❝ ¡Feliz aquel que todavía tiene esperanza de emerger de este mar de confusión! ❞

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baltimore, maryland | zeke's coffee | sábado, septiembre 04, 2021, 10:24 a.m. | actualidad.

ADA SE ENCONTRABA ESPERANDO A LARISA FUERA DEL CAFÉ, todo el asunto de no saber cuál sería el siguiente movimiento por el silencio de Dominic la hacía sentirse perturbada porque aunque todo estaba en una calma fingida sabía que tarde o temprano iría tras ella, pensó en ello hasta que la vio en la entrada sacudiéndose un poco de la lluvia otoñal que ensombrecía la ciudad, pero le sentaba bien el clima nublado.

—¿Ya ordenaste?— Preguntó Larisa con un poco de tristeza al no saber como reaccionaría Ada.

—No, quise esperarte porque sé que a esta hora desayunas— Ada le sonrió no pudiendo disimular su alegría por verla.

Larisa le tomó la mano —De verdad siento mucho haberte gritado ese día, sé que hice mal— Ada le brindó otra sonrisa sincera.

—Yo no lamento haberte dicho lo que pensaba, pero si lamento el efecto que mis palabras tuvieron en ti, porque yo no creo eso de ti— Reforzó el agarre que tuvo en su mano y sin decir nada más ambas supieron que todo estaba perdonado porque así era su amistad, un constante flujo de confianza que se fortalecía porque cada acción llenaba la falta de palabras.

Comenzaron a beber de sus cafés y a comer en silencio antes de ponerse al corriente con todo lo que se habían perdido una de la otra bajo la mirada de Dominic quien no las perdía de vista pensando que su amistad había terminado.

—¿Y Chris?, creí que no se despegaba de ti— Se burló Ada.

—Le dije que me vería contigo pero no le dije que venía en su horario de trabajo, me ha estado cuidando mucho y extraño la independencia así que aquí estoy— Ada asintió entendiendo de que iba bebiendo de su café.

—¿Cuándo dejarás de romper las reglas, señorita leyes?— La pelirroja rodó los ojos con fingido fastidio.

—Espero que nunca— Hablaron un poco más hasta que se hizo medio día.

—¿Me das un aventón?— Preguntó Ada dándose cuenta de que no tenía para el próximo pasaje.

—Seguro, podemos cantar en el carro— Metió las llaves para quitarle el seguro al asiento de copiloto y prendió el carro para empezar a andar.

—¡Uy!, pon las de señora dolida— Pidió Ada haciendo un gesto con la mano indicando una botella de alcohol imaginaria mientras ambas se ponían los cinturones.

Prendieron la radio escuchando todo tipo de canciones hasta que algo se le hizo sospechoso a Ada, una van idéntica a la que la persiguió con Jano hace un mes iba tras de ellas y la sensación que eso le provocaba a su esófago no le estaba gustando.

—Lari, mira atrás— Por el retrovisor, le hizo caso —Es la misma van— En cuanto Dominic se dio cuenta de que ambas estaban al tanto, comenzó a acelerar en la autopista —¡Ay no, Lari!, ¡Písale!—La morena no terminó de gritar porque Larisa aceleró como si fuera la persecución de su vida.

—¡Márcale a Chris!— Ada sacó su teléfono para marcarle a Chris como le pidió Larisa.

El pitido se escuchó varias veces en altavoz, pero, no contestaba lo que inmediatamente las asustó, ¿y si Dominic le había hecho algo?, Ada comenzó a marcarle a Jano sin que Larisa se lo pidiera inútilmente, después del tercer tono decidió llamar a Santino quien tampoco contestaba llamadas ni había asistido al trabajo desde hace varios días.

Larisa comenzó a maniobrar por la autopista para salir, el auto que conducía era de color blanco, por lo que era llamativo entre los deportivos rojos, los trailers estridentes, los ubers con colores negros y metálicos que manejaban, por lo que reconocerla era algo fácil. La van finalmente desapareció, como si fuese arte de magia, pero esto no le dio calma a ninguna de las mujeres que estaban dentro del auto, incluso estaban más asustadas que antes.

¿Dónde estaba?

Así como desapareció, salió rebasando un trailer por delante haciendo que se volteara detrás del auto bloqueando el paso de los demás, frente a ellas la van giró de forma que se atravesó haciendo a Larisa perder el control del vehículo, el auto se volcó quedando ambas boca arriba.

—¡Larisa!, tenemos que salir— Ada se desabrochó el cinturón con cuidado con un brazo adolorido y sangrando, volteó a ver a su amiga quien se encontraba desmayada, entre el ruido sordo del accidente pudo distinguir un ruido lejano.

Su teléfono estaba sonando.

Como pudo sacó medio cuerpo del auto arrastrándose para ir al otro lado del auto con la adrenalina al mil recorriendo su torrente sanguíneo, estiró su mano para alcanzar su teléfono pero al tomarlo una bota le pisó la mano haciéndola jadear del dolor, achicando sus ojos pudo distinguir la sonrisa macabra de Dominic, quien se inclinó para tomar el teléfono.

—Hola, socio— Era Chris, quien había devuelto la llamada en cuanto pudo.

—¿Qué haces con este teléfono?— Inmediatamente se exaltó al no escuchar la voz de la morena.

—¿Sabes?, a veces haces planes pero la vida se empeña en hacer lo contrario— Comenzó Dominic—Mira, después de todo lo que has echo para protegerla, ¿dónde crees que está Larisa en este momento?— Apartó el teléfono observando a la morena poco a poco debilitarse, ahora tendría que matarla.

Los gritos iracundos de Chris se escuchaban a pesar de no estar en altavoz el teléfono, le tomó una foto a la trágica escena con satisfacción y se le envió para que viera que finalmente él lo había derrotado. Larisa seguía atada al asiento, sus brazos colgando y de su frente una herida sangrando con el fuego del trailer de fondo a varios metros de ella, Ada jadeando en el suelo retorciéndose por el vidrio introducido en su brazo, moretones y rasguños en ambos cuerpos.

—Eres un maldito hijo de perra— Dominic separó su oreja brevemente del teléfono tras el grito —Te haré pagar por todo esto.

—Compréndelo de una vez "agente Chris Evans", fuiste un inútil para cuidar de tu hija y lo fuiste también para cuidar a Larisa, mientras yo exista jamás permitiré que tengas a mi Diosa— Se escucharon pisadas del otro lado de la línea —Sé que intentas desesperadamente apartarla de mí, pero yo tengo derecho de antigüedad sobre ella.

—Imbécil, no te atrevas a ponerle un dedo encima porque te mato— Todos en la oficina del F.B.I. estaban asustados al escucharlo hablar, preparados para rastrear la llamada sabiendo que se encontraban ante la posible captura de Mefisto.

—Espera mis instrucciones...Oh, lo olvidaba— Rio repasando en su mente el rostro de su cómplice —Salúdame a tu ex esposa— Colgó.

Esto último hizo a Chris mantenerse hirviendo de rabia. Marcó el número de su cuñado y esperó a que haya salido de esa junta con Rhys, el ex esposo de Larisa no había dejado de fastidiar con que ellos no estaban capacitados para llevar la firma, no obstante los estaba subestimando de sobre manera.

—¿Hey, pasó algo?, Larisa no me contesta— Ni siquiera saludó, no era necesario, Chris lo entendía.

—Me acaba de llamar Dominic y tiene a Larisa— Jano se jaló fuertemente del cabello con frustración, se desajustó la corbata y abandonó su oficina sin cortar la llamada.

—¿Qué te dijo el gran hijo de puta?— Preguntó con coraje, estaba enojado pero por sobre todo estaba triste por sentir la impotencia de no cuidar bien de su hermana.

—Quiere que espere instrucciones, además mencionó a Mara, necesito hablar con ella— Colgó y azotó la puerta del departamento de investigaciones con sede en Maryland y se aproximó a su auto.

Iba atravesando el estacionamiento cuando algo le llamó la atención, o más bien, un ruido. El tic tac de unas manecillas lo dejó quieto hasta que entendió que era lo que iba a pasar, se escuchó el pitido antesala del estallido de la bomba, su auto estaba destrozado, afortunadamente no había nada de valor.

No le quedó otro remedio que parar un taxi después de que sus compañeros se quedaran a revisar los destrozos, quería ir directo a la casa de Mara, sin embargo, una llamada telefónica lo sacó de su discurso planeado de ira contra la rubia. Era ella.

—Contigo quería hablar...

—Se llevaron a Sarah.

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AAAAAA hola, aquí les traigo el PENÚLTIMO capítulo de ANGOS, lo sé el tiempo se fue volando.

Estoy muy muy muy muy emocionada porque conozcan el gran desenlace, les quiero advertir que estará muy largo el capítulo para que se preparen y lo lean con calma, también contará con un epílogo y después de ello les tengo una sorpresa.

Como la próxima semana estaré algo ocupada y tengo que ultimar detalles, el final estelar lo estaré publicando el VIERNES 24 de este mes, la verdad estoy super emocionada de que lean el final y podamos cerrar este ciclo en conjunto.

Sin más qué decir, nos leemos el próximo viernes y muchísimas gracias por todo.