— Llegas tarde Yoongi — dijo mi mamá abriendo la puerta

— Sí... tuve cosas que hacer —dije sin interés en lo que decía

— Hoseok fue muy amable en irte a recojer y tú solo lo dejaste plantado — dijo molesta

— Nancy basta — dijo Hoseok saliendo de la cocina

— Sí, basta los dos, ya soy mayor de edad y si quiero puedo desaparecerme un año — dije pasando por su lado para encerrarme en mi cuarto

Dormir no estaba en mis planes, no podía aunque quisiera, a la mañana siguiente desperté y salí corriendo sin siquiera desayunar, no quería estar con ellos. Cuando llegué al instituto Namjoon me sorprendió con un enorme oso de peluche.

— Feliz aniversario Yoongi, es nuestro día uno — dijo sonriendo

— ¿Día uno? — pregunté sin entender

— De nuestra relación obviamente — dijo abrazándome

Una relación, de una noche entre sábanas una relación salió a flote, pero no fue para nada buena, y es que Namjoon es asfixiante, no me dejaba ni ir al baño solo, siempre está abrazándome y besándome, incluso en la salida.

— Namjoon basta, tengo que irme — dije intentando separarlo de mí

— ¿Y si vamos de nuevo a mi casa? — preguntó pasando sus manos por mi trasero

— Yo cr... —

— ¡Yoongi! — escuché la voz de Hoseok

Me sentí molesto al escucharlo, así que agarré a Namjoon y lo besé en frente de todos, un beso para nada inocente.

— Mañana nos vemos — dije separándome de él para ir hasta el auto

Cuando subí Hoseok no dijo nada, pero lo veía molesto, cuando llegamos a casa vi a mi mamá, simplemente subí a mi habitación y me volví a quedar otra noche sin comer, pero ya no más, tuve que salir siquiera a comer un pan duro, estaba bajando cuando de pronto escuché algo.

— Dijiste que lo dejarías — escuché la voz de mi mamá — yo estoy dejando de trabajar y tú deberías dejar el alcohol, ¿Ahora qué te agobia?, ¿Porqué vuelves a lo mismo? —

— Déjame solo Nancy —

— Primero bebes por tu ex esposa muerta, luego por tu hijo caprichoso y ¿Ahora qué? —

— Nancy cállate —

— Yo no voy a aguantar tus locuras Hoseok, me separé del padre de Yoongi por una razón y era por su inmadurez, pero tú eres maduro, pero tu maldita obsesión por beber me pudre la cabeza, deja de hacerlo, ¿Crees que no me doy cuenta de que hueles a alcohol cuando vas al cuarto?, es una molestia, pero me la aguanto —

— Entonces sigue aguantando — le respondió Hoseok riéndose

— Vete a la mierda — dijo mi mamá dejándolo solo en la sala

Cuando bajé vi a Hoseok tirado en el mueble, tenía un enorme vaso de cerveza en la mano, y varías botellas a su alrededor, la sala era todo un asco.

— Yoongi-i — me llamó cuando me vio

— Me iré — dije viendo como se puso de pie todo tembleque

— No-o, no lo hagas — dijo acercándose a mí

Yo lo sostuve pues casi cae de cara contra el piso, Hoseok solo se río y se abrazó a mí, con dificultad lo llevé hacia la habitación que estaba al frente de la mía, Hoseok solo se dedicaba a olerme y nada más.

— Listo, ahora sí, duerme — dije intentando echarlo en la cama, pero él se negó

— Du-duerme conmigo — dijo sin soltarme

— Hoseok... —

— Solo dormir, no-o pido más —

Terminé aceptando y me eché junto a él, estaba rascando su cabeza, él estaba a la altura de mi pecho y no dejaba de abrazárme por nada.

— Tienes problemas con el alcohol... eso es malo — dije viendo la pared mientras rascaba suavemente su cabeza

— No pue-puedo controlarlo, cada que siento que hago algo mal... me hundo, y eso pasó contigo —

— Sobre lo nuestro... —

— No-o — dijo con la voz rota — Yoongi te herí y me-e siento horrible por eso, no quiero herirte y que t-te alejes de mí, no-o puedo dejar de pensar en tí, no... puedo imaginarme mi vida sin tu presencia, no-o quiero una vida sin tu presencia —

Estaba llorando, podía sentir sus lágrimas mojar mi pecho y escuchar sus suspiros rotos.

— Es raro... porque siento la necesidad de verte y cuando al-algo referente a tí pasa pierdo rápido el control, soy viejo y hay co-cosas que sabía manejar, pero ahora es-estoy actuando como un adolescente estúpido y hormonal — dijo riéndose, pero podía sentir como seguía llorando — te fuiste y en tan so-solo unas horas sentía perder la cabeza, no verte u olerte fue un-una tortura, luego me evitabas y no me hablabas para nada... solo que-quería beber y olvidar —

— Hoseok... — lo llamé, intentando alzar su rostro, pero él es negó — yo también estaba mal —

— Lo-o sé —

— Entonces sabes que pasará —

— No-o, no quiero eso —

— Hoseok debo de irme, me duele mucho esto — dije viendo como alzó el rostro

— Si me dejas creo que en-enloqueceré —

— Ho-hoseok — dije sintiendo sus manos en mi rostro — a mí también me duele mucho —

— Yo no la quiero, solo a tí, siempre pienso en tí — dijo pegando nuestras frentes

— Yo también lo hago — dije sintiendo mis lagrimas brotar — pero tampoco puedo irme, sé que debo, pero no pue-puedo —

— No-o llores, no — dijo secando mis lágrimas

— Está mal, pero ya no puedo pararlo — dije besándolo

— No-o — dijo separándome — huelo mal —

— No me importa eso Hoseok — dije volviéndolo a besar

Toda la noche estuvimos besándonos y dicendo lo que sentiamos, dormimos abrazados, sintiendo el calor del otro, Hoseok no paraba de repetirme que enloquecería sin mí y yo no podía dejar de sonreír, me sentía bien al escuchar eso. A la mañana siguiente cuando desperté estaba solo, me levanté y corrí a mi cuarto, me cambié y salí listo para irme, vi a mi mamá cocinar y a Hoseok leyendo un periodico, parecían una pareja feliz, aunque no lo son.

— Me iré al instituto — dije dirigiéndome a la puerta

— Te llevaré — escuché decir a Hoseok

Yo sin voltear a verlo asentí y salí de la casa mientras sentía los pasos de él atrás mío, cuando llegamos a la cochera volteé a verlo y él solo sonrío.

— ¿Estamos bien? — preguntó viéndome fijamente

— Sí — dije sonriendo

Las clases fueron estresante hoy, pronto tendríamos que presentar el avance y tenía que reunirme con Namjoon para arreglar unos detalles.

— Te amo — dijo besándome mientras dirigíamos a la salida — juntos haremos un trabajo increíble — dijo agarrándome de la mano

— Ya lo creo —

— ¿Tú me amas? —

— Creo que es muy temprano para decir eso —