I
-𝕯𝖊𝖙𝖊𝖈𝖙𝖎𝖛𝖊 𝕬𝖈𝖐𝖊𝖗𝖒𝖆𝖓-
canción: Break My Baby-Kaleo
La iluminación de la prefectura de Shingashina dejaba que desear. Las calles eran alumbradas por la bella luna que lograba equipararse aún foco gigante de luz blanca, aunque aquel astro fuera una buena opción para iluminar aquellas desoladas y tristes vías seguían siendo peligrosas; pues los edificios o casas que se encontraban en este lugar hacían una gran cantidad de sombras capaces de formar una oscuridad atemorizante.
Los demonios se refugian en estás sombras siniestras para provocar horrores, incitar a cometer algo inconcebible para el ser humano que quiere probar un poco del cielo, pero delicioso para aquellos que no temen conocer el infierno y dejarse fundir con sus llamas voraces que al mínimo roce te penetra con sus profundas y candentes llamas.
Es el jodido paraíso.
Las almas son tan puras e inocentes durante las épocas de luna llena, se pueden corromper tan fácil que al mínimo frotamiento se dejan seducir sin oponerse, es en esos instantes en los que es más sencillo juntar piezas para un ejército capaz de derrotar a los ángeles y su creador.
Desde que Lucifer se metió en la cabeza que le cortaría la cabeza al barbudo del cielo, no ha parado de planear y organizar una forma perfecta para que este quede vulnerable...y quien diría que su mejor forma de conseguirlo sería quitándole a su ser más puro de sus garras.
⚜⚜⚜
Levi observaba con el ceño fruncido mientras sentía como la vena le palpitaba en la cabeza, sus ojos juzgaban con cierta ira la carpeta que tenía enfrente y es que encontró que la mayoría de asesinatos al estilo Jack el destripador con símbolos de ritos satánicos hechos con la sangre de la propia víctima después de su muerte no le resultaba precisamente algo encantador, al contrario, sentía las horcajadas de vomitó cada vez más cerca de lo explicitas y sanguinarias que eran las escenas.
Comenzó a leer más detalladamente los informes forenses que le habían llegado; estos redactaban que la mayoría de las victimas antes de ser despedazadas y dibujar con su sangre la estrella de David habían tenido relaciones sexuales, más sin en cambio no pudo continuar leyendo por el fuerte golpe que dio su puerta al ser abierta.
-Rivaille disculpa que te interrumpa en lo que sea que estés haciendo-hablo de manera un tanto perturbada-pero...-hizo una pausa dramática para ver como el rostro del peliazabeche se contraía del enojo.
- ¡¿Qué demonios quieres cuatro ojos?! Suéltalo-exclamo el joven adulto que no pudo evitar sobarse la cien debido al estrés acumulado- ¡dime que es lo suficientemente grave como para que entres de esa manera a mi despacho! -suspiro exasperado.
- ¡Te irás de nalgas cuando te lo cuente! -argumento con una risa divertida al obtener su cometido- ¿conoces lo que es el síndrome de madame Bovary? -se sentó en una de las sillas que estaban del otro lado del escritorio, obtuvo una negación por parte del chico-pues básicamente es tener una insatisfacción crónica afectiva...relacionada con encontrar la "pareja ideal"-comento mientras movía las pestañas.
- ¿Y? ¿Eso que tiene que ver con mi existencia? -interrogo de manera despectiva- ¡viniste a interrumpirme solo por una pendejada! -hablo molesto mientras entrecerraba los ojos, recargo todo su peso en el respaldo de la silla.
-Resulta-una suave carcajada inundo sus labios por lo sorprendente que sonaría-que todas las mujeres que hemos encontrado decían que en sus sueños encontraron al hombre perfecto-se puso seria por un momento-me pregunto qué circula por la mente de ese maníaco, pero lo seguro es que busca a personas dependientes-frotaba su barbilla mientras sopesaba las posibles opciones.
-Joder-murmuro por lo bajo, volvió a bajar su vista hacia los documentos que se encontraba revisando hace unos momentos-por lo visto ese es el único patrón que tiene de allí en fuera son todas totalmente diferentes-cerro los ojos para después levantarse de su lugar y observar hacia el ventanal que tenía desde su oficina.
Unas horas más tarde, un joven veía todo el panorama de aquella noche oscura desde lo más alto del edificio de esa hermosa ciudad, sonrió de manera sensual y se dejó caer de espaldas directo al abismo. Una sensación similar al éxtasis recorrió por completo cada una de las extremidades de su cuerpo provocándole una deliciosa descarga eléctrica que chocaba contra la placentera brisa nocturna, antes de que tocará el suelo extendió sus magníficas alas oscuras, tan oscuras como las tinieblas mismas.
Emprendió vuelo directo hacia las nubes para posteriormente dejarse caer directamente hacia un punto en específico donde se encontraba una mujer rubia de ojos azules, hermosa, preciosa ante los ojos de cualquier ser humano a simple vista podía ser una celebridad con el rostro frágil como si de un cristal se tratase. El chico de ojos verdes profundos la observaba con una enorme sonrisa lasciva, camino directo hacia ella dispuesto a darle una de las mejores noches de su vida antes de que ese hermoso brillo de vitalidad desapareciera de sus azulados ojos...sino fuera por la intervención de una peli castaña.
- ¡Ymir me alegro de que llegarás! -corrió la chica rubia a abrazar a la joven de tez trigueña.
- ¿Cuánto tiempo llevas esperándome Historia? -pregunto la joven tras recibirla de aquel efusivo abrazo, la chica de cabellera castaña noto la mirada pesada que el chico le dirigía, la cual reconoció casi al instante. Obligando a la otra chica a caminar hacia una dirección desconocida para Eren.
El chico por su parte bufo molesto y camino hacia el primer bar nocturno que encontró, se acercó a la barra y pidió un vaso de la bebida más fuerte que tuvieran, lo bebió hasta el fondo para posteriormente pedir una botella completa de aquella sustancia adictiva, la tomo y camino a la mesa más cercana que encontró.
Observaba de manera analítica a todas las personas que se encontraban en dicho lugar, su sonrisa aumento al notar que la mayoría de las personas que se encontraban en aquel lugar bailando al ritmo de la canción o simplemente comiendo sus bocas de manera insaciable eran rodeados por una aura obscura o grisácea, dando a entender que esos seres humanos habían comenzado a corromperse por culpa de alguno de sus súbditos, lentamente se volverían sus esclavos...sus estúpidos y fieles sirvientes que los vería dentro de muy poco en el fuego incandescente del infierno. Parpadeo un segundo hasta que noto un esplendor blanco, demasiado blanquecino para estar en aquel lugar de mala muerte.
Chasqueo la lengua con diversión, sirvió un poco de vodka Devil's Springs en los dos vasos que llevaba en sus manos, camino con una radiante sonrisa acaparando la atención de todo el mundo allí presente para después quitarle importancia y continuar en lo suyo, camino con sigilo y cierta emoción hacia aquella persona que demostraba ser demasiado pura para ser verdad.
Su piel se erizo del enorme escalofrío que escalo por su columna vertebral, al chocar su mirada con aquellos penetrantes y atractivo ojos negros, la colonia varonil que desprendía de su cuerpo se coló por sus fosas nasales de manera casi instantánea provocándole una descarga de adrenalina que simplemente le provocaba cada vez estar más cerca de aquel cuerpo esculpido por los malditos dioses, su piel se veía pálida y suave como la porcelana.
- ¡Dios debió dejar las puertas del cielo abiertas! -hizo una pausa mientras le ponía enfrente el vaso con vodka-porque dejo salir un ángel-murmuro a manera de alago cerca de los oídos del chico de casquete corto, el joven de ojos negros viro los ojos.
El chico de casquete corto se acercó de igual manera dejando sus cuerpos levemente cerca-Hueles como la mierda-susurro con un tono de voz placentero ante los oídos del demonio, tomo la bebida que tenía el incubo entre sus manos.
-Escuchar tu voz es un deleite, cariño-le dedico una mirada intensa, se relamió los labios al ver que el chico bebía de su anterior vaso.
-Si me entero de que le echaste alguna mierda, juro que te romperé la cara a patadas-escupió después de ver como el chico (un poco más joven que él) lo escaneaba.
-Créeme que sería una bendición recibir un golpe tuyo-le guiño un ojo-y dime ¿Cómo se llama el hombre más puro de esta sala? -interrogo bebiendo lo que quedaba de su trago.
-Para ti soy él detective Ackerman, imbécil-le dijo fuerte y claro en su cara, confrontándolo.
-Mucho gusto, yo soy Eren Jeager-exclamo de igual manera que Levi con una sonrisa burlona-dígame oficial ¿a qué se debe su visita en este lugar donde posiblemente adquiera una enfermedad? -pregunto con curiosidad, sin parar de contemplar lascivamente al detective.
-Nos encontramos aquí para hacer una investigación-interrumpió una chica con gafas que intentaba contener una risa nerviosa.
La mujer logro romper con el momento de tensión sexual que comenzaba a crearse en ese lugar.
- ¿Una investigación? -interrogo con curiosidad el ojiverde sin despegar su vista del otro hombre.
-Es sobre los repentinos asesinatos de mujeres y su relación con posibles sectas satánicas, la última vez que las vieron fue en este bar-hablo Levi mientras sacaba algunas fotografías- ¿reconoces a alguna de ellas? -menciono con un tono serio.
Eren despego la vista por unos momentos para admirar con una mirada seria y dura todas las fotografías-joder, esto solo puede ser obra de ese bruto le dije que no dejará evidencia después de terminar la ceremonia-pensó con enfado para posteriormente devolver su mirada hacia la persona que capturo toda su atención-lo lamento sensual oficial pero no las conozco-finalizo para dedicarle una mirada coqueta.
Levi bufo molesto.
Eren le dedico una sonrisa cargada de lujuria. No podía despegar su vista de las caderas del joven adulto, sus labios lo provocaban tan intensamente que le daban unas inmensas ganas de tomarlo y empotrarlo contra la primera mesa que encontrará. Se relamió los labios frente a los ojos atentos de ambos oficiales.
-Bien, si nos disculpa, tenemos que seguir interrogando a otras personas del bar-hablo la chica de lentes de la manera más profesional posible mientras al mismo tiempo rompía con la creciente tensión sexual entre ambos individuos.
-Tienes razón cuatro ojos-carraspeo Levi con un pequeño bochorno provocado por ver fijamente a el chico de ojos verde-vamos tenemos que preguntar al barman-esquivo al chico y continuo con su camino siendo acompañado por la chica.
Eren solo vio como el chico desaparecía de su vista, después de que se alejaran a una cierta distancia de él. Se dirigió a la salida.
Camino con elegancia y porte hacia un callejón con poca luz, suspiro con molestia para posteriormente quitarse el saco negro que llevaba consigo. Crujidos de carne siendo desgarrada comenzaron a escucharse por cada estrecho rincón de ese pequeño callejón, la sensación era dolorosa, ya que las alas que tenía ocultas comenzaban a salir de su espalda con rastros de sangre, cuando estuvieron por completo fuera las sacudió para posteriormente emprender vuelo con un solo destino "La cueva donde habita el diablo".
meilinlin12
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