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ANGEL ━ CAPÍTULO CUATRO:
❛ EN EL BORDE DEL ÉXITO ❜

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Por un microsegundo, Athena Kane quitó su fija mirada del camino y la posó en el espejo retrovisor. Mordió el interior de su mejilla, evitando reír ante la escena que su hija, Calíope, se encontraba montando con su mejor amigo ━quien, por una razón, se encontraba en un pequeño trance━. Dejó escapar de sus labios un pequeño sonido al sentir el golpe que la palma de su pequeña había producido al chocar con el rostro del ruloso... Por segunda vez.

─Mierda, Ricky ─pronunció la latina al ver como su mejor amigo no lograba salir de su pequeño trance─. Llegaremos tarde a la escuela.

─¡Lenguaje, niña! ─exclamó Athena Kane desde el asiento del piloto del automóvil. Su hija murmuró un "perdón"─. Además, deja de golpear a tu amigo o terminarás dejando su mejilla más roja de lo que está.

Obedeciendo las palabras que su madre le había dicho, pasó su mano frente a su rostro, acción que no tuvo respuesta en absoluto.

─Juro que si decidiste morir en el sueño, encontraré la manera de meterme ahí en tu cabecita y volveré a matarte.

Calíope, al ver que su madre había aparcado el auto frente a la entrada de East High, bufó cansada. ¿Por qué tenía que asistir tan seguido a aquel aburrido lugar, sabiendo que podría ocupar esas horas soñando con el personaje ficticio que estuviera ocupando su mente últimamente? Y si, también tenía claro que necesitaba aprender lo que sus profesores les enseñaran, pero muchas veces ellos sólo se dedicaban a leer el pizarrón y no explicaban absolutamente nada o simplemente preferían ocupar ese tiempo en contarles alguna historia se su vida.

Después de todo, lo único que le había dado ánimos para levantarse de la cama de Ricky era saber que era jueves y que en doce horas más Cosmic Dreams tocarían frente a gente importante en la industria de la música.

Al encontrarse desesperada, volvió a girar la parte superior de su cuerpo y estiró su brazo al rostro de Ricky Bowen y lo golpeó otra vez, logrando que el chico pestañara un par de veces procesando que había ocurrido.

Athena Kane miró mal a su hija.

─¿¡Por qué hiciste eso!? ─exclamó con voz un poco más aguda.

Tratando de reprimir una risa, habló: ─Llegamos a la escuela.

Ricky puso sus ojos en blanco y se acomodó en el asiento trasero.

─¿Estás bien? ─preguntó en tono de madre preocupada. Ricky asintió levemente.

─Estoy bien ─asintió mientras abría la puerta─. Oh, y gracias, señora Kane, por su preocupación y también por traerme a la escuela.

─Sólo dime Athena, Ricky. Señora Kane me hace sentir vieja, además de que te la pasas en mi casa, ya tenemos la confianza suficiente. Y no tienes por qué agradecer, Ricky. Callie me ha hablado mucho de ti estos cuatro meses...

─¡Mamá! ─reclamó la morena, llevando una de sus mano a su ahora tibia frente─. Me estás avergonzado.

Por el rostro de Athena Kane se deslizó una pequeña sonrisa.

─Dios, niña, si me dejaras terminar de hablar... Bien, como decía, Callie ha hablado mucho sobre cómo has sido una buen amigo.

Amigo. Al escuchar aquella palabra salir de los labios de la mujer de treinta y tres años sintió como si un cuchillo se le fuera enterrado en el corazón. Le dolía saber que Calíope se refería a él como un amigo.

Espera, ¿qué?

Esto era estúpido. No tenía razón para sentirse así. Callie y él sí eran amigos. ¿Por qué le dolía escuchar la verdad?

Ricky sacudió su cabeza quitando todo pensamiento que lo estuviera invadiendo, antes esto la señora Kane lo miró por el retrovisor. Volvió a tirar la puerta hacia atrás, acomodó su mochila en el hombro y bajó sus pies al suelo, seguido de estirarse al sentir el viento chocando con su cuerpo.

Al sentir la puerta cerrarse, Athena Kane giró su cuerpo en dirección a su hija y rápidamente susurró: ─¡Le gustas! ─exclamó entre susurros─ Y no preguntes cómo lo sé. Digamos que es el instinto de madre, ¿bien?

Calíope, que había repetido la acción que su madre había hecho, puso sus ojos en blanco ante sus palabras y desvió su mirada al sentir el aire chocar con su cuerpo. Ahí estaba él, parado frente a ella, sonriéndole amablemente y con una de sus manos tendida ante ella, dispuesto a ayudarla a bajar del azulado auto.

La morena le devolvió la sonrisa y sin pensarlo más de dos veces, tomó su mano.

─Adiós, mamá. Nos vemos en en la noche. ─se despidió antes de cerrar la puerta y comenzar a caminar con el chico.

Calíope acomodó su mochila en su hombro tratando de disimular el hormigueo que había sentido en su cuerpo cuando Ricky entrelazó sus dedos con los de ella. Se preguntó por qué había tenido esa sensación extraña, siendo que no era la primera vez que el chico juntaba sus manos con la de ella.

─Entonces, ¿irás a hablar con Carlos? Bueno, en sí a mostrarles tus pasos de baile a la biblioteca.

─Sip, estoy listo para ir a avergonzarme frente a él. Pero tengo una pregunta, ¿cómo sabes que está en la biblioteca? ─cuestionó mientras empujaba la puerta.

─Le pregunté a Jazz si había lo había visto y dijo que había entrado allí.

Bowen asintió.

─¿Me acompañarás? Eres como mi amuleto de suerte, Angel ─al darse cuenta de lo que había dicho, volvió a hablar, sólo que esta vez su tono de voz fue más aguda─. ¡Espera! Antes de que lo pienses, no estoy tratándote como un objeto. Nunca haría eso, ni contigo ni con cualquiera otra chica... Oh persona, en general...

Calíope soltó una pequeña risita, dado que el nerviosismo del chico le había provocado cierta ternura.

Espero a que el chico calmara un poco su agitada respiración, para poder finalmente hablar.

─Tranquilo, Bowen. Inhala y exhala conmigo ─hizo la acción esperando a que él la siguiera, sin embargo sólo se dignó a apretar un poco su mano─. O también puedes hacer eso, como se te haga más cómodo. De cualquier manera se que no te referías a eso. ─sonrió mientras saludó con su mano libre a algunos chicos que le sonreían amigablemente.

Una de las cosas buenas que traía ser parte de una banda conocida por la mayoría de los habitantes de Salt Lake City era la "popularidad" ━incluso si no consideraba serlo o en sí no le importaba mucho el estatus que tenía━ en la escuela, ya que algunas personas se acercaban a ella para charlar sobre cualquier tema o simplemente le sonreían y la saludaban con la mano por los grandes pasillos de la secundaria, y adoraba eso. Le gustaba mucho la idea de poder socializar con quienes estaban siendo parte de su vida, incluso si no llegaban a hacer un impacto en ella.

Y tal vez... Sólo tal vez, si la suerte estaba de su lado hoy por la noche, Mason, Dean, Bradley y ella podrían conseguir un contrato discográfico, llevándolos a sus sueños más profundos y logrando tener aquella conexión con todo aquel que escuche y disfrute su música. Quizás con ese contrato podría vivir la vida como siempre supo que debía hacerlo, a lo grande.

Cuando Calíope sintió que el calor del tacto de Ricky había desaparecido, giró su cuerpo en el lugar para ver donde se encontraba; no pudo evitar rodar los ojos al verlo caminado nervioso entre medio de dos estudiantes que coqueteaban descaradamente con él. De primer año deben ser, pensó mientras se acercaba a ellos con la excusa de que necesitaba a su novio por una pequeña urgencia. Las chicas al verla se disculparon y simplemente salieron de ahí lo más rápido que pudieron.

Las mejillas de Ricky se habían teñido de un leve rojo tras lo que dicho por su amiga; abrió su boca y, al notar que Dylan junto a Gwen estaban dando vuelta al siguiente pasillo, dejó escapar una carcajada al notar, que prontamente se convirtió en un quejido.

─¿Puedes soltarme la oreja? ─preguntó entre reclamos.

Calíope negó y ante la mirada suplicante de su amigo dijo: ─Te dejaré cuando entremos por esa puerta ─señaló la biblioteca─ y le enseñes el baile a Carlos.

─Pero...

─Pero nada. Ricky, estuvimos gran parte de la noche bailando, ¡hasta tu papá se unió después de que nos viera por un rato! Y fue divertido, si, pero me encantaría que le enseñaras a Carlos y a todos los demás que mereces estar en ese musical... En especial a Nini si quieres estar con ella nuevamente.

[ RICKY  ]
─ Junior Year.
"Si, podré haberme quedado toda la noche ensayando con ayuda de Callie, pero es normal estar nervioso. Mi Estilo es de skate, no de actor de teatro"

Al llegar a su destino, Callie soltó al castaño y entró al salón luego de jalar la manilla; Ricky, siguiendo a Calíope, llevó su mano a su oreja y la sobo.

─¿Estás segura de que está aquí? ─preguntó en voz alta observando todas la direcciones del lugar. Una chica de rasgos asiáticos lo miró con las cejas fruncidas desde la mesa y llevó un dedo a su boca, señalando que debía estar callado.

Calíope mas no dijo nada y sólo tomó su mano y lo llevó a donde el chico de lentes estaba... Bueno, al menos era era su intención antes de que Bowen la apagara a una librera y él lanzara pequeños papelitos a Carlos.

─¿En serio? ─susurró incrédula─. Sólo ve y enséñale.

Ricky giró su cabeza y le sonrió orgulloso luego de haber obtenido la atención de Carlos, a lo que ella sólo negó divertida.

La morena al ver al chico caminar a donde ellos estaban lo saludó con una pequeña sonrisa, acción que fue de vuelta en su dirección.

─Si piensas agredirme, te aviso que mi madre juega al banco con la bibliotecaria y te denunciaremos. ─habló. Ricky levantó un poco sus brazos y soltó un "wooh".

─Quiero enseñarte algo, ¿vale? Sólo es eso.

─Vengan aquí.

Los tres adolescentes caminaron hasta el final del pasillo; Calíope se posicionó a un lado de Carlos, quedando frente al chico Bowen y comenzó a contar, dándole a entender al chico que debía comenzar a bailar.

─Has estado ensayando ─dijo con sus ojos pendientes en Ricky─. Pensé que lo dejabas.

─Ahora no. Y deberías agradecerle a Callie ─movió sus pies de la forma errónea y volvió a hablar─. Pero me sigue costando la última parte.

Al terminar de danzar, el ruloso mostró sus palmas y movió sus dedos sincronizadamente.

Carlos, con una pequeña sonrisa orgullosa en su rostro volvió a hablar: ─Pero no muevas los dedos. Pon las manos de jazz. ─aconsejó─ A ver, prueba otra vez.

Dicho esto el chico volvió a hacer los pasos que hace unos segundos había terminado.

─Eso. Muy bien.

─¡Lo lograste! Dios, me siento como una madre orgullosa. ─fingió secarse una lágrima y los dos chicos dejaron escapar una carcajada.

Carlos observó a la chica de reojo.

─No se cómo lo lograste, Callie, pero como el coreógrafo del musical, te lo agradezco. Acabas de salvar no sólo a Ricky, sino que a todo el departamento de teatro.

La morena movió sus manos restándole importancia a lo que el de lentes había dicho y subió su vista al reloj en la pared. Ocho y un cuarto de la mañana marcaban los palillos.

Se acercó a Ricky y besó su mejilla: ─Tengo periodo libre al igual que los chicos, así que iré a buscarlo para que ensayemos. ¿Almorzamos juntos? Bueno, con mis amigos incluidos y con Big Red, obviamente.

Antes de que Ricky pudiera responder, Carlos ganó la palabra.

─De hecho ─habló dirigiéndose más a Ricky que a la morena─ Tenemos ensayo para el musical. Orden de la maestra Jenn.

Bowen asintió y besó la cabeza de Calíope.

─Se que estarás ocupada con la banda hoy, y por nada del mundo me perdería su gran noche, ¿entonces nos vemos en la noche?

Calíope asintió.

─Nos vemos esta noche, lince.

Sin nada más que decir, la chica Kane salió de la biblioteca, mientras que Nini terminaba de sacar el libro que llevaba tocando su mano desde que sintió aquella tres conocidas voces.

[ ... ]

─¿Están listos chicos?

─Si, capitán, estamos listos.

─¡No los escucho!

─Sí capitán, estamos listos.

Talía puso sus ojos en blanco y soltó un bufido demostrando lo cansada que estaba, puesto que todo el alumnado que se encontraban a sus alrededores los estaban mirando como si estuvieran locos como una cabra.

─Les juro que si siguen cantando los ahogaré con el cable de estos audífonos ─quitó los dispositivos de sus oídos y los levantó, ganándose una asustada mirada por parte de sus amigos─ Kai Parker no sólo me enseñó lo que es la bisexualidad.

Bradley, al encontrarse al lado de su hermana, se corrió de su asiento un poco más al lado y apegó su cuerpo al de Mason.

[ TALÍA ]
─ Sohmore Year.
"Como la reina Britney Spears una vez dijo: Pero mamá, estoy enamora de un criminal"

─Ignoraré todo lo que dijiste y sólo me quedaré con Kai Parker y en como haríamos una pareja perfecta. ─comentó Dean.

─Él estará más bueno que los brownies, pero eso no quita el hecho de que es un total sociópata. ─al escuchar las palabras de Calíope, Dean puso sus ojos en blanco.

─Dice la chica que duerme con un peluche nombrado a en su nombre.

─Touché.

Ignorando por completo la pequeña conversación de sus amigos, Jazzmyn golpeó la mano de Talía luego de que ésta tratara de sacarle un poco de su ración de patatas fritas del plato. Calíope rió ante esto.

Una de la reglas que la peli naranja había puesto cuando aceptó unirse al grupo de amigos en primer año fue que nadie, nunca y por insólitamente ninguna circunstancia llegaran a tocar su sagrada comida. Es cierto que ninguno de los cinco chicos había hecho caso, ya que por alguna razón ━que descubrieron hace unos pocos meses atrás━ la chica siempre obtenía la mejor comida de la cafetería de la escuela.

─¿Sabes? Como tu novia exijo que tu tía política me alimente de la misma manera en la que lo hace a ti. ─soltó la latina, acercándose a su novia para depositar un vasto beso en sus labios─ Después de todo, ahora somos familia.

Hale sorbió de la bombilla de su jugo y negó con la cabeza. Al finalizar de beber abrió la boca para hablar, pero la campana la interrumpió, haciendo entender que la hora del almuerzo había acabado y que las últimas tres clases estaban a seis minutos de dar su comienzo.

Tres de los seis adolescentes se encargaron de recoger las bandejas de su mesa y las dejaron el las rejillas que estaban a un lado de la cocina, mientras los otros tres tomaban los papeles, botellas y/o vasos que habían usado y los brotaban en sus respectivos contenedores.

Seguido a esto, lo seis se separaron no sin antes de despedirse con un pequeño beso en el aire y un "los quiero, bestias" y partieron para sus respectivos salones de clases, ignorando las miradas que los algunos alumnos les daban.

[ ... ]

Cuatro minutos con treinta y tres segundos, para ser completamente exactos.

Calíope sonrío a su madre y jugó con sus dedos nerviosamente bajo la mesa.

Cuatro minutos con veintinueve segundos y Cosmic Dreams podría comenzar a estar en el borde del éxito.

Sólo quedaban cuatro minutos con algunos segundo extras y Ricky Bowen ━el invitado especial o el próximo novio de Callie, según sus amigos y mamá━ aún no aparecía por ningún lado.

─No debí haber comido ese hotdog. ─musito el rubio observando a su alrededor─ Creo que voy a vomitar. ¡Pero no se preocupen! No es nada malo como si me hubiera intoxicado ni nada de eso, sólo son los nervios.

[ MASON  ]
─ Senior Year.
"Se que manejar mis nervios con comida no es sano, ¿pero me culpan? Ese hotdog me llamaba y soy muy débil a todo lo que trata de comida."

─Van a estar geniales ahí arriba. ─afirmó la madre de Calíope y depósito sus brazos en los hombros de su hija y de su ahijada, Talía.

Calíope cerró sus ojos y realizó los ejercicios de respiración que normalmente le ayudaban a controlar sus nervios. Su cabeza estaba llena de pensamientos tantos buenos como malos; tenía miedo de fracasar y hacer que sus amigos se vieran afectados a causa de ello, pero a la misma vez tenía una pequeña voz que le hablaba en su oído y le decía que esa noche todo saldría como lo planeado.

No, esperen, esa voz sólo era Bradley.

─¿Pueden creerlo? Sólo dos minutos y 10 segundos más para que Cosmic Dreams se convierta en la leyenda que debe ser. ─movió sus piernas de arriba a abajo─ Si conseguimos ese contrato dejaré la escuela. Ya, lo dije.

Athena Kane lo observó con una ceja alzada y quitó sus brazos de los hombros de las chicas y los cruzó frente a su pecho.

─No, jovencito. Si yo pude terminar de estudiar con una bebé en mi vientre y luego en mis brazos, tú o ustedes, en general, podrán terminar la escuela.

Bradley decidió no decir una palabra más y soltó asintió levemente mientras escuchaba las nerviosas voces de sus compañeros de banda y de las dos chicas que trataban de calmarlos.

Luego de un minuto después, todos los presentes guardaron silencio cuando escucharon la grave voz del camarero del bar presentando a la banda que estaba próxima a presentarse, Cosmic Dreams. Los cuatro jóvenes subieron al escenario y se posicionaron en sus respectivo lugares. Mason sacó sus baquetas y las golpeó la una con la otra de forma rítmica y contó hasta cuatro, luego de esto Calíope comenzó a tocar el teclado dándole una entrada a sus voz.

─Hearts on fire, we're no liars so we say what we wanna say. ─comenzó─ I'm awakened. No more faking so we push all our fears away...

Los tres muchachos observaron a la morena con una sonrisa de oreja a oreja. Ella era más que una de sus mejores amiga o compañera de banda, Calíope era como su hermana menor, la que siempre verían como una bebé a pesar de crecer. Aún ellos recordaban la primera vez que debieron pisar un escenario ya como Cosmic Dreams; lo nerviosa y temerosa que la chica se encontraba al demostrar sus talentos frente a un pequeño público. ¡Y miren dónde se encontraba ahora tres años después! Brillando por sí sola sobre un escenario con al menos cuatro cazatalentos.

Y pedirles que dejaran de estar orgullosos de ella sería como decirles que dejaran la música para toda la vida, realmente imposible.

Cuando el coro se acercaba, los tres chicos se prepararon para tocar sus instrumentos mientras que Calíope quitaba el micrófono del pedestal que el teclado poseía y se levantaba rápidamente del banco.

─I got a spark in me. Hands up if you can see and you're a part of me. ─su voz junto a la de Bradley resonaron por los grande parlantes mientras movían sus cuerpos al ritmo de la música, acción que fue seguida por los presentes─ Hands up if you're with me now 'til eternity. It's been so long and now we're finally free.

Aún con el micrófono en su mano, Calíope golpeó el pandero que agarraba con su brazo libre contra en lado de su muslo, logrando que éste armonizara con el resto de los instrumentos y las voces principales y de fondo.

Bradley al dejar de cantar se alejó del micrófono y se subió a la tarima donde Mason se encontraba tocando la batería, seguido de esto Dean se acercó a ellos con su bajo. El guitarrista bajó de un salto y volvió a juntar su voz con la de Callie.

Ambos se miraron y sonrieron.

Calíope volvió su vista hacia el público y cerró sus almendrados ojos, dejando que la música la llevara a su lugar feliz. Brad no logró despegar sus ojos de la muchacha.

Mientras la multitud disfrutaba nuevamente del coro, un cierto joven de castaña y rulosa cabellera se encontraba atravesando la puerta del lugar con una sonrisa que cada segundo se hacía más grande al escuchar las conocidas voces en el interior del lugar. Puso sus pies en punta y buscó a los amigos de Calíope, encontrándolos de pie bailando y cantando en unas de las mesas puestas frente al escenario.

Nervioso dio unos pocos pasos antes de quedarse varado en mitad de su camino, obstruyendo la pasada de algunas que otras personas.

─I got a spark in me. ─cantó Calíope acercándose a Bradley, quien le tendió el micrófono para que él continuara, para luego volver acercar el micrófono a ella─ And you're part of me.

Cuando Bradley bajó su su vista de los ojos de la castaña a sus labios mientras volvía a repetir la frase, Ricky sintió como si todo en su arededor desapareciera y la escena que estaba presenciando ocurriera en cámara lenta. La sonrisa que anteriormente estaba en su rostro se fue desvaneciendo al observar como el ojiverde se acercó un poco más a la chica, siendo reemplazada por un abrir y cerrar rápido de boca y una pequeña picazón en los ojos.

¿Acaso estaba apunto de llorar? ¿Pero qué carajos?

Sorbió su nariz cuando Calíope se alejó del muchacho. Con la vista puesta en el escenario volvió a seguir su camino hacia la mesa donde las tres mujeres estaban. Movió su cabeza al compás de la música y al llegar al lugar saludó tímidamente a Talía, Jazzmyn y a la señora Kane, perdón, Athena.

[ RICKY ]
─ Junior Year.
"No estoy celoso, sólo orgulloso a donde mi mejor amiga está llegando. Si..."

Callie dejó de bailar con sus compañeros de banda y volvió al centro del escenario, depositó el micrófono en el pedestal un poco más bajo que ella y lo tomó con una de sus manos.

─Been so long, and now we're finally free. ─cerró sus ojos y levantó su brazo libre al dejarse llevar por el final de la canción. ─Finally free, yeah.

En el rostro de los cuatro adolescentes se deslizo una sonrisa cuando al finalizar la canción todo el público aplaudió y silbó fuertemente. Mason bajó de la batería y se acercó al centro del escenario donde sus tres amigos lo esperaban con los brazos abiertos. Los tres chicos besaron la cabeza de Calíope, logrando que soltara una pequeña risa seguida de una que otra lágrima que expresaba lo feliz que se encontraba.

Al separar sus cuerpos, se tomaron de las manos e hicieron una pequeña reverencia, ganando que el sonido de los aplausos aumentarán.

─Somos Cosmic Dreams ─recordó una sonriente Calíope acercándose al micrófono aún con las manos tomadas─ Díganle a sus amigos.

Dicho esto los cuatro adolescentes bajaron del escenario dando saltos como niños pequeños. Las tres mujeres y el chico los esperaban con los brazos extendidos, sin embargo en cuanto Calíope puso sus pies en la cerámica, Ricky rodeó su cintura y la apegó a su cuerpo. La morena, un poco confundida con la rápido acción, rodeó su cuello con sus brazos.

─¡Estuviste fantástica, ángel! ─felicitó separando unos centímetros sus cuerpos. Callie soltó una pequeña carcajada cuando su cuerpo fue levantado─ Bueno, la verdad es que eres fantástica.

Al notar como la temperatura de su cuerpo comenzaba a subir ante las palabras de su amigo decidió subir su cabeza del hombro de Ricky, encontrándose con su madre y sus amigos capturando el momento en un video en sus celulares. Pestañeo un par de veces tras haber puesto sus ojos fijamente en la lucecita proveniente del móvil.

Sip, estaban grabando con flash. ¿Cómo no se había dado cuenta?

Ricky bajó a la chica de sus brazos y ésta depositó un casto beso en su mejilla. Ambos giraron sus cuerpos quedando frente al resto de los adolescentes y la adulta, quienes se apuntaron los unos a los otros con las cámaras.

Calíope río por lo bajo.

─¿Qué les parece si vamos a casa a celebrar? Tengo un pastel que hice especialmente para esta ocasión. ─comunicó Athena Kane acercándose a su hija y pasando su brazo por su hombro.

Todos aceptaron sin pensarlo más de dos veces. Si una de las mejores chefs de Salt Lake City se ofrecía a alimentarte de forma gratuita era de ley aceptar la invitación.

La mujer posó su mirada en el invitado especial de su hija y habló: ─Puedes invitar a tu padre y a ¿Big Blue? ─cuestionó. Calíope le murmuró el nombre del pelirrojo─ Si, él, Big Red. Si quieres puedes decirle que venga. Mientras más mejor.

Bowen asintió y sacó su móvil de la chaqueta que traía en la mano, pero en un rápido movimiento se le fue arrebatado por Dean.

─Yo le hablo.

─¿Tienes su número?

─No exactamente el de él, pero si el de su madre.  ─informó, entregándole el aparato al chico, luego miró a sus amigos quienes se encontraban confundidos─ Mi abuela trabaja en la pizzería de su familia. Es obvio que de alguna manera tengo que contactarme con los Redonovich.

Y sin rechistar los seis adolescentes tomaron sus pertenencias y en completo silencio siguieron los pasos que Athena Kane había dado después de haber ido a hablar con el representante del local de la ciudad.

Vaya que sería una verdadera larga noche...

ՙ𖤐𓂃 ֶָ֢  MADS' SPEAKS!

Holaaa bellezas, ¡he vuelto con un nuevo capítulo! y si lo leíste en la tarde, lo siento, pero se me vinieron más ideas a la cabeza y las agregué jejjeje.

Y si, si sé que el capítulo está medio random, pero de a poco vamos a ir apreciando como la relación de Callie y Ricky avanza. (al menos hoy vimos a Ricky celoso, así que eso es algo, ¿verdad?)

En fin, díganme que les pareció el capítulo. A mi me gustó harto, pero quiero saber sus opiniones.

¡Nos leemos pronto!

─Con amor, Mads♡