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Capítulo 9: "Nuevos sentimientos"

Ya había pasado 3 semanas desde que Gokú y Milk se hicieron amigos, la amistad de ambos no fue bien recibida por Lunch ni Majin boo que cada minuto que pasaba detestaban más a los pelinegros.

Milk con ayuda de Gokú estaba asistiendo a un centro de rehabilitación, ella se había alejado del grupo de Lunch y ahora su único amigo era Gokú quien se había convertido en su mejor amigo y confidente, el siempre estaba con ella apoyándola en cada crisis de ansiedad que presentaba, dándole la fortaleza para que la bella jovencita pelinegra pueda alejarse del vicio. Ambos se habían vuelto inseparables, Gokú como formaba equipo con la pelinegra en la mayoría de cursos se la pasaba siempre con ella, incluso almorzaban y cenaban juntos en casa de ella pues su padre prácticamente no paraba en su casa, esta cercanía entre ambos le permitía al joven de cabello alborotado vigilar más de cerca a la pelinegra para evitar que ella intente recaer ya que en ese poco tiempo que llevaba asistiendo a terapia ella había obtenido la fortaleza suficiente para evitar recaer.

Para Milk, Gokú en esas semanas que llevaban juntos era el ángel que ella siempre espero que viniera a salvarla desde que cayo en el vivió. Él con su dulzura y paciencia ayudaba a que la pelinegra sienta la fortaleza que necesitaba para salir adelante. La pelinegra cada día que pasaba se sentía más y más agradecida con el joven de cabello alborotado quien a pesar de no ser su familia se había comportado como ella, estando junto a ella en sus crisis, cuando sentía desfallecer, yendo a verla cada vez que ella lo llamaba porque la ansiedad por consumir su veneno la mataba. Él siempre esta allí para ella y eso en ese corto tiempo había hecho que la pelinegra sintiera un cariño muy especial por él, que ella aún no sabía definirlo debido a su inexperiencia.

Lunch trataba de acercarse a Gokú para hablarle mal de la pelinegra pero todo sus intentos eran en vano pues Gokú casi nunca le prestaba atención a lo que ella decía y eso irritaba más a la rubia que había jurado ante sus amigas evitar a como diera lugar que Gokú se convierta en novio de la pelinegra, pues ella estaba segura que él se sentía atraído por la pelinegra a pesar de que aún entre ambos no había nada solo una simple amistad.

Por otro lado Majin boo buscaba la forma de acercarse a la pelinegra para hacerla nuevamente recaer en el vicio, pero todos sus intentos se venían abajo pues el joven de cabello alborotado no dejaba a la pelinegra sola ni un solo minuto impidiendo de esta forma que el joven de cabello rosa llevara adelante su maléfico plan.

Majin boo al igual que Lunch habían también jurado ante sus amigos sacar de su camino al atractivo jovencito de cabello alborotado que se había convertido en un estorbo para sus planes con la pelinegra.

La cercanía entre Milk y Gokú estaba no solo fortaleciendo su amistad sino despertando en el par de jovencitos inexpertos sentimientos desconocidos por ellos. Cada día que pasaba ambos sentían la necesidad de verse a si no fuera día de clases ellos se encontraban en algún lugar para pasear o hacer alguna actividad que mantenga ocupada la mente de la pelinegra.

Fin de semana:

Un par de pelinegros platicaban mientras se encontraban sentados en el borde de la alberca de la casa de la pelinegra.

Y eso me dijo la terapeuta, decía sonriendo Milk.

Sabía que lo lograrías, ya ves como si se puede, todo es cuestión de fuerza de voluntad, decía Gokú mientras jugaba con el agua con sus pies que estaban dentro de la alberca.

Y también del apoyo, pero aún falta mucho, la terapeuta dice que tengo que desintoxicarme, yo le digo que hay días en las que siento la necesidad de ir en busca de la droga, son esos días en que la indiferencia de mi padre me golpea, claro ahora es menos desde que tu llegaste a mi vida, ya no me siento tan sola, dijo la pelinegra sonriendo.

Me alegra saber que estoy ayudando, dijo Gokú sonriendo mientras miraba cada facción de la bella pelinegra y sentía su corazón latir a mayor velocidad.

¿Qué te parece si nadamos un poco?, dijo la pelinegra.

Me parece buena idea, dijo Gokú sacándose su polo y quedándose solo con shorts para meterse a la alberca.

La pelinegra se saco el pareo que llevaba puesto e ingreso también a la piscina.

Mientras tanto:

En un restaurante una rubia y un joven de cabello rosa platicaban:
Tenemos que hacer algo para que Milk vuelva a recaer, decía la rubia.

Si pero ¿qué?, ni siquiera puedo acercarme a ella, el estúpido ese se la pasa a cada minuto a su lado, ya me tiene harto, decía Majin boo.

Y para colmo la estúpida de Milk a las justas nos habla, como dices se la pasa junto a Gokú todo el tiempo, de lo único que estoy segura es que aún no está todo perdido, pues aún no son nada. Si tan sola pudiera hablar con ella, hacerle creer que Gokú se acercado a ella por lastima, tal vez de esa forma pueda lastimarla y tú podrías aprovechar para hacerla recaer, decía Lunch.

No sería mala idea, decía Majin boo.

Mansión de Milk:

Un par de pelinegros jugaban con el agua mientras sonreían.

Milk es tan bella, ni siquiera en mi planeta hay alguien que se pueda comparar a su belleza pensaba Gokú mientras miraba dulcemente a la pelinegra reír.

¿Qué me miras tanto?, dijo Milk sonriendo.

Me gusta verte feliz, dijo Gokú.

Soy feliz gracias a ti, dijo la pelinegra abrazando al joven de cabello alborotado.

Los pelinegros al sentir el contacto de sus pieles desnudas solo cubiertas por las ropas de baño, sintieron una extraña electricidad recorrer su cuerpo que hizo que ambos se separasen.

Será mejor salir ya, dijo la pelinegra mientras el joven de cabello alborotado solo asintió con la cabeza.

Que fue eso que sentí, nunca había sentido algo así antes, pensaba Gokú mientras la pelinegra pensaba lo mismo mientras se secaba su blanca y delicada piel con una toalla.

Que me pasa con Gokú, ¿qué fue lo qué sentí al rozar mi piel con la suya?, pensaba la pelinegra mientras sus bello rostro empezaba a ruborizarse.

Restaurante:

Y ese es el plan, que te parece, decía Lunch mientras miraba al joven de cabello rosa.

Perfecto, dijo Majin boo.

Entonces lo pondremos en practica los más pronto posible, dijo Lunch riendo.

Que así sea, dijo Majin boo mientras levantaba su copa sellando su alianza con la rubia.

Mansión Ox:

Un par de pelinegros se encontraban sentados bajo la sombra de un árbol bebiendo unos refrescos.

¿Entonces tú padre se fue de viaje?, dijo Gokú con tristeza.

Si, dijo Milk.

¿Por cuánto tiempo?, dijo Gokú.

2 semanas, dijo Milk con tristeza.

No puedo creer que tu padre sea tan indiferente contigo, ni siquiera imagina todo lo que has pasado, dijo Gokú.

No, ni siquiera sabe que estoy yendo a terapia, como te dije para él no existo, desde que mamá falleció no existo para él, dijo la pelinegra con voz entrecortada.

No digas eso tú padre te debe querer a su manera, solo que él esta equivocado en su manera de pensar, el debe creer que dándote todo te hará feliz, ya tendré oportunidad de hablar con él y hacerle entender que tú lo necesitas. Además no estés triste ahora me tienes a mi, dijo Gokú sonriendo.

Lo sé y no sabes lo feliz que me hace tu amistad, dijo la pelinegra abrazando al joven de cabello alborotado que la envolviendo con su fuertes brazos apegándola a él.

Ambos pelinegros al sentir la cercanía de sus cuerpos sintieron su corazón latirle con mayor prisa haciendo que ambos se separasen simultáneamente e intenten cambiar el tema de conversación.

Ahora que estás tratando más al grupo de Vegueta, ¿qué te parecen?, dijo Milk para tratar de calmar los latidos de su corazón.

Son grandes chicos, muy amables y solidarios, dijo Gokú.

¿Y Bulma y Dieciocho, cómo son?, dijo Milk.

Creo que deberías darte la oportunidad de tratarlas no son malas personas, por ellas pude saber donde vivías, dijo Gokú.

¿Te parecen lindas?, dijo Milk sin saber porque se le ocurrió preguntar algo así.

¿Lindas?. Si lo son, son chicas muy atractivas y alegres, dijo Gokú mientras la pelinegra sentía quemarle todo por dentro sin entender aún porque.

Así y yo ¿cómo soy?, dijo Milk en tono celoso que paso desapercibido por ella y por el joven de cabello alborotado.

Una niña encantadora y bella, dijo Gokú sonrojándose ante sus propias palabras.

¿Crees qué soy bella?, dijo Milk sonriendo.

Si, lo eres, todos los chicos en la preparatoria lo dicen, eres la niña más bella de la preparatoria, dijo Gokú sonrojándose más.

Tú también eres el chico más bello de la preparatoria, dijo Milk sonrojándose ante sus palabras.

¡Gracias¡ dijo Gokú sonriendo.

No agradezcas es la verdad, dijo Milk sonriendo dulcemente.

Horas después:

En una lujosa casa una rubia platicaba con sus amigas:

Lunch, ya déjala tranquila, ella no tiene la culpa de que el bombón no se fije en ti, decía Mai.

Mira Mai, ya me tienes cansada, ¿eres mi amiga o no?, dijo Lunch furiosa mientras Marón y Mai la miraban preocupada.

Porque lo soy es que creo que no deberías ensañarte con ella, la pobre ha sufrido mucho, su madre falleció cuando era niña, a su padre parece no importarle, estuvo por meses perdiéndose en el mundo de las drogas y ahora que esta tratando de salir de el, no es justo que tú quieras hacerla recaer solo por tu capricho. Gokú no siente nada por ti, ni por ninguna de nosotras, él aunque aún no se lo halla dicho a Milk, está enamorado de ella, con sus acciones para con ella lo demuestra día a día, déjalos ser felices y busca tú la felicidad en alguien que te ame como lo deseas, dijo Mai.

Yo pienso igual Lunch, no vale la pena que te sigas ensañando con ella, después de todo Milk, durante el tiempo que nos dio su amistad, también nos dio muchas cosas que nunca pensamos tener, como viajes costosos y gastamos su dinero sin que ella nos lo reproche, creó que ya la usamos suficiente y es mejor dejarla tranquila ya, dijo Marón.

Son un par de cobardes, ni parecen ser mis amigas, no saben como me arrepiento de haber formado grupo con ustedes, no piensen que tomare sus consejos, Milk no me cayo desde que la vi, siempre supe que algún día se convertiría en un estorbo para mí y ese maldito día llego. Tiene a la mayoría de chicos guapos de la preparatoria tras de ella, debería conformarse con ellos y no haber arrastrado por lastima a Gokú a ella, pero eso acabara pronto ya lo verán, no necesito de su ayuda cobardes, dijo la rubia parándose del mueble y saliendo de la casa de Marón dejando a ambas chicas intrigadas.


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