° Tails °
Varios kilómetros lejos de la cabaña, específicamente en un pequeño taller a las afueras del pueblo. Se encontraba un zorrito de dos colas amarillo soldando uno de sus tantos inventos, normalmente trabajar en sus creaciones lo ponía muy feliz. Le encantaba poder crear cosas y enseñárselas a sus compañeros; aun si estas fallaban dejando caos allá donde las prueba, pero esta no era una de esas ocasiones. Aunque no era visible debido a la máscara de protección que traía puesta, Tails se encontraba sumamente preocupado por el paradero de su amiga Amy Rose. Hace cinco días que no sabe nada sobre ella, la última vez que la vio; ella muy feliz le había anunciado que buscaría unas bayas para preparar un pastel especial para todos ellos. Grande fue su sorpresa que en el atardecer de ese día, al dirigirse a la casa de la eriza rosada, se encuentra con que ella no estaba. Preocupado llamo a su mejor amigo contándole que Amy no estaba en casa, este lo tranquilizo diciendo "Tal vez se le hizo tarde, tú sabes cómo es ella de despistada" Sonriendo el héroe añadió "Tranquilo, más tarde veras como nos llama para probar su delicioso pastel" Más calmado el zorrito regreso a su hogar con eso en mente, pero un par de horas después se dio cuenta que jamás recibiría esa llamada.
- Amy, te extraño mucho - Dijo quitándose la máscara - Espero que donde estés, te encuentres bien.
Dejando el casco a un lado, Tails se sentó en el pequeño sofá verde que tenía en su taller. Sinceramente no tenía ánimos para seguir soldando, lo único que necesitaba era poder ver a Amy y comprobar que su amiga estaba bien, después de eso la sermonearía por haberlo preocupado de esa manera.
- Hermano - Una voz cansada a sus espaldas lo hizo salir del ensimismamiento en que se había sumido - ¿Alguna noticia sobre ella?
Tails observo como un Sonic exhausto tomaba asiento a su lado en el sofá. El héroe había estado los últimos días recorriendo de arriba para abajo toda la isla, pero en ningún momento consiguió dar con el paradero de la eriza. Y sabía que tanta carrera, le estaba empezando a pasar factura al héroe.
- Aun no hay nada, Sonic - Tails se levantó y se dirigió al mini refrigerador que tenía. Sacando una botella de agua mineral se la extendió a Sonic - Toma, debes hidratarte.
- Gracias, hermano - El héroe desenrosco la tapa y de un solo trago se bebió el contenido de la botella - Vaya que refrescante - Sonrió el héroe.
Tails como pudo le devolvió la sonrisa. La verdad no tenía ánimos para sonreírle a nadie.
- Oye Sonic.
- ¿Si, Tails?
- Tú no crees que a Amy le haya pasado algo malo ¿verdad? - Tartamudeo un poco asustado el zorrito - Y si algo grave le sucedió.
Eso era uno de los temores que había estado rondado por la cabeza de Tails. El temía que su amiga estuviera en algún sitio herida de gravedad, sin nadie que la pudiera llevar al médico. O peor aún, que su mejor amiga estuviese muerta. Negando fuertemente con la cabeza sacudió esas ideas negativas. <<Amy está bien, Amy está bien>> repito esa frase como un mantra.
- No digas eso Tails - Exclamo el héroe - Ella sabe cómo cuidarse perfectamente. Tranquilo, sea donde sea que ella este, está muy bien - Dijo el héroe tratando de convencer a su amigo, pero parecía que trataba de convencerse a sí mismo.
Tails no dijo nada, él sabía que su amigo también tenía sus dudas sobre el estado de la eriza. Sonic trataba de aparentar tranquilidad respecto a la desaparición de Amy, pero fracasaba estrepitosamente. Era muy obvio que se encontraba preocupado, tal vez, hasta más que ellos. El héroe no había dormido bien en los últimos días, a causa de sus búsquedas por la isla, Knuckles y él siempre lo reprendían pero el erizo hacia oídos sordos. Ni se diga de la alimentación, muy pocas veces el erizo comía, incluso llego a rechazar un chili dog que le compro Knuckles. Todo eso confirmaba que el erizo no estaba tan tranquilo como quería aparentar.
- Ella está bien - Afirmo de nuevo el héroe. Esta vez sonaba más convencido.
- Eso espero hermano - Sonrió un poco Tails.
Unos toques en la puerta pusieron en alerta a Sonic y Tails. Ambos corrieron rápidamente a esta, emocionados abrieron pensando que se encontrarían con la eriza rosada. Pero, terrible fue su decepción cuando al abrir, se encontraron con Knuckles quien traía una bolsa marrón consigo.
- Hombres, tampoco me miren así - Dijo Knuckles al ver la cara de sus amigos - Sé que no soy Amy, pero más animo por favor.
El tonto comentario de su amigo, sonsaco unas ligeras carcajadas en los mejores amigos.
- Así me gusta - Exclamo el equidna - ¿Me dejan pasar? Traje hamburguesas - Knuckles agito la bolsa marrón, esta empezó a despedir un olor apetecible.
- ¡Por supuesto! - Respondieron Sonic y Tails al unísono.
Los dos amigos apartándose de la entrada dejaron pasar al equidna. Este se dirigió al pequeño comedor que tenía Tails, allí dejo la bolsa marrón y mirando a su alrededor trataba de localizar algunos platos.
- Tails, donde tienes los platos - Pregunto el equidna rascándose la cabeza.
- Amigo mío, las hamburguesas se comen sin plato - Dicho esto Sonic saco una de la bolsa y se la metió rápidamente a la boca - ¡Que rico!
- ¡Tienes razón! - El equidna no tardo en imitar al erizo y saco su propia hamburguesa - ¡Sublime!
- No vayan a ensuciar nada - Les advirtió el zorrito al par de tragones.
- No te preocupes Tails - Dijeron los chicos con la boca llena.
- Ugh - Dijo al ver dicha escena - Iré por un poco de papel.
El pequeño de dos colas se dirigió al cuarto de baño que tenía, no tardo en localizar el papel, corto un par de trozos y cuando iba a salir del baño su comunicador empezó a pitar. La pantalla amarilla parpadeaba rápidamente en sincronía con el sonido, esto al zorrito se le hizo extraño. Sonic y Knuckles estaban con él, y Sticks no utilizaba comunicador, ya que pensaba que los aliens la podían rastrear; así que no tenía idea de quien llamaba. A menos que...rápidamente contesto, era más que obvio quien llamaba. Que tonto era.
- ¡Amy! - Exclamo emocionado Tails - ¿Dónde estás? ¿Estás bien? ¿Estas herida? ¿Por qué desapareciste así? ¿Ya no nos quieres?
- Tranquilízate amigo - Rio un poco la eriza debido a lo acelerado que se oía su amigo - Estoy bien, Tails.
- Donde estas - Pregunto de nuevo el zorrito - Espérate, espérate no me lo digas aun. Déjame ir con Sonic y Knuckles...
- ¡No! - Grito rápidamente la eriza - No le digas a ellos, por favor.
- ...para avisarles - Termino por lo bajo Tails - Amy ¿cómo que no quieres que se los diga? ¡Son nuestros amigos!
- Lo sé, pero ellos no se pueden enterar - Argumento la eriza - Aun no. Solo necesito tu ayuda.
- Porque dices eso - Pregunto alarmado el zorrito - ¿Qué está pasando, Amy?
- Es una historia muy larga Tails - Suspiro la eriza - Amigo ¿si te doy una dirección podrías venir?
- Amy yo...
- Hermano, estas bien - Pregunto Sonic al otro lado del baño.
Los dos, zorro y eriza, se sobresaltaron al reconocer la voz de Sonic.
- Emm - Tails ya no sabía que decir.
- Tails, por favor no se lo digas- Suplico la eriza - Él más que nadie, no se debe enterar de esto.
Tails estaba en una encrucijada. Por un lado estaba Amy, quien por fin se había contactado con ellos (bueno con él) la eriza se mostraba muy reticente a que los demás supieran su paradero y le quería dar una dirección para encontrarse. Todo muy misterioso y sospechoso. Por otro lado, estaba su mejor amigo quien había estado los últimos días sin comer y dormir tratando de encontrar a la desaparecida eriza. No le gustaba escoger entre uno y el otro, ya que ambos eran muy importantes para él. Pero haciendo lo que creía correcto, contesto.
"Lo siento hermano, pero Amy me necesita" Pensó el zorrito.
- Si, solo estoy un poco indispuesto - Y añadió - Salgo en unos minutos.
- Okey - El héroe se dio por satisfecho con esa respuesta y se dispuso a darle privacidad a su amigo.
- Gracias Tails - Suspiro la eriza - No sabes cuánto te lo agradezco.
- Oye, para que están los amigos - Rio el zorrito - Ya era hora que te devolviera los favores.
- Tienes razón - Rio la eriza.
- Bueno, basta de tanta cháchara - Dijo Tails poniéndose serio - ¿Adónde quieres que vaya?
La eriza sabiendo que no podía perder el tiempo, no en una situación como esa, le dio todas las indicaciones a su amigo.
- Muy bien, Amy - Dijo el zorrito terminando de anotar la dirección - Nos vemos allí a las 20:00.
Dicho esto se corto la comunicación.
...
¡Hola, mis queridos lectores! (^.^)/
¿Como están, como les va en la vida?
Como llevan esta maravillosa cuarentena (Notese el sarcasmo ¬¬) Espero que estén tomando todas las medidas de prevención y se cuiden ;)
Aquí un nuevo capitulo de esta pequeña aventura, nuestro pequeño Tails ya sabe sobre el paradero de la eriza (yeiii), pero lo malo esta por llegar. Como creen que se tomara el que Amy quiera ayudar a Metal, los leo en los comentarios :)
Nos vemos la próxima semana, en el siguiente capitulo ;)
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