—Ah, miren. ¿No es ese chico?—tres chicas asomaban su cabeza a una clase, algo sonrojadas buscando una persona en especifico. Al encontrarlo, todas se fijaron en el, pero este dormía sentado y con un libro en mano, tomando por sorpresa a las chicas.—E-En el montículo se ve completamente diferente.

—¡Pero fue increíble! ¡Seguro todos lo conocerán en el futuro!

—Entonces tal vez lo anime en secreto~.

—¡Oye, no es justo~! ¡Yo fui quien lo vio primero!

—Ah, ustedes dos, miren. Ese de ahí es el que tiene el número 19.

—¡Que lindo~! ¡Es como una niña!

~Piso de primer año, Clase 1-C~

Haruno da un leve salto en el lugar, asombrada del sonido que se hacia presente en el salón.—¡S-Sawamura-kun, otra vez estas haciendo sonidos raros!

—Tiene los ojos abiertos, y sonríe por alguna razón.

—..........Ah, el ruido cambió.

~Piso de tercer año, pasillo~

Una serie de pasos hacia a todos voltearse y empezar a animar con admiración a los 4 chicos titulares del equipo de béisbol.

—Juegan mañana, ¿verdad?

—¡Iremos a animarlos!

—¡Tetsu, batea un home-run!

—¡Masuko, te gruñe el estomago!

—¡Aúlla, Isashiki!

—¡El perro de-

—¡¿MMM?!

—¡LO SIENTO!

Los ánimos en toda la escuela se hacían sentir. Ese era el efecto de haber ganado el primer partido. La esperanza que dio la victoria solo hizo que todos animaran más a su equipo, quienes transmitían poder y orgullo con cada acción que hacían.

—¡Maldito Miyuki! ¡Por tu culpa, ahora tengo que quedarme a limpiar y organizar el salón!

—¿Eh? ¿En serio?—pregunta el de lentes riendo a la vez que Kuramochi le tomaba del cuello.

—¿Otra vez peleando?

—Pero siempre están juntos.

—No tienen amigos, esos dos.

Bueno. Casi todo el equipo.

Los chicos de tercero, caminando recibiendo los elogios, toman una escalera para bajar al primer piso, pero justo cuando toman la escalera que conectaba al piso de los de primero y segundo, se detienen en la intersección. Todo por una pelirroja parte del club, quien apoyada a la pared, dormía plácidamente.

—De nuevo esta en este sitio.—suspira Isashiki, acercándose un poco y arrodillándose frente a Kumiko, viéndole dormir.

—A Takahashi-chan se ve que le gusta esta parte.—recuerda Masuko.

—Aunque si sigue durmiendo en esa posición, tendrá dolor de espalda luego.

Ryosuske mira a Tetsu sonriendo.—Pero no puedes negar que parece estar en paz así.

Todos nuevamente la miran. Su respiración era completamente suave, como si ningún ruido del exterior la perturbara ni pudiera hacerlo. Su cabeza, aunque cabeceaba en ocasiones, estaba levemente inclinada a un lado, con su cabello moviéndose suavemente al son. Con sus pies estirados y su mano en un libro de texto, los 4 chicos no podían parar de observarla.

—Ciertamente. El verla así de cómoda me relaja el alma.

—Se muestra totalmente vulnerable y aun así no dan ganas de molestarla. Lamentablemente.

—¿Lamentablemente?—Isashiki mira a Ryosuke ante lo que dijo, algo extrañado.

—Ayer igual se durmió, ¿no?—recuerda Masuko.—Al parecer estaba muy emocionada por el partido que no pudo dormir bien y al final, cuando regresamos, se quedo dormida en el bus.

—Si. Lamentablemente lo hizo.

—Lamentablemente.

—Fue algo muy lamentable.

—¿Eh?—algo sorprendido ante las frases de sus amigos, Masuko parpadea con la boca abierta.

Flashback

Al terminar el partido, todos recogieron sus cosas y se dirigieron al bus, el cual una vez que estuvieron todos empezó su camino de regreso a la escuela de los chicos. Incluso aun pasando 15 minutos, aun quedaba un largo camino.

Haruichi, sentado al lado de Sawamura, voltea a ver a este, sonriendo nervioso ante el rostro de molestia del chico.—E-Eijun-kun, ¿sabes que desde un inicio el plan era que lanzaras una sola entrada, ¿no? El entrenador dijo que Kawakami-senpai seria el que cerraría.

—¡No me quede satisfecho!—este se levanta de su asiento.—¡Aun podía lanzar! ¡Pero me cambiaron hasta cuando fue mi turno de batear! ¡Boss, yo no soy tan débil!—aunque miraba hacia el asiento del entrenador Kataoka, este parecía no inmutarse.

—Sawamura, cállate un poco. Algunos intentan dormir.—la voz del de lentes se escucha. Aunque claramente parecía querer callarlo, por alguna razón no alzaba su voz.

—¡¿Dormir?! ¡¿Quien puede dormir calmadamente con-

—Oh.—la interjección de Chris hizo a todos mirarlo. Este, sentado en el asiento al lado de Tetsu, miraba a donde estaban los asientos de Kumiko y Miyuki, por lo que todos curiosos, alzan la cabeza para ver, mientras que otros se levantan de su asiento, entendiendo el por que del pedido de Miyuki.

Kumiko, sentada en el asiento del pasillo, se había quedado dormida y, posiblemente por el movimiento del bus, su cuerpo inconscientemente se inclina y su cabeza se apoya en el hombro de Miyuki.

—¿Se quedó dormida?—sentados en los asientos de al frente y apoyándose en el espaldar, Isashiki mira el rostro de Kumiko, al igual que varios.

—Desde hace unos 10 o 8 minutos, ¿tal vez?—supone Miyuki, mirando a la chica.—Anoche ella se despertaba a cada segundo ansiosa, así que tal vez tenga algún sueño acumulado.

—Ya veo.

—Se le ve tan tranquila.

—Esto me purifica el alma.

—Ugh, debo mantenerme callado.

—Oigan, oigan. Tampoco estén alrededor de Kohai-chan mirándola dormir. Eso es descortés. Mirar a una chica dormir.—menciona Tanba notando el comportamiento de varios.—Además, Furuya igual esta dormi-

—Parece un osito polar.

—¡¿Estas despierto?!—todos ante el grito miran a Tanba y ponen un dedo en sus labios, pidiéndole guardar silencio.

—Se le ve tan a gusto y cómoda.—ríe Kuramochi, mirando sobre el asiento de Miyuki.

—Si.......................................Miyuki-senpai.

—Oh, que inusual. Por fin me das algún respeto.—puntualiza el de lentes al ver la forma de actuar de Sawamura.

—Cambie de lugar conmigo.

—Me niego.—le responde de inmediato.

—F-Fueron 8 minutos de viaje donde ella se durmió, ¿verdad? Miyuki-senpai, su hombro debe estar adolorido~. Yo tomare su lugar~.

—Me ni-e-go.

—Sawamura, no pidas imposible.—Miyuki asiente agradecido con Chris.—Si alguien tendría que sustituir a Miyuki, seria uno de tercero.

—¡¿Chris-senpai?!

—Buena frase, Chris~. Miyuki, cambiare contigo. De todas maneras, tengo una estatura similar a la leoncita.

—¿R-Ryo-san?

Algunos se extrañan ante la inusual situación que andaban creando entre ellos mismos, pero nadie se involucraba, ni siquiera el entrenador o el director Oota.

Kumiko, por su parte, siente el ruido y, quejándose levemente, abre los ojos soñolienta.—¿Cuándo me dormí?—la chica, sin darse cuenta de que se había apoyado en Miyuki, vuelve a su posición normal tallándose un ojo y voltea a ver a todos, quienes permanecieron inmóviles por un segundo.—¿Sucedió algo?

—No. Nada de nada.—dicen todos a coro, haciéndola dudar aun más.

End Flashback

—Al final Miyuki fue quien disfruto mucho el viaje.

—Ese suertudo.

—La próxima vez decidamos los asientos a la suerte.—Masuko, por su parte, miraba algo expectante a sus amigos. A veces decían o actuaban de una forma que le asombraba.

—Yu...kio...sensei.—los chicos se callan repentinamente y miran a Kumiko, quien aun parecía soñar.—Yukio......sensei......

—................................................................

—¡Ok~, hora de despertar, bella durmiente~!

—¡AUCH, AUCH, AUCH! ¡¿K-Kominato-senpai?! ¡¿Q-Qué se supone que hace?! ¡S-Suélteme las mejillas! ¡DUELE!

~Horas más tarde, Comedor, Dormitorio Seidou~

—¿Eh? ¿En serio eso paso?

Kumiko, con los ojos cerrados y las mejillas infladas molesta, asiente ante la interrogativa de Takako, quien le recortaba las puntas del cabello por pedido de la chica.

—¿Te empezó a jalar las mejillas sin razón alguna? No suena muy de Kominato-senpai.—supone Yui al lado de Sachiko y Haruno.

—Aunque si lo pensamos bien, ustedes dos tienen una dinámica......especial.—ríe nerviosa Sachiko, sin saber como describir la relación de Kumiko y Ryosuke.

—Pero, ¿por qué te jaló las mejillas de repente?

—Ni idea.—murmura aun con las mejillas infladas y agradeciendo a Takako cuando esta terminó.—Solo dormía en mi lugar usual sin molestar a nadie.

—Pero dices que los otros senpai-tachi igual lucían como algo enojados.

Dejando de inflar las mejillas pero aun con los ojos cerrados, empieza a recordar, entendiendo las palabras de Haruno.—Mmm......supongo que si, pero no entiendo que los pudo enojar.

—¿Tal vez fue algo que dijiste dormida?—Kumiko abre sus ojos mirando a su senpai de tercero.—En ocasiones podemos hablar dormidas y decir algo. *(Aunque dudo mucho que sea eso.)*

—Mmmmm, aunque diga eso, lo único que recuerdo del sueño es que estaba Yukio-sensei.

—....................................................

—Posiblemente fue un recuerdo de él......................................¿Mmm?—la chica mira a las 4 managers, que se habían quedado calladas, pero da un pequeño sobresalto al escuchar a las 4 gritar algo emocionadas.—¿E-Eh?

—¿Y-Yukio es un chico? P-Por el "sensei", ¿es mayor que tu?

—E-Eres increíble, Takahashi-san.

—¿T-Takako-senpai? ¿Yoshikawa-san?

—Takahashi Kumiko-san.—Sachiko, portando una apariencia de detective de películas antiguas, le mira directamente.—Me temo que tendrás que darnos más información al respecto.

—Umemoto-senpai, ¿qué tipo de personaje intenta imitar?

—¡Takahashi-san, cuéntanos todo!

—A-Aunque diga eso... *(¡No tengo ni idea de que hablan!)*

Las 4 chicas se sentaron en asientos frente a la pitcher, mirándola emocionadas y toma la palabra primero Takako.—¿Quién es ese Yukio? ¿Un profesor que tuviste?

Kumiko niega. No entendía nada, pero decidió contestar todo.—Es la persona que me enseño a jugar béisbol. Era un pitcher del equipo de la secundaria local de cerca de mi casa.

—Oh, entonces el "sensei" es por eso.—supone Yui.—¿Cuántos años se llevan? Recuerdo que nos dijiste que juegas desde la primaria.

Poniéndose un dedo en la mejilla, Kumiko empieza a hacer cuentas.—El iba en segundo año de secundaria cuando yo empecé a interesarme en el deporte y le pedía que me entrenara, por lo tanto......mmm, tal vez 7 años.

—¿Eh? ¿Tu le pediste que te entrenara?—parpadea asombrada Haruno.

—Si. Aunque el término correcto supongo que es "acosarlo" hasta cansarlo.—ríe avergonzada por sus antiguos actos.

—¡¿Acosarlo?!

Esperándose esa reacción, empieza a explicar.—Estaba tan conmovida en aquel entonces que quería aprender si o si a jugar. Y daba la casualidad que él vivía cerca. Por lo que empezaba a ir a su casa, esperarlo en el portón de su secundaria, mandarle cartas. De todo con tal de que me entrenara.

—Ohhhhhhhhh. Eras toda una acosadora.

—¡Sacchi!

—Estoy consciente de eso.—una lagrimita traicionera sale de sus ojos cerrados. La pelirroja no podía negar nada, pues ella misma se avergonzaba de como actuó.

—P-Pero él accedió, ¿verdad?—intentando disipar el ambiente pregunta Haruno.—T-Te entrenó por mucho tiempo, ¿verdad?

—¿Eh? Si......—Kumiko sonríe con añoranza.—Finalmente aceptó entrenarme, y no le importo si era una niña de 7 años. Fuera con lluvia o con un sol asfixiante, siempre me entrenó con pasión y sabiduría. Hubo momentos donde se convertía en mi pañuelo de lagrimas y consejero de vida. Llegaba hasta intervenir por mi cuando mi equipo me quería dejar afuera y mis entrenadores no hacían nada.—cierra los ojos ante el recuerdo de esa persona.—Quería demostrarle que podía lograr lo mismo que él y me esforzaba por no decepcionarlo. Incluso entrenando cuando el no podía enseñarme por sus propios partidos o exámenes. Mis padres se reían debido a que hasta adapte costumbres suyas. Lamentablemente, en la mitad de mi primer año de secundaria, él se tuvo que mudar, y perdimos el contacto. Pero...atesoro cada uno de los regalos y enseñanzas que me dio.

Abriendo sus ojos, mira sus manos, pero ante sus ojos, lo que miraba era la espalda que tanto le tranquilizó en ese entonces. Sonriendo, levanta su vista, pero se impacta al ver a las chicas con lagrimas en los ojos y sonrojadas. Incluyendo a Sachiko mordiendo un pañuelo, mientras que Takako solo se limpiaba las lagrimas.

—¡QUE BUENA HISTORIAAAA!

—¡Se parece a una historia de un shoujo!

—¡Uhhhhhhhhh, Takahashi-saaaan!

—¡Alejarte así de la persona que tanto estimabas! ¡Debió ser duro, ¿verdad?! ¡Tranquila, puedes hablar con nosotras!

—¿Eh? Ah, n-no. E-Estoy bien. Fue triste, pero tampoco así. *(¿L-Lucia triste? E-Están actuando de una manera muy rara.)*—siendo tomada por sorpresa completamente, Kumiko no podía dejar de ver a las chicas que actuaban de una manera inusual.

—¡No tienes que hacerte la fuerte! ¡Lo entendemos! ¡Después de todo, se trata de tu primer amor!

—....................¿Eh?

—Una persona con la que pasaste tanto, que se separe de ti y desaparezca de repente. ¡Debió ser doloroso, ¿no?! ¡Que buen primer amor tuviste!

—No. Para nada.—niega con una mano.

—..................................

—..................................

—..................................

—..................................

—..................................

—¿Eh? Espera un segundo, la conversación esta tomando un rumbo raro.—Sachiko, en representación de las managers, mira a la chica.—Este "Yukio-sensei" fue tu primer amor, ¿no?

—No. No se como se siente estar enamorada y a Yukio-sensei solo le veía como alguien a quien admirar.

—...............................

—...............................

—No............

—¿Mmm?

—¡NO CUENTES UNA HISTORIA TAN EMOTIVA PARA LUEGO DECIR ESO!

—¡WAAAAAAAH!

—¡S-Sacchi, relájate!

Takako y Haruno ríen nerviosas, viendo sentadas como Sachiko, siendo sujetada por Yui, le jalaba las mejillas a Kumiko y se voltean a ver.—Bueno, si somos sinceras, era de esperarse de Takahashi-san.

—Si. Su pasión por el béisbol es muy grande. Podría decirse que...¿su primer amor es el béisbol?

Ambas chicas se miran en silencio por unos segundos y luego rien, estando de acuerdo en lo mismo.

—...........................................................

—............................................Es...........difícil.........entrar

—Si.................

—No hay una abertura para poder entrar casualmente.

Mientras las chicas reían y hablaban dentro, los chicos afuera, sentados o apoyados a la pared, sonreían nervioso. De algún modo, el ambiente dentro les impedía dar un paso a interrumpirlo.

¿Amor? Esa era una palabra nueva de escuchar.

¿Amor por un deporte? Eso era algo que se conocía perfectamente.

Admiración por alguien fue lo que llevo a que surgiera el amor por ese deporte.

¿Sera posible que surja otro tipo de amor? Eso es algo que se tiene que ver.