Pov Normal

- ¿Quieres saber la verdadera razón por la cual te cure? - Pregunto Metal Sonic mirando intensamente a Amy.

La eriza que seguía despotricando a los cuatro vientos, paro abruptamente cuando escucho la cuestión de aquel ser despreciable. Mirándolo con una ceja enarcada le respondió:

- Créeme, muero por saberla - Dijo poniendo los ojos en blanco.

Metal en su fuero interno intentaba no irritarse, pero la actitud de la eriza lo estaba poniendo un poco difícil. Pero recordando su plan, y el gran final que este iba a tener (la venganza contra Eggman) se calmó y pensando muy bien lo que haría a continuación se acercó lentamente a Amy.

- ¿¡Que haces!? - Pregunto alarmada la eriza al ver la repentina cercanía de la máquina.

- Algo que debí hacer desde que despertaste - Murmuro el erizo metálico.

Dicho esto el erizo levanto su única mano y empezó acercarla lentamente al cuerpo atado de Amy; preguntándose si era correcto lo que iba hacer, pero ya no había marcha atrás. Por otro lado, Amy Rose se asustó al ver esas garras metálicas aproximarse, por su mente pasaban rápidamente las imágenes de esas mismas garras ahorcándola hasta el cansancio, tal vez Metal terminaría con lo que empezó hace que ¿Uno? ¿Dos? ¿Tres? días atrás. La verdad casi se arrepiente por haberlo atacado de manera verbal minutos atrás. Casi.

Metal lejos de saber las cavilaciones de Amy, acerco su mano al inicio de aquella atadura y de un solo movimiento la corto en toda su longitud. Dejando así libre a la eriza. No fue tan difícil, ya que sus dedos estaban debidamente afilados. Amy quien tenía los ojos fuertemente cerrados esperando su fin (otra vez), sintió de pronto como las cuerdas se deslizaban por su cuerpo dejando atrás esa incomodidad de no poder mover sus extremidades. Abriendo los ojos rápidamente Amy se fijó como las cuerdas quedaron esparcidas a su costado, aquella chatarra no la quería matar (de nuevo) sino que la quería liberar.

"¿Que cojones?" Pensó estupefacta Amy.

- Ahora sí que me he perdido - Murmuro sentándose en la mesa.

Ella sabía que esta era una oportunidad para atacar a Metal, tal vez no fuera tan fuerte como él, pero le daría batalla. O podría esperar el momento idóneo para escapar. Pero no lo haría, y no es porque no tuviera ganas (ya que si las tiene) sino que jamás se esperó que aquella maquina la liberaría. Además, tenía curiosidad por lo que aquel le iba decir.

- No intentes escapar - Y forzándose a decir lo último añadió - Por favor.

"Que empiece el show" Pensó Metal.

- Ya veremos - Dijo cruzándose de brazos - Y cuál es esa famosa razón por la cual me curaste - Pregunto la eriza.

- La razón es - El erizo no pudo evitar titubear un poco- Amy, yo te cure porque necesito desesperadamente tu ayuda - Hablo rápidamente Metal, pero la eriza lo entendió todo.

Amy esperaba que Metal le soltara cualquier cosa, pero por su mente jamás paso la idea de que aquella maquina necesitara de su ayuda. La situación era tan bizarra que la eriza empezó a reír de forma baja cosa que desconcertó al erizo metálico.

- Mi ayuda - La risa empezó a aumentar - Todo esto - Amy hizo un gesto abarcando toda la habitación sin dejar de reír - Lo de dejarme entrar, atacarme casi hasta la muerte, y posteriormente lo de atarme a esta mesa - La eriza se levantó de esta - Fue porque tú, Metal Sonic, la mejor maquina jamás creada por Eggman necesita que yo una simple eriza a la que puedes matar fácilmente si te lo propones ¿te ayude?

Amy camino hasta quedar a unos treinta centímetros de distancia de aquella chatarra. Metal por su parte aunque no lo quisiera admitir se estaba poniendo nervioso por la actitud de la eriza. Ella parecía completamente enloquecida/enfurecida.

- ¡Respóndeme! - Ordeno la eriza.

- Si - Gruño Metal molesto porque una patética eriza lo mandara - Lo hice porque te necesito, Amy.

Esa frase fue la gota que rebasó el vaso para Amy.

- Maldito hijo de perra - Grito la eriza sacando su Hammer - ¡Acaso crees que soy idiota!

Amy alzo su martillo lista para acabar con Metal Sonic de una buena vez. El erizo actuando rápido detuvo con su única mano a Piko Piko antes de que impactara contra él.

- Cálmate, Amy - Exclamo Metal - Te lo puedo explicar.

- Te voy asesinar - La eriza intentaba mover su martillo, pero la maquina lo tenía fuertemente agarrado - ¡Suelta a mi Piko Piko para poder matarte!

- No lo haré - Metal fortaleció su agarre - No hasta que me escuches.

Amy jalaba con todas sus fuerzas del mango, pero aquel inútil era más fuerte que ella. Cosa que la estaba enfureciendo más si cabe.

- Amy, por favor escúchame - Grito con todas sus fuerzas Metal.

Aquel grito que resonó por toda la cabaña y posiblemente en todo el bosque; causo que la eriza detuviera sus intentos de conseguir devuelta su martillo.

- Amy sé que todo esto suena muy bizarro, pero me tienes que escuchar - Metal aprovecho que la eriza tenía toda su atención y empezó a soltar todo lo que tenía dentro - Hace seis meses Eggman en un ataque de furia me desmantelo por completo, todo porque nuevamente habíamos perdido una batalla contra Sonic, y en vez de descargar su furia contra Orbot y Cubot como lo hacia normalmente. Decidió que esa vez yo era el que tenía que pagar los platos rotos - Cabe mencionar que fue difícil para la maquina soltar todo aquello. Le daba tanta rabia y vergüenza recordar ese día, pero decidido a conseguir lo que quería prosiguió - Esa es la razón por la que en batallas posteriores no vieron ningún rastro de mí - Poco a poco Metal aflojo el agarre del martillo, cosa que no pasó desapercibida para Amy - Ese día no pude defenderme ya que, el Doctor al crearme, ingreso un chip que me impedía atacarlo - Una expresión de sorpresa inundo la facciones de la eriza - Lo sé, es difícil creer que el mismo Doctor que crea robots tan patéticos, haya prevenido una rebelión de mi parte y creado un chip para detenerme - Murmuro irónicamente Metal - No sé qué ocurrió después de que me desmantelaran, ya que mis circuitos estaban tan afectados que como ustedes dicen "perdí el conocimiento" - Metal soltó el martillo completamente y para sorpresa de él, Amy lo hizo desaparecer - Cuando volví a despertar me encontré cara a cara con un Lobo y sin titubear lo asesine - Una mueca de horror se presentó en Amy - Sé que suena horrible que lo diga de esa manera, pero yo no podía darme el lujo de confiar en nadie. No después de que mi propio creador, en quien confiaba - La voz de la maquina estaba tan cargada de rabia y ¿dolor? - me había desechado como a una basura.

Amy estaba anonadada, podía percibir que la verdad impregnaba cada palabra que salía de aquella máquina. Pero aún tenía sus dudas.

- Y yo que pinto en todo eso - Pregunto Amy recelosa.

- Como te dije, había perdido toda confianza en cualquier persona. Y un día veo que alguien entra en mi cabaña; invadiendo mi territorio - Amy iba a protestar, pero Metal de un movimiento la acalla - Eso hizo que perdiera el control, y fue por eso que te ataque. Fue un error, un desliz que cometí, cuando te vi ahí tendida perdiendo la vida poco a poco, recapacite.

- ¿Por eso me curaste?

- Exacto - Se podía percibir la sonrisa en esa palabra. Aunque el erizo no poseyera boca - No podía dejar que el mundo perdiera a su más preciada flor - Metal no sabía que lo había poseído para decir aquello, pero vio con gran satisfacción que la eriza se sonrojo un poco.

- Y porque dices que necesitas mi ayuda - Tartamudeo Amy.

- Amy Rose, tu posees un alma tan bondadosa y caritativa - Dijo Metal desde lo más profundo de su ser - Siempre ayudas a aquellos que lo necesitan, yo pensé que tal vez a ti no te importaría si una chatarra tonta, imbécil, estúpida y ridícula - La máquina no pudo evitar soltar un risita al decir aquello - te pidiera que lo ayudaras. Sé que no soy nadie para pedirte ayuda, no después de lo que te hice. Pero créeme que desde lo más profundo de mis circuitos, que te necesito.

Metal no se dio cuenta que en medio de sus palabras se había acercado a Amy y tomado su mano, al percatarse y ver la cara de circunstancias de la eriza la soltó mas no se apartó.

- Lo siento - Murmuro por lo bajo.

Amy no dijo nada, aún seguía procesando todo lo dicho por aquel erizo metálico. Jamás imagino que la ausencia de Metal Sonic, se debiera a que el Doctor Eggman lo había desmantelado. Es un desgraciado pensó Amy, no pudo evitar sentir un poco de pena por aquel ser que estaba frente a ella. Vivir lo que él vivió, se estremecía de solo pensarlo. Entendía que Metal ahora sintiera desconfianza por aquellos que lo rodean, pero no podía creer que la lastimara creyendo que ella lo quería dañar. Ella nunca lastimaría a nadie, a excepción de los robots malvados de Eggman. Soltando un suspiro la eriza miro fijamente aquellos orbes rojos, había tomado una decisión. Le daría el beneficio de la duda a Metal Sonic, además como decían por ahí, a tus enemigos es mejor tenerlos como amigos (o algo así) la verdad que no importaba.

- ¿Cómo quieres que te ayude?

Metal Sonic se sintió como un niño en navidad al oír esas cinco palabras. 

...

Aquí les traigo un nuevo capitulo, Metal Sonic ya puso en marcha su plan.

¿Ustedes creen que Amy se dará cuenta de que la están utilizando?

No olviden votar y comentar si les gusto el cap ^^

Nos leemos después (^.^)/