Lucy estaba acostada en su cama, dormía plácidamente, pero enseguida despertó gritando de manera agobiante, suplicando que por favor se detuvieran. Quizás en su mente revivió un horrible recuerdo. Lucy logró calmarse muy rápido, pero estaba confundida, vio el celular para saber cuánto tiempo perdió el control... ¡Ya era martes! ¡Había estado 4 días sin poder salir!

La situación se le estaba saliendo de las manos, ya no sabía qué hacer, necesitaba buscar ayuda para poder librarse de las demás entidades, o al menos de Darlene. Mientras pensaba en eso, vio una USB en su escritorio con una nota que decía: "Reprodúcela, Lucyana".

Lucy la puso en su laptop y al abrirla vio que tenía dentro 1 video, cuando lo reprodujo se dio cuenta de que era ella misma, pero a la vez no, era Darlene.

—Hola Lucyana, no sé cuándo llegues a ver este video, espero sea pronto, pero si no lo haces nunca es mejor, mira, la verdad quiero anular el trato que hicimos.

—¿De qué hablas? —Dijo Lucy mientras veía el video.

—No necesito de tu talento para la actuación, puedo hacer esto yo misma. —Darlene hablaba de una manera tan tranquila que no parecía que estaba diciendo tal cosa—. La verdad es que nos va mejor desde que yo estoy al mando la mayor parte del tiempo.

—¡Eso no es verdad! —Gritó Lucy.

—Te conseguí el protagónico, me vengué de ese estúpido director extranjero que te humilló, nos hice ser el alma de la fiesta en la premier, bueno, no lo alarguemos tanto, podría seguir así todo el día. El punto es que todo eso lo hice yo, sin tu ayuda.

—Entonces ¿Estuve en la premier? —Preguntó Lucy, confundida.

—Tú solo te paraste en la película y recitaste el guion, digo, actúas bien, pero... con eso no basta, y la verdad es que la escena más conmovedora la hizo Anne, así que no te necesito. Cada vez puedo someterte más tiempo, incluso he pensado que yo soy la dueña de este cuerpo, por eso mismo fui a visitar a papá, pero él me confirmó que no era así —Decepción—. Aunque... que no haya sido así antes no significa que no pueda empezar a serlo desde ahora.

—Esta tipa... ¡Está loca! —Gritó Lucy golpeando su cama.

—Lucy... tal vez creas que lo que digo es una mentira, pero recuerda, todos vivimos nuestra propia mentira, incluso el más "realista" de los eruditos, no ve el mundo como es, sino como él mismo quiere percibirlo. Y tú, Lucyana Granty Bellatriz, te vives engañando a ti misma, creyendo que en serio puedes llegar lejos solo con "pasión y dedicación".

Lucy no dijo nada, eso le llegó bastante, tanto que ni siquiera podía refutarlo.

—Lucyana, eres patética, tuviste tanto tiempo y no lograste ningún papel protagónico en el cine, aparezco yo y en menos de un día lo obtuve —Alardeó Darlene—. Quizás ahora pienses que no es así, que te miento y que tú podrías haberlo hecho, pues, mira, hay una audición el martes, en el TEATRO NO DRAMA a las 18:30, ve ahí. Si consigues el papel protagónico te dejo el control a ti, y si no, estará demostrado que el problema no son los demás, sino tú. Espero aparezcas antes del martes y puedas ir, pero si no vuelves a aparecer nunca, por mí mejor. Sayonara, Lucyana. —Darlene sonrió cínicamente, y el video se terminó.

Lucy se sentía desafiada, pero más que nada, furiosa. No podía creerlo.

"Darlene", alguien que no llevaba ni un año con ella se atrevió a tratarla de esa manera, Lucy debía demostrarle que no la necesitaba, que podía hacerlo sola y que Darlene solo tuvo suerte.

Lucy estudió lo que más pudo del guion y luego fue a esa audición, donde ahora incluso estaban esperando su llegada, al parecer su actuación en la película fue algo tan llamativo que tenía cierta fama en el mundo del cine.

Lucy hizo su audición y... volvió a pasar lo mismo de siempre. Rechazada por negarse a ser una simple y superficial "cara bonita".

¿Qué pasó después? Fue a casa, bebió, se descontroló y terminó en el hospital. Lucy le temía a Darlene, ya no quería que volviera a salir, no le habló a nadie sobre ella, ni siquiera al Doctor James ni a Hank. Lucy tenía la esperanza de que Darlene no volviera a aparecer nunca más, llevaba varios meses sin salir, a veces hasta pensaba que Darlene no existía y solo era Matilda tratando de hacerse la graciosa, pero una noche, mientras Lucy aún estaba en el hospital, sin que nadie pudiera darse cuenta, sin esperarlo siquiera, Lucy no apareció de nuevo. Darlene se hizo con el control total del cuerpo.

Darlene, en realidad, nunca se fue, simplemente estuvo reprimida mucho tiempo, Lucy la retenía como si la hubiera encarcelado en una celda imaginaria dentro de su mente, pero cuando la personalidad de Livi desapareció dicha celda imaginaria se debilitó y Darlene pudo volver a salir. Gracias a que a todas las unía un mismo cerebro, Darlene tenía varios recuerdos del hospital: la llegada de Lucy, las terapias, los medicamentos, y sobre todo recuerdos de Hank.

Darlene sabía que Hank sería una molestia pues la promesa de salir de nuevo del hospital y empezar de nuevo era todo lo contrario a sus deseos personales, así que logró convencer a Anne y Matilda de ponerse de su lado, fue sencillo convencer a Matilda, ella ya ni siquiera quería aparecer después de lo que pasó con el padre de Lucy, Anne fue mucho más difícil de convencer, pero su personalidad frágil la hizo ceder, claro que tuvo una condición: que NO mataran a Hank, pues Darlene lo quería muerto.

Darlene ideó un plan para deshacerse de Hank, pero necesitaba ayuda, así que usó uno de sus contactos y le pidió que moviera sus influencias para enviar unos cuantos aviones de combate a realizar pruebas de vuelo cerca del hospital, Darlene observó cómo Hank enloqueció y tuvieron que sedarlo, además atacó a Joshua, el viejo conserje, eso haría que lo encerraran mucho tiempo, cosa que resultó bien, tan bien que logró su objetivo: Darlene se deshizo de Hank.

Después de lograr su cometido, Darlene, Anne y Matilda dejaron el hospital. Darlene fue a Valencia a su nominación en los Premios Goya y la película donde fue protagonista: "Samyrha Bruce (Una última oportunidad)" ganó en 4 nominaciones diferentes, entre las cuales, Darlene recibió un Premio Goya por la mejor interpretación.

Darlene se acercó a recibir "su" premio Goya y dio un breve discurso al respecto.

—Bueno, no sé qué decir, supongo que agradecerme a mí por creer en mí, sería lo primero —Dijo soltando una risa cínica—. Descuiden, solo bromeo, simplemente que me seguiré esforzando ya que este ha sido mi sueño desde niña y ahora que ha comenzado no pienso detenerme, también le agradezco a mi mejor amiga y mánager Alejandra Márquez, y mi ausencia en los días anteriores a hoy se debió a que tuve un problema de salud con un parásito, pero ya fue resuelto, si quieren algo profesional conmigo llámenla, y eso es todo, me verán muy seguido por aquí, adiós.

Darlene ahora tenía el control absoluto del cuerpo, y estaba decidida a lograr todo lo que Lucy jamás hizo, iba a crear su propio imperio desde las cenizas, y para ello, tenía lo que necesitaba: la colaboración de Anne y Matilda, Alejandra como su aliada, y la atención de las cámaras puestas sobre ella.

Darlene logró en menos de un año lo que Lucy no pudo en 3, ella logró tener bajo control a Anne y Matilda, se hizo con el papel protagónico y el premio de una película; pero las cosas no se quedaron ahí.

Darlene ahora era tendencia, una actriz joven y hermosa que con su primer protagónico ya ganó un premio tan aclamado como lo son los Goya era algo de lo que se hablaba en todas partes. Dicha difusión le ayudó a conseguir mucho trabajo, recibió llamadas de muchos proyectos y muy variados: películas, series, comerciales, modelaje, entrevistas y mucho más.

Todo esto en parte era gracias a Alejandra, ella era una excelente mánager, o eso se creía, ya que, Alejandra aprendió de las cínicas técnicas de Darlene, y se encargaba de manchar el nombre de otras actrices y modelos para que, en el momento idóneo, Darlene hiciera su aparición y las reemplazara.

Alejandra comenzó a usar estas técnicas con gente que en algún punto de su vida la lastimó, pero, poco a poco, descubrió algo excitante en crear mentiras y redadas para dañar la reputación de otras personas, Alejandra llegó a amar el destruir a otras personas para lograr que Darlene llegara a lo más alto, ni siquiera lo hacía por sí misma, todo era por complacer las peticiones de Darlene, ya que la veía como su salvadora, la única que la ayudó, y por eso, sentía cierta devoción hacia ella; Alejandra nunca llegó a enterarse que Darlene fue la que la humilló aquella noche en la fiesta, aunque Alejandra creía tener el control y ser la mano derecha de Darlene, lo cierto es que, era más una marioneta, que estaba a sus más viles servicios.

Mientras Darlene recibía más trabajo, ganaba más fama, y por ende, más dinero; ella y Alejandra lanzaron su propia línea de cosméticos; era el primer paso para tener su propio imperio.

Darlene sabía que no bastaría con Alejandra, si quería tener más poder, necesitaría más lacayos, gente que estuviera a lamer el suelo si ella se los pedía, y también, esa misma clase de gente, pero con cierto nivel de influencia.

Darlene, aplicando la misma técnica que usó con Alejandra, le dio trabajo a modelos que había perjudicado antes. Buscó a modelos cuya reputación y autoestima estaba tan manchado, que la verían como una salvadora y sentirían que le deben algo por revivir sus carreras, gente que firmaría cualquier contrato con tal de recuperar sus 15 minutos de fama.

Darlene usaba como empleados a gente cuyas necesidades básicas eran tan escazas, que aceptarían cualquier paga y maltrato con tal de poder tener un salario mediocre, esa era Darlene, quien aparentaba ser por fuera una persona benevolente y amable, por dentro era una vil arpía, la maldad encarnada, oculta detrás de una hermosa sonrisa.