Gracias por vuestra ayuda, queridos lectores. Acabo de terminar la rima. Ya tiene un vocabulario poético, un ritmo frenético, un timbre atlético, un universo cosmético, un aire bético, un práctico teorético, un orden alfabético, un encanto electromagnético y un éxito hipotético.

Desde el día de julio ocho,
En que tú cocinaste tu famoso Sancocho,
No puedo dormir, cada día trasnocho,
Porque quiero comerte con ganas tu (...) bizcocho.

No estamos hablando de un simple gazpacho.
Mis emociones me pegan borracho
Cuando calientas mi plátano macho.

Juegas un juego, y yo soy la ficha.
Mirarte comer la sabrosa salchicha,
Te veo morderme con gusto la (...) verdura antedicha.

Quiero probar tus merecidos melones.
No mala leche, sabes cuánto me pones.
El mejor de sabor es chupar tus (...) dedos después de comer boquerones.

Cuando tu mano remueve la olla
Siento un lento calor, desarrolla.
Así es que quiero que cojas mi (...) estatua de San Millán de la Cogolla.

Llenas mi plato, que es hondo, redondo,
Y debajo mis pies, ya no toco el fondo.
Joder, mujer, que me pones (...) como el perdedor en una batalla de taekwondo.

Tenerte, quererte, es una ventaja.
No puedo decirte que más merelaja,
Comer de tu mano o hacerme la (...) compra donde nadie trabaja
Y salir de la tienda sin pagar en la caja.