Poco después de lo que Ayame nos dijo acerca de nosotros, no podemos aceptar de buena manera que no podamos besarnos.

—¿No hay nada que podamos hacer?

—Ayame: Relájense, no sera así por siempre, por ahora su estado no es adecuado para que te devuelva tus poderes, así que digamos que tendrás que esperar un tiempo.

Cuando ella afirma eso, Margo se deprime un poco, el sentimiento es mutuo, tras eso nos despedimos y regresamos al apartamento, es la madrugada cuando regresamos, Alexa y Konoka están todavía dormidas, así que silenciosamente vamos a nuestros cuartos. El sueño nos alcanza rápidamente y a la mañana siguiente despierto fresco como una lechuga. Preparo todo para otro día mas de escuela, ya me acople sin clavo alguno a la vida escolar, la profesora a la que todos quieren, etc, mis compañeros fueron buenos al ponerme al día de las clases que a veces me recuerda un poco a Mikaru, para matar el rato voy a la biblioteca donde me siento contento, leo lo que se me cruce o vea primero.

Hoy me toca ir al templo a entrenar, Ayame me enseña a dominar de nuevo mi lado de cazador, pero se centra en refrescarme la memoria sobre artes curativas, defensivas y de ataque, hasta que quedo completamente exhausto que solo me recuesto en el pasto por un rato

3 horas después...

Despierto y antes de irme.

—Ayame: Espera Alex, necesitó probar algo mas.

Tras eso saca de su túnica una pieza de ropa interior y me dijo.

—Ayame: Mira, esta es la ropa interior de cierta personita.

Cuando lo muestra, siento un impulso que me hace tratar de tomarla, en eso.

—Ayame: ¿Te diste cuenta de algo?

—No

—Ayame: Cuando te mostré el calzón reaccionaste pervertidamente.

Estoy apenado por mi reacción.

—Si.

—Ayame: Lo que hice fue evocar un poco tu instinto de demonio.

—¿Como así?

—Ayame: Por el momento debes practicar también como usar los otros poderes que recibiste a voluntad.

—Ahora que lo pienso, las únicas veces que he hecho uso de esos poderes fue en situaciones peligrosas.

—Ayame: Exacto, pero eso lo haces inconscientemente, no puedes activarlos cuando quieras, por lo tanto lo que puedes hacer es utilizar dichos estímulos para activarlos.

Volteo mi mirada a la ropa interior y luego a Ayame.

—Sabe que no puedo depender de eso.

—Ayame: Por eso, el calzón solo es provisional, debes encontrar otras formas mas viables de activar tus poderes sin requerir algo mas, aun que para estas cosas la mas indicada seria tu compañera Konoka.

—Le diré que me enseñe y también a Alexa.

—Ayame: Domina lo básico de esos poderes.

—Si.

—Ayame: Ya puedes irte.

Salgo del templo y regreso al apartamento, cuando entro ellas están felices como si algo hubiera pasado.

—¿Que sucedió?

—Margo: Fuimos juntas de compras y de paso socializamos un poco.

—Ese tu socializar no me convence mucho.

Eso hace que ellas se pongan con cara de pena o de ocultarme algo.

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Mientras en el apartamento mientras Alex estaba fuera...

—Alexa: Cocinar, vamos a cocinar, wiiiiiii.

—Konoka: Leeré por mientras.

—¿No haremos nada mas hoy?

Cuando dije eso ambas tenían la expresión de que eso era su única rutina, así que les sugerí ir a comprar cosas, no les molesto mucho la idea, así que salimos sin mas a unas tiendas cercanas para dar un toque nuevo a la comida así como cambiar de aires como un tiempo de chicas. todo transcurrió normal, Alexa me ayudo con las cosas y Konoka buscaba en la sección de libros sobre cocina. Pagamos las cosas y luego nos fuimos, me sorprendió el hecho que Konoka estuviera tranquila sin mas, ya que usualmente pone su mirada sobre cosas pervertidas pero por lo visto hoy no.

No tardamos mucho en volver al apartamento y sacamos las cosas para tratar de impresionar a Alex, tome uno de los libros que compramos para ver si había alguna receta útil o excelente para el almuerzo pero me sorprendí por algo, en vez de instrucciones de cocina había un cómic porno.

—¡¿Pero que rayos compraste Konoka?!

—Konoka: Unas cositas para pasar el rato.

—Pero te dijimos que libros de cocina no esto y como pensé que no tenias intención oculta.

—Konoka: ¿Acaso no la viste venir Margo?

—Ya me cayo mal, ahora si te voy a dar tu merecido.

—Konoka: Vaya, ¿vaya quieres continuar la pelea del parque no es así?

—Me leíste la mente.

—Alexa: Chicas ya cálmense mejor cocinemos, ¿les parece?

—/Konoka: ¡Tu no te metas!

Debido a eso empezamos a pelearnos, pero de a poco hicimos un desastre en el cuarto, pero antes de que nos saliéramos de control escuche un chasquido de dedos.

—Alexa: מילה אלוהית: רגוע

De un momento al otro nuestro enojo desapareció y estábamos relajadas.

—Alexa: Ya paren su pelea, Alex esta por regresar ¿y no creo que sea bueno que vea el desastre no creen?

—Konoka: Ahhh tienes un poco de razón, solo que ahora si quieres libros de cocina compralos tu.

—Esta bien.

Alexa nos hizo ordenar las cosas y mientras lo hacíamos.

—Esto nos recuerda a cuando empezamos a compartir el mismo techo.

—Konoka: Tienes razón

—Alexa: Lo mismo digo, también me recuerda a nuestras peleas cuando estábamos en Mikaru, la vez que vendimos bebidas para ayudar a Alex, esta es una de esas veces que hacemos algo juntas.

Cuando recordamos lo de las bebidas y todas las locuras que hicimos no pudimos aguantar el reírnos por un buen rato y tras eso cocinamos.

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De vuelta al presente...

—Ya veo con que eso fue y no se preocupen al menos termino bien, ¿que es eso que huele bien?

Ellas ponen semblante de felicidad al mencionar eso y con orgullo me muestran una selección de platillos que cuesta trabajo creer que lo hicieran juntas. Ellas se sirven su porción y ansiosas estan de que deguste.

—Buen provecho.

Increíble el sabor de esta ensalada es sublime, el puré de papa esta exquisito, la sopa de pollo rica y la bebida de palo de la vida excelente.

—¡Esta todo delicioso!

Su felicidad es mayor por el cumplido y con alegría almorzamos, me agrada que ahora se lleven mejor que antes a pesar de sus diferencias pueden ser buenas amigas. Vemos televisión, nos divertimos charlando de cosas sin sentido.

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Mientras en alguna parte de Arkalia...

—¿Ya esta todo listo Ermingard?

—Ermingard: Si, tal y como lo ordeno, sus habilidades van progresando parece que si puede darnos entretenimiento.

—¿Que hay de Mellow?

—Ermingard: Todo va según el plan, para las 8 de las noche debería empezar el acto.

—Muy bien diles a los demás que estén en sus posiciones.

—Ermingard: Entendido y ¿usted que hara señor?

—Tu tranquila, haceros cargo de los demás pilares y yo de ella.

—Ermingard: Como ordene.

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En el templo de Arkalia...

—Kazuko: Mi señora hemos recibido información del Ministro Rayler y el General Sado.

—¿Que te dijeron?

—Kazuko: Encontraron un par de cadáveres en las zonas industriales, sus circunstancias de muerte sin explicación y Sado ha dado ordenes de vigilancia minuciosa en la ciudad, Rayler dice que cuando revisaron las cuerpos vieron un emblema extraño en sus pechos.

—¿Emblema?

—Kazuko: Si, aquí esta un dibujo que hicieron de ese símbolo, Cuando estaba por irme llegaron unos soldados informando que encontraron a otros cadáveres en la zona noroeste y sur.

—Algo anda muy mal, ve rápido al capitolio y diles que se preparen ante posible hostilidad.

—Kasuko: Enseguida.

Tras irse saque mi teléfono para llamar a los chicos, pero al tratar de llamarlos solo escucho interferencia y breves voces en el que no son las de ellos.

Solo espero no resulte tan grave.

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Mientras en el apartamento...

Después de un rico almuerzo y cena se me ocurre salir a ver el edificio mas alto de la ciudad.

—¿Vamos a pasear de nuevo?

—Alexa: ¡Claro!

—Margo: Bueno si tu lo dices.

—Konoka: Por mi bien.

—¡No se diga mas!

Son como las 18:30 cuando salimos, pasamos por el distrito comercial y llegamos a nuestro destino a las 20:20 es una vista increíble, Alexa esta emocionada de ver la ciudad desde muy alto, Konoka no hace nada mas que leer un poco y Margo esta pegada a mi.

—Margo: Una vez vine a aquí, buscaba donde te habías ido.

—A veces miraba a las montañas, tu mirabas de arriba y yo de abajo.

Ambos reímos por eso.

—Margo: Sabes Alex, quisiera que todos estuviéramos así, juntos.

—Pienso lo mismo.

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—Ermingard ya casi llegamos.

—Ermingard: Tranquila, ya pronto empezara.

—Lo se pero debo ver a alguien.

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—Alexa: Lindas nubes, lindas luces de la ciudad todo es hermoso.

—Konoka: No lo niego Alexa, ¡atrás de ti Alex!

Su grito nos hace ver la causa, Kirie y una chica de pelo rosado están frente a nosotros.

—Kirie: Vaya, pense que podría verte de nuevo y resulta que vienes acompañado.

—Margo: ¡¿Que haces aquí y quien es ella?!

—Ermingard: Siento mis modales mi nombre es Ermingard.

—Kirie: Quiero hablar contigo antes que todo acabe.

—¿Que dices?

—Kirie: Que malo, pero solo quiero decirte 2 cosas, hola.

Una ola de choque nos impacta a los 4 y somos lanzados por la parte fuera de la torre.

—Kirie: Y adiós.

Mientras caemos Ermingard se acerca dándonos otro embate que nos estrella contra la torre, por la rapidez de Alexa y Konoka usan sus alas para detener la caída de Margo y mía.

En el suelo...

—Alexa: ¿Pero que rayos paso?

—Margo: Ese poder es abrumador.

—Kirie: Me he olvidado de vosotras dos.

Ambas otra vez estan frente a nosotros y antes de poder reaccionar una ráfaga de cuchillas nos acierta, seguido de eso Ermingard usa su sombrilla.

—Ermingard: Oscuridad eterna, bebedores de sangre, Murciélagos del Purgatorio.

Tras eso su sombrilla se extiende y salen proyectiles que nos habrian dado de no ser por que Alexa usa su barrera para protegernos. Ermingard junto a Kirie se acercan para atravesar la barrera por un descuido de ella y darle una patada doble, corro para darle un golpe a Kirie, pero Ermingard usa su sombrilla para bloquear mi ataque y me hace retroceder de un puñetazo. Kirie me lanza unas dagas que me dan en mi hombro izquierdo y Konoka usa sus hechizos para hacerlas retroceder pero Kirie se mueve rápidamente para sujetarla y aplicarle un DDT dejándola fuera de combate.

—Voz misteriosa: ¡Agáchense!

Cuando nos agachamos un lanzallamas pasa por nuestras cabezas y mientras retroceden aprovecho para poner a salvo a Alexa y Konoka, Margo esta algo lastimada y al ver quien lanzo ese poderoso lanzallamas es Ayame con unos soldados que la acompañan

—Ayame: Me alegra que estén bien.

—Kirie: Siempre fastidian la cosa.

En eso Ayame miro a Kirie.

—Ayame: Oh vaya pensé que algo no cuadraba con respecto a ti.

—Kirie: ¿Por que lo dices?

—Ayame: Por que te pareces a alguien que murió hace mucho.

De un momento al otro Margo se coloca frente mía con su arma lista.

—Margo: ¿Recuerdas lo del parque?

—Si.

—Margo: Quien nos apuñalo esa vez esta frente a nosotros.

—Imposible.

—Margo: Nos engaño a los dos, apenas me percate de una cosa, su cicatriz.

—Ayame: Se podría saber que haces aquí, Kirie Mellow de Ala terra.

—Kirie: Bah cagaste mi sorpresita, supongo que ya no puedo ocultarlo, ella y yo somos de Ala terra, pero no somos las únicas que estamos aquí, quisiera hablar mas pero ya hice lo que debía ahora les toca a ellos, adiosito.

Tras eso Ermingard y Kirie Desaparecen sin mas frente a nosotros.

—Konoka: ¿Que paso?

—Tranquila Konoka ya paso.

Mientras atendíamos a Konoka, un sonido como metálico sonoro se escucha en el cielo y tras eso toda la ciudad entra en oscuridad total y luego unos grabados extraños aparecieron cubriendo todo y enfrente nuestra salio unos seres brillantes que velozmente esquivamos pero atacaron a los soldados, pensamos que esos soldados murieron pero en unos instantes se levantaron.

—Ayame: Bajen sus armas.

—Soldados: ...

Alexa pone su barrera protegiéndonos de las balas que ellos disparan, salto por fuera de la barrera para darles un golpe dejándolos inconscientes.

—Ayame: Ahora tiene sentido todo.

—¿Que es Ayame?

—Ayame: Esos seres son animas del infierno no pensé que intentaran eso.

De inmediato se escuchan balaceras y explosiones por todos lados, en la oscuridad se ven los destellos.

—Radio de Ayame: Atención a todas las unidades, estamos bajo ataque, replegados a los cuarteles generales y al templo, asegúrense de que los civiles entren a los refugios de inmediato, el resto defended.

—Ayame: Hay que movernos rápido a los cuarteles.

—Margo: Esperen, iré a por mis padres. ya los alcanzo.

—Radio de Ayame: Necesitamos apoyo en las zonas oeste y este, la zona norte ha caído, repito ha caído, son demasiados.

—Ayame: Debo ir a ayudar, ustedes traten de llegar a los cuarteles rápido.

—Entendido, Margo nos vemos en los cuarteles.

—Margo: No te preocupes puedo cuidarme sola.

—Ayame: Tengan esto.

Ayame nos da unos lentes de visión nocturna que tenían los soldados y un radio tras eso se fue rápido a la zona que la requieren.

—Vamos rápido.

—Alexa/Konoka: ¡Ok!

Tendremos que abrirnos paso hasta los cuarteles espero que Margo llegue a tiempo.

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Mientras en el estadio de Arkalia...

—Mellow: Ya deberíamos empezar.

—¡Como digas!

—Mellow: ¿Que dicen chicos, empezamos?

—Publico: ¡Siiiiii!

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Continuara...