Mirando el panorama
Con Raph.
Había quedado dormido después de un rato de estar aquí, el cansancio pudo ganarme por lo que rápidamente mis ojos se cerraron. Aún podía escuchar los distintos sonidos de mi alrededor, tanto los sonidos de los animales como del ambiente. A decir verdad era muy tranquilo....lo que más me preocupaba: que esta era la calma antes de la tormenta...
_______
Estimo que llevo ya horas aquí. Había despertado ya hace unos minutos y estaba mirando alrededor, me encontraba en un establo rodeado de muchos caballos, o eso puedo inferir, teniendo en cuenta lo que viví cuando llegué y lo que he podido escuchar en lo que llevo en este lugar; paso a mirar lo que me habían dejado de comer... ¿Una manzana? ¿En serio?
Mi estómago rugió en ese momento, llevaba ya varias horas sin haber probado alimento ni mucho menos agua, pero mi desconfianza me ganaba. Estoy secuestrado en un lugar que ni conozco y me han dejado alimento, ¿quién asegura que no le han echado algo y esperan a que coma para hacerme quien sabe qué?
Suspiro pesado.
—Estoy harto...
Digo sin mucho ánimo, me acuesto sobre la fría jaula metálica en la que no veo escapatoria, estoy agotado de ver lo mismo todo el tiempo, no, de hecho, estoy cansado de sentirme como un animal. Maldita sea, puede que no sea del todo humano pero... soy libre, y eso no dejaré que me lo quiten...
—Me siento tan...cansado...
Y por segunda vez vuelvo a quedarme dormido.
______
Ruidos de pasos me despertaron de inmediato, quedé sentado rápidamente mirando a la dirección de donde los escuchaba, venían para acá.
«Lo que me faltaba, maldita sea.»
Mi corazón latía muy rápidamente, no sabía lo que se avecinaba, y mi mente no dejaba de gritarme que solo corría peligro ahí metido; a cada paso que daban parecía que el aire se escapaba de mis pulmones. Mi corazón se detuvo cuando vi la puerta del establo abrirse.
Un hombre con vestimenta negra se asomó por la puerta, pude notar que era de los que estaban ahí cuando me bajaron, parece ser de uno de seguridad. Cuando fijó su vista en mí, una asquerosa mueca de asombro se asomó por su maldito rostro.
Yo me mantuve apoyado en la parte de atrás de la jaula. Rápidamente miró el plato con agua y la manzana que me habían dejado desde el día anterior, se acercó sin más y se agachó para tomarlos con las manos, me miró al parecer queriendo decir algo, pero puede que lo incomodara de alguna forma, por lo que duró un rato mirándome de vez en cuando, quizás buscando las palabras correctas, pero terminó rindiéndose. Se levantó y me dirigió una última mirada antes de cerrar e irse.
Pude respirar después de que se fue.
—Mierda, cuanto tiempo estaré aquí metido...—llevé mis manos al rostro estresado por la situación.
Pero nuevamente los pasos volvieron, por lo que quedé en la misma posición de antes, la misma persona entró de nuevo, esta vez, con otro plato de agua y una naranja en su mano. Se agachó y dejó todo lo que trajo esta vez más cerca de la jaula, tal vez pensando que así me animaría a comer quizás un poco, fijó su vista otra vez en mí.
—Ehh...por favor come algo...
Yo no quitaba la vista de encima, buscando quizás alguna señal que me dijera que no podía confiar en él, pero parecía igual de nervioso que yo. Al ver que no hice ningún movimiento que le hiciera saber que había entendido se levantó y se sacudió los pantalones que se habían llenado un poco de tierra, para, por lo pronto, salir y cerrar la puerta.
Suspiré con pesadez, odiaba sentirme así.
—No se si pueda confiar en alguien... esto no es un lugar para mí...
Después de decir eso me quedé en silencio nuevamente, escuchando los caballos moverse por sus establos y comer su eno, eso de alguna forma hizo que me diera más hambre, miré a la nueva fruta que me trajeron.
—Tsk...no se que hacer...
Lo dudé por un rato, pero terminé acercándome lentamente hacia lo que habían dejado y al estar tan cerca de ellos, y verlo fijamente no tardó el hambre y la sed en hacerce presente con gran intensidad. De alguna manera esa naranja se veía más brillante y jugoza, mi estómago se retorció con fuerza y mi garganta se secó de repente.
Nuevamente me encontraba en medio de una batalla entre la razón y la necesidad de probar alimento después de tantas horas; mi mente me repetía que esto era una trampa y que no podía confiar en ellos, y mi cuerpo, específicamente mi estómago y mi garganta pedían a gritos un poco de alimento y de agua; me encontraba débil, corría el peligro de enfermarme y eso era peor... Asi nunca escaparía.
Mi estómago volvió a retorcerse, por lo que terminé rindiéndome y tomé la naranja con las manos, empecé a abrirla llenándomelas así de su jugo saliendo ese fuerte olor cítrico que la caracteriza; al tenerla abierta me quedé mirándola un rato, aún me encontraba nervioso por lo que pudiera pasarme, mi garganta se sintió más seca y fue cuando cedí a mis instintos.
Di la primera mordida y jamás me había sentido tan aliviado, seguí comiendo como si nunca lo hubiera hecho —aunque no está tan alejado de la realidad— a cada mordida que daba pequeñas gotas de su jugo caían por mis brazos y mi garganta, siendo un oasis contando lo seca que la tenía; me sentía de nuevo con energía, era como si de la nada todo hubiera mejorado. Ya cuando terminé de comer dejé la cáscara a un lado y miré el agua, ya no estaba tan sediento, preferí dejarlo para después, no se hasta cuando me den alimento o agua de nuevo.
Sacudí mis manos y me volví a acomodar en la parte de atrás de la jaula, donde me recosté perezosamente. Ya más tranquilo me dispuse a mirar alrededor, el establo era grande.
—Pues claro, aquí meten caballos.—me dije con oviedad.
Los muros eran altos, si mucho podía alcanzar a ver un poco de afuera, veía las copas de los árboles y las nubes pasar, era un buen día a decir verdad.
Con eso en mente, me quedé un rato queriendo almenos tener una idea de donde estaba, por si me era importante, aunque realmente donde estoy eso no ayuda mucho.
Pasado un rato de estar más tranquilo y con comida en el estómago, decidí concentrarme bien en la situación.
—Ese maldito de Hun...me vendió a quien sabe quien, maldito...la supo hacer bien... Ahg maldito idiota.
Me dolía tanto admitirlo, pero fue una buena estrategia, cualquiera compraría a una tortuga hunanoide para...quien sabe que cosas retorcidas.
—¿Para qué me querrá ese sujeto?...
Mi mente divagaba, no recordaba nada. ¿Quién podría...?
—Claro...fue Él.—dije soltando un jadeo por la impresión.
Un recuerdo borroso se cruzó por mí mente; caía yo del segundo piso después de casi haber escapado y un hombre de piel blanca con cabello castaño me miraba cínicamente. No recuerdo más de eso...
Mi cuerpo empezaba a volverse más pesado, o así lo sentía, todas mis articulaciones empezaban a dolerme, y sentía como mis párpados empezaban a volverse más pesados. Por un momento creí que si había algo en la comida pero haciendo recuento...he pasado por muchas cosas, y no puede ser posible que caer de un segundo piso no haya hecho ningún daño en mí, que claro, mi caparazón amortiguó el golpe...pero ahora que me siento mas tranquilo, que la tensión se fue....me siento muy adolorido.
—Mierda....
Sin más, me acosté suavemente sobre la jaula. La cual dejaba la sensación de frío del principio para ahora, estar más cálida. Me centré en ver las pocas nubes que visualizaba mientras una frase no dejaba de pasar por mi mente hasta quedarme dormido.
‹‹"Estoy muy lejos de casa..."››
______________
Me desperté abruptamente tras escuchar como abrían la puerta del establo y se acercaban a mí. Me senté rápidamente y pude ver como eran 3 hombres vestidos de negro (como el primero que había venido esta mañana) que me miraban fijamente, me encontraba alerta, atento a cualquier cosa que quisieran intentar esos hijos de puta.
De la nada, escuchaba cómo se acercaba una especie de carro, aunque debía de ser pequeño para poder entrar hasta aquí, al entrar, pude ver como un hombre con las ropas un poco sucias llevaba aquella máquina en la que me habían bajado cuando llegué. La piel se me puso de gallina, querían llevarme a quién sabe donde. Tenía el ceño fruncido, no me gustaba para nada la situación, estaba en total desventaja, encerrado y a merced de cualquiera. ¡Maldita sea!
Los guardias le abrieron paso aquel hombre para que llegara hasta mí. Cuando estuvo cerca, entre todos empujaron la jaula hasta quedar en esa máquina y así dejarle el mando nuevamente al hombre de ropa sucia para empezar a sacarme del lugar. Miraba para todos los lados, no sabía que hacer, de nuevo estaba siendo trasladado a un paradero desconocido y con quién sabe qué persona.
Los caballos al verme se alborotaron, relinchaban con fuerza y se ponían en 2 patas, completamente horrorizados.
Mis nervios estaban a flor de piel, entre más me acercaba a la salida de aquel establo mi corazón latía con más fuerza. Apenas salí vi que habían dos personas más esperando afuera, tenían las ropas algo sucias, por lo que pensé que eran los que trabajan ahí, ellos se sorprendieron mucho al verme, sostuve su mirada con repulsión, jamás olvidaría sus expresiones al verme... Me sentía tan sucio...
Inmediatamente vi a mi alrededor, era de día, podía ver incluso unas montañas, me fijé de nuevo en la enorme mansión que tenía cerca, si que estaba sorprendido, nunca había visto algo como eso.
Pero sólo había visto la parte de atrás. Los establos quedan detrás de la mansión, y también algo alejados, pude conocer cosas nuevas del lugar, grandes palmeras, jardín muy extenso y muchos lujos, demasiados. Ellos me llevan por un camino del jardín, hacia lo que parece un pequeño edificio blanco con grandes ventanas. Mi estómago se retuerce con fuerza de los nervios, muchas cosas para nada agradables reproducía mi cerebro sobre lo que podía pasarme, estaba aterrado.
Pronto entramos, llegando a lo que parecía una recepción, el lugar era bastante grande, una de las personas que se alejó por los pasillos del lugar mientras el otro aún tenía su agarre en la carretilla esa, yo podía escuchar algunos animales por el lugar, varios pájaros, ladridos o incluso de garras moverse.
El hombre volvió y siguieron el camino por donde se fue. Pasamos por habitaciones, pude notar algunos animales enjaulados, la verdad vi muy poco, pasamos muy rápido. Entre más me acercaba más grandes eran las ganas de vomitar que sentía. Pronto entramos a una habitación espaciosa, tenía una camilla, una mesa y varios mesones con frascos y muestras, siendo todo de color blanco.
Ellos salieron del lugar dejándome solo...solo en ese lugar sin tener idea de lo que iba a pasarme. Sin más, una persona entra al lugar, trayendo con sigo una bata blanca puesta.
Con las demás tortugas...
Leo se encontraba en la cocina, había salido de su sesión de meditación con su padre y había vuelto para preparar algo que los llene de energía para la busqueda de la noche, sus hermanos se encontraban tirados en el sofá, ahora con varias hojas y marcadores alrededor, ideando cosas de a donde hubiera podido ir su hermano o lugares que normalmente frecuentara, no sabían que mejor hacer.
Ya sus amigos estaban en la tarea de buscar algún rastro que pudiera llevarlos con él. Para ser honesto, no entendía muy bien porqué pareciera que todo se había salido de control, si si hermano en verdad solo decidió salir para despejarse o si en realidad le pudo pasar algo.....su cabeza no paraba de decirle que tal vez solo quería un tiempo y que en realidad estaba bien en algún lugar.... sentía culpa por lo que pasó, pero también guardaba la esperanza de que solo estuvieran maximizando toda la situación y que su hermano podría entrar a la guarida en cualquier momento como si nada hubiera pasado....almenos guardaba esa probabilidad...pero de no ser así:
No dudarían en buscar alguna cosa que pudiera llevarlos con él.
FIN CAPÍTULO 6º
¡Buenas las tengan gente! Jajajja perdón por la demora pero las clases virtuales y el hecho de estar en el último año escolar no es tan fácil jeje.
Espero les guste y que vean que aun sigo con vida.
Quería agradecerles por el gran apoyo que le dan a esta historia, de verdad, muchas muchas gracias, y también por las veces que me animan y me perdonan el hecho de demorarme, de verdad, se los agradezco mucho, son de las razones por las que aun escribo y sigo aquí.
Muchas muchas gracias, esperen otro capítulo más ❤️
Att: Maryturtle7
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro