Lo siguiente que supe fue que se había alejado. Levante la mirada, desconcertado, para ver a Jungkook, presionándolo contra la pared y su brazo, aguantando su garganta. Se veía tan enojado, sus ojos estaban inyectados de un rojo carmesí demostrando que su lobo estaba al mando. El rostro del chico pasó a ponerse rojo, ya que no era capaz de respirar por la presión ejercida.

—¡No lo toques, maldito hijo de puta! ¿Crees que puedes simplemente entrar como si se tratara de tu casa y darle un beso a pesar de que él no quería? -gruñó Liam con enojo.

Comencé a sentirme enfermo, literalmente enfermo. Me puse en pie y tambaleé hacia mi baño, donde vomité lo que parecía ser varios litros de vodka. Gemí y me sonrojé, me comencé a mover para sentarme, cuando me apoyé en las piernas de alguien. No me asusté, podía olerlo. Sabía que era Kook.

—¿Estás bien? -pregunto, de forma suave.

Pero no pude responderle, solo me incliné sobre el inodoro y vomité otra botella de vodka. ¡Wow, eso es un desperdicio de dinero!

Jungkook, bendito seas, me frotaba pequeños círculos en mi espalda y sostenía mi cabello. Después de unos minutos, me sentí mucho mejor.

—¿Quieres ir a la cama? -preguntó, mirándome preocupado. Asentí con la cabeza.

—Sí, pero antes quiero cepillarme los dientes.

Me esforcé por levantarme del piso del baño, pero estaba tan mareado que no funcionó muy bien. Kook sonrió y se inclinó, deslizando sus brazos debajo de mí y levantándome fácilmente, como si no pesara nada.

Me senté junto al lavamanos. Tomé el cepillo de dientes y le puse pasta dental. Sonreí débilmente y cepillé mis dientes, asegurándome que todo el sabor a alcohol se había ido.

—¿A la cama? -preguntó, cuando había terminado. Asentí con la cabeza, y me levantó al estilo nupcial y me llevó de vuelta a mi habitación. Había quitado los cobertores y estaba a punto de dejarme en la cama, cuando recordé que todavía llevaba mi ropa de fiesta.

—¡Espera! No quiero ir a la cama con esto -murmuré, mirando mi atuendo, incluso todavía tenía mis joyas y los zapatos.

Él asintió y me puso de pie, casi no podía mantenerme, y sentía como si mis piernas estuvieran estropeándose. Jungkook puso un brazo alrededor de mi cintura, sosteniéndome, para luego comenzar quitarme los collares.

Quité el botón de mi camisa y lo comencé a deslizar por mis brazos, pero me enredé en el proceso y empecé a reír. Lo oí suspirar, mientras me empujaba para que me sentara en la cama.

Cuando lo miré, vi que tenía una expresión divertida en su rostro. Comenzó a sacar mis brazos de ambas mangas de la camisa. Me puse hacia atrás y me desabroché el pantalón, levantando mis caderas mientras bajaban por mi trasero; él los tomó y los haló hacia abajo lentamente, mientras me acostaba en bóxer. Mantuvo mis piernas elevadas, mientras me quitaba los zapatos.

—Bonito -ronroneó, mirándome con su típica sonrisa, pero no me importó; solo me quedé ahí, riendo, hasta que mi estómago me sacudió de nuevo.

—¡Oh, no! -jadeé, tratando de sentarme, sujetando una mano sobre mi boca.

Tan rápido como pudo, me levanto y me llevo de nuevo al baño, sosteniendo mi cabello de nuevo y frotando mi espalda mientras mi estómago se vaciaba.

Después de haber cepillado mis dientes de nuevo, se quitó su camisa y la puso sobre mi cabeza.

—Aquí tienes otra para que añadas a tu colección de camisas -dijo con una sonrisa fácil, mientras me levantaba, y me regresaba hacia la cama.

Caminó hacia la puerta. Y realmente pensé que iba a salir para volver a la fiesta, pero no lo hizo, simplemente cerró la puerta y se quitó sus jeans, subiendo a la cama junto a mí. Todavía podía escuchar la música en el exterior.

Jungkook envolvió sus brazos alrededor de mí, mientras me acercaba hacia su pecho. Me sentía realmente asqueroso, no paraba de pensar en el tipo que me había besado en la cocina y antes de que me diera cuenta estaba llorando.

—¿Qué pasa, ángel? -preguntó, mirándome desconcertado.

—¡Ese imbécil se robó mi primer beso! -gemí. Jungkook se echó a reír y me sentí aún peor. ¡No podía creer que se estaba riendo de mí!- ¡No es gracioso, Jeon! El primer beso de un omega es importante para nosotros. Solo porque seas una clase de superputa a la que no le importa, y probablemente no recuerda su primer beso, no significa que las pequeñas cosas no sean significativos -dije, con rabia, golpeando su pecho.

—Tae, por la luna, cálmate. Él no te robó tu primer beso -dijo, seriamente, mirando directamente a sus ojos, haciéndome sentir débil con sus estúpidos ojos azules de gigoló.

—¿De qué estás hablando? ¡Él lo hizo! Él solo me besó y me lo robó -gruñí, con una lágrima cayendo por mi mejilla. Él la limpió con su pulgar y sacudió su cabeza.

—Sí, él solo te besó, pero ese no fue tu primer beso. Yo lo fui hace mucho tiempo -explicó, con una media sonrisa que hacía que su rostro pareciera hermoso.

¿De qué diablos estaba hablando? Nunca me había besado. Fruncí el ceño, tratando de recordar.

—¿Recuerdas cuando me lastimé al caer de ese árbol en mi jardín? Tenía trece años y mi pierna dolía demasiado, me preguntaste que podías hacer para que el dolor se fuera -él cerró sus ojos y sacudió la cabeza con el recuerdo, con una pequeña sonrisa en la comisura de sus labios.

Di un grito ahogado. Oh, dios mío. ¡Eso es verdad! Él me pidió que lo besara y eso hice, bueno, dos veces en realidad. Dijo que todavía estaba doliéndole y me pidió que lo besé de nuevo. Justo después de eso, Yoongi salió de la casa y nos sorprendió. Le dio un puñetazo en el rostro a Jungkook por eso.

Oh, mierda. ¡Jeon fue mi primer beso! No estaba seguro de cómo sentirme sobre eso, fue realmente agradable esa vez. Él estaba siendo muy dulce ese día, estaba subiendo al árbol para bajar mi pelota que había quedado atrapada ahí. Supongo que eso era bueno, al menos si Kook tenía mi primer beso, significaba que no fue robado por un imbécil mientras estaba borracho en una fiesta.

Le sonreí y me devolvió la sonrisa.

—Ese también fue mi primer beso, y aún lo recuerdo -dijo en voz baja, guiñando un ojo en broma.

—Bueno, has tenido muchos desde entonces, y algo más -afirmé, refiriéndome a todas los omegas con los que se ha acostado.

—Sí, pero ese es todavía el primero y el mejor -susurró, besando la parte superior de mi cabeza y tirando de sus brazos a mí alrededor, enterrando mi nariz en su glándula de olor.

Nos quedamos en silencio; no sabía qué decir, así que me quedé callada.

Después de un rato, todavía estaba despierto por el ruido que llegaba de la fiesta. Eran cerca de la una de la madrugada, así que probablemente se prolongaría por lo menos una o dos horas más. Me di la vuelta para ver a Jungkook on Servando observándome.

—Tampoco puedes dormir, ¿eh? -preguntó, sonriendo. Negué con la cabeza.

—¿Por qué no sales y sacas provecho a la fiesta? No tiene sentido que estemos aquí despiertos -me alejé de él para que pudiera salir de la cama.

Pero él negó con su cabeza y me haló de nuevo a su pecho.

—Estoy bien donde estoy.

Después de aproximadamente media hora, levanté mi cabeza y lo miré, se había quedado dormido y se veía tan tranquilo y dulce, y sin mencionar sexy. Prefiero nunca mirarlo de esta manera.

Sabía que él era guapísimo y tenía un cuerpo impresionante, pero nunca se me había ocurrido mirarlo así. Mis ojos se movieron hacia su pecho. Él estaba realmente increíble y tenía abdominales perfectos.

Acerqué uno de mis dedos y tracé las líneas de sus músculos en su estómago, solo preguntándome cómo se sentiría.

Él se estremeció.

—Me siento un poco violado -afirmó, haciéndome saltar y alejar mi mano rápidamente.

Me reí porque había sido sorprendido.

—Bienvenido a mi mundo, me haces sentir así todo el tiempo -me encogí de hombros.

—Supongo que sí, lo siento -dijo, casualmente. Inmediatamente, me pregunté por qué él no era así todo el tiempo; si lo fuera, probablemente estaría enamorado de él como los demás chicos de la universidad.

—Oye, viendo que no podemos dormir... ¿Qué te parece jugar? -sugirió en tono emocionado, lo que era probablemente una mala señal.

Puse mis ojos en blanco, tratando de no pensar en los estúpidos juegos que él propondría.

—Viniendo de ti; será algo como un juego de quitarse la ropa, o algo que implicará que me veas desnudo -dije, frunciendo el ceño y haciendo una mueca con los labios.

Él se rio y tomó mi labio inferior entre su pulgar y dedo índice.

—Sin pucheros, Tae -bromeó, recorriendo su pulgar por mi labio.

El movimiento me hizo débil por alguna razón. Saqué mi lengua y lamí su pulgar en broma, esperando que se alejara y me dijera que era asqueroso. Pero no lo hizo. En cambio, un pequeño gemido surgió de su garganta. El sonido hizo que algo muy profundo dentro de mí cosquilleara y palpitara.

Movió su cabeza cerca de la mía y luego se detuvo, sus labios estaban a pocos milímetros de los míos. No podía respirar, mi corazón estaba acelerado, pero no era el usual miedo que tenía, era porque quería que me besara. Él pareciera estar esperando que le diera una señal para decir que estaba bien.

Tragué saliva y cerré la distancia, presionando mis labios a los suyos ligeramente. Se sentía como si él me diera un shock, mi cuerpo empezó a temblar y vibrar si entiendo la necesidad de esperar su toque. Un millón de mariposas parecían alzar el vuelo en mi estómago, pero sabía que no era causado por el alcohol.

Respondió de inmediato, acercándome a él y recorriendo mi espalda con sus manos. Levanté mis brazos y los puse alrededor de su cuello, enredando mis dedos en su cabello castaño y sedoso. Sus labios eran suaves y encajaban perfectamente en los míos. Él chupó suavemente mi labio inferior y abrí mi boca, sin realmente saber qué esperar de mi primer beso adecuado.

Deslizó su lengua en mi boca y acaricio la mía con ternura. El sabor de él era increíble, mi cuerpo estaba quemando, queriendo más...

De repente, se apartó, haciéndome gemir y me pregunté en qué me había equivocado. Él levantó la cabeza y señaló hacia la puerta, apretando su mano sobre mi boca para mantenerme callado.

—Grita que estás bien -susurró. Lo miré, confundido.

—¡Taehyung! ¡Abre la puerta! -gritó Yoon, golpeando la puerta con fuerza.

Jungkook asintió con la cabeza y me retiró su mano de mi boca. Me aclaré rápidamente la garganta.

—Yoon, estoy bien. Estoy cansado, así que vete -grité, tratando de hacer mi voz sonar enojada.

—Tae, ¿Has visto a Jeon? -preguntó, a través de la puerta. Miré a Jungkook, horrorizado. ¿Qué diablos se supone que tengo que responder a eso? Sí, en realidad está en la cama conmigo, medio desnudo, y acabo de tener mi lengua en su garganta. Ahora te puedes ir, que estás interrumpiendo. Sí, no creo que eso le agradaría mucho a mi hermano.

—Me fui a casa -susurró Kook, asintiendo con la cabeza alentadoramente.

—Dijo que se iba a casa, Yoongi. Ahora vete -grité, mordiéndome los labios y esperando que él se lo hubiera creído. Jungkook inclinó su cabeza hacia abajo y sentí sus suaves labios sobre los míos de nuevo, alejándose con un suspiro cuando mi hermano volvió a gritar.

—Tae, ¿Estás bien? Suenas un poco extraño.

Me reí.

—Sí, Me comencé a sentir mal, así que vine a la cama, pero ahora estoy bien. Te veré en la mañana. Oh, y por cierto, no voy a limpiar, así que necesitas hacerlo todo -bromeé, sonriendo ante la idea de que él limpiara toda la casa solo.

—Lo que sea, Tae, ambos sabemos que me ayudarás de todos modos -dijo, riendo.

Miré hacia Jungkook, el cual me estaba sonriendo con su típica sonrisa para luego volver a juntar sus labios con los míos, haciendo que el cosquilleo volviera al instante.

Su mano se deslizó lentamente por mi lado mientras su lengua regresaba a mi boca, su sabor en mis papilas gustativas era exquisito.

Llegó a la parte inferior del pulóver que estaba usando y deslizó su mano por debajo, recorriendo mi muslo con su mano y tocando mi cadera. Sus dedos trazaron un camino al rededor del elástico de mi ropa interior, de modo que su mano estaba en mi trasero.

Mi piel parecía arder dónde me tocaba.

Fue en ese momento que regresé en sí. Esto era demasiado rápido. Moví mi cabeza hacia atrás y saqué su mano para que dejara de moverse sobre mi culo.

—Oh, lo siento. Demasiado rápido, ¿Cierto? -preguntó, un poco culpable. Asentí con la cabeza, tratando de recuperar el aliento y calmar a mi cuerpo- está bien, ángel. Vamos a dormir, entonces -sugirió, con una gran sonrisa

Se alejó un poco de mí y se recostó, halándome a su lado.

Puse mi cabeza sobre su pecho y colgué mi pierna sobre él mientras que enrollaba mis brazos en su cintura. Él se agachó y tomó mi mano, entrelazando nuestros dedos.

Sus labios rozaron la parte superior de mi cabeza y cerré los ojos, sintiéndome más feliz de lo que había estado por mucho tiempo.

Justo antes de dormir tuve una horrible sensación de que esto era un error que terminaría pagando por la mañana. Quiero decir, estaba con el mejor amigo de mi hermano, que era un total prostituto, y que únicamente se preocupaba por él mismo.

Holii, 2301 palabras y eso que este era la 3ro parte del capítulo 😭

Realmente espero que esta historia les esté gustando. Ya ahora si nos veremos el día 1ro.

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Tengan una bonita semana.
Les quiere 💕

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𓆩Candy𓆪

29-3-2024