Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 20

Narra Pan

Particularmente han pasado ya muchas semanas desde que me dieron el diagnóstico, nunca pensé que justamente yo que siempre he sido tan activa tendría que quedarme en una cama para reposar.

Las cosas andan bien, no me puedo quejarme, mi abuelita Milk ha venido a casa, se esmera en preparar comida tanto para Gala y Vegetto cómo para mí y por las noches cena para Trunks también, sé que quieren evitar que situaciones peligrosas sucedan, pero a la vez me parece extraño que justamente ni mi abuelo haya venido a casa transcurrido tanto tiempo, conociendolo nunca se perderia una comida de las que prepara la abuela, si es verdad que lo que más le gusta es entrenar y es posible que esté con kaio-sama él siempre le daría cómoda, pero me parece descuidado que deje tanto tiempo sola a mi abuela.

Gala: ¿En qué piensas mami? —me pregunta la pequeña, casi termino de deshacer las trenzas de su cabello.

Pan: pensaba en que no ha venido el bisabuelo —le respondo sinceramente mientras sigo enfocada en su cabello.

Me da una mirada un tanto intrigada dejándome ver la hermosura de sus ojos azules, me parece demasiada linda la manera en que sus ojos tienen la forma de los míos pero son del color de los de su padre.

Gala: ¿Ilá venil más talde? 

Pan: Hmm... Es difícil saberlo —le contesto con sinceridad— lo más seguro es que no.

Gala: no te pleocupes mami, papi sí vendla.

Pan: Si mi niña —le acaricio suave la cabeza mientras sonrío.

Ella no sabe que en realidad estoy preocupada porque de la nada todo empieza a parecer extraño, incluso Trunks, últimamente vuelve más temprano a casa y es un gesto que admiro mucho aunque a veces parece quedarse en las nubes pensando.

Aunque quizás esté exagerando todo y se comporta de esa manera porque quiere ser más dócil conmigo y con los niños ahora que estamos pasando por esta situación.

Aunque por el momento mi atención se centra en la puerta, alguien toca dos veces antes de pasar y me doy cuenta que se trata de mi abuela Milk.

Milk: Gala vengo por tí para llevarte a bañar —dice después de darme una sonrisa.

Gala: Voy abuelita —contesta la pequeña, me da un beso en la mejilla y luego corre a su lado.

Suspiro observando cómo se retiran, no hay mucho que pueda hacer en este estado, solo me puedo apoyar en el respaldo de la cama esperando a que el tiempo pase, el anochecer está cada vez más cerca, con eso la llegada de Trunks a la casa, me emociona verlo, su habilidad para hacerse el tonto llega a resultar bastante adorable, quizás es una manera como para que no me sienta mal por estar así se muestra lo suficiente empático.

Cerré los ojos un breve momento, pero al abrirlos lento noté que el pequeño Vegetto estaba en la puerta.

Pan: adelante, pasa pequeño. —volví a sentarme en la cama, él sólo desvió la mirada.

Vegetto: ¿Puedo preguntarte algo tía?

Pan: claro pequeño —lo observé fijamente, el pequeño fijó su mirada tímidamente en mí mientras jugaba con sus deditos.

Vegetto: ¿Tiene el número de Papi y de mami?

Pan: Oh no, no me dejaron número de teléfono del lugar, pero puedo llamarles a sus teléfonos seguro me contestarán.

Vegetto: ¿Cree que estén bien? Sería un viaje complicado.

Pan: no sé si sea complicado, pero fué para relajarse —el pequeño me miró con extrañeza y luego negó con la cabeza.

Vegetto: El señor kibito dijo que debíamos ser pacientes, que todos debíamos tener paciencia.

Pan: ¿El señor Kibito? —fruncí el cejo intentando buscar respuestas.

Vegetto: es el acompañante del señor Shin.

Pan: ¿Quiénes son ellos? ¿Y porqué debemos tener paciencia? —ladee la cabeza intentando entender la situación.

Vegetto: Lo que pasa es que el abuelo Vegeta y el abuelo Goku están...

Trunks: ¡Entrenando! —gritó Trunks entrando rápidamente a la habitación.

El grito que dió nos dejó desconcertados a ambos, cuando notó que lo observabamos pareció relajarse un poco.

Pan: ¿Ellos entrenando? —pregunté incrédula.

Trunks: Si mi amor, verás sé pusieron de acuerdo para eso —sonrió rascando su mejilla tomando a Vegetto en brazos.

Se acercó a mí y me dió un beso corto sobre los labios, hacia unos días que no me besaba.

Pan: Cuesta creer que ellos estén de acuerdo a entrenar.

Trunks: a mi también me sorprendió, por eso grité tan alarmado ¿Lo puedes creer mi padre y el señor Goku llendose juntos a entrenar? Estando de acuerdo.

Pan: La verdad es que no.

Trunks: Ah, por cierto te traje algo, también a Vegetto y Gala, ya lo traigo —volteó a ver a Vegetto que permanecía en sus brazos— vamos por tu sorpresa.

Me dió una mirada a mi también y sonrió.

Trunks: ya regresamos con tu sorpresa amor.

Pan: No tarden tanto amor —los observé retirarse a ambos con una gran sonrisa ¿Mi abuelo y el señor Vegeta?

Ya imagino que mi abuela debe estar muy enojada pero no quiere demostrarlo frente a mí, y ni hablar de cómo estará la señora Bulma, zeguro que echa chispas...

[...]
Narra Mirai Trunks
Unos minutos antes.

Llego a casa después de un día cansado del trabajo, llego a casa para fingir como siempre que soy el otro yo, ya que estoy tomando su lugar seré una digna versión de él, anuncio que he llegado pero nadie contesta, no está Gala lanzandose a mis brazos, ni Milk dándome miradas de desconfíanza, tampoco Vegetto haciendo escándalo por toda la casa, siento un terrible mal presentimiento, dejó todas las cosas que llevaba en las manos en uno de los sofá y subo corriendo las escaleras, corro por los pasillos desesperando, pero me detengo frente a la puerta de la habitación de Pan, la puerta está entreabierta y escucho voces.


Pan: ¿El señor Kibito? —Edcucho preguntar a Pan, mi corazón late más rápido de lo que debería y no precisamente por amor.

¿El señor Kibito? Claro que recuerdo a Kibito, estaba con el supremo kaio-Sama pero, ¿Por qué lo están mencionando?

Vegetto: es el acompañante del señor Shin. —escucho decir a Vegetto, yo solo logro preguntarme ¿Qué es lo que está pasando?

Pan: ¿Quiénes son ellos? ¿Y porqué debemos tener paciencia? —tras la pregunta de Pan puedo saber que por suerte Vegetto no ha dicho nada aún que sea perjudicial.

Vegetto: Lo que pasa es que el abuelo Vegeta y el abuelo Goku están... —mis pies se mueven por impulso propio, necesito evitar a toda costa que diga que están muertos.

Mirai: ¡Entrenando! —grito fuete, por suerte ese grito desconcierta tanto a Vegetto que solo se queda callado viéndome.

Pan: ¿Ellos entrenando? —pregunta pan incrédula, su cejo está fruncido, sé que no se trataría una mentira así de fácil pero fué lo único que se me ocurrió.

Mirai: Si mi amor, verás sé pusieron de acuerdo para eso —no puedo hacer nada más que rascar mi mejilla tímidamente, enserio ¿Tantas mentiras que pude elegir y yo elijo la más tonta?

Pero para evitar que aquel momento vergonzoso tomo a Vegetto en brazos, tengo que asegurarme que este niño no hable de más pero también tengo que asegurarme que Pan me crea, así que hago lo que menos se espera, me acerco de forma cariñosa y deposito un beso sobre sus labios, hace días que no la beso para no hacer incómodo mi lugar pero tras besarla puedo ver un sonrojo sobre sus mejillas, al menos eso la distraería.

Pan: Cuesta creer que ellos estén de acuerdo a entrenar. —me responde unos momentos después, es verdad ella no se lo creería tan fácil.

Tiempos desesperados, medidas desesperadas.

Mirai: a mi también me sorprendió, por eso grité tan alarmado ¿Lo puedes creer mi padre y el señor Goku llendose juntos a entrenar? Estando de acuerdo. —negué con la cabeza con una sonrisa irónica, fingir desconcierto tal como ella era la mejor opción.

Pan: La verdad es que no. —responde afirmando mis teorías, pero es mejor que piense que ellos actúan raro a que algo raro sucede.

Mirai: Ah, por cierto te traje algo, también a Vegetto y Gala, ya lo traigo —volteé a ver a Vegetto que permanecía en sus brazos— vamos por tu sorpresa dije intentando sonar muy animado, tanto para que no sospechara— ya volvemos amor —le dí una sonrisa y salí de la habitación.

Al salir exhalo mucho aire de mis pulmones, por kaio-sama ¿Cómo pude manejar una situación así?

Vegetto me observa espantado cómo si yo hubiera enloquecido, pero solo me relajo y le sonrio, no lo suelto hasta que estamos en el nivel de abajo, tomo la cajita con el auto de control remoto que le había comprado.

Agradezco haber pensado en ser un padre ejemplar, de esa manera pude tener un pretexto para salír de la habitación y dejar de sentir tanta presión o el aire denso a mi alrededor.

El pequeño Vegetto no deja de lado su asombro con el juguete sentado en el sofá intentando sacarlo del empaque sin dañarlo.

Me pongo de cuclillas frente a él y centra su atención en mí.

Mirai: Vegetto, respecto a lo de hace rato, no puedes decirle a Pan que el abuelo Vegeta y Goku están muertos.

Vegetto: ¿Por qué no tío?

Mirai: porque si se lo dices ella se pondrá triste.

Vegetto: pero no es bueno decir mentiras.

Mirai: lo sé bien, pero esta es una mentira por una buena causa, ¿No quieres verla triste o sí?

Vegetto: No

Mirai: entonces ¿Tenemos un trato con que no la pondrás triste? —le extendí la mano y él la estrechó con su pequeña mamita sonriendo.

Vegetto: tenemos un trato tío.

Mirai: gracias, ahora volvamos con los demás —retiré mi mano tomando las otras compras, almenos este asunto estaba solucionado, Vegetto corrió a la habitación de Gala, lo seguí y noté que Milk la estaba peinando, estaba recién cambiada y duchada al parecer.

Gala: ¡Papito! —gritó levantándose tirándose a mis brazos, sonreí recibiendola— ¡Ya llegaste!

Mirai: si mi niña, ya me encuentro acá—le dí un beso en la mejilla y ella también me devolvió uno.

Milk: Gala, no había terminado de peinarte —protesta la señora Milk, río leve y la llevo al aciento en donde estaba dejándola sentada.

Vegetto: mira lo que me trajo el tío —le menciona a Gala mostrándole el carrito ya fuera del empaque.

Gala: no es justo, yo también quielo un juguete.

Mirai: No hay problema, también traje algo para mi princesa, una princesa para otra princesa —le digo entregándole una hermosa muñeca con vestido color rosa dentro de una caja.

Gala: ¡Glacias papito! —grita emocionada recibiendola, parece que le gustó más de lo que planeaba.

Mirai: que bueno que te gustó.

Gala: selá mi juguete favolito papito.

Mirai: muy bien mi niña.

Milk: estás siendo un padre después de todo —desvia la mirada mientras yo sonrío, viniendo de ella es un gran halago.

Mirai: también traje algo para usted —le sonreí entregándole una caja roja llena de cosméticos, ella solo abre los ojos como platos observándola.

Milk: ¿Te has sacado la lotería o que Trunks?

Mirai: No, no, cómo cree, es que recibí mi primer pago en la empresa y quise consentir a todos.

Gala: ¿También a mami?

Mirai: Si, también.

Gala: llévale el regalo Papi.

Mirai: a sus órdenes mi princesa —digo retirándome del lugar.

Camino a la habitación de Pan, al abrirla observo que está sentada viendo al frente, como perdida en la nada, así que estrecho fuerte la pequeña caja y tomó valor para entrar a la habitación.

Mirai: ya volví —digo llamando su atención, voltea a verme y sonríe.

Pan: ¿Y los niños?.

Mirai: con Milk, están encantados con sus regalos —le sonrío sentandome a su lado, había olvidado lo agradable que es conversar con ella.

Justo porque es tan agradable te mantienes alejado, me recuerda mi conciencia.

Pan: Estás muy consentidor con ellos ¿Puedo saber por qué?

Mirai: Hey, seré padre otra vez, no quiero que Gala piense que la dejaré de lado —pronuncio a como hubiera pronunciado el otro yo.

Pan: ¿Incluso conmigo? Estás siendo mucho más considerado o despistado, ¿Finges ser así para que no me sienta mal conmigo misma sino más útil recordándote cosas?

Mirai: Ah... Quizás pero no, la verdad es que no sé cómo acostumbrarme a tu estado, quiero que estés bien y eso implica consentirlos —coloco una mano sobre su vientre, mis mejillas se sonrojan.

Pan: siempre eres tan tierno —me aparta el cabello del rostro sonriendo— a pesar de lo inútil que estoy siendo ¿Me amas?

Mirai: ¿Bromeas? No eres inútil, nunca me cansaré de decírtelo, eres una mujer maravillosa tanto por dentro como por fuera, tienes un corazón y sentimientos hermosos, para mí eres mi reyna, si pudiera pasaría todo el tiempo aquí contigo solo para cuidarte y consentirte —duspiro abriendo la cajita dejándole ver un dije de plata—  espero que te guste.

Pan: es hermoso, ¿Me lo colocas?

Mirai: claro —digo poniéndole el pequeño collar en el cuello, me sonríe ampliamente y sin preveerlo me planta otro beso, lo correspondo un momento y luego me separo sonrojado.

Ella se ríe al ver que Milk y los niños nos observan desde la puerta, ella con una mirada apática por cierto, por suerte Pan está ocupada riéndose de mí sonrojo como par notarlo, ah ¿Por qué me toca suplir el papel más complicado a mi?... Me preguntó con una expresión de desdén.

[...]
En otra parte del planeta.

Bra: ¿Estás seguro de esto Goten?

Goten: es la única parte de recuperar la esfera del dragón de siete estrellas. —Suspiro pesadamente observando al dragón que se la tragó.

Uub: pero... Es que, ya que no se la podemos sacar.

Goten: ¡Lo sé! ¡Es asqueroso pero tenemos que esperar! —les grito sentandome en el suelo de una cumbre observando en una enorme montaña de tierra el dragón en su nido.

N°18: No pienso participar en esto.

Krillin: Nadie quiere hacerlo pero el líder de la misión se sacrificará.

Goten: ¡Los detesto a todos menos a Bra!

Continuará...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro