(Narrador Omnisciente)

Jimin observaba aquel atractivo Alfa frente a él. Jamás en su vida había visto tanta belleza en una sola persona.

Sus pensamientos y mirada estaban tan concentrados en el Alfa que no se daba cuenta de lo que realmente estaba pensando, solo podía admirar al ser frente a él. Pareciera como si no fuese de este mundo.

Con sus ojitos gatunos y brillosos, sus labios delgados y rojizos, su mandíbula perfilada, su cabello azabache, sus manos tan blanquitas y varoniles que mostraban perfectamente sus venas al tenerla extendida hacía él. Pero lo que más le atrajo a Jimin además de su aspecto físico fue su exquisito aroma a Chocolate amargo y madera, Jimin amaba el chocolate y el aroma a madera le regalaba tanta paz, frescura y tranquilidad que en cuestión de segundos sintió como si aquel Alfa fuese su lugar seguro en la tierra.

El Omega platinado se sentía tan ambobado por el Alfa que no podía despegar sus ojitos de los gatunos tan hermosos. La caballerosidad del Alfa lo tenía babeando, pues normalmente un Alfa no mostraba respeto ante un Omega, ni mucho menos su ayuda. Jimin a lo largo de su vida solo había conocido a dos Alfas con amabilidad y educación y esos eran su padre y Namjoon.

Sin duda alguna, Park Jimin había caído ante los encantos y belleza de aquel hermoso Alfa.

Mientras que Min Yoongi tampoco podía despegar sus ojos de los hermosos mieles frente a él. Para Min, jamás había visto tanta belleza, ternura, sensualidad y perfección en una persona y aquel Omega tenía todo lo que le gustaba.

Iniciando por su delicioso aroma a Chocolate blanco, tan suave y dulce como el caramelo, el cual lo encantó desde el primer segundo. Siguiendo por el inigualable físico de tan hermoso ser.

Yoongi tenía frente a sus ojitos al chico más hermoso de la faz de la tierra, con aquellos ojitos mieles, mejillas regordetas pero mandíbula marcada, labios pomposos y rojizos, su lindo cabello brillante al igual que sus ojos. Sus manitos se veían pequeñas al tenerlas sobre su frente que fue donde cayó el disco y aunque el gorro amortiguó un poco el golpe, las manitas del Omega se mantenían sobre la zona.

El Alfa pelinegro sintió de inmediato como aquel dulce y tierno chico Omega era su persona ideal, como su lobo le decía una y otra vez que ese tierno chico es suyo y que desea protegerlo del mundo a como de lugar. Min no pensaba negarse ante los deseos de su lobo y con una sonrisa dulce entre sus labios mostró interés en el chico frente a él.

Él sabía que debía conocer más de tan hermoso ángel y estaba dispuesto a todo con tal de tenerlo para él y protegerlo del mundo entero de ser necesario.

¿Amor a primera vista?

¿Destinados?

¿Causalidad?

Quizá eran las tres juntas, pues definitivamente la madre luna unió aquella pareja de destinados, logrando que se enamoren a primera vista uno del otro, acercándolos en un lugar en el que demuestra la principal pasión de cada uno.

El hielo.

Con ello creando una que será mucho más fuerte e intensa, aquella pasión sería diferente, pero única y especial. Pues la pasión y amor que crecerá en sus corazones jamás podrá ser comparada con absolutamente nada.

Sus miradas permanecieron conectadas por lo que parecieron largos minutos y es que el primer encuentro de una pareja de destinados siempre sería especial.

Yoongi decidió tomar la iniciativa y hablar nuevamente. Pues no pensaba dejar a tan lindo chico tirado en el hielo cuando fue el culpable de que se encuentre en aquella situación.

- Lamento mucho lo sucedido - Extendió nuevamente su mano - No fue mi intención - Se disculpó nuevamente.

Jimin observó lentamente la mano del Alfa y después los ojos de este, repitiendo la acción un par de veces más. Hasta que se animó y extendió su manita.

Está demás decir la conexión y chispas que ambos sintieron entre sus cuerpos al momento de sentir sus pieles juntas.

Jimin sintió a su lobo aullar, mover la cola, dar vueltas de un lugar a otro y sentir tantas emociones positivas, alegres y emocionantes, unas que Jimin jamás había sentido, solamente en el patinaje artístico.

Sin embargo, en esta ocasión fue más intensa y agradable.

- No te preocupes - Respondió Jimin, siendo ayudado a ponerse de pie.

Min Yoongi juro haber escuchado la voz más tierna y hermosa del mundo, es que sin duda alguna ambos habían caído redonditos uno por el otro.

- Solo... Quisiera saber - Dijo Jimin, una vez se encontró de pie - ¿Qué haces en mi propiedad?, Y... ¿Quién eres tú?

En otras circunstancias Jimin juraba que le tiraría lo primero que encontrará en su camino, lo insultaria y habría llamando a la policía para que se lo lleven por invadir propiedades ajenas. Pero con aquel hermoso Alfa jamás se le ocurriría algo similar.

- Oh si, yo este... - Yoongi se puso nervioso, se dio cuenta que ninguno de los dos había soltado sus manos y de inmediato lo hizo, no quería asustar al chico.

Jimin sonrió con exceso de ternura. ¡Él jamás había conocido a un Alfa tan tierno como aquel!, Aunque su voz fuese tan varonil, ronca y atrayente, su ternura lo derretía.

- Lamento eso también - Se disculpó por tercera vez el Alfa - Vivo allá - Señaló el mayor - Desde mi habitación vi el hielo y mamá me dijo que no estaba el dueño en casa y... - Yoongi suspiró sintiendo su rostro arder ante la vergüenza - En verdad lo siento - Rascó su nuca - Jamás quise invadir tu propiedad, solo quería jugar un poco, si no lo hacía, moriría de depresión o ansiedad.

Jimin lo escuchó atentamente en todo segundo, con una suave sonrisa entre sus labios. Le encantaba aquel Alfa, es que su ternura lo tenía embobado y el nerviosismo con el que hablaba, lo hacía sentir miles de mariposas en su pancita.

- ¿Eres hijo de la señora Shin? - Pregunto para ayudar un poco al Alfa a bajar sus nervios - Creí que la señora Shin no tenía familia.

- Bueno... Si, tiene, solo somos ella y yo - Sonrió el Alfa, ambos siendo bombardeados por un detonante de ternura excesiva.

- Entonces tú... - Jimin se atrevió a preguntar, algo le decía que entablará una conversación con aquel bonito Alfa - ¿Eres jugador de Hockey? - Pregunto.

- Algo así - Jimin levantó la ceja y Yoongi río bajo - Se puede decir que si, es una larga historia, ¿Tú eres patinador artístico? - Pregunto el Alfa, recordando las palabras de su madre.

- Aldo así - Respondió Jimin y ambos rieron por sus respuestas - Solía serlo, pero lo deje - Dijo Jimin soltando un suave suspiró - Si quieres... Puedes utilizar la pista cada que gustes - Señaló el Omega y los ojitos de Yoongi brillaron.

¡Es que ese Omega es perfecto!

- ¿Hablas en serio? - Pregunto con emoción el pelinegro.

- Claro, yo nunca la uso, tú... Puedes utilizarla, si prometes mantenerla limpia y cuidada - Condicionó el menor.

- ¡Hecho! - Dijo con emoción el Alfa y Jimin una vez más sonrió - Lo siento, es que tú... Eres muy dulce y tierno, ¿Sabes? - Ladeó un poco la cabeza el Alfa, sintiendo hermoso al ver el sonrojo en las mejillas del lindo Omega.

- G-racias... - Tartamudeo un poco el Omega, sintiendo mas vergüenza ante su torpeza - Digo... Tú también lo eres, a pesar de ser un Alfa, te ves muy tierno, frágil y... Amable. No todos son así - Intento esquivar el Omega.

El pelinegro carraspeó y sonrió, mostrando su lindo gummy smile, el cual aceleró el doble, el corazón de Jimin. Tenía una bonita sonrisa aquel Alfa.

- Lo mismo me dice mamá - Sonrió el Alfa - Disculpa mi atrevimiento, pero... ¿Puedo saber tu nombre? - Se atrevió a preguntar.

- Si tú me dices el tuyo primero, prometo decir el mío - Sonrió Jimin.

El Alfa no evitó reír. Sin duda alguna el conocer aquel Omega le había caído como un milagro del cielo. Jamás había sentido tantas emociones felices en un día como en aquellos minutos con tan lindo Omega.

- Me llamo Min Yoongi - Respondió el Alfa.

- Min Yoongi... - Repitió Jimin, sentía que había escuchado aquel nombre en otro lado, pero al no recordar, le resto importancia - Bonito nombre - Sonrió.

- Gracias, ¿Y tú?, ¿Cuál es tu nombre? - Pregunto el Alfa, manteniendo fija la mirada en el Omega sonrojado.

- Oh sí, soy Jimin. Park Jimin - Respondió el Omega mostrando su dulce eyesmile.

- Un hermoso nombre para tan bello ser - Las palabras de Yoongi, sin duda hicieron sonrojar furiosamente al Omega quien colocó sus manitos sobre sus mejillas, tratando de bajar el calor de estas.

- Eres demasiado dulce Yoongi - Vaya que escuchar su nombre en los labios del menor, tenía mucho más encantado al Alfa.

- Al igual que tú - Min tenía repuesta para todo.

Ya lo pensó, debía conquistar aquel hermoso Omega, la sonrisa de este lo tenían embobado, su presencia y aroma, casi enamorado.

Mantuvieron sus miradas fijas durante largos minutos que para ellos fueron pocos segundos. Claramente ellos sabían lo que eran, pero su misma mente les advertía que tomaran las cosas con calma, que no se precipitaran y disfrutarán del momento.

De pronto, Jimin sintió una leve punzada en su vientre bajo. Se quejó y llevo sus manitos hasta la zona, sintiendo el dolor cada vez más agudo y molesto.

Yoongi fue consciente de todo. El aroma de Jimin incremento de un segundo a otro, atrayéndolo al instante, el chocolate y el caramelo se sentían más intensos a cada instante.

Quizá otro Alfa posesivo hubiese actuado de otra forma, quizá hubiera tomado por la fuerza al Omega al verlo en estado de celo, pero Yoongi era diferente.

Su instinto no le dijo que debía poseer al Omega, ni mucho menos tomarlo cuando acaba de conocerlo. En un abrir y cerrar de ojos, dominó a su lobo y se agachó hasta la altura del Omega, quien se había dejado caer ante el malestar.

Yoongi se acercó con cuidado y llevo sus manos hasta las mejillas del Omega, quien se sentía demasiado atraído por el aroma del Alfa. Su instinto le estaba exigiendo, el restregarse en el mayor, su lobo le rogaba el ser atendido por el Alfa. Sin embargo, parte de Jimin aún se mantenía cuerdo y este le decía que debía alejarse del Alfa, ya que aún sigue siendo un desconocido y no lo conoce completamente. El Omega no sabía cómo actuar.

- Tranquilo cachorro - Susurró Yoongi - Prometo no hacerte daño, no haré nada para lastimarte, solo quiero cuidarte, ¿Me permites? - La voz de Yoongi sonó tan suave que los oídos de Jimin se encantaron en ese momento.

Cuando el Omega estuvo por asentir, sintió otro aroma extra que conocía perfectamente, aquel aroma a Lima y coco lo hicieron levantar la mirada rápidamente.

Sin embargo, Yoongi lo tomo como un desconocido, como una amenaza y no dudó en colocarse frente al Omega y protegerlo con su cuerpo, soltando su aroma y envolviendo con este mismo, todo el cuerpo del menor.

Yoongi gruñó al Alfa que se acercaba rápidamente con furia en su mirada, mientras también soltaba su aroma, pero este se sentía tan amargo que puso en alerta a Min.

- ¡¿Quién mierda eres tú?!, ¡¿Qué haces con mi Omega?! - Grito en medio de furia el Alfa que se acercaba.

Entonces Yoongi sintió mucha más irá recorrer en sus venas. ¿Aquel lindo Omega tenía Alfa?, ¿Por qué si era así no veía ninguna marca en su cuello?, ¿Por qué no le dijo nada en todo el tiempo que permanecieron hablando?

Yoongi volteó a ver a Jimin, quien se mantenía detrás de él, mientras se retorcía del dolor, el lobo de Jimin exigía la presencia de Yoongi, mientras rechazaba el aroma a Lima y coco, pero Jimin era un cuento diferente. Él, no sabía que hacer o cómo reaccionar.

Frente a él tenía al que supone es su Alfa destinado y lo supo desde un inicio, pero también estaba su mejor amigo, el que creía su otra mitad, quien lo ha protegido todo ese tiempo y al que adora con todo su corazón. Se sentía entre la espada y la pared, no sabía si hacerle caso a sus instintos o a su subconsciente.

- ¡Te hice una maldita pregunta! - Grito con furia Namjoon, sin quererlo, asustando a Jimin en el proceso - ¡¿Qué crees que le estás haciendo a mi Omega?!, ¡Aléjate! - Demandaba.

- Jimin - Llamo con calma el Alfa menor. Yoongi no tenía ninguna intención de asustar al Omega y tampoco alejarse de él, si este no se lo pedía - ¿Él es tu Alfa? - Pregunto suavemente, sonriéndole al menor, para calmar sus nervios y miedo.

Yoongi había sido totalmente capaz de captar el temor de Jimin a través de su aroma, algo que lamentablemente Namjoon no había logrado con éxito ninguna vez. Las razones eran más que claras, Min Yoongi es el destinado de Jimin y Namjoon no lo es, claramente se le facilitaría más al Alfa menor, sentir todo del Omega detrás de él que a Namjoon.

Jimin no sabía que responder. Su vientre dolía aún, su lobo necesitaba más la cercanía y aroma a Chocolate amargo y madera. Tampoco entendía porque Namjoon había dicho que es su Omega, pensó que quizá lo hizo porque vio a Yoongi como un enemigo y solo quería protegerlo, sentía tantas emociones en su pecho, que no sabía que responder.

- Tranquilo Jimin, responde o vete a casa, prometo no causarte problemas si no es lo que quieres. Solo quiero que estés bien, ve adentro, toma un baño frío y unos supresores, descansa y si  quieres verme, sabes dónde estaré...

- ¿De donde conoces a mi...?

- Nammie Hyung - Interrumpió Jimin, sintiendo la dificultad de sus palabras - No digas... Qué soy tu Omega - Pidió Jimin con sus ojitos nublados - Perdón... Perdóname por no llegar y hacerte esperar, pero... - Volteó a ver a Yoongi, quien en ningún momento lo forzó a nada y lo ha tratado con respeto y delicadeza - Es que él...

Jimin dejo sus palabras a medias, perdiéndose en la mirada de Yoongi. El Alfa lo tenía tan atontado que no lo dejaba formular las palabras correctas.

Namjoon fue consciente de ello. El Alfa supo desde aquel instante en que Jimin, su pequeño y tonto Jimin, ya había encontrado a su persona indicada.

Sintió su corazón doler como nunca y siendo el Alfa que es, acepto que perdió en aquella batalla, que su lindo Minnie encontró a quien necesitaba a alguien mejor que él. A su Alfa, su destino, su otra mitad, quien sabrá protegerlo mejor que como él mismo lo hizo. Namjoon no necesito mucha explicación para entender a donde quería llegar Jimin.

- Minnie - Llamo Namjoon, atrayendo la atención del menor - Él es... Tu persona, ¿No es así? - Pregunto suavemente.

Los ojitos del Omega se empañaron y con cierto dolor y alegría en su pecho, asintió suavemente hacia el Alfa mayor, mientras mostraba una suave sonrisa.

Namjoon sonrió y asintió, entendiendo todo y aceptando su derrota, pero claro que se sentía feliz por su pequeño Minnie, si él es feliz, él también lo será. Siempre y cuando aquel Alfa demuestre amor incondicional y respeto hacia su Minnie.

- ¿Puedo darte un abrazo de cumpleaños al menos Minnie? - Pidió Namjoon extendido sus brazos.

Jimin volteó a ver a Yoongi, quien con respeto se mantuvo en silencio y en ningún momento mostró alguna mirada de rechazo o incomodidad, en todo momento escuchó atento y se mantuvo al margen.

El Omega sonrió y camino hacia Namjoon, refugiándose entre los brazos de este y soltando lágrimas de dolor y alegría al mismo tiempo. El Alfa mayor dejó derramar sus lágrimas también y dejó un suave beso sobre la coronilla del Omega.

- Gracias Minnie, sabes que siempre estaré para ti, ¿Verdad? - El Omega asintió suavemente - Si me necesitas siempre estaré para ti, si alguien te hace daño, no dudes en llamarme, eres mi pequeño Minnie, mi mejor amigo y el Omega más dulce y tierno que haya conocido jamás, tienes el corazón más frágil y noble de entre todos los Omegas, al igual que TaeTae. Solo se feliz Minnie, ¿Bien?

- Gracias Nammie Hyung - Susurró el Omega - Prometo retomar nuestra salida muy pronto y espero que en ese entonces, pueda contarte que este corazón, está completo - Sonrió con melancolía el menor.

- Se que así será Minnie - Sonrió Namjoon - Déjame darte tu regalo de cumpleaños, ¿Si? - Jimin asintió.

Namjoon de alejó un poco y saco una cajita de su abrigo, al abrirla se pudo observar una linda pulsera, la cual tenía la palabra “love” entre un infinito y un dije de un patín de hielo. El Alfa lo puso en la muñeca del Omega, para después dejar un beso sobre el dorso de esta misma.

- Feliz cumpleaños mi pequeño Minnie, te quiero mucho - Susurró el Alfa.

- Gracias Hyung, también te quiero mucho - Respondió Jimin.

Namjoon sonrió y después de soltar un suspiro, levantó la vista hacia Yoongi, quien solo observó la escena en silencio y con cierta vergüenza, ya que él apenas conoce aquellos dos y aunque su lobo gruñó un par de veces, él intento mantenerse al margen y no cometer algún error.

- Espero que protejas a Jimin con tu vida, porque si jamás he cometido un delito, soy capaz de cometerlo por primera vez, si te atreves a lastimarlo - Amenazó Namjoon.

- Nam Hyung - Recriminó Jimin, con sus mejillas rojizas y sintiendo nuevamente las punzadas en su vientre bajo.

- No se... Quién eres, no los conozco a ambos como quisiera - Dijo Yoongi con sinceridad - Pero prometo jamás dañar el dulce y tierno corazón que tan hermoso ángel posee - Sonrió Yoongi.

Las mejillas de Jimin se sonrojaron más y fue entonces que Namjoon terminó por darse cuenta que dejaba a su pequeño Minnie en buenas manos.

Namjoon al estar seguro que dejaba en buenas manos a su pequeño Minnie, se alejó, dejándolos a solas y decidiendo comenzar una nueva vida y quizá en un futuro poder encontrar también a su persona indicada.

Jimin observó a Namjoon alejarse y sintió un poco de dolor en su pecho. Estuvo a nada de aceptar ser su pareja, creyó haberse estado enamorando de Namjoon, creyó que lo que sentía por él, era real, pero el Omega comprendió algo muy importante en ese momento.

Su sentimiento por Namjoon, no era amor, era dependencia emocional que sentía hacía el Alfa.

El sentimiento de Namjoon hacía él, no era amor, era un sentimiento de protección el que existía.

Ambos estaban equivocados, ambos estaban confundiendo la dependencia emocional y protección con atracción y amor.

- Lo lamento Jimin - Escuchó el Omega la voz del Alfa a sus espaldas.

- Es... La sexta vez que te disculpas - Respondió Jimin, dando media vuelta - ¿Por qué te disculpas está vez Yoongi? - Camino hasta el Alfa.

- Siento que estoy casi seguro que entre tú y ese chico existía algo, ¿No es así? - Pregunto, observando fijamente los ojitos irritados del Omega y atreviéndose a limpiar una lágrima que resbaló por la mejilla de este mismo.

- Estuvo a punto de existir algo - Aclaro Jimin - Pero siempre seremos buenos amigos y eso es lo importante ahora.

El Omega se agachó un poco al sentir una nueva punzada. Yoongi libero su aroma y con este mismo envolvió a Jimin e intento calmar sus malestares, lograndolo en cuestión de segundos.

- ¿Me permites llevarte adentro y ayudarte a calmar tus dolores un poco? - La pregunta del Alfa no tenía ni una pizca de malicia, pero Jimin no pudo evitar reír.

- Eso no sonó nada bien - Río con gracia. Yoongi sonrió al escuchar la hermosa melodía que desprendían los dulces labios del Omega.

- No, pero tú sabes a qué me refiero. Apenas nos conocemos Jimin, no sabemos nada uno del otro, más que nuestros nombres y... Qué somos pareja destinada - Fueron las palabras del Alfa.

Entonces Jimin elevó la mirada y se permitió ser impulsivo, se permitió hacer lo que su instinto le pedía. Se acercó más al Alfa y llevo sus manitas a la cintura de este mismo, para después recostar su rostro sobre el pecho del mayor y aspirar profundamente su aroma.

- Entonces es momento de conocernos, saber más uno del otro que no sean solo nuestros nombres, quizá... Es momento de que nos permitimos una oportunidad, ¿No crees?, Yoongi.

El Alfa sonrió y envolvió entre sus brazos al Omega. Yoongi estaba realmente impresionado por las decisiones que la madre luna llegaba a tomar y estaba demás decir que aquel momento era uno de los más felices y emocionantes que ha vivido a lo largo de su vida.

Sin pensarlo, conoció a su destinado y es tan lindo y perfecto, que él, día con día tratará de conquistarlo y hacerlo feliz.

Para Min Yoongi, la felicidad había llegado y se encargaría de hacer feliz a Jimin, su pequeño Omega destinado.

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¡Hola amigos!

¿Qué les pareció este capítulo?

En verdad esperó de todo corazón que les haya gustado. ¡Yo ame escribirlo!

Si soy sincera, mi idea inicial para el encuentro de estos dos era un poco diferente, quería que se despreciaran un poco al inicio, pero si soy sincera, ame mucho más esta versión. La obra es romántica, ¿Por qué hacer que se odien cuando son destinados?

Si, como ya saben, habrá drama, pero les daré las mejores escenas románticas de esta bella parejita, desde una relación primeriza, dónde todo es dulce y rosa, hasta pequeños y grandes problemas, pero como saben, odio matar a mis personajes principales, eso no sucederá, así que siempre acabará con felicidad.

Lo quiero hacer realista, pero también ficticio, ya que esto es ficción y no todo lo que suceda aquí, será realista. Pero tendrá sus detalles.

Así que estoy ansiosa por escribir más de esta bella obra. Pero la dejaré un par de días, necesito escribir de 💣 o me volveré loca xd

¿Qué les pareció la personalidad de Yoongi?🥰

¿Creen que Nam fue maduro en todo momento?

Esperen por más de estos bonitos capítulos.

Sin más que decir...

¡Nos leemos pronto chiquillos!

Bye💜

No olviden dejar su estrellita si les gusto el capítulo ⭐