CAPÍTULO XXI: COMO UN STARDUST
Luego de ese abrazo que para Neil significó mucho, su ánimo había mejorado notablemente por lo que antes de entrar detuvo a Alan solo para decirle una palabra:
-Gracias-.
-No hay de qué Neil, ¿Estás listo para ser el próximo Starman? -.
-Por supuesto que sí-. Atravesaron las puertas para encontrarse con el siguiente panorama: los gemelos estaban terminando las fases finales de la cápsula que enviarían al planeta rojo, Joan estaba calculando la cantidad exacta de ingredientes necesarios para la misión, Heiny y Benji estaban tan concentrados terminando de coser algo, apenas entraron, Benji despegó la vista del traje y la centró en Niel.
-Muchacho, quiero entregarte esto-. Le tendió el traje espacial mientras esperaba paciente que Niel diese el visto bueno, pero el chico se había quedado sin palabras, luego de un rato tomó aire mientras sonería de manera infantil y soñadora. -Y bien, ¿Qué te parece el traje? -.
-¡Está genial!, Te luciste con esto Benji-.
-En realidad, querrás decir: nos lucimos con esto-. Heiny apareció por detrás de Benji mientras hablaba para finalizar posando una mano en el hombro del otro mayor.
-Así es, hay que destacar que mi viejo amigo Heiny me ayudó-. Volvió a hablar Benji dándole la razón y devolviendo el gesto de su amigo alemán, tanto Neil como Alan se sorprendieron de que Heiny dedicara su tiempo libre a las costuras.
-Vaya, no conocía esa faceta tuya "Beerman" -. Soltó Alan mientras jugueteaba con su cabello para ocultar el asombro por lo anterior, el mayor solo sonrió y alzó los hombros.
-Ah, viejas costumbres alemanas, colega-.
-Anda, ve a probarte nuestra obra maestra-. Sin pensarlo, Neil salió corriendo obedeciendo a Benji, estaba tan emocionado que no le importaba chocar con algunos corría al baño más cercano para ponerse el traje, en el transcurso entró Nick con su café en la mano seguido por los gemelos.
-Nunca lo había visto así de feliz-. Volvió a hablar Alan, ante eso Nick bajó su bebida luego de darle un sorbo para entablar conversación con Alan.
-Creo que ya lo entiendes-. Alan lo miró con una ceja arqueada, Nick soltó una risita. -Al fin logró su sueño, de pequeño solía llenarme la cabeza de cosas del espacio-. Ambos ríen imaginando la escena.
- Ya me lo imagino, el cosmos era el pan de cada día-. Ríen de nuevo mientras Nick asiente, para ser sinceros Neil siempre que había oportunidad sacaba el tema del espacio duraba horas y horas hablando con Nick (que era muy paciente), rara vez aceptaba cambiar de tema sin protestar, al cabo de un rato Niel sale con el traje puesto caminado hacia ellos. -Ah ya volviste, ¿Cómo te sientes amigo? -.
-Con ganas de darle la vuelta al mundo en 80 días-. Respondió de lo más natural centrando su atención en Nick que lo miraba negando con la cabeza antes de abrazarlo, se soltaron para hablarse.
-Nunca faltan las santas referencias espaciales tuyas-. Ahora los tres ríen ajenos a los demás, ya que estaba terminando unas cosas. -Nunca cambias-.
-Claro que no, perdería mi esencia-. Cada gemelo se le acercó por un lado sigilosamente antes de darle buenas noticias, esperaron pacientemente y los otros dos no los delataron para no arruinar el misterio.
-Escuché que alguien está que se recorre el universo-. Neil asintió sintiendo un peso en su hombro derecho que casi lo hace caer, era Sam. -Pues estás de suerte porque ya tenemos todo listo-.
-Así es, solo falta que tú des la orden "Astroboy" -. Scott siguió el ejemplo de su hermano dejándose caer en el otro hombro de Niel con más delicadeza que Scott, iban a irse cuando un carraspeo por parte de Nick los detiene.
-Pero antes te tenemos una sorpresa hermano-. Niel abrió los ojos como platos a la espera de las siguientes palabras de Nick. -No creerás que vine solo, ¿O sí? -.
-Oye amigo-. Salió Robert hacia él tendiéndole una mano para que se hicieran un saludo especial que crearon en su estadía en Norteamérica y culminando con un fuerte abrazo y palmaditas que sonaron por todo el cuartel. -¿Emocionado? -.
-Ni te imaginas cuanto-. Con la mirada buscaba a Alice, así que al no verla se desesperó un poco con Robert. -¿Dónde está Alice? -.
-¿Buscabas a alguien? -. Neil se da la vuelta al reconocer esa voz, le da un fuerte beso en los labios para luego suspenderla por el aire y girar con ella. -¡Bájame! -. Su esposo obedece y la baja con delicadeza sin dejar de mirarla y negándose a soltarla.
-Que agradable sorpresa, gracias chicos-. Todos los que estaban ahí inclinaron la cabeza a modo de agradecimiento, de la nada una figura de un niño apareció corriendo hasta donde estaba él y se detuvo mientras tomaba aire. -Hola Jonny-.
-Hola tío Neil-. Respondió el niño mientras apoyaba las manos en sus rodillas, los padres del niño se acercaron para saludar a Neil, Anderson fue el primero en hablar.
-Escuchamos sobre la misión y decidimos venir-. Anderson se acercó a Niel para saludarlo con un breve apretón de manos ya que seguía pegado a Alice, estaba extremadamente feliz y no quería que eso acabara.
-Además, creo que para Jonny su gusto por Stark Trek fue demasiado lejos-. Todos rieron porque el niño se veía feliz en la base, se podría decir que tal vez quisiese seguir el camino de su "tío Neil" de ser el próximo James Kirk en la USS Enterprise acompañado de sus otros compañeros, se escucharon unos pasos que se aproximaban a Neil.
-No quiero arruinar tu felicidad, pero Isaac está llamando para hacer la misión lo más pronto posible-. Apareció Benji más agotado de lo normal sujetando unos papeles que indicaban que estaba listo para supervisar y tomar apuntes de la misión.
-Bueno a sus posiciones, será mejor que no lo hagamos esperar-. Habló Alan un toque disgustado mientras pensaba para sí mismo "Maldito idiota" refiriéndose al soldado, el equipo de Niel se dirigió a la pista donde ya estaba preparado, mientras que Nick y compañía tomaban asiento en un espacio reservado para ellos por cortesía de Alan y los gemelos, pero antes de que Niel entrara, Alice lo agarró de la mano y se lo llevó a un lugar aparte para quemar tiempo, leyendo las intenciones de su hermana; Robert también decidió distraer a los demás, antes de decir una palabra más Alice se abalanza contra Niel chocando sus labios en un beso cargado de pasión y deseo, atrayéndolo a ella sujetándolo de la nuca mientras estaban en la cabina.
-Cariño, tengo que ir-. Habló Niel cuando recuperó el aire separándose de ella pero sin apartar las manos de sus caderas, la tenía acorralada entre él y una pared.
-Lo sé, solo que tengo miedo-. Ante su preocupación Neil la toma de las manos de manera reconfortante. -No pasará nada, ¿Verdad? -.
-Descuida amor, tengo al mejor equipo-. Finalizó señalando con la cabeza hacia donde estaban los demás esperándolo. -Te veré luego-. Aseguró de manera tan impresionante como si quisiera retar al destino pero Alice lo detuvo tomando su mano donde tenía el anillo de compromiso.
-Antes de que te vayas, alguien quiere verte-. A lo lejos una figura femenina avanzaba hacia ellos, Niel centró más de lo normal la vista en aquella figura que conforme se fue acercando fue describiendo a su madre, tenía una sonrisa que decía mas que mil palabras.
-Mírate, por fin podrás hacer lo que siempre soñaste, estar en el espacio y explorarlo-.
-Gracias mamá, hoy es el mejor día de mi vida-. Abrazó a su madre como si no la hubiera visto en años, después de ese momento que para él pareció una eternidad.
-Estor orgullosa de ti, mi pequeño chico espacial-. Esas palabras casi le sacan lágrimas a Neil, pero se contuvo de hacerlo antes de abrazarla de nuevo.
-Gracias mamá, por fin estoy haciendo lo que quería-. Le sonrió antes de que Alice se acercara a él mientras que Alan lo llamaba con señas dada la impaciencia del soldado por llevar a cabo la misión. -Debo irme, las veré cuando vuelva, las quiero-. Se despidió y sin más se adentró al sitio que tenía designado caminando con un porte serio y con la vista al, estaban aún haciendo unas últimas revisiones para asegurar que estaba todo OK.
-Listo jefe, todo está en orden-. Habló Isaac acercándose a él casi corriendo y siguiéndole el paso, Niel solo dio una cabeceada seca a modo de agradecimiento, no tenía ganas de hablar con él, solo le importaba realizar esa misión lo más rápido para así poder estar todo el tiempo que quisiese con su amada Alice, con sus hermanos de otras madres (Robert y Nick), sus excompañeros de guerra (Anderson y Howie) y finalmente sus amigos de misión.
-Mas te conviene que sea cierto-. Alan se unió a su caminata sin quitarle los ojos de encima al soldado, lo miraba con un odio extraño, dejó eso de lado cuando Neil entró a la capsula, se abrochó el cinturón, encendió el intercomunicador, presionó unos cuántos botones para encender la capsula, acomodó su posición y por la ventana les hizo una señal de que todo estaba bien.
-Bueno que comience el conteo regresivo-. Heiny estaba a nada de comenzar a contar cuando ve que su viejo amigo Benji se dirige hacia la puerta, antes de que se vaya lo detiene sujetándolo de la muñeca, se le veía preocupado. -Benji, ¿A dónde vas? -.
-A mi oficina por unas cosas, continúen con la misión-. Respondió soltándose del agarre de su amigo y dándole un sentido que no había nada de qué preocuparse; sin embargo se equivocaba porque a medida que iba caminando estaría más lejos de ver el despegue y más cerca de perderse una de sus misiones más importantes que pudo haber dirigido durante su estancia en la UKSA, su corazón le jugaría una mala pasada, había hecho caso omiso a su doctor unos años antes.
No le quedaba mucho tiempo y debería evitar a toda costa cualquier actividad que pudiese alterar su ritmo cardiaco, a parte de eso ninguno sabía de eso porque había hecho un excelente trabajo ocultando la verdad ante los demás y no le importó en lo más mínimo, sin embargo él se consideraba una persona temeraria; pero su terquedad y "actitud de temerario" serían las responsables de lo que pasaría a continuación en su oficina.
-10, 9, 8, 7 ...-. Heiny siguió las órdenes de su compañero, pero desde otro extremo de la base lejos del piso donde estaba la oficina de Benji, este luchaba contra una fuerte punzada en su pecho que parecía estar sincronizada con el conteo, por poco cae de su silla. -6, 5, 4 ...-. Una vez más esa sensación lo hizo llevar su mano al pecho, apretar los dientes en un intento fallido de retrasar lo inevitable, respirar cada vez más le era difícil, sentía que en algún momento iba a desfallecer y nadie podría ayudarlo sin importar lo mucho que gritara, su hora llegaba, podía sentir como una figura negra encapuchada lo conducía por un camino en donde otras personas lo estaban esperando, donde familiares, conocidos, colegas y su fiel mascota, su perro alemán se veía mejor que la ultima que vez, este apenas lo vio salió corriendo hasta donde estaba él, el conteo prosiguió. -3, 2 1 ... Despeguen-.
-Heiny ...-. No había nada que hacer, Benji se había ido para siempre de este mundo, su última palabra antes de caer de frente sonoramente sobre la mesa de su escritorio fue el nombre de su mejor amigo, lástima que no estaba ahí y nunca volverían a verse, había dejado de existir, había dejado de ser uno de los nuestros y ahora se embarcaba en un viaje a otro lugar ajeno a todo lo que pasaba en la base mientras abandonaba su cuerpo que ahora parecía un muñeco grotesco en una oficina que hace solo unos instantes había dejado de ser suya.
Por otro lado la nave que transportaba a Neil se elevaba más y más alejándose de la Tierra, los espectadores miraban atónitos la escena en aire, ese destello en el cielo significaba uno de los más grandes avances que hicieron hecho ellos como grupo, el evento tenía tal relevancia que lo estaban transmitiendo en distintos canales, titulándolo como "El Gran paso del hombre al espacio" o "Misión Marte: El salvavidas para la desesperanza de la Tierra", aquello era como una luz en medio de la oscuridad para una desolada Tierra que con el paso de los años iba perdiendo su escencia, su belleza y se iba quedando sin recursos, sin esperanza de vida, convirtiéndose en un sitio caótico.
Neil se sujetaba con fuerza a su asiento mientras la nave iba desintegrándose hasta salir al espacio exterior, después de eso no se oía nada más que su propia respiración, abrió los ojos dejándose llevar a por la vista del universo, era lo mejor como bien había dicho antes, sin embargo mientras estaba disfrutando del éxito de su misión, todo se iría al demonio en cuestión de segundos, un pequeño error podría comprometer la integridad de su misión y su misma integridad, un diminuto fallo amenazaba con estropear su travesía espacial y solo hasta estrellarse con la realidad sabría si lo podría manejar o no, debería prepararse para lo que viniera, pero a su vez aquello era solo un paso de un pequeño secreto que estaba por descubrir.
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