Capítulo 7:

—Harry no es necesario que digas algo en tu mirada lo dices todo— dijo Jack sabiendo que su amigo se sentía solo.

—Genial ahora le harás de psicólogo conmigo, no tengo ganas de esto— dije poniéndome de pie para luego salir.

Camine por un largo pasillo hasta llegar a la biblioteca, tome un libro y salí de ahí con el libro en la mano, tenía pensado leerlo sentado cómodamente en el cuarto de estar donde solo los integrantes del equipo 4 podíamos entrar con invitadas que deseáramos llevar.

El cuarto de estar también era grande ahí teníamos sillones de color castaño casi obscuro, una televisión de plasma enzima de un pequeño mueble de madera, en la pared tenía colocado una figura circular donde podía lanzar unos dardos en el, en la esquina teníamos una mesa de billar y un estéreo para oír música.

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Brandon se encontraba en la azotea su lugar favorito, era tranquilo y silencio donde podía descansar, sentir los rayos del sol en su rostro e incluso dormir.

Brandon era un chico que apreciaba la amistad pero también era serio y solitario en ocasiones, a diferencia de Harry el se sentia mas comodo de esa forma, no le gustaba estar con demasiada gente, no le gustaba el escándalo y sus amigos decían que era un ermitaño.

Cuando iba a la azotea nadie lo incomodaba por esa razón era su lugar favorito donde también si quería podía observar el instituto desde arriba.

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—Nos han dejado solos— dijo Jack.

—Bueno amigo creo que es hora de irnos, ¿que tal si nos vamos a casa y hacemos una fiesta e invitamos a unas chicas?— dijo Cristián emocionado.

Cristián a diferencia de Jack era un mujeriego si pero con chicas de su edad, solo una vez se había enamorado solo una vez había sentido ese sentimiento pero la dejo ir porque tenía miedo de lastimarla y de ser lastimado, él tenía la idea de que si dejabas pasar ese momento jamás volverías a tener otra oportunidad; solo tenías una oportunidad en la vida y si dejabas pasarlo todo acabaría, también tenía la idea de que la vida se vive solo una vez; sólo una así que debías disfrutarla al máximo.

Jack y Cristián salían del instituto para ir a encontrarse con chicas que quisieran divertirse y pasar un buen rato junto a ellos.

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Salí en mi auto para ir a casa ya era un poco tarde se me habían ido las horas concentrado leyendo, al llegar todas las empleadas me saludaron cortésmente al verme, yo las ignore subiendo los escalones que me parecieron incontables y cuando por fin estaba por subir el último escalón oí una voz tan conocida que mi corazón empezó a latir tan rápido, gire todo mi cuerpo, y la vi levantando sus brazos esperando a que bajara para darme un abrazo.

—¡Harry, mi querido hermano!— dijo en un grito mi hermana.

—Tonta pero porque tienes que gritarme te hubiera escuchado sin la necesidad de que levantaras la voz sabes— dije bajando de nuevo pero en esta ocasión ya no sentía el cansancio de hace un rato al subir, me acerque a mí hermana dándole un fuerte abrazo.

—¿Que paso hermana ya tan rápido tu esposo sea cansado de ti?— pregunté serio aunque para ser honesto quería que sonara a broma pero falle en el intento.

—Valla que hermano tan descortés tengo- dijo mi hermana molesta y dándome un fuerte golpe en la nuca— Esta vez te lo has ganado.

—¡Auch eso dolió! Solo era una broma no tenias porque pegarme— dije sobandome donde me dio el golpe.

—Pues no hagas bromas, ¿como están los chicos?

—Bien, seguro que Jack y Cristián están en algún lugar divirtiéndose con mujeres y conociendo a Brandon seguro está en su casa durmiendo ese chico tiene una enfermedad relacionada con el sueño me da un poco de lastima.

—No hables así o te ganaras otro golpe en la nuca.

—Tu me quieres dejar consciente.

—Vaya no has cambiado en nada, creo que lo que querías decir era inconsciente.

—Tú tampoco has cambiado te gusta seguir corrigiendome.

—La cena está lista joven ya pueden pasar al comedor— dijo interrumpiendo una de las sirvientas.

—Vamos hermano y después te irás a dormir.

—Pero quiero quedarme un rato más contigo no te he visto casi en dos años.

—Solo fue año y medio, mañana tendremos mucho tiempo me quedaré cuatro días contigo así que no hay excusa alguna te iras a dormir cuando termines de cenar.

—Bien, está bien— dije haciendo pucheros como si aún fuera un niño.

Al terminar de cenar mi hermana me mandó a dormir y yo obedecí con una falsa sonrisa como odio que me digan lo que tengo que hacer.

Marcus entró como siempre para cerrar las puertas de la terraza y mientras él terminaba yo me quedaba dormido en el más profundo sueño, me sentía en una nube todo gracias a la visita de mi hermana a quien extrañaba demasiado, ella era lo mas cercano que conocía a una madre aunque en un tiempo también había tenido a una nana pero luego deje de saber de ella creo que se a juvilado.

Un capitulo corto pero ya sabemos mas de Cristián y Brandon espero les guste.