Una persona no puede realmente amarte, a menos que ellos sepan quién eres, el verdadero tú.
(E.F.)

* * * * *

Ángel se removió incómodo en su lugar, sintiendo sobre su piel las prendas que en otro momento estuvieron sobre la de Wolf, y eso sólo hacía que fuera más...incómodo.

Su piel hormigueaba, había diminutas chispas de electricidad recorriéndolo, su miembro palpitaba de un modo que él no reconocía pues nunca lo había sentido, apretó sus piernas y jugueteó con sus manos.

Lo peor es que Darren no estaba siendo grosero ni parecía tener dobles intenciones. Su voz no era arrogante como cuando le decía que era "Suyo" o una tentación seductora como cuando lo tocaba. Incluso su mirada parecía menos oscura, con un brillo extraño en ella.

Ángel tomó una pieza de pan, principalmente para tener algo qué hacer con sus manos y para evitar esa mirada que debería ser fría como siempre y no lo era.

Su primer impulso fue burlarse, "¿Qué te hace pensar que voy a contarte algo de mí, cuando me compraste en una subasta ilegal?", o decirle que no quería saber de él. Ángel no podía involucrarse con el humano porque eso significaría apegarse a él, conocer a alguien es peligroso porque después duele la partida. Y Ángel estaba decidido a huir, eso era seguro, tarde o temprano se iría.

Pero se encontró, muy a su pesar, respondiendo: —No necesito realmente comer, no aquí, no comida humana. Aunque hemos pasado ya tanto tiempo aquí entre ustedes, un siglo es demasiado, que nos hemos terminado acostumbrando.

—¿Hemos? —Wolf había echo a un lado el periódico que leía desde el momento en que Ángel llegó, al menos tenía educación, y ahora toda su atención estaba en el ángel ojiazul frente a él. Ni siquiera era por el deseo, saber más de él para hacerlo rendirse, era algo diferente, la voz, la mirada, los gestos corporales de Ángel habían cambiado y Wolf realmente quería saber de él.

—Sí —Ángel comenzó a desmenuzar la pieza de pan, sin llegar a comerla—. Nosotros. Debes saberlo, estuviste en una subasta donde había más ángeles, obviamente no soy el único —había una mezcla de tristeza y acusación en su voz, pero cuando miró hacia el humano, sus ojos azules se abrieron demasiado.

Darren estaba realmente sorprendido. —La verdad es que... Bueno, esto hará que me odies más, pero nunca me pregunté por el origen de ustedes. Es decir, son ángeles, vienen del cielo y todo eso, pero... Nunca me pregunté cómo llegaron a una subasta clandestina. Y no te ofendas, pero muchos de tus compañeros no se veían tan devastados o luchando contra esto como tú.

El ceño de Ángel se frunció y sus labios formaron un puchero. —Esto fue mi culpa. Estaba aburrido de nuestra vida "perfecta", quise aventuras, quise conocer a aquellos a quienes veíamos a diario. Sólo era por curiosidad, bajaríamos a la Tierra sólo un tiempo, una especie de "vacaciones"... —se detuvo cuando se dio cuenta que estaba haciendo justo lo que se dijo que no haría.

Una de las cejas oscuras de Wolf se alzó. —¿Los obligaste? Porque es la única forma en que puedo aceptar que esto sea tu culpa.

Ángel comenzó a negar varias veces. —¡Por supuesto que no! Todos bajamos por nuestra propia voluntad, pero algunos eran más jóvenes que otros, debí saber que no podrían resistir la tentación de ustedes...

Los labios de Wolf se curvaron un poco, sus ojos tenían una chispa traviesa antes de que su mano se extendiera hacia el muslo de Ángel. —Ahora sabes lo que es caer tú también. No es tan malo —su pulgar acarició un poco más hacia arriba, Ángel se tensó, sus piernas temblaban, pero tan pronto como comenzó, terminó. Darren quitó su mano y tomó una taza de lo que parecía café—. Sigue, entonces, tus hermanos cayeron en la "tentación", ¿y...?

Ángel tragó, se aclaró la garganta antes de poder seguir. Su cuerpo se sentía extraño. —Y...nada, eso. Como bien notaste, no todos quieren volver, algunos están cómodos entre ustedes los humanos. Han cedido a sus deseos, han cedido sus deseos angelicales, pero no sólo eso, se han enamorado y no quieren volver.

Wolf se encogió de hombros. —¿Y cuál es el problema? Si algunos de ustedes son felices aquí, si han encontrado su destino en la Tierra y no en el Cielo o lo que sea, si dan sus deseos libremente y reciben felicidad a cambio, ¿por qué tienen que irse? Me parece egoísta, viniendo de seres celestiales, querer quitarles eso.

Ángel parpadeó, sorprendido. Él nunca lo había visto así. ¡No era así! No podían quedarse en la Tierra, no eran felices, sólo estaban confundidos, equivocados, se habían dejado engañar... -Este no es su destino, no es nuestro destino. Nuestro lugar es...

—¿Ángel? —la voz de Wolf era baja, dulce incluso, paciente, mientras lo interrumpía y tomaba su barbilla, obligándolo a mirarlo—. Nuestro lugar es donde queramos. Ángel o humano, debemos poder elegir. Si tus hermanos quieren quedarse, no puedes obligarlos a irse. Es egoísta de tu parte.

La boca se Ángel se abrió. No era egoísta, él buscaba lo mejor para todos.

Terminó en puchero. Tenía una verdadera razón, una buena, pero no la dijo. "O nos vamos todos o nos quedamos todos. Esa fue la condición para poder volver."

Él se hundió en su asiento, sin haber probado ningún alimento. Wolf sólo terminó su café antes de ponerse de pie. Volvió a tomar la barbilla de Ángel, obligándolo a mirarlo hacia arriba.

—Descubrirás, como ellos, que no es tan malo aquí, Ángel. No todo es lo que parece a primera vista. Date una oportunidad, dame, danos una oportunidad.

Ángel no supo que contestar, pero Wolf siguió: —Tengo que ir a trabajar. Puedes recorrer la casa, tomar lo que quieras. No busques la llave de tu grillete. Hay sólo una y la llevo conmigo. Mejor disfruta. Todo lo mío está a tu disposición, querido —antes de que Ángel dijera que no le importaba nada, Wolf tomó sus labios en un beso rápido.

Ángel se quedó sin aliento. Lo tomó por sorpresa. Y aunque fue breve, se quedó sintiéndolo un rato más. El sabor del café, la fruta, y de Wolf, el sabor de sus primeros besos.

Suspiró y dejó caer su frente sobre la mesa. No se supone que esto fuera así. No se supone que terminara cautivo mientras intentaba rescatar a los demás ángeles. No se supone que su captor humano lo tocara y a él le gustara. No se supone que Wolf fuera amable...aunque fuera algunas veces.

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P

arece que demasiado pronto Ángel se da cuenta que no todo es como él cree 😅😅

¿Qué les va pareciendo la historia?