— Hoseok... — dije mientras caminabamos por una feria cercana

— Dime — dijo agarrándome de la mano

— ¿Qué le diremos a mi mamá? —

— ¿Sobre? —

— Sobre que debería estar en el instituto, pero estoy aquí — dije sonriendo al ver como hizo un gesto raro

— Pues... yo también estaba pensando en eso — dijo riéndose — pero eso no importa por ahora — dijo besándome

Nos pasamos toda la mañana jugando todos los juegos de la feria, Hoseok me compró un lindo peluche de caballito, era demasiado tierno, ambos luego cuando ya teníamos hambre, fuimos a comer a un restaurante cercano, era agradable el lugar.

— ¿Ésto es una cita? — pregunté sentándome al frente de Hoseok

— Lo es — dijo agarrándome la mano — somos aquí solo una pareja más —

— Lo somos — dije sonriendo

Comimos y luego de eso fuimos a pasear, no teniamos preocupaciones, Hoseok me abrazaba y besaba libremente.

— Me siento tonto — dije recostando mi cabeza en su hombro

— ¿Porqué? — preguntó mientras metía un poco de algodón de azúcar a mi boca

— Me siento así... raro — dije cerrando mis ojos

— Creo que debemos de volver — dijo él suspirando — el cielo ya oscureció hace mucho, ahora si tendremos problemas —

Corrimos hasta el auto y rápidamente partimos, ambos habiamos dejado nuestros celulares en el auto y cuando prendí el mío vi todas las llamadas perdidas que tenía, de Jungkook, de Namjoon y de mi mamá. También habían mensajes, de Jungkook hablaban de comprar ropa, de Namjoon sobre el proyecto, de como estaba y lo mucho que me amaba, el de mi mamá solo decía una cosa.

— ¿Has visto a Hoseok? — dije leyendo el mensaje

— ¿Nancy? —

— Ella misma — dije apagando mi celular

— No importa — dijo él acercándose a mi para besarme — no te preocupes por eso —

El resto del viaje estuvimos hablando de cualquier cosa, cosas muy absurdas.

— No estoy viejo — dijo Hoseok riéndose

— Ayer te vi una cana — dije riéndome por su cara — seguro tienes más —

— Pues me siento bien con mi apariencia, para mi edad puedo decir que estoy muy bien conservado, mis amigos están peor —

— Eso s... — no terminé porque pude ver a mi mamá parada con cara de pocos amigos fuera de la casa — mierda —

— Te he dicho que no digas malas palabras Yoongi —

— Pero mira — dije señalando sutilmente

— Mierda — dijo él estacionándo el auto afuera de la casa

Bajamos en silencio, podía sentir la mirada de ella sobre mí, me estaba matando con la mirada, ella no dijo nada y abrió la puerta, ambos pasamos en silencio hasta que la bomba estalló.

— ¿¡Dónde estabas!? — exclamó ella viendo a Hoseok

— Me distr... —

— ¡Seguro fuiste tú! — exclamó señalándome — ¿¡Acaso eres consciente de lo que haces!? — exclamó acercándose a mí

— Nanc... —

— ¡Estoy pagando tus malditos estudios y no veo que pongas tu empeño! —

— Tú no los pagas — dije en voz baja — mi papá lo hace, tú nunca me has dad... — no terminé de hablar al sentir su mano impactar sobre mi mejilla

— ¡No me respondas! — exclamó jalándome el cabello y yo la empujé de inmediato

— ¡Nancy! — exclamó Hoseok poniéndome detrás suyo — ¿¡Qué carajos de pasa!? —

— ¡Me pasa que marido prefiera pasar tiempo afuera cuando yo me encuentro a dentro! — exclamó furiosa — ¡Y éste mocoso te distraes!, ¡Trato de acercárme a ambos y me rechazan! —

— ¡Solo llevas días con nosotros! —

— Y ya me estoy hartando, tú bebiendo sin control y el otro inútil rechazándome como a una estupida... ambos me estresan — dijo ella yendo a encerrarse en su cuarto

— ¿Estás bien? — preguntó Hoseok volteando a verme

— Quiero dormir — dije queriendo estar solo, él solo empezó a sobar mi mejilla

— Te golpeó fuerte, tu mejilla esta muy roja — dijo viéndome preocupado

— No pasa nada — dije negando con una sonrisa

Hoseok me abrazó y me dijo que más tarde iría a mi cuarto, yo subí y me cambié para luego echarme a esperar su llegada.

— Está dormida — dijo él acercándose a mí

— Que bueno — dije sentándome para acercárme a él y abrazarlo

— Tengo una sorpresa para tí — dijo haciendo que me separe de él

— ¿Una sorpresa? —

— Lo compré mientras jugabas a los bolos en la feria — dijo sacando una cajita negra de su bolsillo — míralo y dime si te gusta — dijo entregándome la caja

Lo miré y sonreí, me sentía feliz por recibir cosas así de él. Al abrir la caja vi una cadenita dorada, habían dos letras en esa cadena, J y Y.

— ¿J? — pregunté sin entender de donde salía

— La J de Jung — dijo riéndose — no puedo poner el inicial de mi nombre.. es arriesgado — dijo besándome — ¿Te gusta? —

— Mucho — dije sonriendo — pónmelo — dije volteándome

— Bien — dijo pasando sus manos por mi cuello, de inmediato sentí la fría cadena caer sobre mi cuello — listo — dijo besándome el cuello

Me eché boca a bajo y alcé mi trasero restregandolo contra él, Hoseok tampoco se quedó atrás, él daba pequeñas embestidas.

— Hoseok... — suspiré

De inmediato escuché el sonido de su cierre y sentí como mi short era bajado, dejando mi culo al aire. Sin decir nada Hoseok metió sus dedos dentro mío y empezó a dilatarme, unos minutos después sentí el lubricante chorrear por mis piernas, luego de eso él sacó sus dedos y sentí como empezó a meter la punta de su pene.

— Con-condón — dije volteando a verlo y él solo gruñó en respuesta

Rápidamente se lo puso y volvió para meterse dentro mío sin compasión.

— Oh — gemí cuando lo sentí tocar mi útero, de inmediato me empecé a mover en circulos y él a embestirme lentamente

Las embestidas eran lentas para no hacer demasiado ruido, eran lentas, pero duras, Hoseok sabía como hacerme delirar, salía por completo de mí y entraba con fuerza.

— Eres delicioso — dijo mirándome

— Ho-hoseok — gemí cuando lo sentí moverse más rápido

— Párate — dijo saliendo de mí

Rápidamente me puse de pié, podía sentir mi ano contraerse dolorosamente en busca de su mienbro dentro mío, lo vi recostarse en la baranda y yo me acerqué a él para sentarme encima de él.

— Uhg, uhg, uhg — gemia mientras saltaba encima de él

Para callar mis gemidos él me besaba, pero habían ratos en donde eso no era suficiente, él empezó a morder mis pezones con desesperación y eso me dificultaba estar en silencio.

— Hose-hoseok — gemí jalandolo de los cabellos, queriendo que deje de hacer eso, pero él no parecía entender — me voy a venir Ho-hoseok — dije cerrando mis ojos

— Hazlo — dijo lamiendo mis pezones, ya los sentía hinchados

Me corrí manchándolo y él también se vino en el condón, su nudo se formó adentro mío y tuve que abrazárme a él por el dolor.

— Shhh, shhh, ya va a pasar — dijo sobando mi espalda

— Cada día lo siento más grande — dije moviéndome un poco

— ¿Así? — preguntó para empezar a besarme

— Sí — dije sonriendo en medio del beso

— Te amo — dijo hundiendo su cara en mi cuello — me hubiera encantado conocerte muchos años antes... pero creo que tú hubieras sido un niño muy pequeño —

— Eso no importa ya — dije rascando su cabeza

— Sí importa, eso cambia todo —