Denji iba caminando con Nayuta entre sus brazos.

La pequeña niña estaba comiendo algunas gomitas y de vez en cuando le daba de comer también a Denji el cual aceptaba gustosamente el caramelo.

Recientemente había terminado con su trabajo de cazar demonios, aunque ese día no hubo mayor cosa, por lo que terminó rápido como su deber.

Y lo agradecía puesto que ahora debía de llevarse a la niña consigo ya que no podía dejarla sola en casa o con kishibe.

Y esto se debía a que Nayuta cada vez se aferraba más a la idea de estar con el en todo momento.

Afortunadamente no le pedía entrar con el al baño porque eso ya sería el colmo.

Pero ahora ella estaba detrás de él en todo momento, y eso de cierta forma lo agobiaba puesto que se sentía acorralado.

Ya no tenía tiempo para el, aunque tampoco es que lo necesite puesto que su vida se compone entre cazar demonios, cuidar a Nayuta y vivir en la vagancia.

Aun así, le gustaría tener un pequeño espacio para el, aunque no lo utilice para nada.

- quieres otra gomita? -

- no gracias... Te las compre a ti, así que cometelas tú. -

- de acuerdo... Pero estas seguro que no quieres una? -

- seguro Nayuta... Gracias. -

- seguro seguro o me estas mintiendo? -

- seguro seguro.-

- hmm, bien. - dijo la niña la cual siguió comiendo sus gomitas tranquilamente hasta que 5 minutos después, volvió a preguntarle al rubio si quería gomitas, a lo cual, el por no seguir con el mismo tema, terminó por aceptar. -

- y ahora a donde vamos? -

- no lo se... Supongo que iremos al centro comercial... Necesito comprar la comida de la semana.-

- Me puedes comprar una paleta? -

- Nayuta, ya hemos tenido esta conversación muchas veces. Siempre que vayamos al supermercado no es obligatorio que te compre una paleta. -

- pero quiero una paleta. Acaso tú no quieras una? -

- No... Y lo mejor será que no me pidas nada porque no voy a gastar dinero en cosas innecesarias. -

- entonces yo la voy a comprar con mi dinero. -

- tú no tienes dinero. -

- claro que si, mira. - dijo Nayuta la cual sacó de su bolsillo tres monedas. -

- de donde sacaste eso? -

- me lo encontré en uno de tus pantalones. -

- Nayuta...-

- así que en esta ocasión no pasa nada, yo te voy a invitar a una paleta. -

- creo que es lo mínimo que puedes a hacer... Ladrona. -

- Gracias. - dijo la niña la cual le sonrió al rubio. -

- ¡Eso no es un halago! -

Dicho eso, ambos fueron hasta el Super mercado, en donde Denji tomó una carretilla y metió a la niña en está para que fuera acomodando las cosas que iría a comprar.

Durante su recorrido por los pasillos, podía ver cómo Nayuta cada vez que veía algo que le gustara o que le llamara la atención, lo metía a la carreta, cosa que de cierta forma le hizo gracia al chico puesto que eso le hacía recordar las veces en las que el asistió al supermercado con Aki y con power y también metía las cosas que le gustaban para comer.

Y ahora entendía muy bien la razón por la que Aki lo regañaba a el y a power por meter cosas innecesarias, y es que no tenía dinero para estar comprando cualquier cosa.

- Nayuta, deja de meter paquetes de galletas. -

- pero yo lo voy a comprar. -

- con esas tres monedas no te alcanza, así que no lo hagas. -

- entonces pagalo tú. -

- no tengo dinero para eso... Tal vez en otra ocasión te lo compre, pero ahora no.-

- pero que no se supone que estas trabajando? Deberías tener dinero. -

- por desgracia los trabajos que tomo no son bien remunerados, y no me alcanza, además, kishibe no se ha aparecido por la casa para dejarme dinero. -

- eso significa que somos pobres? -

- creo que si...otra vez. - dijo el chico el cual suspiró de manera derrotada. -

No sólo debía de gastar en comida para el y para Nayuta, sino que también debía de comprar el concentrado para sus perros y para Nyako.

Tenía que pagar la luz, el agua, el gas etc. Por lo que no le alcanzaba el dinero para todo.

La herencia que le dejó Aki se iba mayoritariamente en eso, por lo que debía de trabajar para sustentarse.

Kishibe era otro que lo ayudaba también para cubrir los gastos de Nayuta, pero muchas veces no lo hacía puesto que su sueldo se lo gastaba en alcohol.

Así que el debía de cazar demonios para conseguir todo el dinero posible, pero últimamente la paga a sido demasiado mala.

Y eso le molestó ya que incluso en un trabajo tan peligroso como lo era la SP, no trataban bien a sus empleados.

- tks... Incluso con Makima recibía un mejor trato que con estos bastardos. -

- uhm... Mencionaste a Makima otra vez. Acaso la extrañas? -

- no... Ella ya es cosa del pasado. -

"Aunque es imposible olvidarme de ella puesto que la veo reflejada en ti todo los días." pensó el chico el cual veía a los ojos Nayuta.

Esto le provocó un escalofrío, así que mejor siguió con su recorrido para poder regresar a su casa y descansar.

Es por eso que empezó a devolver todo lo que Nayuta metió a la carrera y que no iba en su lista de compras, lo que le provocó que la niña lo mordiera pero poco o nada le importó.

Estaba tan acostumbrado a que ella lo mordiera que seguramente estaba desarrollando una inmunidad por las mordidas.

Y no sabía si eso era bueno o malo.

Denji luego se dirigió a pagar todo lo que compró, incluyendo las paletas de Nayuta que en algún momento tomó de las estanterías y luego salieron del supermercado.

En su regreso a casa, Denji observaba cómo las calles en las cuales recorría casi todo los días, estaban algo vacías.

Eso no le agradaba puesto que significaba una cosa, y es que un demonio estaba deambulando por el lugar y seguramente ya esparcieron el comunicado por los megáfonos del Distrito.

Aunque debía de decir que no eran de gran utilidad puesto que no lo logró escuchar desde adentro del supermercado, y eso era un verdadero problema.

- esto no pinta nada bien. -

- que sucede? -

- aun no estoy seguro, pero no te despegues de mi. -

- entendido. - respondió Nayuta la cual de subió a la espalda de Denji y lo abrazó con fuerza para no caerse. -

Luego de eso, Denji siguió con su camino, pero no se sentía seguro puesto que sentía que lo estaban observando.

- esto no pinta bien... Nayuta, haremos lo siguiente. Te dejaré momentáneamente en un negocio y quiero que cuides nuestras cosas. -

- porque? A donde vas a ir? -

- A ningún sitio, solo que presiento que hay un demonio cerca, así que necesito que te resguardes ya que no puedo pelear y cuidarte al mismo tiempo. -

- entendido, cuidate mucho. - dijo la niña la cual le dió unas palmaditas en la cabeza al rubio en señal de ánimos. -

Luego de eso, Denji rápidamente fue a dejar a Nayuta a un pequeño negocio de ropa y posterior a eso, regresó a la calle en donde tomó su cordón del pecho y luego lo jaló, mostrándose así, su forma de demonio.

- Uhm... Te agradezco la espera, ahora puedes salir. - dijo Denji el cual empezó a escuchar una especie de aleteo el cual incrementaba su ruido cada vez más. -

Hasta que repentinamente Denji cruzó sus brazos en forma de "X" justo a tiempo puesto que en ese instante algo lo había atacado, mandándolo varios metros lejos de donde estaba.

- al fin te encuentro motosierra. -

- tks... Y tú quien Diablos eres? No recuerdo a ver visto algo tan feo en mucho tiempo. -

- Soy el demonio Avispa... Y estoy aquí para arrancarte el corazón. -

- si... No es la primera vez que escucho esa mierda. Solo espero que estés listo para lo que se viene. -

- El que tiene que estar preparado eres tú. Después de matarte, recibiré una recompensa de parte del demonio de la obscenidad. -

- Pues buena suerte con eso. JAJAJAJAJAJA. - dijo Denji el cual empezó a reírse frenéticamente mientras se lanzaba al combate. -

Nayuta estaba sentada en el piso mientras observa su paleta a medio comer.

Estaba preocupada puesto que ya había pasado mucho tiempo y Denji aún no iba por ella.

Quería estar con el y ayudarlo pero no podía puesto que era muy débil y solo lo molestaría a el, o eso es lo que pensaba.

Así que lo mejor que podía a hacer en ese tipo de situaciones era comportarse correctamente y esperar a que el rubio fuera por ella.

- Uhm... Hola pequeña, como estas? -

Nayuta al escuchar eso, volteo a ver de quien se trataba y observó a un chico de cabello negro el cual le sonreía de manera amable.

- eh? Y tú quien eres? -

- oh, lo siento por no presentarme como se debe... Me llamo Yoshida y soy un cazador de demonios privado. -

- hmm, tienes el mismo trabajo de mi papá. -

- tú papá.... Puedo saber cómo se llama el? -

- se llama Denji, y es muy fuerte. -

- eh? Osea que ese tonto tenía una hija y nunca lo mencionó... Dime, cuantos años tienes? -

- tengo 5, casi 6.-

- eso significa que denji te tuvo a los... No me jodas. - dijo Yoshida totalmente sorprendido por la revelación. -

El había llegado hace poco al lugar puesto que había escuchado la alarma que anunciaba que había un demonio cerca, y al ver a Nayuta sola quiso saber si estaba pérdida.

Pero jamás se imaginó que ella fuera la hija del chico al cual conoció hace mucho tiempo cuando lo contrataron para protegerlo.

- oye... Puedo saber quién es tu mamá? -

- No lo se, no lo recuerdo, solo se que el viejo kishibe me llevó con el y ahora vivo con mi papá. -

- kishibe-san... Un señor de aspecto acabado? -

- Si, así es, lo conoces? -

- algo así, aunque hace mucho que no lo veo. - respondió Yoshida el cual ahora estaba con más dudas que respuestas. -

En eso, la puerta del negocio de ropa fue abierta, mostrando así a Denji el cual iba caminando con normalidad, pese a que su hombro tenía un agujero enorme el cual se estaba regenerando poco a poco.

- malditas avispas... Un día de estos las eliminare a todas. -

- ¡papá! ¡Regresaste!- dijo la pequeña niña la cual corrió hacia Denji y salto encima de él, sin importarle que este estuviera manchado de sangre. -

- si... Espero que no te hayas metido en problemas. -

- para nada, de hecho, conocí a un amigo tuyo. -

- un amigo mío? Pero si todos están muertos. -

- oh vaya, me lastimas Denji-kun. Acaso ya te olvidaste de mi? - preguntó Yoshida el cual se fue acercando al rubio quien lo veía seriamente. -

- Uhm... Tu eras aquel chico el cual tenía que protegerme y no lo hizo? -

- como que no? Yo me enfrente a la señorita Quanxi para que no te hiciera nada. -

- si claro. Lo único que recuerdo es que aquella vieja loca me cortó la cabeza, así que no, no fuiste de utilidad. -

- bueno, enfrentate a ella, vamos a ver si después de eso es así de fácil. -

- el día que la encuentre la vencere, por ahora está desaparecida. -

- Uhm... Quien es Quanxi? -

- es una mujer la cual le dió una paliza a ese tipo. -

- y también le cortó la cabeza a tu papá.-

- eh? Eso quiere decir que ella es mala? -

- yo no diría que mala. Solo cumplía ordenes. En realidad es una buena mujer. - dijo repentinamente kishibe el cual entró a la tienda de ropa, llamando la atención de los tres los cuales vieron al viejo canoso de distintas formas. -

Yoshida lo vio con una pequeña sonrisa, mientras que Denji lo vio con un ceño fruncido, y Nayuta lo vió de manera neutral.

- oh viejo de mierda, en donde demonios has estado en todos estos días? -

- si... Viejo de mierda. -

- ¡Nayuta! No digas groserías. -

- lo siento. -

- Es bueno verlo otra vez kishibe-san. -

- si... A mi también me da gusto verlos a los tres sanos y salvos... Bueno, al menos ustedes dos, puesto que no puedo decir lo mismo de ti Denji. -

- tks... Eso no importa, mejor dime, en donde estuviste en todo este tiempo? -

- Pues ya sabes, he estado aquí y allá, de un lado a otro, de arriba abajo... En todos lados realmente. -

- eso es interesante kishibe-san. -

- verdad que si Yoshida? Es una pena que este mocoso no lo vea así. -

- nosotros ya nos vamos, nos vemos viejo... Y que no se te olvide dejarme el dinero del mes. -

- adiós. - dijo nayuta la cual se despidió de ambos con su mano mientras se aferraba a Denji el cual se marchó de ahí, sacándole una sonrisa a Yoshida y un largo suspiro a Kishibe.-

- entonces... En verdad es su hija? -

- algo así... Aunque hay mucho más detrás de eso. -

- entonces te escucho. -

- bien... Todo empieza en un viaje que hice a China para encontrar a Quanxi... Ahí encontré a una niña un tanto peculiar. - dijo Kishibe el cual empezaba a caminar junto con Yoshida mientras le relataba la historia de Nayuta. -

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Lo siento, tengo un pequeño bloqueo mental y por eso no he actualizado más seguido jaja.

Nos vemos en la próxima. ^^