Después de aquel raro suceso, me aseguré de cerrar la puerta y la ventana con seguro. Tomé un poco de ropa y me metí en la ducha. Me desvesti y comencé a lavar mi cuerpo. De pronto escuché un ruido en mi habitación. Cerré la llave y salí a ver que había ocurrido.

.....

Abrí mis ojos lentamente esperando despertar al lado de mis padres en el cielo. Pero me sorprendí al ver que estaba en la cama una habitación. Traté de levantarme, pero me dolió. Toqué mi cuello, tenía un vendaje alrededor de el. Estaba un poco mareado y sentía mi presión baja. Mi visión se volvió borrosa. Me giré lentamente y me caí de la cama. Empecé a escuchar el sonido de gotas de agua cayendo en el suelo detrás de una puerta. Se detuvieron. Traté de levantarme, pero mis náuseas no me lo permitían.

—¿Estás bien?— dijo una voz delante de mi.

Levanté la mirada, pero apenas y pude distinguir los colores. Sentí unas manos ayudandome a sentarme en la cama.

—Así que... ¿No piensas hablarme?— continuó la voz —¿Ni siquiera para darme las gracias?—

—¿L-Las gracias?— pregunté.

—Te salvé la vida.—

Mi vista comenzó a aclararse de nuevo. Pude ver el rostro de aquella persona. Me asusté.

—N-No...—

—Tranquilo, tranquilo. No te haré daño.—

—¡Alejate de mi!—

Aquel monstruo me dedicó una sonrisa. Varias lágrimas inundaron mis ojos, pero no dejaría que salieran. Tomé una almohada y se la arrojé en la cara.

—Oye, calmate— dijo algo molesto.

—¡Vete! ¡No sabes por cuantas cosas he pasado! ¡Preferiría estar muerto a que un vampiro me hubiera salvado la vida!—

No pude más, las lágrimas resbalaban por mis mejillas. El sólo me abrazo. Traté de alejarlo de mi, pero un vampiro tiene la fuerza de 10 hombres, así que no pude.

—Si se que has pasado por muchas cosas por culpa de mi especie. Y realmente te pido disculpas— se separó de mi. —Te prometo que no te haré daño y te protegeré. Además creo que lo que necesitas en este momento es un amigo, ¿no lo crees?—

Por fin me digne a mirarlo a los ojos. ¿Pero qué diablos estaba diciendo? Por culpa de ellos vi a mis padres morir frente a mi, me separaron de mis amigos y sigo sin saber si están vivos, y perdí mi libertad. ¿Cómo voy a ser capaz de perdonar a uno de ellos y ser su amigo si me han dañado tanto?

—Confía en mí— me suplicó.

—¿Por qué he de confiar en ti?—

—Porque te salvé la vida, porque no te he hecho daño en estos... 10 minutos, porque te he pedido disculpas—

Todas eran buenas razones. Pero seguía sin confiar. Sabía que si no respondía algo rápido, el podía mandarme al calabozo o chuparme la sangre. ¿Realmente quería morir de esa forma?

—De acuerdo, seré tu amigo— ¡¿pero qué acabo de decir?!

—¡Perfecto! Y dime, ¿cómo te llamas?—

—Lloyd Garmadon—

—Que raro nombre. Yo soy Kai Smith, príncipe de los vampiros. ¿En qué año naciste, enano?—

—Me llamo Lloyd, L-L-O-Y-D.—

—Perdoname, Lloyd—

—Está bien. Nací en el 850, ¿y tu?—

—En el 605. Sabes, Lloyd, eres bastante joven—

—Y-Y tu demasiado viejo—

Kai soltó una carcajada. Lo miré extrañado. De pronto tocaron la puerta.

—Kai, necesito que salgas unos minutos— dijo una voz aguda del otro lado de la puerta.

—Ya voy, Nya— respondió Kai de mala gana. —¿Crees poder quedarte aquí e intentar no escapar?—

No tenia elección. Este era el lugar donde habían más vampiros. Si trataba de escapar, estaría muerto.

—De acuerdo— suspire pesadamente.

—Gracias, Lloyd— dijo Kai mientras salía de la habitación.

.....

Salí de mi habitación y me recargue en la puerta suspirando ligeramente. Nunca había visto unos ojos tan verdes y vivos como los suyos. Su piel es tan pálida como la nieve. Sus labios son rojos como la sangre, y por alguna razón me provocan tratar de besarlos. ¡¿Pero qué demonios me pasa?! Jamás había visto un humano como el en mis 245 años y me está volviendo loco.

—Kai, deja de babearte encima— dijo mi hermana limpiando mi boca con un trapo.

—L-Lo siento—

—¿Te divertiste con tu mascota?— pregunto a lo que yo la miré incrédulo. ¿Cómo podía decirle así a la cosa más bella del mundo? Espera... ¿Qué estoy diciendo? —Sólo bromeo—

—¿Qué querías decirme, Nya?—

—Sé que no te gustará, pero la familia Chen quiere formar alianzas con una boda—

—Wow, espera, ¿qué no esa familia tenía serios conflictos con la nuestra?—

—Si, lo sé. Pero ahora que el padre ha muerto y su hija vio lo que hicimos con la población humana, quiere proponernos una alianza—

—De acuerdo, pero Skylor es hija única, ¿acaso quiere...?—

—Así es, Kai. ¡Ella quiere casarse contigo!—

—Espera... No, no puede ser—

Yo realmente detesto a Skylor. Me acosa cada vez que estoy con ella. Y ahora que parece que encontré el amor, ella quiere obligarme a pasar el resto de mi vida a su lado.

—Disculpame, Nya. Pero no lo haré. No me casaré con ella—

—Pero Kai, es una gran oportunidad, las guerras acabaran para nosotros—

—Lo siento, Nya. Pero no lo haré. Y no hay nadie que me pueda obligar —

Regrese a mi habitación y cerré la puerta de un portazo. Sentí una mano tocar mi hombro. Me giré y me sorprendí al ver a Lloyd detrás de mí. El rápidamente apartó su mano al ver lo furioso que estaba.

—Estoy bien, pequeño. No te asustes— Le revolvi el cabello suavemente.

......

Continuará...