Un hombre verde miraba desde su pequeño planeta de manera fija hacia un punto determinado.

¿Qué sucede Kami?, últimamente lo veo preocupado, decía Mr. Popo.

Y lo estoy, lo que estoy viendo no me gusta nada, decía Kamisama.

¿Qué sucede Kamisama?, decía Mr. Popo.

Esa niña aún esta muy susceptible, si lo alejo ahora solo la volveré a hacer recaer y yo le prometía Milka ayudar a su hija, además queda menos de dos meses, ¿cómo pudo suceder algo así?, decía Kamisama.

No le entiendo Kami, decía Mr. Popo.

Ojala y Kaiosama y los otros Kaios no se hayan dado cuenta aún, sino lo que le espera es terrible, decía con tristeza Kamisama mientras Mr. Popo lo miraba intrigado.

Planeta tierra:

Nos alegra saber que disfrutaste tu cumpleaños, decía Mai.

Si, lo importante es que lo hayas pasado bien, en compañía de tu amorcito, decía Dieciocho.

Si, lo pase muy bien, dijo Milk.

Lunch esta furiosa, yo ya le dije que se de por vencida pero ella parece que no piensa rendirse Milk, cuida mucho al bombón, aunque Lunch no tiene opción con él, porque para él la única que existe eres tú, siempre vale estar alerta, dijo Marón.

Si Marón tiene razón, me preocupa la pasividad de Lunch, algo debe estar planeando, dijo Bulma.

No se preocupen, nadie podrá separarnos, nuestro amor es muy grande y nadie lo puede romper, porque este va creciendo día a día, dijo la pelinegra.

Que bueno Milk, tú mereces que te amen así, dijo Mai.

Cambiando de tema. ¿Y cómo vas con las terapias?, dijo Marón.

Bien, la doctora dice que el amor me ayudo a salir adelante y alejarme del vicio, dijo Milk sonriendo.

Pues debe ser, Cell y Freezer también se alejaron del vició gracias al amor, dijo Dieciocho riendo.

Así, dijo Milk.

¿No sabías que Mai y Marón salen con ellos?, dijo Bulma sonriendo.

La verdad no, dijo Milk.

Nosotras te lo dijimos, pero como tu cabecita para Gokulandia ni atención nos prestaste por lo visto, dijo Mai fingiendo molestia.

Disculpen, pero las felicito, ellos no son malos chicos y que bueno que ustedes los estén ayudando a dejar el vicio dijo Milk, cuando su atractivo novio llego junto a ella.

¡Hola chicas¡ dijo Gokú.

¡Hola¡ dijeron las chicas.

Mi niña, ¿estas ocupada?, dijo Gokú sonriendo.

Para ti nunca estaré ocupada, dijo Milk sonriendo dulcemente.

¿Entonces me acompañas, necesito decirte algo?, dijo Gokú tomando la mano de la pelinegra.

Sí, dijo Milk sonriendo.

Ahhhhhhhhh, el amor, dijo Dieciocho al ver alejarse al par de pelinegros.

Hacen tan bella pareja, dijo Bulma, mientras Las jovencitas asentían.

Gokú y Milk caminaron hasta la parte trasera de una de las aulas y detuvieron su andar bajo la sobra de un frondoso árbol que daba a la misma.

¿Qué sucede?, dijo Milk mirando al atractivo joven de cabello alborotado intrigada.

Gokú no respondió nada solo la rodeo con su fuertes brazos de la cintura y la apego a él para darle un dulce beso.

Minutos después:

El joven de cabello alborotado se separo de la pelinegra y le dijo: Te tengo un regalito.

¿Un regalito?, pero si mi cumpleaños ya paso, dijo Milk sonriendo.

Si pero no te di nada para el y por eso quería darte esto, decía Gokú sacando de su bolsillo una cajita cuadrada.

No te hubieses molestado, tú me diste mucho más que algo material, me diste tú compañía, tu amor, dijo la pelinegra.

Y ello lo tendrás siempre, además lo que estoy dando no es algo que me haya costado dinero, más bien lo encontré en el río que esta cerca de mi cabaña y creo que podrías usarlo de amuleto, dijo Gokú dándole la cajita a la pelinegra.

Milk abrió la caja y tomo en una de sus mano una pequeña esfera color naranja de cuatro estrellas.

Es muy bella, dijo la pelinegra mirando con curiosidad la esfera.

A mi también me pareció, por eso quería dártela, para que la conserves como un recuerdo mío, dijo Gokú con melancolía.

Parece que te estuvieras despidiendo, dijo Milk con tristeza.

No, claro que no, dijo Gokú sonriendo, abrazando a la pelinegra.

Horas después:

Gokú y Milk salían de la preparatoria tomados de la mano ante la mirada de rabia de Lunch.

Tiene que haber alguna forma de separarlos, pensaba la rubia con molestia mientras los veía partir.

Gokú y Milk caminaron hasta un lugar descampado, donde el joven de cabello alborotado llamo a su nube y tomo la mano de la pelinegra para que subiera junto a él.

¡Vamos a dar un paseo por el mar antes de ir a tu casa¡ ¿qué te parece?, dijo Gokú sonriendo mientras abrazaba por la espalda a la pelinegra.

Me parece buena idea, dijo la pelinegra.

Nube voladora llévanos a dar un paseo por el mar antes de ir a casa de mi niña, dijo Gokú.

La pequeña nube se elevo mientras la pelinegra recostaba su cabeza sobre el hombro del joven de cabello alborotado.

Minutos después:

La pelinegra miraba maravillada el inmenso océano y los peces y delfines que saltaban en el mar.

Parece que estuviera viviendo un sueño, dijo Milk.

Pues no es un sueño, es una realidad, dijo Gokú sonriendo.

Si lo sé y es tan real, como mis sentimientos que cada día crecen más y más por ti, dijo Milk.

Igual que los míos, cada día que pasa te amo más Milk Ox, dijo Gokú dándole dulces besos en su rostro a la bella jovencita pelinegra.

Luego de unos minutos sobrevolando el mar en la pequeña nube, los pelinegros volvieron a la ciudad.

La pequeña nube los dejo a unos metros de distancia de la mansión de la pelinegra para que los jóvenes tomados de la mano continuaran su camino.

Minutos después:

Milk, Gokú y el padre de la pelinegra almorzaban juntos mientras platicaban.

¿Entonces tendrás que viajar papá?, dijo Milk con tristeza.

Así es hija, pero solo será por una semana, es un negocio importante que deje pendiente y solo esta para cerrarlo, decía el gigantesco hombre.

Comprendo papá, dijo la pelinegra.

Por eso quería pedirte un favor, Gokú, dijo el padre de Milk.

¿Qué favor señor?, dijo Gokú.

Qué durante esa semana vengas a quedarte aquí a mi casa, así estaré más tranquilo, ya que tú estarás más pendiente de mi niña, yo se que tú siempre lo estás pero no es lo mismo estarlo de lejos que estarlo de cerca, tú sabes que la terapeuta dijo que Milk aún no puede quedarse sola, es cierto que ya esta alejada del vicio pero por precaución aún tenemos que estar pendiente de ella, decía el padre de la pelinegra mirando al joven de cabello alborotado y su hija.

Milk al oír lo que su padre decía entristeció, pues era cierto así ella llevara meses alejada de las drogas, la terapeuta consideraba que ella aún necesitaba estar vigilada para evitar alguna recaída.

No entristezcas mi niña, tú no volverás a recaer, dijo Gokú mirando dulcemente a la pelinegra.

¿Qué dices te vienes a vivir por una semana a mi casa?, decía el padre de la pelinegra mirando a Gokú.

Sí, dijo Gokú mientras tomaba la mano de la pelinegra sobre la mesa y le sonreía.

Entonces mandare prepararte una habitación, dijo el padre de la pelinegra.

¿Cuándo se va?, dijo Gokú.

En dos días, dijo el padre de la pelinegra.

No se preocupe yo cuidare muy bien a Milk, dijo Gokú sonriendo.

Lo sé, dijo el gigantesco hombre.

Una vez que acabaron la cena Gokú y Milk como solían hacerlo desde que se conocieron salieron al jardín y se sentaron en la banca de madera a contemplar el anochecer.

Ahora pasaremos más tiempo juntos, dijo Milk sonriendo.

¿Y eso te gusta?, dijo Gokú.

Por supuesto, dijo Milk.

Disfrutaremos mucho esa semana juntos ya lo verás, dijo Gokú sonriendo dulcemente.

Horas después: "Paoz"

El atractivo joven de cabello alborotado se encontraba alistando su pequeña maleta para cuando llegue el momento de mudarse a la casa de su amada novia mientras pensaba: Será maravilloso pasar más horas a tu lado, nos vamos a divertir mucho y eso fortalecerá más nuestro amor.

Al día siguiente: "Preparatoria Dragón"

Un grupo de chicas platicaban:

Entonces tu padre viajara nuevamente, decía Marón.

Si, se irá por una semana, decía Milk.

¿Y te quedarás sola?, dijo Mai preocupada.

No Gokú se quedara conmigo, dijo Milk sonriendo sin percatarse que una rubia que estaba junto a ella escucho la plática y dijo de forma irónica.

Vaya no solo eres drogadicta, sino además zorra y fácil, dijo Lunch.

¿Qué dices?, dijo Milk parándose de su asiento y girando a ver a la rubia ante la mirada des su amigas y de otros alumnos que empezaban a llegar al aula.

La verdad, con esa carita de niña inocente, eres una cualquiera, pero el director va ha enterarse de esto, el te expulsara de aquí, dijo Lunch saliendo del aula siendo seguida por la pelinegra.

No entiendo porque dices eso, yo no soy una cualquiera y hace mucho que deje las drogas, si lo quieres es lastimarme no lo harás, como tampoco podrás destruir el amor que Gokú y yo nos tenemos, dijo Milk con firmeza.

Pues lo que ustedes tienen no es amor, Gokú te dejara en algún momento, es más puedo garantizarte que el solo está esperando conseguir lo que todos han buscado en ti desde que te conocieron, una vez que lo consiga te dejara como la basura que eres, a poco crees que al haber dejado las drogas tu problema se acabo. No querida, las drogas dejan secuelas, que hombre en su sano juicio no te querría para algo serio, si siempre tendrá que vivir con el temor de que al tener un hijo contigo este le venga con algún problema de salud o malformación congénita, esas son las consecuencias de las personas que consumieron alguna vez droga en su vida, dijo Lunch tratando de lastimar a la pelinegra con sus palabras.

Ya cállate Lunch, dijo Mai.

Si Lunch no seas tan cruel, dijo Marón.

Ya fue suficiente, dijeron Bulma y Dieciocho que habían entrado en ese momento y habían escuchado la discusión.

No tengo porque callarme, solo digo al verdad, solo es cuestión de tiempo para que el bombón se aleje de ti, dijo Lunch saliendo del aula mientras la pelinegra sollozaba desconsolada en los brazos de sus amigas.

Cálmate Milk, dijo Bulma, cuando en eso alguien llego junto a ellas.

¿Qué sucedió aquí?, ¿por qué lloras mi niña?, dijo Gokú acercándose a la pelinegra para abrazarla.

Dime que no me dejaras, dime que no lo harás ¡por favor¡ dijo Milk sollozando.

No lo haré nunca, siempre estaré junto a ti, dijo Gokú abrazando a la pelinegra.

Milk prefirió no comentarle nada de la discusión que tuvo con Lunch al joven de cabello alborotado, argumentando que ya se sentía mejor y que no quería recordar que la había puesto así de vulnerable.

Días después:

El joven de cabello alborotado se mudo a casa de su novia para estar más pendiente de ella por una semana.

Gokú y Milk se encontraban más felices que antes pues ahora estaban mucho más horas juntos disfrutando de la compañía del otro y ello los unía aún más y eso se reflejaba en su mirada y en sus rostros que lucían radiantes sonrisas a toda hora lo cual aumentaba la molestia de Lunch que no sabía que más hacer para separarlos.

Mansión Ox: "Alberca"

Un par de pelinegros se encontraban jugando con el agua mientras se encontraban nadando en la alberca.

No puedo creer que ya se esta acabando la semana, sin duda extrañare mucho todas estás horas que he compartido contigo, decía Gokú abrazando a la pelinegra a él.

Yo también la extrañare. ¿Y si le pido a papá que te quedes a vivir con nosotros?. Finalmente tú no tienes familia, solo un tutor, no creo que tú tutor se oponga, ¿o tú crees que sí?, dijo Milk mirando al joven de cabello alborotado que al oír la palabra tutor palideció al acordarse de Kamisama y de la misión por la que él estaba allí.

¿Sucede algo?, dijo la pelinegra mirando a su novio.

Gokú no respondió nada solo miro a la pelinegra y pensó: No quiero alejarme de ti, no quiero hacerlo. Tú eres lo mejor que me ha pasado en la vida y no quiero separarme de tú lado, que haré ahora, ya esta por cumplirse los 6 meses que Kami me dio.

Mientras tanto:

Un hombre verde recibía la visita de un hombre regordete de lentes negros y antenas.

Kaiosama, ¡bienvenido¡ ¿a qué debo el honor de su visita?, decía Kamisama mientras Mr. Popo miraba con preocupación al hombre regordete.

No me digas que no lo sabes, dijo Kaiosama.

¿Es por Gokú?, dijo Kamisama con tristeza.

Sí, es por él, creo que ha llegado el momento de que vuelva, dijo Kaiosama.

Pero aún faltan 3 semanas terrícolas para que venza el plazo, decía Kamisama.

¿Y qué crees qué pasara si lo seguimos dejando más tiempo?. Es mejor cortar esto ahora, antes que los demás Kaios y el Supremo Kaios lo noten, dijo Kaiosama.

¿Y la chica?, dijo Kamisama.

Ella al igual que todos los que conocieron a Gokú se olvidaran de él, será como si nunca lo hubieran conocido. Es lo único que podemos hacer para que no reciba el castigo que se le impondrá, él me parece un gran muchacho, tal vez no fue buena idea mandarlo a una misión así siendo tan inexperto, nosotros tuvimos parte de culpa y por eso tenemos que evitar al menos que su cuerpo se separe de su alma. Diremos que no pudo cumplir la misión y se quedara como un ángel a mi lado, dijo Kaiosama.

Está bien, así será, entonces iré por él, dijo Kamisama.

Mansión Ox:

Un par de pelinegros miraban abrazados las estrellas mientras estaban sentados en una banca de madera.

Mira esas estrellas tienen forma de un caballo, decía Milk sonriendo.

Si, si es cierto decía Gokú mirando detenidamente el lugar del espacio que señalaba la pelinegra con su mano.

Y esas parecen un ángel, dijo Milk sonriendo mientras miraba el rostro del joven de cabello alborotado que miraba sorprendido el lugar que la pelinegra señalaba.

Si es cierto, hasta alas tiene, dijo Gokú sonriendo.

Yo conozco un ángel que no tiene alas, dijo Milk sonriendo mientras el joven de cabello alborotado la miro intrigado.

¿Un ángel que no tiene alas?, dijo Gokú sorprendido creyéndose descubierto.

Sí, tú eres mi ángel, el ángel más bello y bondadoso que he conocido, dijo la pelinegra besando dulcemente los labios de su amado mientras este le correspondía el beso con la misma dulzura bajo el oscuro cielo e iluminados por la luz de las estrellas testigos de su gran amor.