jin totalmente despreocupado.

Eran como murmullos ya que las paredes eran insonoras. Mientras se acercaban a la puerta más cercana y Jin abría los seguros; noto la gran puerta de metal al final del pasillo, no tenía ventanas como en las demás y resaltaba por lo blindada que parecía, el reflejo de sí misma en aquel frio metal solo lo hacía sentir más incómodo "¿Para qué es esa habitación?"

- Listo...- El sonido de la puerta, lo saco de su trance - ...Ven- Le indico el rubio.

Al entrar se pudo ver un cuarto como cualquier otro, una pequeña sala con sofás sencillos, una televisión mediana y la luz de la lámpara daba una fresca luz al lugar, casi olvida que estaban bajo tierra.

- ¿MinHyuk? - Jin busco en una de las puertas mientras YoonGi miraba con atención el lugar. Del baño salió un muchacho con una toalla en las manos, YoonGi no se lo podía creer. El expediente decía claramente "ENFERMEDAD: Sadomasoquismo"

¡¿Quién era este chico?! ¡Lucia totalmente normal! YoonGi se sintió un poco culpable por imaginarse a un depravado en algún calabozo y una camisa de fuerza.

- Jin, que bueno verte - El joven se acercó.

- El es YoonGi, vendrá en mi lugar desde hoy - Dijo señalando a YoonGi, El correspondió con una nerviosa sonrisa y un ademan.

- Mi nombre es MinHyuk - Dijo tendiéndole la mano; con aun la culpabilidad latiendo en su cabeza le correspondió. "Es más normal de lo que imagine"

- Bueno...- Jin hablo -... es hora del almuerzo, ven con nosotros - Y los tres salieron de la habitación. Antes de volver a subir las escaleras, le dio una última mirada a la puerta de fondo; tenía un incómodo presentimiento.

Cerca de las 10 de la noche varias de las enfermeras cenaban y algunas se cambiaban. Era un momento donde muchas charlaban acerca de las cosas que ocurrían en el hospital, algunas ocurrencias graciosas o quizás intercambiaban consejos acerca de algunos pacientes; pero el deber principal antes de irse era entregar los reportes.

YoonGi al fin había conocido a su último paciente, pero de lejos ya que ese día se mantuvo todo el día en su habitación.

- Disculpa - YoonGi le llamo la atención a otra de las enfermeras, que en su gafete se leía "Jennie"- ¿Me dirías que debo poner aquí? - YoonGi trataba de terminar con el reporte.

Jennie se asomó y con una sonrisa le dijo:- Aquí pones si hubo algún incidente con el paciente sino le haces una línea y ya.

- Muchas gracias. pero - una duda no paso por su filtro de "sutileza"-. ¿Me dirías algo más?

- ¿Qué duda tienes?

- ¿Tú has bajado al subsuelo?-

- Esto.- De la nada Jennie se tenso, las otras enfermeras cerca pusieron atención mal disimulada - Sí, tengo un paciente abajo

- Perfecto...- YoonGi no hizo caso de la tensión del ambiente - ... Entonces ¿Sabes para qué sirve la puerta blindada que esta al fondo? - De pronto todos los ojos se dirigieron a ella.

Jin rio nervioso la tomo del hombro sacándola de ahí. - Oye... ¿Qué sucede? - YoonGi Se arregló la camisa.

- No debes hablar de eso, es un tema demasiado delicado - Dijo con una seriedad que jamás creyó ver en su rostro.

- ¿Qué es?- La curiosidad de YoonGi estaba a flor de piel.

- El Doctor JungKook debería habertelo dicho ya...

- No me menciono nada, ni siquiera sabía que existía ese subsuelo, solo me tendió varios expedientes y me dijo "Escoge cuatro" - Lo último lo imito con la voz de JungKook.

- ¿Cuatro? Todas aquí manejamos cinco o más pacientes...- Jin estaba sorprendido -... solo JungKook tiene una excepción y las psicólogas ya que ellas tratan a todos

- No estoy entendiendo.

- Pregúntaselo a el...- Dijo refiriéndose a JungKook -... Pero, como consejo... No te acerques ahí - Y Jin volvió a la enfermería; se quedó solo pensando en esta situación "¿Qué secreto oculta esa puerta?"

- ¡Un caníbal! - YoonGi Golpeo el escritorio.

- Así es joven YoonGi - JungKook no dejaba su tono formal. Después de que varias se retiraran YoonGi por fin pudo encontrar al doctor para preguntarle lo que yacía detrás de la misteriosa puerta; ahora solo estaba consternado.

- ¡¿Cómo es posible?! ¡Es un asesino! ¡Debería estar en prisión!

-¡No le permito que....- JungKook se paró de su asiento.

- ¡¿Por qué esta aquí?! Se supone que esto es un hospital psiquiátrico, no una prisión psiquiátrica ¡Arriesga al personal teniéndolo aquí!

-Todos son conscientes de su existencia y la aceptan pero son pocos los que saben dónde está - La voz de JungKook era autoritaria pero ocultaba ira contenida.

- ¿Por qué yo lo se recién hasta ahora? No me hablaron de eso cuando me asignaron aquí.

- No es algo que deba preocuparlo... - JungKook se cruzó de brazos con una mirada mordaz-... yo me encargo personalmente de el.

- ¡¿Es por eso que hay tantas vendas en su basura?! - "¡Idiota! No debí decir eso" - Ambos voltearon hacia aquella esquina.

- Como podrá saber a veces ocurren incidentes, a pesar de que lo tenemos bajo máxima seguridad hay cosas que no se pueden evitar.

- Esto me parece un error - YoonGi puso su reporte sobre el escritorio y tomo su abrigo. Pero antes de que cerrase la puerta tras de sí, se detuvo al escuchar a JungKook de espaldas.

- Es un ser humano joven YoonGi, un hospital procura el bienestar de las personas... ya sea por métodos pocos ortodoxos pero todos merecen una segunda oportunidad.

YoonGi suspiro - Tal vez tenga razón- Y se dirigió al fantasmal pasillo, tenía que digerir el hecho que este hospital no era como otros que alguna vez visito en sus años como estudiante.

En casa, sentado en medio de la oscuridad y una taza de café,  la luz de la laptop era lo único que daba señal de vida... empezó su búsqueda para saber todo acerca de aquel lugar; tal vez había sido injusto y no presto atención a la información adicional. Quizás si podría haber sido advertido de a donde se metía.

Pero lo que encontró era más desalentador.

Noticias, informes, periódicos... todo acerca de aquel lugar. Todo era común, "Ingreso de tal alborotador." "Que se recupera tal persona..." "Cambio de director..." pero las cosas cambiaron quince años atrás, y ahí lo vio...

"Caníbal asesina 5 personas en una pizzería"

La información no estaba completa pero indicaba que después hubo varias desapariciones y luego el sujeto tuvo su ingreso en el Hospital Nevermind, de ahí en adelante se notaba vacíos entre los informes.

La policía asistió el caso dejando al público de lado... como si quisieran que todo el mundo olvidara su existencia.

Cuando las noticias policiacas pararon empezaron las desapariciones, no una, sino dos enfermeras desaparecían por año hasta que una le dijo a los periódicos que algo extraño ocurría en el hospital, un año después JungKook tomo el puesto como director; haciendo cuentas, el tomo el control al sexto año del ingreso del caníbal; desde ahí se registra la desaparición de una enfermera por año hasta el anterior.

- Aquí hay algo raro...- Volvió al reporte de la enfermera que hablo con los periódicos...

"Aquí hay cosas raras, en las noches llega un camión de donde el director supervisa el traslado de cajas..."

"...se escuchan gritos en el ala oeste, no muchas enfermeras tenemos autorización de entrar ahí..." "...una de mis compañeras baja todos los días al subsuelo, me dijo que jamás me acercara ahí..."

"...hace dos meses dos de los pacientes desaparecieron; el director dijo que escaparon pero uno de mis pacientes me dijo que vio cómo se los llevaban al ala oeste en la noche..."

La cosa se expandía mas allá de lo que pensaba.

"¿En qué me estoy metiendo?"

Por un momento se alejó de su computador... su instinto le ordenaba cerrar su laptop, irse a la cama, olvidarse del asunto, hacer como las demás enfermeras y fingir que no pasa nada.

Esa noche no pudo dormir.