[-Narrador omnipresente-]

Luego de que pasara un rato la familia de ángeles caídos se retiraron al cuarto que le fue asignado al arácnido albino, era el momento para finalmente tener esa charla y Vaggie no podía estar más nerviosa por cómo se desarrollarían las cosas, sin embargo, sabía que tampoco podía evitarlo por lo que estaba listo para lo que fuera a pasar.

Los demás les dieron su espacio ya que sabían que era un tema familiar que no les incumbía, eso incluyendo a Molly y Arackniss que eran familia de sangre de Tony, por lo que se sentaron a esperarlos en la sala de husk mientras ellos tenían su conversación privada.

Ahora en la habitación de Anthony, este estaba parado y de brazos cruzados mientras miraba seriamente a Vaggie que se encontraba sentada en la cama jugando nerviosamente con sus dedos, la polilla estuvo caminando de un lado a otro por un par de minutos mientras se frotaba la cien, tomándose un tiempo para empezar.

Finalmente detuvo su paso y se colocó a un lado del arácnido, el par de manos superiores se pusieron en su cintura mientras cruzaba los brazos restantes, mirando con seriedad a la de cabello plateado.

─ Ahora dinos jovencita. ─Comienza val con un tono interrogante─ ¿Por qué esto de los exterminios? ¿Para qué hacerlos en primer lugar?

─ Y por qué demonios no renunciaste. ─Exige saber el albino ligeramente molesto─

Vaggie respiró profundamente mientras agarraba con fuerza su falda, soltó un largo suspiro y levantó la mirada.

─ Bien, aquí vamos. ─Dice en voz baja dando otro suspiro─ Hay un problema de sobrepoblación en el infierno, hay demasiados pecadores y las exterminaciones son para disminuir la población.

─ ¿Cuál es la necesidad de hacerlo? ─Cuestiona Anthony─ No es como que afectara al cielo de alguna manera.

─ Sera ha dicho que es una sublevación al cielo, el infierno se ha estado levantado al igual que sus demonios. ─Dice la exorcista jugando un poco con su cabello─ Podrían ser un peligro para el cielo.

─ ¿Hay alguna prueba de eso para empezar? ─Cuestiona de igual manera val, con una expresión desconfiada─

─ No que yo sepa, pero-

─ Mira mi pequeñita Vagatha. ─La interrumpe Val─ Sabes que yo no cuestiono las decisiones de los superiores, pero provocar una masacre anual sin haber motivos ya me huele mal.

El arácnido albino asintió estando de acuerdo, de hecho, le gustaría saber si realmente había algún motivo para que los exterminios empezaran en primer lugar, por qué no había realmente necesidad.

La exorcista se mantuvo en silencio con la mirada baja, la polilla soltó un suspiro.

─ Cientos de almas perdidas por años, y aunque sean pecadores, no es razón para matarlos. ─Dijo seriamente─

─ Ahora responde mi pregunta de por qué no renunciaste. ─Ordena Anthony mientras golpeaba un poco el suelo con su pie─

─ Tony no era fácil. ─Responde Vaggie mientras lo miraba─ Me habían elegido al ver lo hábil que era, no me dieron otra opción y una vez que me unía no podía retractarme.

─ Y vaya que resultaste ser la mejor, a palabras de Adam. ─Dijo el arácnido apartando la mirada─

─ Ahm... ─La peligris agachó un poco la mirada─ Yo... de verdad quería decirles, pero eran las reglas de los serafines que solamente los exorcistas supieran de los exterminios.

─ ¿¡E che cazzo importa!? ¡Esos imbéciles permitieron genocidios nada más por una maldita suposición de sublevación sin pruebas! ─Exclamó con enojo el albino, acercándose a la contraria─

Valentino y Vaggie miraron con sorpresa a Anthony, si bien sabían que el arácnido hablaba a veces en su idioma natal y mayormente maldecía en este, él jamás decía groserías tan fuertes como la que dijo hace unos momentos.

─ ¡Pudiste matar a uno de mis hermanos en un exterminio! ─El arácnido le apuntó con el dedo acusador─

Vaggie se sobresaltó por el grito molesto de Anthony, pero no respondió, entendía el enojo del albino por lo que solo se quedaba callada, la polilla tomó del hombro a la araña alejándolo de la chica, Anthony apartó la mirada sin más todavía molesto.

Valentino suspiró pesadamente, él también estaba molesto con vaggie por ocultar tal cosa, comprendía que eran las reglas, pero aun así no aprobaba algo que no hacía más que afectar al mismísimo infierno.

─ Tony, yo...

─ No me hables, Vagatha. ─Anthony frunció el ceño y caminó a la puerta─

─ ¿A dónde vas? ─Val miró al albino abrir con algo de fuerza la puerta─

─ Saldré un rato.

Sin decir nada más salió de la habitación y cerró de un portazo, algo que llamó la atención de los que estaban en la sala, Vox algo curioso -y chismoso- usó su habilidad de teletransportarse a través de la electricidad para llegar más rápido a dónde estaba el albino, dejando a los otros atrás.

Al llegar vio al arácnido afuera de la habitación dónde se había metido con su familia y lo notó molesto, lo supo por su expresión y como estaba contra la puerta, el demonio tv ladeó un poco la cabeza al verlo así, por lo que decidió acercarse a él.

─ Oh, pequeña araña ¿Por qué esa cara? ─Pregunta con una típica sonrisa de presentador, inclinándose un poco frente a él pese a la diferencia de altura─

─ No te incumbe, maledetta intromissione. ─Responde con un tono molesto el albino─

─ Que grosero, y yo que quería ser amable. ─Dijo con un fingido tono de ofensa─

─ ¿No que me querías matar por causarte una grieta en tu pantalla? ─Cuestiona el arácnido levantando una ceja─

─ Por supuesto que sí. ─Vox se rio─ Todavía tengo ganas de romperte todos tus malditos brazos para que no vuelvas a lanzarme ninguna botella, pero no lo haré por una sola razón.

─ ¿Y esa razón cuál es?

Vox no respondió, solo se apoyó contra la pared con las manos en el bolsillo, mientras aquella sonrisa de presentador seguía proyectada en su pantalla, el albino estaba expectante a lo que diría el overlord.

─ No creo que Val me perdone por lastimar a uno de sus hijos. ─Responde con simpleza, apartando la mirada─ Si lo hago, esa vez no sabría como ganarme su perdón.

Anthony se sorprendió ante esa revelación, ¿Qué? ¿Había oído bien o vox solo le estaría gastando alguna broma de mal gusto?

─ ¿Como que esa vez? ─Cuestiona el albino nuevamente, sospechando un poco de esa frase─

─ Eso no importa. ─Dice seriamente el demonio tv─ Mira ocho ojos, hemos empezado con el pie equivocado y lo sé, y aunque no me faltan las ganas de darte una paliza, mi único motivo para no dártela es tu padre.

─ Por Val... ─Dice en tono bajo, permaneciendo en silencio por unos momentos─ Espera, entonces me estás diciendo-

─ Cállate. ─Ordena vox─ Ahora habla, ¿Por qué saliste así de enojado?

El arácnido se quedó callado nuevamente, apartó la mirada por unos momentos mientras estaba apoyado en la puerta, el demonio tv se había sincerado con él a cerca del por qué no le había intentado hacer daño, aun teniendo una pequeña oportunidad al recuperarse un poco.

Quizás... podría hablarle un poco, podría ayudar a calmarse.

─ Solo... estoy molesto con Vagatha, ¿De acuerdo?

─ Hmm, me imaginé que era por eso. ─Dice vox encogiéndose levemente de hombros─

─ Pero es que... agh, cuando le tienes tanta confianza a alguien y te guarda un secreto tan grande. ─Dice Anthony apartando la mirada─ Es complicado procesarlo cuando te enteras lo que era, sobre todo si dicho secreto dañó a tantos.

─ Ujum... ya veo. ─Vox habló más tranquilamente─

─ ¿No te enojarías al enterarte de algo así?

Vox se encogió de hombros.

─ Cualquiera se enojaría, es una reacción normal. ─Explica con calma el demonio tv─ Y supongo que nunca más le volverás a dirigir la palabra a esa exorcista, ¿Cierto?

─ Eh...

─ ¿No estás seguro? o ¿Estás dudando? ─Vox comenzó a caminar a los lados mientras miraba al albino con una sonrisa─

Anthony no respondió, sin tener una respuesta a esa pregunta, pues jamás ha pensado en dejar de hablarle a vaggie, estaba molesto con ella, pero no tanto para llegar a ese extremo, el arácnido apartó la mirada aun sin responder.

El overlord rio al ver eso, pues aun cuando Anthony no ha dicho una palabra, ya tenía una respuesta a su pregunta, así que solo se encogió de hombros y se detuvo frente al albino, aun con aquella sonrisa en su pantalla.

─ ¿Y bien?

─ No me pongas las cosas difíciles, imbecille. ─Anthony se cruzó de brazos─ Ahora déjame solo, necesito pensar.

─ Como quieras. ─El demonio tv se transformó en electricidad yendo de vuelta a la sala─

Cuando estuvo solo en el pasillo, una de sus manos adicionales tomó del otro brazo mientras baja la mirada, pensando en las palabras de vox, ¿Dejar de hablarle a vaggie? llevaban conociéndose unos pocos años debido a la época en la que murió vaggie, pero desarrollaron una fuerte relación fraternal.

¿Iba a tirar todo por la borda?

[-Narra Valentino-]

Luego de que Anthony saliera de esa manera me quedé solo con Vaggie, volteé a verla, pero estaba con la cabeza agachada y las manos en la cara, estuvimos en silencio por unos momentos sin hablarnos, hasta que la escuché sollozar, parece que el ataque de enojo de Tony la afectó.

No dudé mucho antes de acercarme a ella, seguía algo molesto, pero no podía dejarla llorando, así que me senté a su lado y acaricié su espalda en un intento de consolarla, ella siguió sollozando y yo solo me quedé junto a ella mientras la consolaba.

Pasaron algunos minutos y vaggie aún no se calmaba, yo lo comprendía y la dejé desahogarse un poco en mi hombro, sabía que quería a Tony como el hermano que nunca tuvo además de que él jamás estuvo tan enojado con ella.

─ Soy una estúpida. ─La escuché decir, y pude sentir que apretaba mi pelusa─ Y-yo.. soy una idiota...

─ No lo eres, querida. ─Palmeé su espalda y la oí sollozar de nuevo─

─ ¡Pero es cierto! ─Ella volvió a apretar con algo de fuerza─ ¡Soy una maldita idiota! ¡Un monstruo desquiciado!

─ Q-querida... ouch.. ─Me quejé un poco, ya que empezaba a dolerme su jalón de mi pelusa─

─ O-oh perdón. ─Aflojó su agarre y suspiré aliviado─ Pero no pude evitarlo... Tony debe estar odiándome en estos momentos.

─ No cre-

─ ¿Y-y si nunca más me habla...? ─Ella me miró a los ojos─ ¿También me odias valentino?

Me quedé callado por un momento, ¿Yo? ¿Odiarla? ni por esto la odiaría, si estoy molesto y todo lo que quieras, pero jamás llegaría a odiar a Vaggie, ella es mi pequeñita y no me creo capaz de odiarla.

Suspiré suavemente y tomé las manos de Vaggie, a la vez que una de mis otras manos la tomaba de su mentón levantando su mirada, en ella pude ver la tristeza y solo pude abrazarla en un intento de consolarla.

─ No, no lo hago. ─Dice en un suave tono─ Nunca te podría odiar por nada en este universo.

Rápidamente aceptó mi abrazo y ocultó su cara en mi pecho, yo solo la dejé desahogarse mientras acariciaba su cabeza con delicadeza, sé lo mucho que le dolería que Anthony no volviera a dirigirle la palabra.

Luego de unos minutos se pudo calmar, la acurruqué en mis brazos y estuvimos en silencio un rato, solo con la compañía del otro mientras ella seguía con la mirada en un punto perdido, hasta que oímos la puerta abrirse.

Al voltear, vimos que era Tony, su expresión era seria, aunque ya no lo veía tan molesto, me levanté después de dejar con cuidado a Vaggie sobre la cama.

Tony aún estaba sin dirigirle la palabra a Vag, aunque lo pude notar también algo pensativo, quizás habrá estado pensando mientras estuvo fuera del cuarto, y miró a vaggie por unos momentos.

[-Narrador omnipresente-]

El arácnido miró por unos momentos a la exorcista, quién al parecer se veía arrepentida de lo que hizo, mantenía la mirada agachada y se quedaba en silencio mientras abrazaba sus piernas, Anthony suavizó su mirada pensando que tal vez no debería ser tan duro con ella.

Seguía algo disgustado al saber que era una exorcista, pero luego de pensarlo un rato junto a la conversación con el overlord, comprendió que era por las reglas y que su hermanastra estaba obligada a permanecer en silencio, entonces respiró profundamente y se acercó a ellos.

Sabía de antemano que tardará un poco en tenerle la misma confianza de antes a la peligris, pues estuvo asesinando a pecadores, almas humanas (casi) igual a ellos y no es tan fácil volver a confiar después de enterarse de algo así, aparte que tal vez haya más secretos entre ellos de lo que le gustaría.

Se detuvo frente a la exorcista y el silencio reinó la habitación, ninguno de los tres habló por un breve período de tiempo mientras solo se miraban entre sí, el silencio empezaba a ser incómodo.

─ Escúchame bien, Vaggie. ─Comenzó Tony y se sentó a un lado de ella─ Todavía estoy muy decepcionado de ti.

La exorcista dio un suspiro, aun con la mirada baja solamente se quedó callada.

El arácnido la miró en silencio unos momentos antes de suspirar suavemente.

─ Pero... puedo ver que estás genuinamente arrepentida por la mirada que tienes. ─Tomó las mejillas de la contraria para que lo vea a los ojos─ Ahora no tenemos la misma confianza de antes, y tardaremos bastante... pero podemos trabajar en arreglar eso.

─ ¿En-enserio...? ─Pregunta con un pequeño brillo en su mirada─ Así que ¿No me odiarás por siempre?

─ No, eres mi hermana y no puedo odiarte por mucho tiempo. ─Tony sonrió ampliamente─

─ Eso sí, no más secretos entre nosotros jovencita. ─Interrumpe Valentino acercándose a ellos y sentándose al otro lado de vaggie─

La exorcista se rio un poco y rodeó el cuello de ambos, uniéndolos en un abrazo, Anthony y Valentino solo sonrieron un poco y aceptaron el abrazo, entre los tres se acurrucaron y hubo un ambiente muy tranquilo y agradable.

Hasta que la polilla interrumpió dicho ambiente.

─ Pero están castigados de todos modos.

─ ¿¡Que!? ─Ambos jóvenes se apartaron al oír eso─

─ Tu por exorcista estás castigada por uno o dos años. ─Dijo val señalando a vaggie, para después apunta a anthony─ Y tú por lanzarle la botella a Vox estás castigado dos meses.

─ ¿¡Perché!? osea, el de vaggie es comprensible ¿Pero por qué yo estoy castigado? ─Cuestiona el arácnido cruzándose de brazos─

─ Tony, era una botella de vidrio y su pantalla sufrió daños ¡Pudo pasarle algo peor! ─Regaña la polilla levantándose de la cama y pone sus manos en la cintura─

─ Pero no le pasó nada, Così... ─Anthony se encogió de hombros─

Valentino levantó una ceja mientras sus manos permanecían en su cintura y vaggie rodó los ojos sin estar convencida, Anthony sonrió nerviosamente, pero al verse acorralado solo suspiró y se resignó.

─ Ya que.

─ Bien, ya pensaré de que se tratará el castigo de cada uno. ─Val sonrió viendo a ambos─

─ ¡Aspetta un momento! ─El albino levantó la mano─ Antes de que lo decidas, respóndeme algo.

─ ¿Que? ─Val inclinó ligeramente la cabeza─

─ ¿Que te pasó en el cuello? ─Señaló al cuello de la polilla─

Pues al momento en el que se abrazaron estuvo lo suficientemente cerca como para notar una extraña marca en el cuello del productor de novelas románticas, Valentino se sobresaltó por eso y se tapó rápidamente la marca con una mano.

La polilla se puso nerviosa y comenzó a tartamudear diciendo cosas que no se llegaban a entender, la exorcista y el arácnido se miraron entre si con una ceja levantada por el repentino nerviosismo de valentino.

─ B-bueno verás... ehm... m-me ¡Picó un mosquito! ─Rio nerviosamente la polilla─ Si, eso, los mosquitos del infierno son tremendos, jaja...

─ Ay ajá... ─Vaggie miró fijamente a su padre con sospecha─

─ C-como sea, lo-los espero afuera. ─Val abrió la puerta y salió corriendo de la habitación─

Vaggie y Anthony se quedaron solos, se miraron a la cara con expresión de no creer en aquella excusa que dio la polilla antes de salir corriendo como alma perseguida por el diablo.

─ ¿Tú le crees que haya sido un mosquito? ─Pregunta la peligris a su hermanastro─

El arácnido negó con la cabeza y se levantó de su cama, acto que fue imitado por la peligris y ambos salieron de la habitación para seguir a su padre fuera del cuarto hasta la sala principal.