Capítulo 3:

—¿Donde se encuentra mi hijo?— pregunto la señora collins dejando su gran abrigo en las manos de una chica quien era una de sus tantas empleadas domesticas.

—Fue al instituto señora— respondió con respeto.

—Retirate

—Si señora— dijo saliendo y  serrando la puerta del despacho con mucho cuidado.

Cuando dejara de ser amigo de esos chicos debería madurar ya, los amigos no le dejaran nada bueno para él unico heredero Collins.

—Harry, Harry vamos a comer algo tengo hambre.

—Pero yo no, ve tu Brandon te esperó aquí— dijo recargado en la pared colocando sus dos manos a cada lado del bolsillo del pantalón.

En eso pasaban tres chicas lindas de unos 17 años cerca donde se encontraba Harry quien no le quitaba la vista de encima a su carro convertible este era él segundo auto que manejaba por su cuenta sin tener a un chofer.

Una de ellas se le acero para verlo mas cerca y le dijo.

—Hola mi nombre es…

—No me interesa porque no sigues con tu camino y dejas de molestar.

Ella no insistió mas y se fue con sus amigas.

—¿Guau porque no eres mas cordial con las chicas por eso nunca has tenido novia sabias eso?—dijo Jack uno de sus amigos.

—No me interesa tener novia todas son iguales solo les intereso por mi apeyido, dinero y posición— dije molesto.

—Amigo mio pronto encontraras a una mujer diferente a las demás y espero que cuando ese día llegué te sepas comportar— dijo Jack sonriendole.

—Eso no pasara y si llega seré él primero en no dejarla ir nunca— dije estabes serio y mi vista directo a sus ojos.

—Eso espero.

—¿Pero que hacen aquí?— pregunto Cristián.

—¿Cuando volvisteis de California?— le pregunte asombrado no me había percatado de su presencia.

—Hoy mismo llegue, fue un viaje divertido hubieran venido conmigo— respondió Cristián.

—No, gracias— dijo Jack, Harry y Brandon al mismo tiempo, se vieron, y rieron a carcajadas.

—Oigan no se rían de mi— dijo Cristián y luego termino riendo junto a ellos.

—Vamonos los invito a comer en mi restaurante favorito hoy lo reserve solo para nosotros.

—Vamos, a pero ¿Puedo llevarlas conmigo?— dijo Cristián llamando con señas a unas dos chicas.

—Claro mientras no me molesten a mi — dije enarcando una ceja.

Subimos a mi auto y conduci hasta él restaurante, entramos siendo los únicos, las mesas vasias al igual que la sillas, nos sentamos en una de las mesas cuadradas tenia un mantel blanco con algunos adornos, pédimos varios platillos y empezamos a comer él sabor era exquisito a lo que estábamos acostumbrados.

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Estaba en mi cuarto estudiando para la prueba que teníamos hoy de historia, nos faltaba algunas pruebas finales para acabar él curso del año, me puse él uniforme ahora que era miércoles nos tocaba pans. Él pans era una blusa blanca, una chamarra color verde al igual que él pantalón.

Baje a desayunar, vi a mi hermano listo con su uniforme y muy buen peinado y junto a él tenía su computadora.

—Buenos días hermanito hoy te ves muy guapo.

—Gracias hermana hoy le diré a Alma que sea mi novia, espero que acepte— dijo Alejandro riendo.

—¿Como no me habías dicho nada de ella?— le pregunte sorprendida.

—Como te voy a decir cuando siempre estas ocupada estudiando sabelotodo.

—No me digas así tratare de escucharte más lo prometo hermanito.

—No te preocupes anís bueno me voy al colegio antes que tú, adiós.

—Adios hermanito y suerte— dije luego me senté a desayunar, tome mi mochila y me fui esta vez  caminado a la escuela.

Al entrar al salón me senté en mi pupitre a estudiar un poco más y sin darme cuenta Alfonso estaba junto a mi.

—Anis me le declare a Fernanda y me dijo que si, ella me dijo que si a mi estoy tan feliz que saltaría de felicidad pero si lo hiciera pensarían que estoy loco— dijo Alfonso feliz con un brillo en su mirada que no había visto en él.

—Que bueno me da mucho gusto por ti se lo mucho que te gusta ella, sabes mi hermano también se le confesara a una chica.

—Tan chico y ya esta enamorado, solo faltas tú ¿Cuando me darás la sorpresa de que ya tienes novio?— Pregunto Alfonso.

—Creo que nunca además no tengo tiempo para pensar en eso ahora— dije algo triste ya que por dentro si quería conocer a alguien, tener una cita con él chico que me guste.

—Chicos buen día comencemos con la prueba van a tener solo media hora— dijo la profesora pasando la prueba a todos  —Buena suerte comiencen ahora.

Paso la media hora y uno por uno fuimos entregándole las pruebas a la maestra.

—Mañana les daré sus calificaciones a todos.

—Seguro que tu seras la mejor como siempre anis—me dijo Alfonso con una risa.

Las siguientes clases fueron español, álgebra y filosofia. Luego tocaron para él receso.

Me quede en él salón a comer sola mi comida favorita, cuando termine entro Andrés y Carlos pero no me molestaron, habían entrado sin mirarme como si fuera una persona invisible, se sentaron a hablar hasta que tocaron para continuar con las clases...