01. operation troy bolton.
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ANGEL ━ CAPÍTULO UNO:
❛ OPERACIÓN TROY BOLTON ❜
ִֶָ . ָ࣪ 🕊 ˑ ֗ ִ 🦋 ˑ ִ ֗ ☁️ . ָ࣪ ִֶָ
Si tan sólo alguien le hubiera dicho a Calíope que quedarse hasta altas horas de la noche llorandole a Cedric Diggory y a su corta vida haría que llegara tarde a su primer día de clases, ━oh, espera, su madre si lo hizo━ probablemente sólo se hubiera reído y le hubiera tirado a su adorado peluche Kai en el rostro mientras decía que la dejaran sufrir en paz por la muerte de su esposo. Pero aquí estaba, corriendo lo más rápido que sus cortas piernas le permitían por los vacios pasillos de la secundaria East High, tratando de llegar al gimnasio antes de que la típica asamblea de principio de año comenzara.
Paró en seco al ver que la puerta estaba frente a ella. Tomó un poco de aire, y sin tomarle importancia a como se encontraba su apariencia, entró tratando de pasar desapercibida.
¡Spoiler Alert! No lo logró.
─¡Señorita Kane! Muy buenos días. ─habló el director, causando que los estudiantes presentes se le quedaran observando. ─Ha llegado justo a tiempo. Pase, pase y tome asiento en algún lugar.
Ella giró su cabeza y con una fingida sonrisa en el rostro habló. ─Muy buenos días para usted también.
Volvió su vista hacia el frente y caminó hasta llegar a las gradas; allí logró diferenciar a su grupo de amigos, quienes con señas le hicieron saber que el asiento que habían guardado para ella había sido ocupado. Maldijo en su interior y buscó algún lugar vacío. Para su buena suerte sólo había uno completamente desocupado, justo al lado del mismo chico con el que había entablado un gran amistad en el verano, Richard Bowen.
─Uhm... Hola, Ricky, Big Red. ─dijo tímidamente, al sentarse al lado derecho del de rulos y dejar en el suelo, entre sus pies, su mochila negra decorada con algunos parches o llaveros de colores.
Ricky posó su mirada en ella y sonrió en su dirección, mientras formulaba un: "Hola, ángel", para después volver su vista al director Gutiérrez, quien estaba comenzando a decir su típico discurso de principio de año; Big Red, por otro lado, le sonrió amigablemente y movió su mano lado a lado, para después sumergir su rostro en la pantalla de su móvil.
A decir verdad, ninguno de ellos dos se consideraban cercano, pero ante la idea de Ricky Bowen de pasar la mayor parte del verano juntos, debido que él disfrutaba demasiado de la compañía de Calíope, lograron congeniar bien, pero sólo convirtiéndose en buenos compañeros de instituto apuntando para... Casi amigos. Si, digamos que los dos adolescentes sólo eran un casi amigos.
─¿Cómo estuvo tú fin de semana, Callie? ─preguntó Bowen, desviando su mirada del frente y posándola en su amiga─ Debo decir que extrañé pasar el rato contigo.
La castaña lo miró de reojo y recostó su cabeza en su hombro, acción que causó que el joven sintiera algo extraño en su estómago.
─Si sacamos el hecho de que fui la violinista de Talía y Jazz en su no-cita y de que no pude ensayar con los chicos porque a los idiotas los castigaron por robarse el alcohol de la abuela de Dean y organizar una fiesta para los de último año en la casa de ésta, estuvo bastante normal. ¿Y el tuyo?
Ricky bajó su mirada y rodeó el cuerpo de la chica con su brazo, causando que las mejillas de ésta se tiñeran con un leve color rojizo, dándole un toque natural a sus pómulos.
Desde unos lugares más arriba se encontraban los chicos de Cosmic Dreams junto a Talía, quienes observando enternecidos la escena. Ellos sabían que Calíope tenía muy mala suerte en lo que se relacionaba con el amor y estaban más que satisfechos al ver que alguien lograba hacer a su querida amiga inexplicablemente feliz, incluso si ella no lo aceptaba.
─Nada interesante. ─dijo, a lo que el pelirrojo lo miró ofendido─ Bueno, pasé el rato con Big Red, pero pudiste haberme llamado o mensajeado, tal vez así te hubiera enseñado a usar el skate como te lo había prometido.
«Y yo sé primero auxilios» pensó, causando que riera y llamara la atención del alumnado a su alrededor, de algunos profesores que se encontraban en el gimnasio y de la mujer rubio-fresa que sostenía el micrófono con el que anteriormente el director hablaba, que, además, a su lado estaba Jazzmyn y Carlos.
Si el rostro de Calíope Kane ya tenía un leve color en sus mejillas, ahora su rostro completo estaba teñido de rojo debido a la vergüenza que había sentido en aquel momento; sin embargo aclaró su garganta y trató de concentrarse en otra cosa, creyendo que eso haría que la temperatura de su cuerpo volviera a la normalidad.
─¿En qué momento el director dejó de hablar y quien es ella? ─murmuró Ricky, en cuanto notó la presencia de la mujer rubio-fresa─ ¿Y qué es "millenial"?
─Es la nueva maestra de teatro, la señorita Jenn. ─respondió el pelirrojo con la mirada hacia la recién nombrada─ Tiene la idea de hacer la priemra obra sobre High School Musical en esta escuela.
Bowen miró a su amigo con los ojos abiertos como plato y sonrió ampliamente, pues una gran idea se le había venido a la mente.
─¡Perfecto! ─dijo emocionado, mientras giraba su cuello y se enfocaba su pelirrojo amigo sentado a su lado─ Es como si el destino me estuviera dando una segunda oportunidad para estar con Nini.
[ CALÍOPE ]
─ Junior Year.
"Se que él es mi mejor amigo y lo adoro, ¿pero por qué toda conversación debe terminar focalizada en Nini? Talía, hace unas semanas, me contó que ella ya estaba saliendo con alguien más, y estoy segura de que Ricky ya lo debe se saber."
Al escuchar una vez más el nombre de la chica salir por la boca del joven Bowen, Calíope levantó su cabeza del hombro del chico, inclinó su cuerpo para tomar su mochila del suelo y la dejó sobre su regazo, para así, finalmente, buscar su móvil y sus auriculares en el bolsillos más pequeño de esta; al encontrarlos desbloqueó la pantalla y abrió la aplicación donde contenía toda su música, conectó los blancos aparatos al móvil y se sumergió en la voz de Taylor Swift, ignorando la conversación que los dos amigos mantenían sobre la hermosa y talentosa Nini Salazar-Roberts.
[ ... ]
A ver, déjame ponerte al tanto. Cuando el acto de inicio de año finalizó, Callie bajó rápidamente de las gradas con la excusa de que debía hablar con la maestra de música y ya decidida a ignorar al muchacho por el resto de lo que quedaba de jornada escolar, cosa que hasta el momento le estaba resultando a la perfección, pero... ¿Por qué lo estaba haciendo? No lo tenía muy claro que digamos, sólo deseaba alejarse de él hasta que ese horrible nudo que había aparecido en la boca de su estómago luego de escuchar el nombre de la ex novia de Ricky salir por sus labios.
Sin embargo, la tan deseada hora del almuerzo había llegado y la cafetería cada segundo se comenzaba a llenar, logrando que ese pequeño y estúpido plan se fuera a la basura en un par de minutos.
─Sabes que no podrás seguir evitándolo, ¿verdad? ─dijo Mason con un poco de papas en su boca y rompiendo el silencio que hace unos segundos había.
La morocha lo miró y asintió levemente.
─¿Entonces para que lo haces? ─cuestionó Jazzmyn─ Los vi abrazados en el gimnasio y Carlos me comentó que creía que hacían una linda pareja, incluso una mejor que con Nini.
Callie, ya un poco cansada de escuchar ese nombre, rodó sus ojos.
─Entonces deberías decirle a Carlos que olvide esa idea. Él sigue enamorado de ella y yo sólo soy su amiga.
Y aquí iba otra vez ese maldito nudo, sólo que no sólo en el estómago.
─¿Soy yo o nuestra pequeña niña está celosa? ─comentó burlonamente Dean.
La joven se apuntó con su dedo y rió sarcásticamente. ─Para estar celosa debería sentir algo más que amor platónico y claramente no lo hago.
─Si eso te deja dormir por las noches, pequeña Calíope.
Después de que la conversación siguiera, los cuatro adolescentes colocaron su atención en los ahora hermanastros Zweig-Belmonte, quienes a carcajadas se acercaban a la mesa donde sus amigos los esperaban.
─Sigo sin creer que Nini esté saliendo con E.J Caswell. ─habló Talía antes de depositar un casto beso en los labios de Jazzmyn. Dean y Mason asintieron compartiendo su pensamiento─ Es tan fantástico, como recién sacado de Wattpad.
«¿Por qué todo tiene que estar relacionado con ella?» se preguntó, mientras apoyaba su codo contra la mesa y recostaba su cabeza en su palma, dejando que su mente se trasladara a un mundo lejano.
Por lo visto sería una larga hora del almuerzo y no para ella solamente, sino que para un cierto joven de rulosa y desordenada cabellera también.
─¿Lo viste amigo? ─preguntó, desde el otro lado de la cafetería, Big Red a su mejor amigo, refiriéndose a la escena que estaban contemplando.
Ricky Bowen en verdad no comprendía como ella podía verse tan tranquila y feliz al estar con aquel arrogante y fallido intento de Armie Hammer y el resto de sus amigos, al menos no luego de que le hubiera dicho que lo amaba hace nada más que tres meses atrás. Toda esa escena en la cafetería era completamente irreal, como si estuviera en un sueño en dónde él y la historia que había tenido con Nini nunca hubiera existido.
─Lo veo, lo escucho y lo odio. ─respondió con un claro tono de molestia en su voz.
─El co-capitán del equipo de waterpolo y el tesorero de la clase. ─continuó, ignorando por completo el tono que Ricky había usado para expresarse─ Aún no puedo creer que el chico del campamento vaya en nuestra escuela.
Ricky lo miró con cara de pocos amigos, causando que el pelirrojo se disculpara apenado.
─¿Y qué vas a hacer?
─No lo sé. Y no te ofendas, pero una de las personas que pueden ayudarme está de luna de miel en plena cafetería y la otra me ha ignorado todo lo que ha pasado de día.
Dicho esto, tomó su mochila del suelo y se paró de la banca y caminó directo hacia el pasillo de la escuela, pasando por frente de los tortolitos y de la joven Kane.
[ RICKY ]
─ Junior Year.
"Todo esto es una pesadilla. Completamente terrible... ¡El amor está muerto! Al menos para mí"
Calíope se acomodó en su asiento y siguió con su mirada al chico, asintiendo a todo lo que sus amigos decían. Sintió como si una lluvia llena de culpa cayera sobre todo su cuerpo, después de todo ella no tenía el derecho de molestarse por lo que Ricky aún sintiera por la chica perteneciente al coro estudiantil. Ella y él no eran nada más que mejores amigos.
─Ay, por favor ya vete a verlo. Se que no nos estás escuchando, niña.
Sonrió nerviosa ante las palabras de Brad y en un dos por tres ya se encontraba en busca de Richard Bowen. Caminó por todo pasillo cercano al comedor mas no había alguna notoria pista de su presencia.
Paro seco al recordar las palabras que hace un par de semanas le había dicho cuando contaban algunas anécdotas divertidas, pero que en aquel momento no había logrado captar mucho al estar desconcentrada observando cada uno de sus detalles. Lamió sus labios y pensó en el lugar donde podía estar completamente en paz y con los rayos de sol abrazando su rostro cuando las cosas en su casa se colocaban mal.
¡El tejado!
Puso sus ojos en blanco como por la cuarta vez en el día, giró su cuerpo y caminó a pasos largos hacia la subida del lugar, la cual contaba con eternas escaleras. Y no la mal entiendan, ella adoraba al ruloso y haría lo que fuera por él, pero de todos las partes "secretas" de la escuela ¿en verdad tenía que elegir el lugar más lejos? Aún que viéndolo del mejor modo haría el cardio correspondiente a todo lo que quedaba de año.
Soltó un pequeño gruñido al llegar a la puerta de metal que separaba el último piso con la azotea; la empujó con todo su cuerpo y continuó su camino. Al llegar al final de la escalera se encontró a Ricky dándole la espalda.
─Para odiar los musicales, tu gusto por escondites secretos es igual al de Troy Bolton. ─habló, llamando la atención de Bowen. Éste sonrió al escuchar su voz y volteó su cuello, logrando ver como el viento causaba que su frondoso cabello se volara hacía atrás.
Calíope dio unos pasos más y posó su cuerpo junto al de él.
─¿Entonces esto te convierte en la chica que es su interés amoroso?
La joven Kane trató de ocultar el pequeño tono rojizo que se le había formado en su rostro girando su cabeza hacia un lado, logrando apreciar un poco la vista de las afueras de la secundaria.
─Nah, prefiero ser la que sigue sus sueños y no a un chico, ─ante el comentario de la chica, la pequeña sonrisa que estaba dibujada en el rostro de Ricky se convirtió en una mueca─ pero que en el desarrollo de la historia conoce a alguien que le enseña lo que es amar y ser amado verdaderamente.
[ CALÍOPE ]
─ Junior Year.
"Si, señores, ¿quién necesita tener un interés amoroso para después terminar con el corazón roto, cuando puedes conseguir lo que desees y finalmente aprender lo que es amar? Yo. Yo necesito eso, o imaginarme una vida con Cedric Diggory o Nico D'Angelo me volverá loca"
La chica de frondosa cabellera volvió su mirada hacia el muchacho, tomó su mano y lo guio hacia la parte de atrás de la azotea. Apegó la falda de su vestido a su trasero y se dejó descansar en la única banca del lugar. Bowen se sentó a su lado.
─¿Y qué ocurre al final? ─preguntó interesado.
─No lo sé con certeza, Ricky. Pero hay probabilidades de que queden juntos para el resto de sus vidas o decidan seguir caminos distintos, recordando el amor que alguna vez sintieron por el otro.
Ricky asintió levemente, mientras su cabeza se hundía en pensamientos sobre su antigua relación con Nini Salazar-Roberts y en si en verdad estaban destinados a estar en la vida del otro sin ser más que un sólo bonito recuerdo de la juventud. Después de todo, gracias a los problemas que el matrimonio de sus padres tenía, él había aprendido que el amor no es algo fácil de conseguir en la vida y que para obtenerlo completamente hay que luchar contra toda adversidad que se llegue a presentar.
La morena cerró sus ojos y trató de disfrutar la briza que corría y golpeaba delicadamente su rostro, sin embargo el joven a su lado decidió volver a hablar.
─Extrañé tu compañía. No tengo idea de porqué estuviste evadiéndome.
Abrió sus ojos y nerviosa comenzó a jugar con sus dedos. ¿Qué se supone que le diría? No podía explicarle que por una extraña razón cada vez que él hablaba de Nini sentía como un nudo se formaba en la boca de su estómago.
─Lo siento, Ricky, en verdad lo hago. Sólo que... Es sólo que estuve ocupada enseñándole parte de la escuela a Gina Porter, la chica nueva; y en el periodo libre ensayé con los chicos algunas canciones nuevas que teníamos. ─aclaró su garganta y con una pequeña sonrisa volvió a hablar─ Pero te prometo que pasaré la mayor cantidad de tiempo posible contigo sólo para que no extrañes mi presencia.
Ricky soltó una risa.
─No te preocupes, ángel. La música es parte de ti y no dejaré que nuestra amistad se interponga en tus sueños.
Antes de que la castaña pudiera responder, la campana sonó, avisando que la hora del almuerzo había acabado y que las próximas clases estaban a punto de dar su comienzo.
Ambos se miraron con los ojos bien abiertos y se pararon inmediatamente. Ricky tomó la mano de Kane y jaló de ella, llevándola a la salida de la azotea. Aún con las manos entrelazadas, corrieron escaleras abajo, causando que ella tambaleara un poco, tropezara con sus pies y cayera en sus brazos. ━típico cliché ¿verdad?━ Calíope hizo una mueca y musito un "perdón", a lo que el ruloso sólo sonrió tímidamente; arreglaron su postura y continuaron con su camino a sus respectivas aulas de clases.
Cuando divisaron el salón donde el maestro de ciencias biológicas dictaba su clase, soltaron sus manos, se despidieron con un corto abrazo y un beso en la cabeza de la castaña por parte de Ricky, y mientras Calíope entraba al salón, rulitos volvió a correr por los pasillos hasta llegar al gimnasio.
No podía llegar tan tarde al comienzo de la clases y ganarse un pase directo a detención por toda la semana, si quería audicionar para la nueva obra escolar.
[ ... ]
Cuando Calíope había recibido una llamada de su madre al finalizar el día escolar, diciéndole que debía ir a casa porque tenía una gran sorpresa para ella, lo que menos se esperaba al entrar por la oscura puerta era ver a su tía Artemis con su esposo sentados en el sofá grande disfrutando de las galletas de chispas de chocolate que ella había preparado la noche anterior.
Sin embargo aquí estaba, contándoles a sus tíos sobre su nueva vida como cantante casi profesional, mientras su madre con ayuda de su tío terminaban de lavar los platos y utensilios que se habían ocupado para la cena de bienvenida.
─Si en algún momento deseas vivir en Los Ángeles con tus compañeros de banda para así lograr cumplir sus sueños, no dudes en contar con nuestra ayuda, Callie. ─dijo el hombre de treinta años al que ella llamaba tío James, mientras enjuagaba un último vaso.
La joven Kane al escuchar las palabras de la única figura paterna que ha tenido en su vida, corrió hacia él y rodeó su muscular espalda con sus brazos, acción que fue devuelta luego de que el hombre girara su cuerpo y la abrazara como se debe.
─Muchas gracias, tío. ─susurró en su oído.
James Seydoux acarició el cabello de su sobrina y de la misma forma en la que ella le había agradecido, él le respondió: "Eres como mi hija, niña. Haría lo que sea para verte sonreír", sin embargo, al tener una voz más grave, todos los presentes en la habitación habían escuchado.
Calíope sintió como su corazón comenzó a latir más rápido de lo normal y como sus ojos chocolatados se inundaban de agua salada. Se separó de los brazos de su tío y limpio el rastro que algunas lágrimas habían dejado al caer por sus mejillas.
─¡Ay, James! Ya la hiciste llorar. ¿Acaso no ves que está chiquita y que hay que cuidarla? ─dijo Artemis con un pequeño tono de burla. James levantó uno de sus brazos en el aire y con el otro depósito tres de lo vasos sobre la mesa.
─Estaré chiquita, pero sigo siendo cinco centímetros más alta que tú. ─la morena sacó la lengua en dirección a su tía.
Mientras una sonriente y melancólica Athena Kane miraba la escena que su hija y hermana tenían, el móvil de la menor de la familia comenzó a vibrar en la mesa, llamado la atención de James.
─Siento interrumpir esta linda escena, pero Callie, un chico llamado...─volvió a mirar la notificación─ ¿Ricky? Acaba de llamar para iniciar una videollamada. Oh y ahora tienes un mensaje de él.
La morena se acercó a la mesa, tomó el aparato en sus manos y encendió la pantalla.
« 3312, 3312. TENEMOS UN 3312 »
Trató de cubrir su sonrisa con una pequeña mueca, sin embargo ya era muy tarde, puesto a que sus familiares estaban pendientes a ella.
Posó su brillante mirada en su madre y antes de que pudiera emitir algún sonido, ésta habló. ─No es necesario que pongas esos ojos de cachorrito. Sólo ve a hablar con él, pero no te tardes tanto, en un rato comenzaremos con la noche de películas.
Asintió corrió escaleras arriba, sin olvidar antes depositar un pequeño beso en la mejilla de su progenitora.
Lo último que logró escuchar desde el interior de su habitación fue la voz de su tío decir: "¿Debería preocuparme del tal Ricky y de lo enamorada que está o sólo lo dejo pasar?" . Rodó los ojos y con su pierna empujó la puerta así cerrándola. Chequeo su apariencia en el espejo y al encontrarla decente para ser la misma ropa y maquillaje del día, marcó el número del chico.
Un tono. Dos tonos. Tres tonos.
Y finalmente su rostro apareció tras la pantalla.
─Tengo una gran idea para reconquistar a Nini, y antes que lo digas, si, es algo completamente legal. Nada parecido a lo que tenía planeado en el verano.
«Claro, Nini. Ella era la emergencia»
─Oh. Bien. Entonces dímelo. ─por más que quisiera cortar la llamada y gritar en su almohada, la sonrisa entusiástica que poseía Bowen era la razón por la que no podía negarse.
─Audicionaré para el musical.
Calíope al escuchar las palabras de su amigo rió escandalosamente. Ricky sólo se dignó a mirarla con una ceja alzada. ─Hablo en serio. Ella tiene que verme de una forma distinta.
Al ver que Ricky hablaba en serio secó las lágrimas que habían caído de sus ojos y respiró tratando de controlar la risa.
─Pero tú eres Ricky "odio los musicales" Bowen.
─No los odio, sólo creo que es raro cuando se ponen a cantar en plena calle.
«Ay Dios mío. ¿Quién le va a decir» pensó mientras lo miraba con divertida.
─Como sea, ─continuó─ mañana audicionaré y nada podrá detenerme.
Kane, aburrida de estar de pie y sabiendo que esto tomaría más de lo que creía, fue directo a su cama y recostó su torso, luego con una mano sujetó el aparato y con la otra hecha un puño apoyó su cabeza.
─¿Al menos sabes de lo que trata?
El ruloso bufó y con un tono de voz más agudo respondió: ─Claro. ─aclaró su garganta─ Se trata de Zac Efron bailando con un balón de baloncesto.
─No, rulitos. Trata sobre Troy, que es el personaje protagonizado por Zac, tratando de escoger si ser leal a sus amigos o a seguir su corazón con Gabriella. ─Ricky ladeó su cabeza y sonrió al ver como la chica hablaba sobre la famosa película─ Y dentro de la trama ocurren más cosas, como por ejemplo Sharpay y Ryan tratando de impedir que Troy con Gabriella roben su show, Taylor y Chad siendo los peores mejores amigos y Gabriella siendo la drama queen de toda la historia.
─¡Genial, sabelotodo! ¿Me ayudarás a practicar con las canciones, líneas y bailes? Que conste que tendré tu ayuda incluso si consigo el papel.
La morena pestañeo varias veces tratando de comprender lo que le habían preguntado. ¿Acaso no había escuchado nada de lo que le había dicho?
─Entonces...
─Bien, te ayudaré. ─aceptó a regañadientes─ Pero el único consejo que te daré es que trates de divertirte mientras te ayudo, nada de ser duro contigo o al menos mientras esté presente, ¿te parece?
El chico suspiró de felicidad.
─Si, si, haré lo que sea. Eres la mejor, Callie.
─Uuh, no fue buenas idea decir eso. ─la miró extrañado─ Acabas de alimentar mi ego, así que mañana te haré decirlo mientras lo grabo.
─¿Mañana en la escuela? Que sea en un rato y en tu casa. Nos vemos en treinta minutos. ¡Adiós, ángel!
Antes de que ella pudiera contestar algo, en la pantalla de su móvil sólo se lograban leer las palabras: «llamada finalizada». Dejó reposar el aparato en su cama y giró su cuerpo en la cama así quedando su espalda apoyada en el colchón. Miro al cielo de la habitación pintada con muchas estrellas y pensó en las últimas palabras que Richard Bowen le había dicho.
¿Acaso iría a visitarla mientras él único hombre de su familia se encontraba, probablemente, disfrutando de un gran bol de palomitas y leche chocolatada junto al resto de su familia? En serio estaba en graves problemas... Bueno, más bien Ricky lo estaba.
[ JAMES ]
─Calíope's political uncle.
"Yo no sé que hago hablándole a una cámara, pero lo único que diré será que ese tal Richi o como sea que se llame, deberá prepararse para una de las peores noches de su vida. Mi High School Musical fan side no dejará que descanse una vez hasta que los bailes le resulten a la perfección"
Mejor olvidenlo. Tal vez Bowen no corría ningún peligro...
ՙ𖤐𓂃 ֶָ֢ MADS' SPEAKS!
¡Les presento a Artemis Kane y James Seydoux! Quienes son interpretados por Chris Wood y la diosa Kat Graham 🛐🛐
Entonces, hablando del capítulo, ¿qué les pareció? ¿cómo creen que irá funcionando la relación entre Calíope y Ricky, slowburn o rápida?
¡Déjenmelo saber en los comentarios (youtuber se creía ah)
No olviden votar y comentar. En verdad aprecio los aprecio mucho.
¡Les amo!♡
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