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Buscando entre las sombras

Chic@s nuevo capi!! bueno lamento que no pudiera subir la entrevisa pero el tiempo me come! enserio sorry pero lo compensara cuando puedan leerla espero que el capi les guste1 ;)

por cierto les tengo una pregunta... recientemente vi algunas fotos de Zac como sabran es el actor que elgi para ser Milo... pero como que ya no me convence tienen alguna sugerencia? plis diganme se los agradecere enormemente!!

si nas aqui el capi, si les gusto se los agradecere si le puchan a la estrellita y si tinen alguna duda o sugerencia haganmela saber plis! los quiero

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Buscando entre las sombras.

Paris

1910

Milo

Las calles desiertas, la noche gélida y el silencio sepulcral me acompañan en esta tarea que me fue encomendada.

Al despertar a mitad de la madrugada me quedó bastante claro lo que tenía que hacer, a quien debía buscar y para que propósito.

Recuerdo a una mujer pelirroja, diciéndome que debía encontrarla para repetir la historia; siendo honesto mi mente no comprende lo que dice pero mi interior lo hace perfectamente; extraño ¿no? 

Busco entre las sombras a aquella que me liberará el siguiente recuerdo, ya que sé que falta algo pero mi mente ahora es un caso policiaco, al llegar a la escena del crimen encuentro la siguiente pista que me dirá a donde ir, más que el deber es la curiosidad lo que me motiva a continuar.

Sigo caminando y mientras lo hago me es imposible no pensar en mi hermano, ya que éste es su territorio, su zona de confort.

Hasta hace apenas unas noches, mi hermano se la pasaba recorriendo cada lugar de perdición de esta zona, bebiéndose cada botella hasta que ni una gota quedaba.

Varias veces tuve que venir a buscarlo y llevarlo a casa en condiciones no propias, por eso al tener tatuado en la mente el nombre del lugar de perdición al que debía ir, supe cómo llegar y es así como estoy frente a la puerta, dudando.

Tome aire tres veces, sosteniendo el aire el mayor tiempo posible, me preparé para la actuación más grande de mi vida. 

Sin más dudas entré, de inmediato el olor a alcohol a suciedad y tabaco inundó mi nariz, me dirigí a la barra al lugar más apartado, pedí un whisky tal como mi hermano acostumbra.

Al servírmelo el cantinero en turno me reconoció, dio un barrido con la mirada al lugar en busca de mi hermano a quien por supuesto no encontró.

-No lo he visto desde hace unas noches, No le ocurrió algo ¿Verdad?

-No te preocupes, Remy, parece que se ha reformado -le sonreí y eso pareció calmarlo - esta vez vengo por mi cuenta.

-¿Así que siempre debe haber un hermano Delacroix causando dolores de cabeza?

-Si, Remy, eso parece.

-no soportaras ni una noche-Me miró burlón.

-Quizá te sorprendas - le guiñe el ojo.

Enseguida me tomé mi copa de un sólo trago, me quemó la garganta al pasar pero no le di la satisfacción de verme sufrir por mi poco aguante hacia el alcohol, en lugar de eso le pedí que me sirviera otro trago. 

Me tomé como 3 al hilo, debía llamar la atención y dada mi reputación y que todos ahí la conocían, se quedaron atónitos.

El último que me sirvieron no lo bebí de inmediato, fue entonces cuando ella apareció: Pelirroja, ojos azules, hermosa aunque no una belleza como la que a mí me interesa y cuando nuestras miradas se encontraron  pasó:

Tal como predije, la siguiente pieza del rompecabezas apareció, supe que ella es un vampiro y que yo debía lograr que me convirtiera y a mi hermano también.

Me asusté, al principio lo hice, pero después supe que era verdad que no debía entrar en pánico y justo en el fondo de mi ser me embargo el júbilo, yo quería serlo, de verdad quería y al darme cuenta de ello me prometí a mí mismo que haría lo que fuese necesario para lograrlo.

Una vez convencido de ello debía destapar la siguiente pieza y eso es ¿porque deseo tanto esto? ¿Cuál es mi motivación?

Para contestar a mis preguntas debía apurarme y conseguir lo que quiero así que como ella seguía mirándome, alce la copa y al mismo tiempo con un gesto de la cara le comunique que brindaba por ella.

No mostró interés, buscó un lugar vacío y se sentó sin mirarme nuevamente, bien, yo haría que mirara de nuevo.

-¡sírveme otro! Es más una ronda para mis amigos ¡alcohol para todos! 

Los presentes me secundan, gritos, celebraciones se escuchan, golpes en las mesas y por primera vez comienzo a disfrutar del lugar, quizá se deba al alcohol en mi cuerpo pero ya nada importa.

Pido una nueva ronda, y ya mi estado es tan malo que estoy cantando, algunos me hacen coro, platico con algunos y unos cuantos me comentan que mi hermano y yo somos parecidos, sabemos poner ambiente, al escuchar esos comentarios miró de reojo a la pelirroja y nuevamente el rompecabezas aparece, se su nombre y también reconozco sus expresiones y por ello sé que lo logré, sé que he captado su atención.

Seguro de ello me bebo una última copa pago la cuenta y salgo de ahí, no revisó si me está siguiendo pero mi instinto me dice que no soy el único caminando por las calles silenciosas.

Acelero el paso y finjo estar nervioso en cambio ni tuve que fingir torpeza ya que el tambalear y tropezar hasta con mis propios pies me salía natural, el alcohol no es lo indicado para mí.

Me interno en el primer callejón que veo camino sólo lo que mi cuerpo me permite para casi desplomarme, afortunadamente alcanzó a sostenerse del muro y para evitar futuras caídas  me quedó recargado ahí.

Cierro los ojos y como antes obtuve conocimiento, supe que ella estaba de pie mirándome, acechando, no la delataba sonido alguno, ni olor ni alguna otra cosa pero sin necesidad de comprobarlo le hablé.  

-Sabía que vendrías, Llily -no recibí respuesta. -Estaba esperándote.  

En silencio, espere un momento, lo necesario para que digiriera mis palabras y mi presencia, e igualmente continúe con los ojos cerrados.

-¿Quién eres? -Exigía saber.

-alguien... ¿qué importa eso? 

Instantáneamente recobre la sobriedad, abrí los ojos para mirarla, mágicamente ya no me sentía mareado, el pecho volvía a doler y entonces cambie mi actitud:

Postura altiva, sonrisa cínica y mirada firme con una entera confianza en mí.

-lo que nos interesa, es el asunto que vengo a discutir contigo. -Las palabras salían de mi boca como si hubiera ensayado el discurso miles de veces. 

-¿Que podrías decirme tú que me importe?- escupió la frase despectivamente.

-Se lo que eres, pero sobretodo se lo que más anhelas en este mundo y puedo entregártelo.

-¿Que podría saber un patético mortal? - Soltó estruendosas carcajadas. 

Para ganar la guerra debes estar dispuesto a sangrar y sufrir, estaba consciente de ello por eso en cuanto se me hecho encima no le di la satisfacción de escucharme gritar ni suplicar.

Sus afilados colmillos desgarraron mi piel, el dolor fue impactante, se esmeraba en provocarme la peor de las agonías sin embargo, su objetivo no era matarme, ni mucho menos dejarme libre, le gustará o no admitirlo cause una gran impresión en ella.

No sé exactamente cuánto tiempo transcurrió, posiblemente fueron segundos. Hasta que las piernas dejaron de sostener mi cuerpo, mi visión se tornó borrosa.

Fue entonces que las imágenes iban y venían mi pasado, mi presente y finalmente una imagen que predominó sobre las demás se trataba de algo sublime belleza cómo ninguna otra, una mujer, de pie en medio de la calle, la noche danzaba a su alrededor y la luna iluminaba su silueta, cabello negro azabache como lo noche, piel blanca como los rayos de la luna y unos ojos, grandes, expresivos de un gris precioso, como si se tratará de plata fundida por su fuego interno.

Me aferro a ella, era ella mi verdadero motivo, ella mi objetivo mi ser la anhelaba intensamente y juro que hare lo que sea necesario con tal de encontrarla, de tenerla junto a mí.

Salí de la niebla de mis pensamientos  y en lugar de encontrar unos ojos grises, me topé con unos azules .Lily me sonreía.

Sin contemplaciones me desgarro la camisa, ahí justo donde me ardía el pecho paso sus dedos, sus helados dedos  que buscaban ávidamente algo y cuando lo encontró se detuvo, al principio no vi nada pero después una especie de símbolo aparecía y los ojos le brillaron de felicidad, yo no entendía nada

-Veo lo que tú ves. ¿Qué es lo que quieres? ¿Cuál es tu historia?

-Inmortalidad, es lo que quiero, repetir la historia

-¿Estás dispuesto a pagar el precio que yo demande? ¿Sea cual sea? 

-Sea cual sea. –le confirme.

Entonces como si tratara se cerrar el pacto, me mordió, en esta ocasión no me hizo sufrir, bebió lo poco que quedaba en mi cuerpo lo bebió para después morderse su propia muñeca, de ella emergió el elixir de la inmortalidad  y desesperadamente bebí de ella, bebí su sangre, este era el primer paso para llegar a mi objetivo.

Caroline

El clamor de la batalla invadía las venas de todos los presentes, incluida yo, me era casi imposible concentrarme, abstenerme, por alguna razón me instinto trataba de controlarme, quería salir a la luz y me estaba costando mucha fuerza de voluntad mantenerme sentada y no correr y participar en  la batalla y demostrarles que lo mejor soy yo.

Cada vez que alguno de los contrincantes asestaba un golpe, me daban ganas de gritar como si estuviera en las luchas, salvajemente mi mente me mostraba esas imágenes y cuando aquel golpe terminaba en una herida por donde  salía sangre, mis ojos me delataban, evitaba mirar a cualquiera y era cuando me agarraba fuertemente de la silla.

Los combates habían durado más de lo deseado, el sol ya se ocultaba y de pie solo quedaba Brian y William, me daba extremado nervio saber lo que ocurriría y para mi desgracia Dorian no permitiría que la pelea final se llevara a cabo al día siguiente, para que de esa manera me asegurara de que fuera William quien ganara, porque pensándolo mejor si William se casa con Cassandra, Cybelle ya no podría arruinar su vida, de esa manera Dorian no se vería forzado a limpiar su honor y morir en el intento y entonces Brian podría casarse con ella, no es tan mal vigésimo plan.

Brian frente a William, cara a cara, en donde no existía regla alguna que hiciera de este combate uno justo, analice sus actuaciones anteriores y cualquiera tiene la probabilidad de ganar

Dorian anunció el inicio ambos se analizaron, parecían un par de fieros y fuertes leones luchando por el liderato de su manada y como los leones solo uno podría quedarse y el otro debía dejar de ser, comencé a sentirme nerviosa ¡esto no está bien!

­—¡William! ¡William! —se escuchaba en el aire

Taladraba mis oídos y a Cybelle le desgarraba el corazón quien a mi lado, trataba de impedir  que las lágrimas se hicieran presentes, mirarla me dolía así que preferí ponerle atención al par de leones que luchaban.

Las espadas y los escudos se balancean frente a ellos, William le asesta un golpe que Brian bloquea con el escudo, utilizando su pie izquierdo atrás como punto de apoyo y haciendo uso de sus fuerzas, con el mismo escudo empuja a William, este intentaba no caer ya que lo había tomado desprevenido y eso le había robado tiempo, tiempo que Brian aprovechó para tratar de atravesar su torso, sin embargo por muy poco, Will logra esquivar el golpe mortal.

La batalla se prolongó unos minutos más, minutos infinitos a pesar de que ambos ya se notaban cansados. Con un movimiento Will tumbó a mi amigo, quiso clavarle la espada en el estómago, afortunadamente el escudo volvió a protegerlo aunque no fue lo suficientemente resistente, la espada hizo su trabajo y Brian quedo desprotegido al quedar su escudo destrozado.

Will volvió a alzar la espada y la bajo velozmente Y al mismo tiempo Brian se giró hacia su derecha.

Años de mi vida los pase en el gimnasio, arriesgue todo en el campo, misión a misión y por tal experiencia se perfectamente cuando un duelo está por terminar. Expectante me siento al filo del asiento y al igual que Cybelle contengo el aliento y entierro las uñas en el asiento; como si mi cuerpo se mandara solo me levante, mis ojos se abrieron lo más que pudieron y me mordí el labio con fuerza.

Entonces pasó lo que menos esperaba, Brian perdió por completo el control, dejó de ser un hombre racional y se dejó llevar por la ira, el instinto, su lado salvaje. Lluvia de ataques le llegan a Will, quien resistió lo que pudo hasta que Brian sin ningún aviso lo golpeo en la cabeza y este cayó al piso desorientado y así como antes William quiso atravesarlo así lo intento él, elevo su espada y velozmente la bajo para atravesar a su enemigo.

 -¡No! ¡Detente! -grité demasiado tarde.

 -¡Finalmente nuestro vencedor! -anuncio Dorian.

 A primera vista parecía que Brian había clavado la espada en el estómago de Will, sin embargo, mi alivio fue inmenso al corroborar que Will estaba ileso, Brian solo atravesó la tierra.

 Brian ayudo a Will a ponerse de pie y cuando se incorporó, todos los presentes gritaron, aplaudieron y alabaron. Detenidamente mire el rostro de ambos:

 Brian lucia completamente orgulloso de su victoria, se alegraba de poder demostrar su superioridad a pesar de todas las probabilidades en su contra, sin embargo no parecía emocionado por el premio, más bien el me miraba tratando de comunicarme algo, sus ojos me mostraban un tipo de complicidad y al mismo tiempo quería decirme que no tuviera miedo, yo estaba a salvo... no, más bien mi secreto estaba seguro en sus manos.

Por otro lado, William no ocultaba su decepción; lo curioso era que tal emoción no se debía a su derrota, el me miraba y con sus ojos me suplicaba perdón, se sentía desilusionado, angustiado, me había fallado, la pregunta es ¿En qué? Correcto... ¿Qué sucede aquí?

 -Cassie -me llamaba mi padre -¿saludamos al vencedor? - Dorian me ofreció su mano, la tome y delicadamente me guio escaleras abajo, Cybelle y Jessalyn nos seguían. -Estas muy fría mi muñequita -me comento mientras entrelazaba sus dedos con los míos, llevando mi mano a su pecho y con la otra la cubría para intentar calentarla. Ya que no contaba con nada pata cubrirme.

 Llegamos a la mitad del campo, Dorian daba su discurso, que insisto creo que me gusta más siendo malo, pero al parecer a las personas les agrada, lo respetan y lo aman. Al finalizar me miro como si estuviera esperando algo de mí.

 -¿el beso? -me susurra Jessalyn - a Will en la mejilla.

 Obedecí de inmediato; le plante un besito, puro y casto e  inesperadamente me recibe con un abrazo.

 -perdóname Cass, lo intente - me susurra al oído

En un abrir y cerrar de ojos se aleja de mí, dejándome mas confundida enserio ¿qué está pasando aquí? Me urge encontrar a Leonard y Cassandra. Los gritos y aplausos de la muchedumbre me sacan de mis divagues, Dorian había anunciado al ganador , no tengo idea de lo que debo hacer y por lógica me acerque a Brian, intente no parecer nerviosa porque realmente lo estoy pero al mismo segundo en que lo tuve cerca me acorde de todo lo que habíamos vivido juntos así que le di un abrazo, no sé si fue correcto o no pero todos me volvieron a aplaudir ;Al girar para saludar al público alcance a ver a William y a Cybelle corriendo detrás de él y yo debía perseguirlos.

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