CAPÍTULO IX: "FOTOGRAFÍAS".
Había pasado 18 años después de la partida de Ana Luisa y su familia, tiempo en el que decidí ir borrando cada uno de sus recuerdos y hasta después de 8 años pude concebirlo. Los primeros años fue imposible ya que viví por dos años y medio en la que antes consideré la "mansión del terror", lugar donde también la gente fue cambiando dicha percepción y esto en gran parte a nosotros.
Los primeros meses siempre estaban los vecinos hablándonos que veían sombras en la entrada, escuchaban ruidos extraños y hasta sentían que peligrábamos ahí viviendo. Mis padres ignoraron todos estos comentarios y con el paso de los tiempos la casa pasó de ser tenebrosa y solitaria a estar llena de críos felices, revoloteando por todos lados, jugando y llenando de vida la gran casa. Niños de la cuadra que jugaban enfrente, vecinos como Dally y su hermano que entraban a jugar con mis hermanitas y conmigo; mis primos que iban frecuentemente a jugar en la inmensa casa. Al final todos concluyeron que fue una desgracia pero que no existía nada misterioso allí.
Durante muchos días estuve mirando cada una de las habitaciones, incluso aquella que Ana Luisa tanto nos narraba donde padeció muchos eventos. Sin embargo, pude notar que si tenía instalaciones eléctricas funcionando, solo hacía falta una bombilla que iluminara el cuarto que era algo oscuro, sin embargo, de día por una rendija se colaba un poco de luz y se podía ver claramente. Por un tiempo llegué a pensar que quizás cada cosa que nos dijo a Christofer y a mí, no era de la magnitud como ella se refería, pero también supe que con lo que vi y vivencié, ella sufrió demasiado con sus familiares; así que le dí el crédito de la confianza a sus afirmaciones.
La mitad de la casa tenía el techo en zinc, lo que me hacía pensar que la misma fue modificada para albergar las más de 15 personas que vivían allí, sus cuartos eran más pequeños y el piso era hecho en cemento pintado con color rojo, algunos cuartitos no tenían piso y tenían viejas cosas guardadas allí, incluso juguetes que después pasaron a nuestra propiedad y donados por los abuelos de Ana (padres de crianza).
La otra parte de la casa tenía más de 50 años de construida, se podía apreciar en un marco que estaba en la entrada de la casa, la fecha de construcción y la primera familia que habitó la misma. Cuando llovía en la parte mas nueva de la casa se escuchaba un estropicio por la caída de las gotas de agua en el techo de zinc. Mientras que en la zona delantera de la misma (la parte mas antigua) el sonido de la lluvia era mas apacible, ya que esta estaba hecha en antiguas tejas, la cuales había que estar revisando de vez en cuando, porque cuando llovía con fuertes brisas se podían correr un poco y por allí se filtraban a veces unas ligeras gotas que mojaban los cuartos delanteros o la sala.
Ese era mi trabajo al día siguiente de una lluvia, treparme por el árbol de mango que estaba a un costado de la casa y que también en esa zona de patio era contiguo a la Casa de Dally. Había una separación aproximada de 20 mts. entre los costados de las casas. En mi tarea de mover la teja o colocarle algún pegamento suave para tapar las pequeñas averías en el techo, mi padre me indicaba por donde caminar para no dañar las delicadas tejas o que me fuese a caer y golpear. Me volví un experto en repararlas.
¿Después de haber olvidado esas épocas difíciles en Tajamar y después que se vivenciaron tantos episodios crueles y espantosos a finales del siglo pasado y principios del nuevo siglo, decido volver a recordar?... ¿Por qué después de olvidar por completo aquella niña pelo rubio (casi rojizo), la traigo a mi actualidad?...
Todas esas preguntas me las formulé de adulto y supe que no las recordé porque sí, había algo de más trasfondo, había soñado con ella, pero esos sueños que no recuerdas al día siguiente pero tienes pálpitos extraños en tu interior y miras en retrospectiva que pudiste haber soñado que no puedes sacar de tu cabeza y fué así como recordé épocas que estaban en el baúl de los recuerdos y supe que había tenido fragmentos de sueño con Ana Luisa y por eso decidí saber que había sido de su vida y como se encontraba en la actualidad.
Lo primero que hice fue indagar con mis amigos de aquellas épocas, de los cuales con algunos cuantos aún mantenía contacto y estábamos pendiente de cada proceso que vivíamos en la vida y por ello existía mucha conexión en redes y en la misma vida, nos felicitamos por cada triunfo conseguido o cada evento que suceda, bueno o malo. Muchos se sorprendieron porque personajes como Rubber, Christofer, Ana Luisa, se borraron del mapa y nunca supimos más de ellos, e incluso ya la gente les había olvidado. No podía quedarme con las respuestas de mis viejos amigos de infancia así que decidí colocarme a la tarea de saber de ellos.
Rubber se había ido del país y al parecer tiene un negocio de ventas de repuestos de Motocicletas en un país vecino. Christofer desapareció por completo y aunque recuerdo sus apellidos no me registra nadie con su nombre que le asocie con él y lo que recuerdo de él... Me dio una pena no localizarle, el solo estuvo ese año conmigo y esos meses que Ana se fué sin terminar el año escolar entró en una gran depresión, su "noviecita" se había ido para nunca mas regresar. George se convirtió en un famoso político regional, Dally se convirtió en ama de casa, Rina se casó con un exalcalde del municipio, los demás tenían buena vida y trabajo estable... pero ¿y Ana?....
... Ana Luisa la extraña niña que se robó mi corazón tenía muchas homónimas en las redes sociales...
Decidí buscarle una a una y encontré un perfil que no se movía desde hace más de 3 años y efectivamente era ella, con el cabello un poco mas corto, ya adulta, de estatura mas baja de lo que antes la veía, de buen porte y al parecer con fotos en Panamá. Sue entonces que había pasado años con su verdadera madre, lo que seguramente le fortaleció el espíritu. Se me da por buscar mas en las redes y encuentro otro perfil que se me parecía mucho a ella pero ya algo mas entrada en edad, se parecía mucho a una de sus tías, o el recuerdo que tenía de la que era la tía profesora y supe que este era su actual perfil.
Me produjo un sinnúmero de sentimientos verle, se le notaban ya los años y aunque aún debe estar algo alejada de los 40 años su rostro era el de una mujer de 40, con bastantes signos de arrugas debajo de sus ojos y en su frente. Su cabello había sido cortado a tal punto de usarlo como los hombres normalmente lo cortan. Su cuerpo había sufrido grandes cambios, sus brazos estaban mas gruesos de lo habitual, sus caderas más grandes y aunque se puede decir que estaba un poco pasada de kilos, su cintura era parecida a la de una avispa, bastante pequeña para con respecto a las otras partes de su cuerpo. Noté que su perfil era privado y solo pude ver unas 3 fotografías y con ellas concluir lo que había sido su vida y lo que es actualmente ella hoy en día.
Fotografía 1: Ella en Panamá, era su foto de perfil, asumía que estaría allá viviendo, pero su rostro allí se veía distinto y su cabello aún era largo, lo que me indica que no era reciente esa foto. Esta fotografía aún me definía nada de lo que quería saber.
Fotografía 2: Ella y una cantidad de niños en una pequeña escuela. Era maestra de preescolar y se le notaba feliz con los más de 10 niños que la rodeaban, su cabello corto, sus cejas delgadas, sus pronunciadas pecas que cada vez eran más notorias, su escaso maquillaje y su vestimenta particular: unos "bluejeans" ajustados una blusa sencilla color blanco y unos botines color gris. Sin duda alguna había cambiado desde la última vez que le ví.
Fotografía 3: Ella en una montaña del oriente Antioqueño, donde se veía el nombre de la pequeña escuelita, que según pude analizar quedaba en zona rural de algún pueblo de ese Departamento. Esta foto tenía un pie de página: " Trabaja en lo que realmente te hace feliz y sentirás que no hay esfuerzo en ello."... Esta foto me dejó feliz al punto de no enviarle ninguna sugerencia de amistad porque pude concluir que era muy feliz en la actualidad y aparecer así para saludarle podía avivar unos duros recuerdos de su infancia que tal vez había dejado en su pasado.
Adicional a ello supe que aún estaba soltera, no tenía hijos o eso no se evidenciaba en sus redes y que había resurgido de su inmensa oscuridad; que ya había pasado ese túnel oscuro para vivir en medio de la luz. Simplemente fui feliz sabiendo que ella estaba bien y que había tenido la oportunidad de ser una mujer que le cambió esa vida llena de sangre, miedos, oscuridad y tristezas a ser una mujer madura y con un gran proyecto de vida...Todo lo malo, la oscuridad...
...Eso ya era pasado!
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