Me despierto fresco como una lechuga, después del entrenamiento de ayer me siento mejor, encuentro a las tres a mi lado plácidamente durmiendo. Creo que me adelantaré a preparar el desayuno, luego de hacerlo ellas salen de la tienda por el aroma del desayuno, seguido de eso continúo mi entrenamiento básico con Margo. Aun que logre mejorar sustancialmente, termino como un flan después de eso, me divierto jugando en el río con ellas, les cuento historias de terror y así transcurrió un día mas de la acampada. Al llegar el martes, que es el ultimo día de las capacitaciones, regresamos al pueblo. Para así prepararme para mañana, para el mediodía regresamos.

—Alexa: Ahhh hogar dulce hogar.

—Claro que si.

—Margo: Bueno es relajante estar en casa después de un respiro.

—Konoka: Vaya, pero lo único que hacias era quedarte dormido en la noche, Alex, así no se vale.

—Jajaja ok.

Retornamos a la rutina de siempre, y llego la mañana del miércoles, salí para ir al instituto. Pero otra vez iria con acompañante, era Alexa. Ya solo falta que Konoka me acompañe el jueves.

—¿Por que me acompañas Alexa?

—Alexa: Mmmmm, bueno solo quería acompañarte al instituto.

—Esta bien, solo no llames mucho la atención.

Si tan solo pudiéramos esconder sus alitas.

Esta vez no me encontré con mis amigos, seguimos hacia el instituto donde estaban mis amigos en la entrada conversando, al acercarnos para saludarlos. Se quedan viendo a Alexa primero y luego me saludan, pero no se como explicarlo, vi que uno de ellos tuvo una mirada extraña al verla.

Puede que solo este imaginando cosas.

—Se fueron por un camino distinto, ¿verdad?

—Zie: Si, es que fuimos a acompañar a Miyuu a un encargo, por eso tuvimos que ir por otro lado.

—Ok, que esperamos.

—Miina: Bueno que nos presentes a tu otra novia.

Aquí vamos de nuevo.

—Ella no es mi novia, solo es una amiga.

—Miina: ¿Bueno en ese caso como se llama?

—Su nombre es Kamijou Alexa.

—Yayo: Mucho gusto Alexa.

—Alexa: Mucho gusto a todos.

Después de eso ella regreso a casa y yo entre al instituto con los demás. El periodo transcurrió con normalidad y al finalizar me encontré con Yayo y Miyuu en la salida.

—Ahora que veo Zie, ¿se adelanto?

—Yayo: Sip, dijo que tenia algo que hacer.

—Ok, vámonos.

Nos fuimos fastidiando por el camino como de costumbre y llegamos cada quien a su casa, al entrar veo la casa algo vacía salvo por Alexa que estaba viendo televisión en la sala.

—Ya volví.

—Alexa: Bienvenido.

—¿Sabes a donde se fueron Margo y Konoka?

—Alexa: Ah eso, Margo salio a una misión y Konoka dijo ir a vagar un rato.

—De acuerdo, prepararé la cena, solo guardo mis cosas.

—Alexa: Ok te ayudare.

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En alguna parte de Mikaru...

—Cazador I: A mi señal, ataquen por detrás.

—Entendido.

Habían unos demonios escondidos en un almacén los cuales no sabían siquiera que estábamos cerca.

—Cazador I: Ahora.

—Cazador II: Enseguida.

Avanzamos en sigilo hasta tenerlos a rango de nuestros ataques y sin posibilidad de defenderse, fueron vencidos sin mas. Luego de eso uno de mis compañeros agarro a uno de los demonios y le impuso uno conjuro de inmovilización, acto seguido procedió a interrogarlo.

—Cazador I: ¿Necesitamos saber que hace Lizael aquí?

—Demonio: Quien sabe, tal vez si se o no.

—Cazador I: No tomes a broma esto, di de una buena vez.

Uno de los mios procedió a torturarlo para forzarlo a hablar, lo cual tras un buen rato, conseguimos lo que necesitábamos.

—Demonio: Esta bien, esta bien lo escupiré, Lizael vino por que estaba interesado en alguien que esta en Mikaru.

—Cazador I: ¡Continua!

—Demonio: Aghhhhh, dijo que no se marchara hasta que la encuentre, además llevaba una arma muy extraña consigo.

—¿Podría tratarse de eso acaso?

—Cazador I: Es una posibilidad Margo.

Después de terminar de interrogarlo, fue eliminado como el resto pero lo que dijo sobre las intenciones de Lizael; me tienen preocupada, No creo que Alex sea su objetivo, es débil como para ser un rival para el.

—Cazador II: Compañero,  ¿podremos derrotar a Lizael?

—Cazador I: Esta muy difícil la cosa, si tuviéramos a alguien mas, posiblemente si.

—Cazador II: Ahora que recuerdo que hay de la arma que menciono ese tipejo.

—Cazador I: Si es verdad lo que dijo, estaríamos lidiando con algo peligroso en extremo.

—¿Que haremos ahora?

—Cazador I: Por el momento continuaremos vigilando a los demonios, localizar a Lizael es la prioridad y tratare de informar a la ciudad capital sobre esto para que envíen a alguien mas fuerte para asistirnos.

—Eso es lo prudente.

—Cazador I: Ah y les recuerdo, si lo encuentran, no intenten enfrentarlo solos antes avisen a los demás rápidamente.

—Cazador II: Entendido.

—Entendido.

Espero que no empeore la situación.

Después de eso, nos separamos para seguir con lo nuestro.

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En otra parte de Mikaru...

—¡Maldición, maldición, maldición, maldición, maldición, maldición, maldición, maldición, maldición, maldición, maldición, maldición, maldición, maldición, maldición!

—Malditos ángeles, mirad con atención por que pronto la vida de uno de vosotros tomare, así que id preparándose.

—Acabaré con esa maldita ángel, podre vengarme de ellos.

En eso escucho un leve susurro a mi espalda. Al darme vuelta un ser envuelto en oscuridad aparece.

—Ser: Vaya, vaya.

—¿Quien eres?

—Desconocido: No es necesario que lo sepas, solo que veo que tienes mucho resentimiento en tu corazón así que vine a darte una mano.

—¿A que te refieres?

—Desconocido: Simple, estoy en busca de alguien igual que tu y necesitó que alguien lo haga salir de una puta vez.

—¿En ese caso que debería hacer?

—Desconocido: De daré algo que te permitirá vengarte y espero que con esto cumpla también mi objetivo.

—Esta bien, te ayudare.

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Estaba terminando de cocinar cuando veo a Margo, entrar por la puerta.

—Bienvenida Margo.

—Margo: Ah hola Alex.

Después de eso me pregunta sobre la cena y para ser sorpresivo esta vez, hice frijoles volteados, fideos con mayonesa y un poco de mole, solo faltaría Konoka que regrese. El olor atrajo a Alexa y a Margo que estaban con cara de impacientes de probar la cena.

Al rato escucho un sonido extraño de arriba en los cuartos. Decidí ir a investigar y al entrar a mi cuarto veo a Konoka en mi armario de nuevo, recordé de inmediato que ella había ido a vagar por allí.

—Si que te fuiste a vagar.

—Konoka: Sip, hasta que un olor rico me atrajo hasta acá.

—Bueno entonces vamos a cenar.

Ella bajo entusiasmada al ver la comida no se contuvo y me pedía que le diera, con alegría les di su cena a cada una y así transcurrió la noche en familia. Cada quien va a su cuarto a dormir, al entrar al mio, Konoka esta durmiendo plácidamente, me acuesto, dado que mañana sera otro día.

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Espere un poco para levantarme de mi cama e ir a la habitación de Alex, al entrar desperté a Konoka y antes que ella dijera algo, le indico me acompañe al patio para hablar con ella.

—Konoka: ¿De que querías hablar?

—¿Necesitó saber si tienes algo que ver con Lizael?

—Konoka: Estoy al tanto de Lizael, pero no tiene nada que ver conmigo.

—Espero que sea así, si descubro que tu tienes algo que ver aun que Alex confíe en ti, te matare.

—Konoka: Agradece que sea por él que podemos convivir bajo el mismo techo, aun que me pregunto que pasaría si Alex te viera hacerlo.

—Ni se te ocurra.

Después de una acalorada discusión regresamos a nuestros dormitorios dejando en claro mi advertencia a ella.

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Ahhhh que ricamente doloroso es dormir en el suelo, para mi sorpresa esta vez Margo no esta debajo de la sabanas y al levantarme Konoka tampoco. Bajo al comedor donde Alexa se encuentra preparando unos ingredientes para el desayuno, al preguntarle sobre ellas.

—Alexa, ¿sabes a donde fue Konoka?

—Alexa: La vi salir en la mañana a quien sabe donde.

—Ok

Tal vez se fue a vagar, pero es algo temprano para hacerlo.

De paso aliste mis cosas para el instituto, Margo baja a comer somnolienta como siempre, por lo visto esta vez si no se levanto en la noche, termine de comer y me alisto para el instituto; En el camino me encontré con Miyuu, Yayo y Zie conversando, me les uno y juntos llegamos temprano al instituto. Al entrar en la clase y sentarme, noto algo raro en el aire, sentía locura y resentimiento que me molesto todo el periodo.

Al finalizar otra vez Zie se adelanto, Miyuu y Yayo eran los únicos que estaban dado que Miina y Facu se fueron. Tomamos el camino de regreso a casa.

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Bueno antes que Alex vuelva, iré a por ingredientes para la cena. Voy a una tienda cercana por los ingredientes, al caminar por la calle antes de llegar a la casa, siento una sensación horrible detrás mía. Al voltearme un escalofrío me recorre.

—Desconocido: Saludos amigita, me acompañaría un momento.

—Pero si tu eres.

Me da un golpe y caigo inconsciente.

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Al regresar entro a la casa para empezar con los preparativos de la cena, pero me percato de algo, Alexa no esta por ningún lado, Margo no se encuentra tampoco, salgo para ver si no salio a comprar cosas; Lo que me preocupa es que veo una bolsa a la distancia que al revisar de cerca me di cuenta que a Alexa le paso algo, al levantar la bolsa una nota ensangrentada cayo y me asusto al leer lo que dice.

Ven a la escuela.

Sin dudarlo tomo por mi vara de bambú y voy directamente a la escuela, la puerta principal esta cerrada, tengo que ingeniármelas para trepar uno de los muros.

Al entrar empiezo a buscar de abajo hacia arriba de la escuela pero no hay nada, respiro hondo y al ver al suelo hay manchas de sangre que me guían directamente al techo de la escuela, al salir por la puerta hacia la azotea del edificio principal, veo a Alexa herida y a alguien que me resulta conocido.

—¿Zie?

—Alexa: Por...fa...vor...Co...rre.

De inmediato Zie se mueve a una velocidad que no tengo chance de poner resistencia, me acierta un puñetazo haciéndome retroceder bastante. Al ponerme de pie recibo una ráfaga de golpes que me causan un daño brutal, uso mi vara para intentar bloquear pero aun así la ráfaga no se detiene.

A este paso no podre salvar a Alexa, mierda debe haber algo que pueda hacer.

Los golpes son mas fuertes con el tiempo y la vara ya casi se rompe, en un intento desesperado por contraatacar, materialice mi arma para por fin contrarrestar los ataques de Zie, pero aun así el daño que recibo es demasiado que mi cuerpo apenas lo resiste.

—¿Zie que rayos te paso?

—Zie: Largate Alex, si no quieres acabar como tu amiga.

—¿¡Zie por que rayos haces esto!?

Al hacerle la pregunta una aura oscura emana y una sensación horrible invade mi mente.

—Zie: ¡Muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere, muere, mueree maldita ángel, por que mierda no te mueres!

Cuando dice eso con total alevosía,  Alexa agoniza mas, ya que unas púas emergen del piso atravesándola.

—¡Zie sueltala ahora!

—Zie: Por lo visto no entiendes nada, es una venganza contra los seres que nos causan daño, por fin puedo tomar justicia en mis manos debido a que alguien me concedió el don para la justicia, tu no sabes lo que los ángeles que antes eran bondadosos ahora matan a cualquiera que se cruce en su camino, ¡yo perdi todo por culpa de los angeles y todo aquel que lleve alas es mi enemigo!

—Alexa: ¡Alex...corre...aghhhh...ahhhhh...duele...duele...mucho!

—¡Resiste ya pronto te llevare a casa!

—Zie: Por lo visto eres amigo de esta monstruosidad, así que también debes morir Mizushima Alex.

—Zie.

El me vuelve a atacar, esta vez saca una arma similar a una daga la cual logro esquivar pero rápidamente recibo una serie de puñaladas en todo mi cuerpo, no puedo retroceder aquí. En el momento que el iba a atacarme.

—¡Arte chi, muro de viento!

Una ráfaga embiste a Zie derribandolo por unos segundos que son suficientes para acercarme a Alexa y trato de destruir las espinas que no paraban de emerger.

—Zie: ¡¿Pero que mierda haces?!

De inmediato una lluvia de bolas de fuego fue en dirección de Zie causándole daño, al ver de donde provenían las bolas de fuego, es Konoka que vino a ayudar.

—Konoka: ¿Estan bien?

—Si pero ayudame a liberar a Alexa.

—Konoka: Enseguida.

Ella solo extiende su mano a las púas que perforan a Alexa y estas desaparecen fácilmente, rápidamente la atrapo, solo me abraza llorando y con heridas, pero no es buen momento para eso.

—Konoka, ¿sabes que le pasa a el?

—Konoka: Esta bajo efectos de conversión.

—¿Que es eso?

—Konoka: Una habilidad taboo entre los bandos, una que permite concederle poderes específicos a alguien dando resultado que dicho individuo cambie de forma.

—¿Entonces Zie ya no es humano?

—Konoka: Debido a su resentimiento, la conversión avanza rápidamente todavía es posible revertirlo si lo paramos ahora se salvara.

—Gracias, entonces que esperamos.

—Zie: ¡Bueno que reciban esto!

Una ráfaga oscura nos golpea a los tres haciendo que choquemos contra la cerca metalica de la azotea fuertemente.

—Konoka: Ahora si valiste.

—Zie: Tarde.

Unas cadenas salieron del suelo aprisionando a Konoka y Alexa debido a las heridas no podía hacer nada, así que le indique que se pusiera a cubierto.

—Zie: Por lo visto solo quedas tu en pie.

—¡Zie detente, no dejes que te consuma!

—Zie: Para que, si se siente tan bien tener poder, ya se veamos si tu determinación las salva.

—¿Que?

Mueve con rapidez, no pienso en nada mas que detenerlo, lo cual consigo pero unas ráfagas cortantes me dan a mi y otras dirigidas a ellas. Están sufriendo, no puedo permitir esto, debo luchar.

—Zie: ¡Ahora si!

Un golpe fuerte me hace salir disparado lejos de Alexa y Konoka.

—Zie: Muy bien una molestia menos, es hora de cumplir mi objetivo.

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—Zie: Muy bien, las voy a descuartizar, destrozar y hasta gozare sus muertes, por quien empiezo.

No puedo resistir mucho y Konoka parece estar en aprietos también. Alex esta demasiado herido como para seguir deteniéndolo.

—Zie: Ya se a la Angel matare primero.

Acaso moriré en vano. alguien ayúdenos. Al mirar detrás de Zie, esta Alex de pie como si nada.

—Zie: ohhh, así que no eres normal eh Alex, pensaba que eras normal y hasta pensaba dejarte vivir a ti, pero ni modo.

—Alex: ¡Zie!

En un abrir y cerrar de ojos, Alex le propina una patada a su rostro haciendo que el salga impactado contra la cerca de la azotea, la fuerza de dicho golpe se ve potente. El se pone de pie nuevamente para pelear con Alex.

—Zie: Hora de morir amigo.

—Alex: ¡Arte chi, eco de los elementos!

Una aura apenas perceptible envuelve a Alex, cuando Zie se lanza a atacarlo.

El agilmente le da un puñetazo en llamas, quemandolo gravemente en el lugar del golpe, Zie le arroja una ráfaga oscura, lo cual es repelido por un muro de concreto que Alex hace con el piso, rápidamente el lanza unas salvas de agua que se vuelven en fragmentos de hielo acuchillándolo.  Alex no se inmuta ante lo que hace. El invoca un circulo del cual salen varios proyectiles oscuros, los cuales el repelía con un muro de aire. Antes que Zie tenga otra oportunidad de atacar.

—Alex: Arte chi, castigador de tierra.

Alex da un salto en el aire y empuñando con fuerza su arma se precipita contra Zie levantando una nube de polvo dejando agrietado el lugar donde le acerto, luego parece que enfoca energia en su mano izquierda.

—Alex: Arte chi, purificar.

De repente la oscura aura que envolvía a Zie desaparece, el lo recuesta en una banca cercana.  Alex vuelve en si y se alivia al vernos al fin a salvo.

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—Bueno, por lo visto es según he escuchado, veamos si lo soporta.

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Al ver a Alexa y Konoka bien, hago que Konoka me deje darle el hombro para que se apoye, y a Alexa la cargo debido a sus heridas. Cuando siento algo que me perfora la espalda lo cual me hace soltarla y caer sobre ella. Solo pude escucharlas gritar.

—Ambas: ¡Alex!

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—Desconocido: Que pena, por lo visto no resistió, vaya pensé que al ser hijo de esa mujer, el seria capaz de darme entretenimiento pero supongo que fue pura fantasía.

—Cazador I: Detente Lizael.

—Cazador II: ¡No te escaparas maldito!

—Esta vez te detendré.

—Lizael: Quítense estorbos.

Una ráfaga invisible nos derriba y al instante Lizael desaparece en nuestras narices. Cuando se calma un poco escuche unos gritos que me hicieron voltear en dirección a la azotea de la escuela y estoy horrorizada al ver a Alex tendido en el suelo sangrando. Salto de techo en techo hasta el lugar donde siento un enorme dolor en el pecho y demasiada tristeza.

—Alexa: ¡Alex, alex, por favor resiste no te mueras!

—Konoka: ¡Maldicion no te duermas!

—¡¿Que rayos le paso!?

—Alexa: ¡Lucho con Zie y este le infligió mucho daño y ahora un proyectil le atraviesa la espalda y no para de sangrar!

Del shock me acerco a Alex y entre lágrimas trato de comprobar sus signos vitales, fue un breve alivio el saber que todavía sigue con vida, pero es evidente que no sera por mucho.

Los demás llegan y le brindan primeros auxilios a Alex y nos retiramos del lugar.

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En algun lugar de Mikaru...

—Ese chico sigue vivo después de ese ataque, bueno veamos si realmente es fuerte como para sobrevivir, por mientras iré a por esas chicas, no me vendra mal matarlas para provocarlo.

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Continuara...