Estaba en la sala, eran las dos de la mañana, no tenía sueño así que estaba aprovechando para ver algunas cosas del trabajo. Desde ayer no puedo dormir, tuve una discusión con Nancy de nuevo, pero eso no me importa, lo que me importa es Yoongi y él me evita, sé que vio mi mensaje, sé que salió, lo pude sentir del departamento, pero nunca salió a verme, eso me dolió. Necesito verlo a como de lugar.

Ya me estaba dando algo de sueño pero en eso recibí una llamada, era Jimin, contesté rápidamente pensando en que algo había pasado con Yoongi, de solo pensar eso mi cuerpo se estremecía de miedo.

— Papá... — escuché la voz de mi hijo a través de la línea

— Dime Jimin, no es común que llames tan tarde... de hecho ni llamas, solo por lo de ayer, ¿Pasó algo malo?, ¿Está bien... Yoongi? — pregunté mientras estaba en mi laptop, viendo algunos papeles de mi trabajo

— Yo... quería invitarte mañana a mi boda — dijo dejándome en shock — va ser algo sencillo, y sé que no tenemos la mejor relación, pero luego de lo de Yoongi con su papá y tía he pensado las cosas, me gustaría que vengas mañana, es importante para mí — sonaba contento

— ¿Te casas mañana...? — pregunté sin salir del shock

— ¿Pap...? —

— ¿Dónde será? —

— En la iglesia del centro... claro que será por la mañana, nueve. Ya todo esta organizado, será simple... pero no quiero a Nancy aquí y sé que Yoongi también quiere lo mismo —

— Yoongi... — dije pensando en él

— Est... —

— Me tengo que ir — dije colgando

Se casaba, se casaba mañana, con mi hijo, se iba a alejar de mí. Era muy tarde para salir, y sé que aún si voy ahora él no saldrá, así como ayer.

No pude dormir esa noche, estuve toda la noche pensando que hacer, no podía dejar de pensar en Yoongi. Apenas vi el cielo claro salí, vi a Nancy en la sala pero no me importó.

— Hoseok debemos hablar — la escuché decir pero no me detuve y salí de casa

Nada me detendría pensé, pero el maldito tráfico no estaba en mis planes.

○●○●⊙●○●○

En solo tres horas era la boda, estaba alistadome para cuando el auto llegara, Jimin no estaba, nos veriamos en el altar. Me estaba poniendo una orquilla en el cabello cuando recibí una llamada, pensé que era Jungkook pues él me había dicho hoy muy temprano que tal vez vendría, yo lo quería aquí, quería a alguien de mi familia a mi lado, pero no era él llamando, era mi mamá.

— Aló ma... —

— Maldita perra — dijo sin dejarme terminar

— No voy a permitir que me hables así, no más — dije listo para colgar

— Sé que eres tu la puta amante de Hoseok — dijo dejándome frio — sé que eres tú maldita sea —

— No-o... — dije en voz baja, sintiendo mis manos sudar frío

— Tengo pruebas Yoongi, maldita perra, me las vas a pagar —

— Mam... —

— Te odio Yoongi, siempre robandote lo que es mío, pero ten algo por seguro, solo fuiste un aguj... —

— Lo disfruté — dije interrumpiéndola — lo disfruté mucho mamá, es un hombre con un gran apetito sexual, no sabes como se mueve en la cama — dije viendo en el espejo mi rostro, viendo mi sonrisa y mis lágrimas bajar

No podía ocultarlo, ya lo sabía y cualquier cosa que yo dijera no importaba, ella lo sabía, todo estaba acabando, y si ella decía que era un perra era cierto, ella y yo lo sabíamos, pero ella no sabía algo.

— Maldito — la escuché decir con odio — te odio tanto —

— Mientras tú dormias él iba a mi cuarto y lo haciamos mamá, cada noche, cada tarde o día en el que no estabas cerca, él me sostenía entre sus brazos... no a tí, porque él me ama a mí y no a tí, porque él te va a dejar para irse conmigo, porque tú nunca lo tuviste, nunca lo harás, yo sí — dije sintiendo mis manos temblar, mi corazón no dejaba de latir con fuerza — ahora sí me puedes llamar maldita perra, ahora si tienes una razón para hacerlo, porque yo conseguí a Hoseok, no tú —

— ¡TODO EL MUNDO LO VA SABER!, ¡JIMIN LO SAB...! — colgué, no había más caso escucharla

Sabía que en algún momento el hilo de mentiras caería, sabía que todos se entrarían, pero no lo esperaba el día de mi boda, es un mal día hoy sin duda.

— Lo siento mucho Jimin... —

Sabía que tenía que hacer, sabía que arreglaría todo, me puse de pie y alisté mis cosas, debía irme con Hoseok, él vendría por mí, yo lo sé, porque él me ama.

— Espero que llegues rápido — dije viendo por la ventana, esperandosu llegada, saqué mi celular y llamé a Jimin, debía de acabar con esto

— Yoon... —

— Te he sido infiel... Jimin, no me voy a casar —

○●○●⊙●○●○

Estaba por llegar, solo unas cuadras más y ya estaría ahí, desde que salí solo recibía llamadas de Nancy, no respondería, debía ir por Yoongi.

— ¡YOONGI! — grité para tocar la puerta, un simple toque hizo que la puerta se abriera

Sin pensarlo dos veces entré, busqué con la mirada a Yoongi, lo vi sentado al frente de un tocador, tenía un hermoso vestido blanco, un hermoso vestido de bodas. Él sonrío cuando me vio y se puso de pie.

— Sabía que vendrías — dijo volteando a verme sin borrar aquella sonrisa

— Yoongi... — dije acercándome a él, pero paré al sentir de nuevo la llamada de Nancy, estaba harto de sus insistencias

— Hoseok... — dije Yoongi acercándose a mí

— No deja de fastidiar — dije viendo la pantalla de mi celular

— Debe de estar furiosa — dijo pasando sus manos por mi cuello — ya lo sabe —

— ¿Qu-qué? — pregunté alejándolo de mí

— Ya lo sabe, me llamó y se lo dije, no podía ocultarlo Hoseok, ahora sí podemos irnos a vivir a la casa que me prometiste — dijo sonriendo

— Yoongi... —

— Debemos irnos, tú viniste para eso, para irnos, para tener nuestra casita, nuestros perros, nuestros hijos... — dijo sin dejar de sonreír — Hoseok... viniste por eso, ¿Verdad?, tú viniste por mí... — dijo borrando su sonrisa poco a poco

— Yo... no sabía que ella lo sabía, yo... —

Mi idea era irme con él, pero ahora mismo me acabo de dar cuenta de algo. No podía, yo no podía, si me iba con él mi hijo sería herido, no pensé en él, pero ahora me doy cuenta del error, no puedo irme con Yoongi, está mal.

— Hoseok... —

— No puedo — dije volteando para intentar irme, pero fui detenido por la mano de Yoongi

— ¿Porqué?, ¿A qué le tienes miedo? —

— Yoongi... — dije volteando a verlo — te vas a casar con mí hijo... no puedo, es mí hijo —

— ¿Y yo qué? — preguntó soltándome — ¿Yo qué Hoseok? —

— No puedo hacerle eso, él te ama —

— Tú-ú también... ¿O no? — preguntó alejándose de mí

— Yoongi por favor... — dije intentando hacerle entender

— Ella lo sabe y se lo dirá, no podrás hacer mucho, el daño ya está hecho Hoseok — dijo viendo hacia la ventana — el auto de Jimin está aquí — dijo sonriendo — ¿Qué harás Hoseok? —

— Yoongi... —

— Solo podrás tener a uno, Hoseok, ¿Qué harás? —