Me aparte de todos un poco asustada y colgué la llamada, pero volvía a llamar una y otra vez, comenzaba asustarme hasta que... Notificación de SMS.

Dylan
Tómame la llamada ¿o estás muy ocupada despidiendo a tus hermanitos y tu padre?

Y fue ahí cuando entre en pánico ¿Me está vigilando?.

-Lina no te piensas despedir de tu padre?

Habló mi madre y me saco de aquel transe.

-Eh, a si... Este... Adiós padre y madrastra, Hasta luego hermanos .

Dije algo desorientada lo cual Evan noto.

-¿Estas bien Lina?

Lo mire... No, no estoy bien, tengo miedo, miedo de Dylan y de lo que sea capaz de hacer.

- Si Estoy bien.

No, no me creas, no me dejes sola... Tengo miedo

- ¿Estás segura?

Preguntó Evan preocupado.

- Que si estoy bien, solo vi una publicación triste... Solo eso.

Mentí

-Bueno hasta mañana Hermana

Se despidió Evan.

-Cuidate hermanita

Ethan acaricio mi cabeza y yo sonreí, para luego verlos alejarse.

Mi madre cerró la puerta y yo me iba a mi habitación pero mi madre me detuvo.

-Lina hija, ¿Te sentiste bien en la cena?

Preguntó mi madre, esperando ansiosamente.

-Si... Creo que fue la mejor cena que eh tenido en mucho tiempo.

Le sonreí a mi madre y está corrió a abrazarme lo cual me sorprendió pero le correspondí.

-Hija perdoname -Zolloza- lo siento mucho y siento que estés pasando por todo esto, que estés enamorada de tu hermano, me imagino lo difícil que debe ser llamarle hermano.

Mi madre comenzó a llorar en mi hombro y yo solo suspiré.

-Tranquila mamá, disculpame tú a mí por como te trate, aquí nadie tiene la culpa de lo que esté pasando, y por lo de Evan... Tranquila ya me acostumbraré.

Sonreí mientras abrazaba a mi madre mucho más fuerte.

Luego de un rato entre a mi habitación, me cambié de ropa y me acosté en la cama... Ya hasta me había olvidado de Dylan. me entretuve mirando fotos mías junto a Evan, que felices éramos en ese entonces.

¿Y si reescribimos las estrellas?

Aún me sigue dando vueltas esa propuesta, reescribir las estrellas... ¿Y cómo podemos reescribir las estrellas? Desearía que pudiéramos reescribir nuestra historia y eliminar la parte que somos hermanos.

Mirando fotos, recordando momentos junto a él, escuchando un poco de música... Me quedé dormida.

En la madrugada sentí un cosquilleo en mi cara, estaba aún profundamente dormida así que solo me moví, pero seguía aquel cosquilleo en mi rostro. Pensé que era mi cabello así que sin abrir los ojos pase mi mano por mi cara intentando quitar lo que me causaba cosquillas y volví a acurrucarme hasta que.

- Despierta ya princesa

Escuché un susurro en mi oído y me desperté de golpe, al ver quién era salí de mi cama aterrorizada.

-Dylan

El temor me consumía

-Buenas princesa,tú y yo tenemos asuntos pendientes que resolver.

Dijo con una sonrisa maliciosa y un tono malicioso.

-Ya déjate de juegos Dylan y sal de mi habitación, no sé ni cómo entraste.

Mi voz temblaba intentaba no tener miedo o por lo menos no demostrarlo pero me era imposible

En un instante Dylan estaba frente a mi a sentimientos mientras me acariciaba el rostro.

-Venga ya Lina, tú comenzaste esto, ahora no puedes dejarme con las ganas.

Ese tono arrogante y malicioso me ponía mucho más nerviosa, solo intentaba apartar mi rostro para que no me tocará.

-Alejate de mi Dylan , ya para con esto.

Dije sin mirarlo pues buscaba con la vista mi celular, tenía pensado llamar a mi madre.

-Venga ya si se que en el fondo quieres esto tanto como yo.

Dylan comenzó a tocar mi cintura y agarró mi mentón fuertemente para que le mirara.

Encontré mi celular!

Estaba en una esquina de mi cama, ¿cómo llegaría ahí si me tiene acorralada en la pared?

-Dylan ¡Que me dejes en paz!

Lo empuje y corrí a tomar mi celular, pero este me sujeto la mano.

-¿A quien piensas llamar? A la policía?

Dijo este con una sonrisa yo con dificultad logré marcar un contacto, no sé cuál pues no podía ver pues Dylan me levantaba el brazo.

-Ya déjame!

Comencé a forcejear, y este me tumbo en la cama y cayó sobre mi, y se las arregló para lanzar mi cel a alguna parte de la habitación.

Si se rompe mi madre me mata, no puede ser dos celulares lanzados en tan poco tiempo

Este comenzó a besar mi cuello asquerosamente, yo forcejeaba intentaba sacarlo de arriba de mi pero me era imposible, intente gritar pero este tapo mi boca con un trapo.

Alguien ayúdeme...por favor...que alguien venga.

Esto se hacía insoportable solo podía llorar, llegó un intenta en el que me di por vencida, no podía contra el hasta que...

-¡Que rayos le haces a mi hija!

La voz de mi padre sonó muy molesta.

- Imbécil parece que necesitas otra palisa.

Evan...

Evan muy furioso saco a Dylan de arriba de mi, y lo agarró del cuello.

-¿Acaso quieres morir?

Dijo enojado y mi padre fue a detener a Evan para que no hiciera una locura y mi madre fue a donde yo estaba.

-Hija , ¿estás bien?

Mi madre hablo preocupada mirando cada esquina de mi cuerpo,yo solo la abracé y comencé a llorar.

Luego de ese mal rato, mi padre llamo a la policía, mientras Evan se encargaba de que Dylan no huyera, el solo me miraba como si quisiera correr hacia mi. Mi madre solo me hablaba intentando que desconectara del tema... ¿pero cómo hacerlo teniendo a esa persona ya cerca?

En pocos minutos llego la policía y se lo llevaron, y nos dijeron que todos debíamos estar allí para testificar lo sucedido.

Al llegar a la comisaría llegó una mujer muy preocupada llorando, ella estaba en silla de ruedas, le faltaban las piernas y tenía una mano negra.

-Mi hijo Dylan dime está, ¿que sucedió?

Ella lloraba desesperadamente, la madre de Dylan parecía estar enferma.

-Señora su hijo intento violar a una muchacha, estamos esperando a que la víctima y los testigos, testifiquen.

-No, no, mi hijo no

Ella lloraba desconsolada me daba mucha lástima verla así, no sé que sucedió con Dylan, cuando lo conocí no parecía ser ese tipo de persona, tal vez se comporta así por su madre enferma, tal vez es la rabia que siente por dentro... No lo sé.

- Que pase la víctima

Dijo un oficial y pase a una oficina con mis padres y mis hermanos.

Dylan estaba ahí, enojado pero su rostro cambio al ver a su madre... Parecía arrepentido, y comenzó a llorar al ver el rostro de tristeza y deseción de su madre.

¿Debería darle una oportunidad?

El oficial me pregunto lo sucedido, y solo lo mire a él y a su madre... ¿Cómo podría ella aguantar ver a su hijo preso?, Todos merecemos una segunda oportunidad.

-Señorita Lina, necesitamos que declare

El oficial volvió a preguntarme.

-El... El no hizo nada