Una Aparición Hermosa
Una Aparición Hermosa.
Diane.
Antes, cuando era humana nunca le intereso fijarse en los pequeños detalles de la vida, no fue hasta que regreso como una vampiresa y obtuviera una magnifica visión que comenzó a maravillarse con esos detalles y es por ello que justo en ese instante mantenía su vista perdida en las llamas danzantes de la chimenea, observar él va y ven de las flamas bailarinas y maravillarse con sus colores, le permitía serenarse y de alguna manera reconfortarse; Diane había perdido la noción del tiempo, no sabía cuánto había permanecido en la misma posición, simplemente no le importaba otra cosa que no fuera encontrar a Caroline viva, por supuesto que sus pensamientos no concordaban con sus actos debido a que había jurado que esperaría el regreso de Milo algo de lo que se arrepentía ferozmente, ella debería estar allá afuera buscando a su amiga y aun así ahí se encontraba, recostada en el sillón sin hacer nada.
-¿amor? –escucho a Logan llamándola, su voz se escuchaba en la lejanía a pesar de que se encontraba de pie tras ella –Diane.
No le contesto, necesitaba estar sola para seguir culpándose de todo.
-Diane –Logan insistió esta vez con voz firme y molesta –debes alimentarte.
En esta ocasión Diane se atrevió a mirarlo, Logan de pie, sostenía una taza humeante en la mano: sangre la cual había recolectado <<robado>> la noche anterior ya que se había negado rotundamente a acompañarlo a cazar, la depresión no le permitía hacer nada. Quería negarse a tomar la taza también pero su instinto no se lo permitió así que se enderezo y le arrebato la taza a Logan, bebió la mitad de un solo trago, él se sentó a su lado, le tomo las piernas a Diane, las coloco en su regazo y se acercó a ella para poder tocarle la mejilla con el dorso de su mano.
Ella lo miro directo a los ojos, algo que había evitado hacer desde que Milo se marchó ya que al mirarlo recordaba la primera vez que se besaron y se había formalizado su relación; aun podía ver el cielo estrellado haciéndoles de techo, aun podía oler el aroma del pasto y aun podía ver el rostro de Logan delineado por los rayos de la luna menguante, esa noche Logan la había llevado a ese pequeño campo para disfrutar de lo que se podría llamar un picnic, se bebieron una botella de vino tinto y después se recostaron y miraron el cielo, ella no dejaba de señalarle las constelaciones para hacer alarde de sus conocimientos astronómicos y Logan no dejo de mirarla a ella, hubo un momento en el que sus miradas se cruzaron y quedo atrapada por esa magia que los ojos azules de Logan despedían, él fue quien dio el paso, quien acorto la distancia que los separaba y finalmente probo el sabor de sus labios, algo con lo que llevaba tiempo imaginando; recordar aquella noche la hacía sentirse feliz y esa felicidad le causaba culpa ¿Cómo podía ella ser feliz si no sabía nada de Caroline? También era capaz de captar los rasgos semejantes entre su hermano y él y al notar aquello recordaba el sufrimiento por el cual Milo estaba pasando y eso la desarmaba por completo, ella tenía a su chico enfrente y aun así sus ojos y su mente se confabulaban para regresarle una imagen de Milo, lleno de dolor y desesperación.
-ella está bien –Logan le dijo mientras bebía de nuevo de su taza –Lily la encontrara te lo aseguró.
-nosotros deberíamos estar haciendo algo ¿no crees? no tenemos por qué depender de Lily.
Logan le sonrió de medio lado.
-yo patrullo todas las noches intento buscarla, lo sabes.
-no abandonas la zona, eso no es buscar. –le dijo, se bebió lo que le faltaba de sangre.
-le prometimos a Milo no movernos de este lugar.
-y me arrepiento de ello.
Quiso levantarse y alejarse de él, no quería discutir de nuevo eso nunca la lleva a ella ganar nada pero Logan se lo impidió, la obligo a sentarse de nuevo y le tomo la cara con sus dos manos.
-la encontraremos, te lo juro.
-no hagas juramentos que no puedas cumplir, un juramento roto es considerado como traición –Diane recito en automático, algo que tanto Caroline como Ella solían decir muy seguido –y la traición no es posible perdonarla.
Logan no supo que contestar en cambio le robo un beso, Diane sintió sus labios anhelantes y aun así no quiso corresponder al beso, simplemente no podía, no se sentía a gusto con eso a pesar de que lo deseaba tanto o más que él.
Logan no se dio por vencido y siguió besándola, después de un tiempo no logro resistirse mas, Diane correspondió al beso, lo necesitaba, de verdad lo necesitaba y cambio de opinión, no existía nada de malo en desear, en sentirse amada y se juró que después de amar a Logan como era debido encontraría Caroline cuente lo que cueste.
Diane se dejó llevar por el deseo y el amor que sentía por Logan, sus besos se volvieron más intensos y su mente se desconectó del cuerpo dejándose controlar exclusivamente por el.
Ahí en el sillón, Logan se colocó sobre ella, Diane lo despojo de su delgada playera y se maravilló con la fortaleza de sus músculos de la espalda, la recorrió, memorizando cada centímetro de ella. Logan hizo lo mismo con la blusa de ella, iba a dejarla sin sujetador cuando la puerta se abrió, los dos se sentaron buscando sus ropas.
-aggh mínimo váyanse al cuarto ¿no? –Lily iba entrando
Diane avergonzada tenía problemas para volverse a poner la blusa y más torpe se volvió cuando vio entrar a Leonard detrás de ella, Diane sintió una vergüenza inmensa por que la vio en semejante situación.
Leonard la miraba molesto y celoso y Diane no podía creer que quien estuviera frente a ella fue de verdad él, se notaba tan cambiado, mas fuerte, más maduro y mucho más guapo ¿alguien puede cambiar tanto en tan poco tiempo?
-Santo Dios ¡que frio hace! –Diane miro al pequeño joven que había pronunciado aquella frase que la hizo reír y abrió más los ojos ¿de verdad? ¡No podía creerlo!, incluso la boca se le abrió hasta el piso, se puso la blusa con rapidez y sin dificultad.
Se levantó de prisa y se acercó a él, Tristán no la había visto todavía, tenía problemas con su maleta y no se había dado un tiempo para inspeccionar el interior por lo que cuando Diane corrió en su dirección y lo abrazo con fuerza, Tristán salto del susto.
-Tri-tri –Diane le dijo al oído, se separó de él un instante para que pudiera verla y esperaba de todo corazón que la reconociera y así fue, los ojos azules de Tristán se iluminaron con el reconocimiento y le sonrió, Diane se sintió reconfortada por la mirada y la calidez de la sonrisa de su primo -¡estas enorme! Y ¡muy guapo!
-¿podría ser de otra manera? –le contesto y la abrazo, perdió la noción del tiempo.
Diane tenía unas ganas enormes de llorar de felicidad y solo por él se contuvo, no estaba segura de que supiera lo que todos en la cabaña eran.
Lo soltó y lo ayudo con la maleta y lo llevo directo al sillón, le paso una manta que estaba ahí y le froto los brazos por encima de la cobija para ayudarlo a entrar en calor. Mientras hacía eso Diane le dirigió una mirada a Milo quien había entrado al último, lo que vio en su rostro la preocupo, no la miraba a ella, miraba a Tristán y lo miraba como si fuera un objeto valioso y al mismo tiempo repulsivo ¿Qué paso? Milo jamás había tenido esa mirada de asesino psicópata ni siquiera cuando cazaba, eso la puso en alerta y se prometió no alejarse de su primo ni un segundo.
Logan abrazaba a su hermano y Lily se había acomodado en el sillón junto a Tristán y Leonard se acercó a ella por detrás y le rodeo la cintura, sintió cosquillas ahí donde el aliento de él le rozaba la piel.
-¿no habrá abrazo para mí? –le susurró al oído. ¿De verdad es Leonard?
Se deshizo de las manos de Leonard y se giró, le dio un corto abrazo, un corto y sincero abrazo, se alegraba de tenerlo ahí, el que se aprovechara del chico no quería decir que no lo apreciara.
-tenemos que hablar –le dijo al oído lo más bajo de lo que fue capaz, Diane se sorprendió por la sexy voz que ahora él poseía.
<< no puedo dejar solo a Tristán >> -le comunico mentalmente.
Las próximas horas se dedicó a consentir a su primo, le preparo una calientísima taza de café y de paso se encargó de esconder las bolsas de sangre y cualquier otra evidencia, platicaron largo y tendido, ocultándole claramente la parte en la que fue espía, su muerte y regreso como vampiresa y la existencia de Caroline porque es más que obvio que son hermanos, tienen la misma forma de la cara, el mismo cabello y la misma expresión picara y divertida cuando hacen una broma, es imposible que no lo sean. La pregunta aquí es ¿Por qué ninguno de los dos sabe de la existencia del otro? Y ¿Por qué Caroline termino recluida en la organización?
En cuanto Tristán se quedó dormido en el sillón, Lily, Milo y Logan se fueron a buscar a Caroline, algo que le complació en lo más profundo.
Tristán usaba la pierna de Diane como almohada y ella no quería que fuera de otra manera, de un modo Tristán lograba calmar su tormenta interna.
-¿Qué querías decirme Leonard? ¿Cómo es que estas aquí? ¿De dónde conoces a Lily y a mi primo?
Leonard contesto a todas sus preguntas y en ningún momento lo interrumpió, cada palabra que salía de su boca le sonaba sorprendente e imposible de creer, no podía creer que Joe supiera todo el tiempo de la existencia de vampiros, de la relación entre Diane y Caroline y tampoco entendía porque necesitaban desesperadamente ocultar y proteger a Tristán.
-te he contado todo, es tu turno ¿Por qué elegiste condenar tu alma a cambio de la eternidad? – Diane se enfureció ante tal comentario.
-no lo elegí, era necesario o ¿hubieras preferido que muriera?
Debido a que se trataba de Leonard y confiaba totalmente en él le conto todo, absolutamente todo, sin omitir detalle así como él había hecho con ella y al igual que en su caso él no la interrumpió ni siquiera cuando una pregunta se le asomaba en los ojos.
Terminando cada quien sus relatos y teniendo conocimiento de las dos partes de la moneda Diane se puso a pensar en algo y una pregunta se le vino a la mente.
-dijiste que en el avión Tristán menciono a Caroline ¿verdad? –Leonard asintió.
Diane sintió que las ideas se acomodaban e iba en el camino correcto.
-¿Qué ocurre?
-dijiste que Tristán sueña con ella ¿y si no son sueños? Son hermanos, ambos podrían tener el mismo don posiblemente son visiones.
-pero son cosas que han pasado, los sueños de Tristán son cosas que le ocurrieron a Caroline según me has contado.
-Leonard, -Diane tenía una teoría –Tristán acaba de cumplir los 17 años, lo hizo el día que Caroline menciono su nombre por primera vez, de acuerdo a la organización a esa edad el don de cada persona madura totalmente, listo para usarse.
-¿Qué quieres decir? –Leonard no entendía nada y Diane estaba más que segura de su teoría.
-Caroline y Tristán se han estado llamando a través de los sueños, a través de sus dones, Lily ha evitado todo este tiempo que estén juntos y Joe a ti solo te ha dicho que de Caroline depende la sobrevivencia del mundo y se ha esforzado por mantenerlo a salvo de Dorian ocultarle su existencia y Cassandra dijo:
<<La última gota de sangre del linaje Blake, obteniendo control sobre el tiempo, adquirirá tal poder que traerá el balance de vuelta pero así como puede salvar también puede destruir, la primera y la última no se deben confundir >>
-¿Qué con eso? –Leonard pregunto.
-¿no lo ves? ¡Control sobre el tiempo! ¡Caroline tiene visiones del futuro y el presente! Y ¡Tristán debe tener visiones del pasado! Por eso Joe y Lily no quieren que estén juntos, ¿te imaginas si Dorian los encuentra a ambos?
-¿de verdad crees que puedan controlar el tiempo? Y ¿a que se refiere con eso de <<última gota>>?
Diane se quedó pensando, es aparte la había recalcado Lena y debía ser por algo pero solo se le ocurría lo lógico y con estas cosas nunca es lo lógico.
-ellos son los últimos en el linaje Blake, ninguno ha tenido descendencia. –era lo lógico pero en su interior aún no estaba convencida, eso no es lo que realmente quiere decir.
En ese momento Tristán despertó, tenía cara somnolencia y entonces se froto la sien con fuerza.
-¿Qué pasa Tristán? – Leonard pregunto asustado, Diane no entendía porque darle importancia a ese gesto.
-está aquí –Tristán dijo contento y rápido se levantó y se dirigió a la puerta de salida.
Tanto Leonard como Diane reaccionaron tarde y Tristán salió de la cabaña, ellos lo siguieron al exterior.
Corrieron y sin esfuerzo Diane lo alcanzo, ¡valla que corría rápido! Tristán se detuvo detrás de la cabaña y miro hacia el límite del bosque
-Una aparición hermosa –dijo Tristán como en trance
Cuando Leonard los alcanzo hizo lo mismo, buscaba n lo que Tristán veía y gracias a su vista súper desarrollada Diane distinguió la silueta que se veía en el interior de bosque.
-¡Caroline! –Diane grito con emoción pero esa alegría desapareció en cuanto vio que Caroline daba media vuelta y se alejaba de ellos.
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chicos espero que les guste este capi, siento que con esto muchas dudas quedan resueltas!! jajaja q emocion! bueno espero como siempre sus comentarios y votos!!
tambien es este capi le di un poco de gusto a una de mis fans pero no creo que me perdone por haberlos interrumpido jajaja pero aun asi espero que le guste!
un beso enorme!!! grx x leer!
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