Junkook, Taehyung y Yoongi entraron al antro. Después de la competencia en donde Taehyung y su equipo ganaron la ronda y pasaron a las finales. El Omega peli menta tuvo la gran idea de ir a celebrar el triunfo de todos. Jungkook se tuvo que escabullir de sus "amigos" ya que Ji-eun había querido adueñarse del Omega invitándolo a salir. Mintió diciendo que se había lastimado la pierna en el partido y tenia que reposarla si no empeoraría. Y como sabía que ella no se ofrecería a cuidarlo porque la Alfa simplemente no era de ese modo, lo dejó estar y ella se fue con su sequito de amigos.

Los tres adolescentes tuvieron que irse lo mas lejos posible para que nadie los viera y entonces se fuera al demonio todo. Aunque si el plan era que en algún momento todos supieran de la relación de Taehyung y Jungkook, tampoco querían que les arruinaran el viaje, ya en casa enfrentarían todo el revuelo que seguramente causaría.

Además, Jungkook tenia que cancelar la estúpida apuesta con Yugyeom, esperaba que por una vez el descerebrado Omega quisiera ser consecuente y no obligarlo a una humillación pública. Aunque lo dudaba mucho, ya vería como hacerle para salirse de eso.

—Vamos a bailar. — Yoongi miró la pista, la música ya estaba haciéndolo mover los pies.

—Yo no sé bailar. — Tae resopló con pesar.

—¿No? Yo te vi bailar muy agustito con Yoongi Hyung en la fiesta de Jackson-ssi — El Omega le levantó la ceja, mientras empujaba su lengua en la parte interna de su mejilla.

—Hum, bueno si, pero eso fue para...

—Ponerte celoso, ¿para que más? — El peli menta sonrió triunfal — ¿y de quien crees que fue la idea?

—Son un par de hijos de p...— No terminó de decir cuando Taehyung ya lo había atraído a el para robarle un beso, el mayor puso los ojos en blanco.

—Un Omega tan lindo como tu no puede decir esas cosas, amor. — Jungkook se sonrojó por el mote cariñoso. Y porque Taehyung le dio un apretón en su trasero.

—Bueno, ya. Vamos a sentarnos y a beber algo. — No podían beber alcohol, pero sí que la pasarían bien. Tomaron asiento y comenzaron a platicar de todo lo que habían pasado, recordaron la fiesta en casa de Jackson, Jungkook volvió a mirarlos feo a ambos. — Mi canción — Dijo el mayor

—Hyung, todas son tus canciones — Se metió una papa frita a la boca.

—¿Y que tiene? — Dijo ofendido. —Vamos Jungkookie, bailemos.

—Bueno, si tu insistes. — El Omega olor a manzana le sonrió precioso y se levantó a bailar con él. Antes de irse, le dió un beso a su novio y se fue con su mayor a la pista a bailar. Mientras el Alfa los miraba desde su silla, no podía quitar los ojos de su precioso novio.

—Hyung bailas muy bien. — Jungkook estaba sorprendido por los movimientos de su mayor, lo había visto bailar en la fiesta, pero no como ahora.

—Llevo la música en la sangre, pero tu no lo haces nada mal. — Y si, aunque Yoongi sabía que Jungkook solamente tenia ojos para Taehyung, y que por ningún motivo jamás podría tener al omega como el "quisiera" no se privaría al menos de mirarlo, en mirar no hay pecado. Ambos reían y bailaban, Yoongi le enseñaba los pasos "prohibidos"

—Pero miren que tenemos aquí, un par de lindos Omegas. — Un Alfa con olor a cerveza y cigarro se acercó a ambos. Mucho más de lo que ellos hubieran querido. — Parece que les hace falta un buen alfa.

—De hecho, no, pero gracias — Yoongi se giró hacia Jungkook con la intención de ignorar al tipo ebrio que estaba molestando.

—¿No?, creo que no entendiste, mocoso. — Se paró frente de Yoongi, dándole la espalda a Jungkook.

—Largo de aquí, borracho. — El Omega castaño no esperaba que la reacción del hombre fuera del modo que fue, pero... ¿Qué esperaba? A los alfas no les gustaba que los Omegas se les negaran.

—¿Qué mierda dijiste? — El Alfa ahora giró a Jungkook, quien tragó duro cuando sintió el aroma a cerveza aun mas cerca de él, asqueroso fue lo primero que se le vino a la mente. — Los Omegas como tú; mimados y modositos son mi especialidad, ahora te niegas, pero cuando te tenga en mi cama, con la cara en la almohada y gimiendo mi nombre, suplicaras más y más.

Jungkook se quedó congelado en su lugar cuando el hombre amago con tocarlo.

Alfa...

—Como ya le dijimos, no necesitamos de ningún alfa, así que puede irse por donde vino — Yoongi le tomó el brazo para quitárselo de encima del cuerpo de Jungkook. Pero el tipo le tomó de manera brusca ahora el brazo al peli menta, quien intentó quitárselo de encima pero por obvias razones no pudo hacerlo. El alfa empujo a Yoongi hacia el suelo, dándose un buen golpe en el trasero.

—¡Hyung! — El Omega castaño gritó asustado cuando vio al mayor caer en el suelo. Todo se estaba yendo al demonio.

—¡Suéltalo, imbécil! — A pesar de la música alta y de que unos cuantos se habían dado cuenta, la voz fuerte y molesta del Alfa se dejó escuchar.

—¿Pero que tenemos aquí? otro mocoso, y además de todo un nerd. Por que me siento muy bueno y perdona vidas voy a dejar que te des la vuelta y te largues a la biblioteca o que se yo. — El tipo no soltaba a Jungkook mientras encaraba a Taehyung.

—Suelta a mi Omega — Le habló entre dientes encarándolo. Jungkook sentía que se moría, ese tipo sin problemas podría desbaratarle la cara a Taehyung, el pensamiento casi se le hizo insoportable, recordó las veces que los compañeros de instituto lo habían golpeado.

—No me hagas reír mocoso, claro que el no es tu Omega, ¿te has visto en un espejo? — Taehyung se agachó a levantar a su Hyung, quien estaba bien, solo con un buen golpe en el trasero, pero nada del otro mundo. — Así que, si me permites, iré a divertirme con este Omega. — El tipo hizo el amago de llevarse Jungkook. Pero no se esperaba que el puño de Taehyung fuera más rápido que él.

—MI OMEGA, MIO. — Rugió El alfa peli negro, una vez que volvió a estrellar su puño en la cara del Alfa borracho.

Todo fue en cámara lenta y al mismo tiempo en rápida, Jungkook solamente vio como su novio golpeaba en la cara al tipo ebrio. Yoongi le gritó y lo jaló para espabilarlo.

—¡Corre! — Lo jaló de la camisa para que se moviera los pies y se largaran de ahí.

—Taehyung, no me voy a ir sin el — Trataba de no dejarse llevar por el Omega mayor.

—Después del puñetazo que le metió al tipo ese y la voz de mandó que se cargó que casi hace que me orine ¿crees que esta desprotegido? — ahora lo empujaba desde atrás para que caminara.

—Pero no quiero...Hyung... no puedo dejarlo solo. — Jungkook casi que se echa encima de Yoongi para detenerse, cuando sintió una mano tomarle la cintura, iba a pegarle un codazo al sentir su tacto, pero ese aroma a hogar inundo sus sentidos. — Dios, Tae.

—Aquí estoy bonito, pero vamos, corre. — Esta vez Jungkook ahora si que corrió sin soltar la mano de su novio y del Omega peli menta que iba detrás de ellos. Por fortuna un taxi de sitio se encontraba desocupado. Yoongi le silbo y los tres estudiantes se subieron.

—Vámonos... deprisa — Pidió Jungkook mirando hacia afuera, esperando que el tipo no llegara a buscar revancha. Para su fortuna nada de eso sucedió. El auto arrancó y ellos se fueron, el corazón de Jungkook latía a mil por hora. — ¿Qué ha sido eso? — Preguntó a nadie realmente.

—Que tu novio le ha dado una buena piña a un imbécil que quería propasarse contigo. — Yoongi sonreía orgulloso y triunfal —¿A que no adivinas quien le ha enseñado eso?

—¿Tu? — Jungkook miro a ambos chicos sin entender nada. — Pero... ¿Cuándo?

—Después de que me dieron la ultima paliza en la escuela — Taehyung dijo bajito tomando la manita de su novio. —Mi Hyung me obligó prácticamente a tomar lecciones con el y uno de sus "amigos" ya sabes. — Yoongi sonrió al escucharlo, pero no dijo nada. —No volveré a dejar que nadie se aproveche de mí, y mucho menos que traten de dañarte a ti. —Besó su manita — Voy a cuidarte como tu Alfa que soy.

—Gracias, aunque a mí también me gustaría aprender a defenderme, no siempre voy a tener a mi alfa que me cuide, y eso de ser una doncella en peligro no es lo mío.

—Así se habla, cuando quieras Jungkookie, yo te enseño — ambos se sonrieron.

Taehyung atrajo a Jungkook en un abrazo, se dieron un beso mimoso y no se despegaron el uno del otro.

Una vez llegando al complejo se bajaron y espiaron que no estuviera nadie. Corrieron hacia el lobby y luego hacia las escaleras, subiendo a la habitación de ambos omegas entre risas y bromas.

—Buenas noches, Hyung — Dijeron ambos al mismo tiempo.

—Okeeey, ya entendí, me voy para dejarlos un rato a solas, tortolitos. Vi un cuarto de servicio por el pasillo — Les cerró el ojo a ambos y se metió sin decir mas.

Ambos se miraron sonrojados y giraron al mismo tiempo hacia el pasillo, efectivamente estaba un cuarto de servicio.

—¿Quieres hacer algo estúpido y atrevido? — Jungkook se mordió el labio al decir esto.

Taehyung tomó la mano de su Omega bonito

—Contigo hasta el fin del mundo. — El omega le sonrió precioso, con esa sonrisa que derretía el corazón del Alfa en dos. Con arruguitas y estrellas.

Nunca se había imaginado tener que vigilar que nadie los viera entrar al cuarto de servicio, tampoco se imaginó tener que poner seguro a la puerta para que nadie entrara, mucho menos se imaginó estar besuqueándose con Taehyung en un lugar en donde olía a pino, había escobas, trapeadores y cubetas, además de un sinfín de papeles higiénicos, toallas y demás cosas de limpieza. Y definitivamente nunca se imaginó estar desvistiéndose, aunque fuera solo de la parte posterior de su cuerpo para tener sexo ahí mismo.

No, definitivamente hubo muchas cosas que Jeon Jungkook jamás se imaginó hacer. Y que decir de Taehyung, un chico que hasta hace unos meses no había si quiera dado su primero beso, mucho menos tener sexo en un lugar en donde claramente no inspiraba a ello. Pero al mismo tiempo lo hacía excitante. Esa fue la única explicación que su mente pudo formular cuando realmente el corazón le latía desbocado, sus pantalones le apretaban como jamás lo habían hecho. Jungkook se encontraba igual, ya que con toda la anticipación que su cuerpo guardaba no era capaz de desabrochar el estúpido y estorboso cinturón de su novio.

—No puedo — Gimoteo molesto cuando por tercera vez el cinturón no cedió — Ayúdame, alfa.

—Mi hermoso Omega, tan desesperado — Sonrió y el Omega se mordió el labio inferior con fingida inocencia. Las manos largas y perfectas de Taehyung desabrocharon su cinturón. — Todo tuyo, ¿Qué harás con eso?

Las mejillas de Jungkook se tiñeron de un rosa cálido, aún le causaba un poco de pena — un mucho— Escuchar ese tipo de cosas, sin embargo el calor que recorría su cuerpo podía más que la vergüenza. Pensó que más que decírselo, se lo mostraría. Se puso de rodillas y el aliento de Taehyung se atascó en su garganta ¿el iba a?... la respuesta no se hizo esperar cuando el Omega saco el miembro ya erecto de su encierro, tragando saliva de nervios al verlo así, tan cerca y palpitante.

Dios...

—Yo...no te atrevas a... solamente cállate y si no te gusta... solo...

—No habría manera de que no me gustara nada de lo que tu...

—Solo...cállate... — Jungkook volvió a tragar saliva, con la punta de la lengua lamio la punta del pene del Alfa quien se tuvo que sostener de unas toallas que estaba apiladas junto a él. El omega tomo ese movimiento como algo bueno, así que volvió a pasar la lengua esta vez con un poco mas de ganas.

—Dios... — Siseo Taehyung cuando la sensación le sacudió todo su ser. —Jungk... Amor... esto...

—Shhh... alguien puede oírnos — Y era cierto, pero también le gustaba molestar a Tae, sabía que no podía guardar silencio, sobre todo si su lengua empezaba a moverse por todo el miembro del Alfa. Ya un poco más atrevido el Omega, abrió la boca para envolver un poco más y luego un poco más y más, dejando a Taehyung viendo estrellitas. No tenia con que compararlo obviamente, pero por dios que el Omega le estaba dando el sexo oral más increíble del mundo. — Para...para...no voy a... — El castaño al escuchar aquello libero el pene de Taehyung, se puso de pie y lamio sus labios.

—Sabes bien. — El pecho de ambos subía y bajaba. Taehyung lo tomó de la cintura atrayéndolo a él.

—Abre las piernas, engánchalas a mi — Jungkook obedeció cuando el Alfa lo cargó, se aferró a él, y un jadeo salió de la boca de ambos cuando Taehyung se abrió paso en su interior. Las uñas del omega se encajaron en los hombros del pelinegro cuando no hubo más camino que recorrer. Una vez que sintió a Jungkook relajarse comenzó a entrar y salir. Los jadeos, sus pieles chocando, el sonido de los besos, la hebilla del cinturón golpeando en el piso por las embestidas propinadas, eran lo único que llenaba el lugar. — Te amo, Jungkook. — Juntó su frente con la del Omega, esa era una ventaja de tener la misma estatura.

—Te amo, Taehyung, ¡ah...ah...! ¡Diablos! — El alfa lo besó para que sus gritos no fueran tan altos, descarado que lo había silenciado hace unos minutos y el gritaba más. Giro para apoyar la espalda de Jungkook en la pared y acelerar los embistes aun más, el omega puso los ojos en blanco cuando el orgasmo lo embargo, Taehyung lo siguió segundos después. — Mierda... duele — Gimoteo más cuando el nudo creció dentro de él. — ¿Por qué duele más esta vez? — Dijo jadeando.

Taehyung abrió los ojos al darse cuenta del porqué. — No...no utilizamos un preservativo, puede ser eso.

Jungkook lo miró a los ojos, era cierto, ni siquiera se preocuparon por ello. —Bueno, no tiene porque pasar algo ¿no?, mañana por la noche volvemos a casa, puedo comprar una píldora de emergencia ¿bien? — Trató de calmar al Alfa quien tenia color papel. — Nadie se embaraza de una sola vez... ¿verdad?

¿Verdad?

—Si... si, tienes razón, mañana compraremos la píldora. — Concedió el Alfa, le dio un beso delicado a su novio quien le acarició el cabello para calmarlo. Una vez que el nudo se desinflamó, el Alfa bajó al Omega. Tomaron un rollo de papel higiénico de los muchos que ahí había, se asearon y se aseguraron de dejar todo correctamente y limpio. Acomodaron sus ropas y espiaron para cerciorarse que no hubiera nadie que pudiera verlos. Corrieron hasta la habitación del menor. — Hasta mañana, mi amor. — Taehyung acarició la mejilla de su bonito novio mimosamente

—Hasta mañana, cariño— El color rojo subió por su cuerpo, jamás le había dicho así o de ningún modo cariñoso a ninguna de sus anteriores parejas, simplemente ninguno le había inspirado para decirlo, pero con Taehyung todo se sentía tan correcto, tan natural.

—Mañana será un gran día, van a ser campeones. — El alfa no pudo evitar atraerlo a su cuerpo para abrazarlo fuertemente.

—Ojalá, la verdad es que los desgraciados contra los que vamos son muy buenos. — Ambos se rieron por el comentario del Omega — Anda, debemos dormir, tú también tienes tu última competencia mañana. — Taehyung asintió, pero no quería soltarlo, no podía separarse de su precioso Jungkook, no después de tenerlo para él, toda una noche, deseaba poder tenerlo así el resto de su vida.

No había que correr, no aún.

Ambos se despidieron con un beso que duró más de lo que pretendieron. Cuando El omega ingresó a su habitación lo hizo volando prácticamente, no podía estar más que feliz, aunque esa palabra palidecía a comparación de cómo se sentía.

Esperaba que las cosas siguieran así, quería ser feliz con Taehyung, después de lo que habían pasado ya no podía separarse de él, no quería.

Pero como ya dije antes, a veces las cosas no son como uno quisiera.

Holi, ¡he vuelto al fin!

perdonen la tardanza, pero ya saben las vacaciones.

¿Qué tal los noviecitos de cochinotes en el cuarto de servicio?

¿Qué creen que pase?

me gusta leer sus teorías.

nos leemos luego, besitos cibernéticos.

IPY💜💜💜💜💜💜