Disclaimer: Detective Conan y Magic Kaito son propiedad de Gosho Aoyama.

Advertencia: Fanfic de genero Yaoi/BL con drama, corazones rotos, llanto, arrepentimientos, amor no correspondido, angustia, mentiras, dolor y romance.

«Aunque aun no conoces mis sentimientos por ti, creo que lo mejor es terminar con todo e irme.

Porqué, cada vez que estoy contigo, siento como mi fragil ser se llena de lagrimas»

Kaito observa su demacrado rostro frente al espejo del baño, sus ojos están levemente rojos, tiene ojeras y su piel se ve pálida. Es un completo desastre.

Toma un poco de agua entre sus manos y la lleva hasta su cara para lavarla.

Se siente realmente cansado, quiere volver a su cama y dormir hasta que la noche llegue, sin embargo le es imposible.

Más ahora que Shinichi se encuentra en la sala de su departamento esperando por él.

El simple hecho de recordarlo le estresa.

¿De que quería hablar?

Realmente no podía encontrar una posible respuesta en su cabeza y eso le aterra.

Con pereza, Kaito toma la toalla que se encuentra colgada a un lado del espejo, seca su rostro y sale del baño para poder cambiar finalmente sus prendas.

Habría preferido tomar una larga ducha para refrescarse y despertar completamente, pero con el detective esperándolo en su sala era algo incomodo.

En cuanto Kaito terminó de abrochar su reloj de muñeca, se observó frente al gran espejo de su recamara para comprobar que se viera bien y, posteriormente, se encaminó hacia la sala en silencio.

Al llegar al lugar se encontró con Shinichi observando la pantalla de su smartphone con una radiante sonrisa.

Kaito supuso que se encontraba hablando con Ran, pues sabía muy bien qué solamente aquella mujer era capaz de hacerlo sonreír de tal radiante forma.

Aprovechando la distracción del contrario, Kaito lo observó desde la entrada a la sala con detenimiento.

Shinichi llevaba un elegante e impecable traje azul marino hecho a medida junto a una camisa blanca y una corbata negra.

Por un momento, se preguntó el porqué de su vestimenta, pero sus dudas no duraron mucho al dirigir su mirada al reloj en su muñeca.

«14:53 PM.»

Shinichi seguramente acababa de volver del almuerzo qué tenía programado con los padres de Ran aquel dia.

Recordaba vagamente que lo había mencionado durante la fiesta del dia anterior.

—¿Kaito?—el repentino y algo confundido llamado de Shinichi lo hizo salir de sus pensamientos.

—¿Qué tal te fue en el almuerzo con tus suegros?—formuló Kaito sin pensar. Realmente no quería saberlo pero ahí estaba, preguntando por ello.

—Oh, bien, la madre de Ran está realmente emocionada por la boda—dijo con alegría mientras una sonrisa se instalaba en su rostro.

—Ya veo—dijo Kaito mientras se forzaba a sonreír—Supongo que es de esperarse, después de todo el matrimonio es algo… Maravilloso—musito sin emoción alguna.

Shinichi observó con pesar a Kaito, como si fuera capaz de notar que aquellas palabras estaban llenas de dolor. Separó sus labios con la intención de hablar pero se vio frenado por la duda y solamente desvío su mirada apenado.

Kaito tampoco hablo, ni siquiera hizo el intento de crear charla, no tenía la energia y muchos menos los ánimos para ello.

Simplemente observó como Shinichi desviaba su mirada de él con incomodidad, dándole paso libre a un largo e incómodo silencio entre ambos.

¿Hace cuánto no sucedía esto entre ambos? No, la verdad era que aquel escenario nunca surgió entre ellos hasta ahora.

Era doloroso ver que su relación poco a poco comenzaba a ser distante.

Kaito suspiro pesadamente, llamando la atención de Shinichi, y procedió a ir a la cocina para tomar un vaso de agua. El incómodo ambiente le secaba el paladar.

Shinichi lo siguió en silencio y se detuvo en la entrada observando al mago con duda, temiendo a hablar por un momento, pero finalmente formulando sus palabras.

—Kaito, ¿Eres Gay?

El joven mago se atraganto con su propia saliva y dejó caer el vaso de vidrio que había sacado de una de las alacenas segundos antes.

Los trozos de vidrio salieron volando golpeando y cortando su pie izquierdo, lastimandolo levemente.

—Miérda—murmuro Kaito sintiendo sus heridas arder.

—¿Estas bien?—cuestionó Shinichi, preocupado, mientras se acercaba rápidamente a él.

—¡No te acerques!—exclamó Kaito sin dirigirle la mirada—Hay vidrio por todo el piso, es peligroso…—se excusó. La verdad era que no quería verlo ni tenerlo cerca.

—Pero Kaito…—musito con desesperación al ver como el mago empezaba a levantar los vidrios con sus manos y se hería en el proceso—¡Estas lastimandote!—exclamó con molestia mientras ignoraba las palabras de Kaito y se acercaba finalmente a este.

Shinichi jalo a Kaito fuera de la cocina y lo obligó a tomar asiento en el sofá de la sala mientras él iba en busca del botiquín de auxilio en el baño.

Kuroba permaneció en el lugar, en silencio, observando los cortes en sus manos y pie.

Su mente era un caos, Shinichi acababa de preguntarle por su sexualidad y él realmente no estaba listo para esto.

Entre su fatiga y sus amargos sentimientos mañaneros, creyó que sería capaz de hablar con Shinichi sobre sus culposos sentimientos. Sin embargo, en cuanto aquel detective quizo iniciar la conversación él se sintió tan asustado. Así que ahí estaba, acobardandose en el último momento.

¿Qué debería hacer? ¿Mentir?

No, Shinichi era un detective y, sobre todo, lo conocía lo suficiente bien como para saber cuándo mentía.

Mucho más ahora, que no tenía elaborada una buena historia para acompañar sus mentiras.

Kaito mordió con fuerza y frustración su labio inferior. Se sentía desesperado.

La boda de Shinichi estaba a la vuelta de la esquina, él no quería aturdirlo con sus insignificantes sentimientos, no quería causarle problemas.

Solo quería tomar sus sentimientos y enterrarlos en lo más profundo de su corazón hasta que éstos finalmente murieran.

Porque no hay forma de que pueda amarlo por siempre, ¿Verdad?

Algún día su amor se desvanecerá, sabe qué, quizás, más adelante sus sentimientos cambiaran y entonces podrá ser libre.

Anhela por que aquel momento llegue algún día.

—Kaito—el suave llamado se Shinichi lo hace salir de sus pensamiento y elevar su mirada para encontrarse con el detective en frente suyo con un par de vendas y alcohol en sus manos—¿Te encuentras bien? Te vez algo pálido—dice mientras se acerca al mago y toca su frente con la intención de comprobar su temperatura.

—Estoy bien—dice Kaito rápidamente mientras aparta la mano de Shinichi de su rostro. El detective le dedica una mirada algo dolida por ello—Solo duele un poco—declara.

—Seguro lo hace, déjame tratar tus heridas—comenta mientras se arrodilla frente al mago y procede a inspeccionar las heridas en su pié.

Kaito no discute y simplemente permite que Shinichi hago lo que quiera con sus heridas. Sabe qué negarse sería problemático y ya tiene suficientes problemas con en detective como para sumar otro.

Prefiere permanecer en silencio y pensar una forma de salir de esa situación.

—Voy a empezar—musita Shinichi antes antes de empezar a tratar las heridas de Kaito.

El ardor del alcohol lo hizo estremecerse levemente en su lugar.

Kuroba observó a Shinichi limpiar los cortes en su pie y luego proceder a vendarlos con suavidad.

Aquello le traia tantos recuerdos.

Shinichi siempre fue amable con él, aun cuando lo conoció como Kid, siempre intentó ayudarlo y cuidar su espalda. Era alguien confiable y seguro, por eso lo amaba.

Dios, ¿Porque no puede evitar tener esos sentimientos?

Shinichi debería de haber dejado que tratará sus heridas solo, no preocuparse y ayudarle hasta el punto de arrodillarse, frente a el, en el suelo.

Eran exactamente ese tipo de acciones las que no le dejaban superar su amor. Le daban esperanzas aunque fuera imposible. Todo comenzaba a complicarse cada vez más.

Ah, todo sería más simplemente si Shinichi le odiase.

Porque así podría ser herido, rechazado, podría olvidarlo y seguir.

No tendría que preocuparse o temer por perder su amistad.

Kaito sonríe vagamente ante sus pensamiento y se dice a sí mismo qué eso es absurdo.

Aun si Shinichi le odiase, el lo amaría tanto como ahora. Porque era un idiota.

Un completo idiota enamorado.

Continuará...

Hey~ ♥

Ha pasado tiempo :) ¿Como estan?

Espero les haya gustado este capítulo.

Como verán, decidi separar esto en tres parte, finalizando todo en la tercera. Todo termino por extenderse demasiado asi que y crei que seria muy pesado mantenerlo asi.

En fin, muchas gracias por leer!

Espero verlos en la siguiente y ultima parte ♥