Desayuno con Sorpresas
Al ser de mañana, Larota se despierta ya que el sol atravesaba su cortina y le daba justo en los ojos, haciendo que se quejara por la molestia.
Cuando se despertó del todo, se dio cuenta, que estaba en su casa y en su cama, pero había alguien más durmiendo con ella. Ese alguien era Raphel, quien la estaba abrazando por la espalda. Ella al sentir esa acción por parte de él, no supo como disimular su sonrojo ya que hace tiempo no se sentía de esa manera.... De una forma protegida.
Al tratar de salir del agarre del chico tortuga, se dio cuenta que Raph se veía muy tierno y lindo durmiendo. Se notaba que estaba cómodo y relajado. Esto incremento la sonrisa de Larota, ya que le gustaba estar acompañada siempre por aquel mutante. Cuando Larota salió de su nube de sueños, vio la hora en su reloj de pared y vio que eran las 8:30 A.M así que decidió hacer un desayuno para poder sorprender un poco a Raph.
Al cabo de un rato, cuando Larota tenía todo listo para hacer unos ricos hotcakes, decidió poner un poco de música. Ella es amante de la música Rock así que decidió poner una emisora de radio que pasaban canciones de la cual ella era fan. Al encenderla pudo escuchar que estaban emitiendo una de sus favoritas. Mientras estaba haciendo la mezcla para el desayuno no pudo evitar comenzar a cantar. Ella no se dio cuenta de que alguien la estaba viendo y escuchando, y esa alguien era Raphael, quien no pudo evitar sonreír por ver feliz y de ese modo a Larota. Y sin mencionar que se sorprendió de sobremanera de la voz que tiene ella. Nunca imaginó que una chica como ella cantara tan angelicalmente.
Al escuchar que la canción estaba llegando a su fin, decidió interrumpir dicho "mini concierto".
- Vaya, vaya no sabía que cantabas tan bien. Me sorprendes cada día más. - dice Raph con una sonrisa traviesa haciendo así que sus ojos de color verde tóxico resalten más provocando así en Larota un rubor de vergüenza ya que nadie la había oído cantar así y agregándole que se trataba de una canción de amor. Y que indiscretamente pensaba en él cuando la cantaba.
- Amm buenos días... ¿Hace mucho tiempo que estabas escuchándome cantar? Siento mucho haberte despertado..... Estaba haciendo el desayuno tranquilamente.... y no me di cuenta que estaba cantando. Te pido una disculpa... - dice Larota con vergüenza y agachando la cabeza para que él no vea su rubor creciente en su cara. Raph al ver esto se le derritió el corazón ya que le gustaba mucho poner a Larota de ese modo. Ya que se dio cuenta que ella no era una chica de pedir disculpas y tampoco de ser una chica que se ruboriza por cualquier cosa.
- Oye sabes que no necesitas ponerte así.... Me gusto mucho oírte cantar esa canción. No sabía que te gustaba el Rock. - dice Raph mientras se acercaba peligrosamente a la pelinegra.
- Jejej está bien. Si me gusta mucho el Rock solo que no suelo hablar de mis gustos con las personas. No preguntes el porqué pero ni yo lo sé. ¿Oye quieres desayunar? - dice Larota tranquilamente.
- Si me encantaría. Y si es un desayuno hecho por ti nunca diría que no. Pero antes, podrías darme mi besos de buenos días. - dice Raph mientras la acorrala contra la pared y espera expectante su beso.
Larota al escuchar esa petición por parte del mutante decide responder pero no de la forma que él quiere... Lo hace pero no con un beso en los labios como Raphael espera sino uno en la mejilla. Ante esta acción Raph decide contestarle de inmediato. - O no preciosa de esa forma no me gusto. Preferiría de esta forma. - dice y en eso la empieza besar de una forma violenta y desesperada comenzando a tocar su espalda y a bajar cautelosamente hasta llegar a sus muslos. Larota al sentir estas acciones decide corresponder de inmediato ya que le fascina ese lado de Raphael, un chico rudo y violento, pero que a veces es un chico dulce.
Esta acción comenzada por Raphael termina en una guerra de lenguas por parte de ambos. Los dos quieren ser los dominantes pero ninguno quiere ser el sumiso. Así que los dos comienzan a reclamar poder. Raphael al ver que Larota no le daba el poder decidió tomarlo de la forma más baja. Haciendo que lo perdiera por culpa de los deseos carnosos que emanaban porque él la tocara de esa forma.
Y así comenzó nuestro ninja de banda roja pasar al cuello de nuestra protagonista. Cosa que hizo que Larota gimiera de placer pero decidió reprimirlo para que él no la escuchara gemir de esa forma. Raphael al escuchar que ella se reprimía para no gemir le contesto. - No te reprimas.... Por favor... No lo hagas déjame escucharte. -
Larota al escuchar eso decidió hacerle caso y dejó que él la haga lo que quiera.
Raphael al sentir que Larota le daba el poder y que estaba ahora bajo su merced. Decidió meter su mano por debajo de su blusa, así le daba un acceso de más placer a la pelinegra. Al llegar a su pecho y agarrarlo con fuerza, pudo escuchar como Larota se retorcía de placer y más lo pudo sentir cuando incremento en su beso, convirtiéndolo en uno francés pero llevándolo al extremo.
Al ver que la cosa iba aumentando de tono. Comenzó a sonar el celular de Raphael. Larota al escucharlo le dijo lo siguiente.
- Ve a responder.... De seguro es urgente... Tal vez sucedió algo... - dice con la respiración agitada ya que Raphael estaba bajando hasta su pecho.
- Deja que siga sonando.... No debe ser nada. - dice Raph mientras retomaba a su tarea: hacer suya a Larota.
- Es enserio... Ve a responder... - dice Larota mientras detenía todo.
- Ahg... Está bien. - dice Raphael molesto y desanimado ya que no quería que nadie lo molestara en estos momentos. - ¿Diga? - dice molesto.
- Raph, soy Leo, ¿dónde diablos te metiste? Él Sensei aún no sabe nada que aún no estás en la alcantarilla, vuelve de inmediato, no lo podremos detener por mucho. - dice Leonardo enojado por la ausencia de su hermano menor.
- Agh eras tú Bobonardo, estoy de camino a la guarida, no te preocupes, si el Sensei pregunta dile que fui a caminar un poco o algo así. No se di algo que sea creíble. Adiós temerario líder. - dice Raphael molesto e indiferente mientras corta la llamada y escucha un quejido en la otra línea. Diciéndole que no corte.
- Entonces... ¿En que nos quedamos? - dice mientras retoma su acción anterior. Pero Larota lo aparto de inmediato.
- Jajaj muy chistoso. Oí que el Sensei está por descubrir que no estás en casa. Así que nada de mimos y besos, y será mejor que comas rápido y te vayas con él. Sin reproches Hamato. - dice Larota autoritaria y amenazante.
Raph al oír esto decidió hacerle caso, ya que no se quería quedar sin arrumacos y besos. Comió rápido y le dio las gracias por dejarlo dormir en su casa. Y se marchó sin antes plantarle un beso francés muy bien merecido, dejando así a la chica feliz y sonrojada. Mientras ella miraba como se iba Raph, alguien estaba viendo todos sus movimientos....
Continuará...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro