En la entrada de la puerta de casa de Tae, Jungkook dudaba en tocar el timbre o no. Ok si bien era cierto que ya tenia el "camino libre" con el Alfa debido a los nuevos acontecimientos, pero... ¿y si el mencionado Alfa ya no quería nada con él?

Eso definitivamente no podría soportarlo.

Se armo de valor, tragó duro y se acercó para llamar a la puerta.

1,2,3 timbrazos y nada sucedía.

Se mordió el labio interiormente, tal vez solo Tae no estaba en casa, a lo mejor es que simplemente no quería abrirle. A lo mejor lo odiaba y de plano jamás quería volver a verlo, a lo mejor...

― ¿Qué haces aquí? ― La voz gruesa y pesada del Alfa se escuchó cuando el Omega pensaba en todas las posibilidades, pero al parecer la primera se acercaba más. Al menos por el momento.

―Hum... ¿Puedo pasar? ― No es que a Jungkook le emocionara la idea de que fuera rechazado en la calle, no le agradaba la idea de ser rechazado en ningún lugar, pero si aquello sucediera al menos no quería ser humillado en plena calle.

Tae resoplo, no quería ser un lepero ni nada, pero realmente intentaba con todas sus fuerzas sacar de su cabeza al Omega de ojos hermosos y su presencia y olor a manzanas no ayudaban en la tarea.

―Entra ― Abrió la puerta y se hizo aun lado para que Jungkook entrara, el mayor dejo las llaves en su perchero y se cruzo de brazos para mirar al Omega. ― ¿Y bien? Tengo muchos deberes que hacer así que dime que necesitas.

Al chico de ojos hermosos se le hizo un nudo en la garganta al escuchar el tono frio en el que el Alfa le hablaba, aunque sabia que lo merecía, no dejaba de dolerle.

―Yo... lamento mucho lo que sucedió entre nosotros ― Taehyung puso mala cara ― ¡No! No me refiero a "lo que paso" si no a lo que yo te hice, a como te traté, lo desconsiderado que fui y todo eso. ― Musito en voz baja cuando sintió el olor del Alfa agriarse un poco.

―Jungkook-ssi, no tengo intenciones de volver a abrir esa herida, así que si es lo único que tienes que decir...― No terminó de decir cuando los labios del mas joven ya estaban en los suyos, y sus manitas en el pecho del Alfa.

Jungkook rogó porque no lo rechazara.

Alfa... mío, te necesito, te extraño.

El lobo de Tae estaba dolido, pero el también extrañaba al Omega, igual que Taehyung.

Omega, mi Omega.

Después de unos segundos, El pelinegro separo al castaño provocando un chasquido.

―No... no de nuevo, además yo estoy con Yoongi hyung y...

El Omega sonrió de lado ― Lo veo un poco difícil ya que el gusta de Omegas, Omegas bonitos, o al menos eso me dijo en la escuela.

― ¿Él te dijo eso? ― Tae levanto una ceja incrédulo, pero ¿de que otro modo lo sabría Kook?

―Mju ― Intento volver a besarlo, pero Tae esta vez lo alejó. ― Por favor, Taehyung-ssi, de verdad lo lamento mucho.

― ¿Y quieres que yo te crea, así como así? De todos modos ¿Qué esperas de mí? Que acepte hacer esto a escondidas ¿o qué?

― ¡No! ― Se quedó callado, le era muy difícil verbalizar lo que su corazón sentía.

Taehyung lo miraba exigiéndole una explicación.

― ¿Entonces? ¿Mmh?

―Te quiero conmigo. ― Dijo bajito, pero firme.

― ¿Cómo? ― El pelinegro medio que no había escuchado y medio que quería que Jungkook lo dijera más fuerte.

―Que te quiero conmigo, como mi...novio.

Taehyung realmente no espero aquello, lo ansiaba claro, desde hace mucho tiempo. Recuerda cuando eran unos niños pequeños, aun no se habían presentado como Omega ni Alfa, pero a Taehyung siempre le había parecido que Jungkook tenia galaxias en los ojos. Solo que todo eso se esfumo cuando el Omega comenzó a ser cruel con él, aun le gustaba sin embargo sabía que había un mundo de diferencia entre ellos. Tae no era tonto, sabia como funcionaba el mundo.

El chico nerd y el más popular no podían estar juntos. Al menos todo el mundo y la vida se encargaba de hacérselo saber. Pero jamás dejó de admirar su belleza, para el jamás habría otro Omega o personas más hermoso que Jeon Jungkook.

―Si esta es otra de tus bromas crueles mejor vete. ― La voz profunda pero temblorosa del Alfa sonó después de unos segundos de mirarse a los ojos.

―No es ninguna broma ― El Omega terminó de hacer el camino hasta estar frente a frente con el mayor. ― Se que fui un desconsiderado e infantil, es solo que... es la primera vez que... bueno...

―Que te gusta un nerd. ― Concluyó Tae, Jungkook asintió avergonzado.

―No quería herirte, simplemente...no supe como manejarlo, ¿aun...aun te gusto?, ¿aun me quieres contigo?

El alfa se paso la mano derecha por el cabello despeinándolo un poco, aquel acto le pareció jodidamente sexy y al mismo tiempo lindo al Omega.

―Uno no olvida de la noche a la mañana, Jungkook. ― La manera en la que el pelinegro dijo aquella frase hizo al castaño estremecerse un poco. No supo bien por qué.

Al menos no en ese momento. Tiempo después sí que lo haría.

― ¿Entonces, que dices si lo intentamos? ― El Omega se acercó aún más, si es que eso se podía, prácticamente estaban labio a labio. ― ¿Mmh?

No hubo mejores palabras para responder que la acción que hizo Taehyung, tomó al Omega bonito de las mejillas para saborear sus labios color carmín, y sabor a cielo. Jungkook sintió mariposas, explosiones y un sinfín de sensaciones al volver a probar los labios del Alfa, que, aunque era un beso tranquilo y hasta cierto punto temeroso, para él era la gloria.

― ¿Eso es un sí? ― Murmuro Jungkook cuando el beso terminó.

― Lo es ― Taehyung acaricio la mejilla derecha del Omega y este cerro los ojos para disfrutar un poco más el toque.

―Entonces formalmente somos novios. ― El menor lo abrazo fuertemente y Taehyung le beso la cabeza. ― Jimin y Jin se van a morir cuando les diga y...bueno todos.

―Oh, no, yo creo que es mejor que mantengamos esto en secreto. ― Soltó el Alta y Jungkook se aparto de el para mirarlo.

¿Quién entendía al Alfa?

―Pero ¿y ese cambio? ― Tae se aparto de Jungkook para irse a sentar a un sillón, le hizo señas de que se sentara con él.

―Bueno, pues por lo mismo que tu me dijiste, nada ha cambiado respecto a lo que los profesores piensan de ti, y el alumnado de mí. Así que lo mas sensato es seguir así. Al menos por el momento.

El castaño sintió una ligera punzada de algo que no supo descifrar. Pero como ya escribí antes, después sí que lo haría.

―Esta bien, supongo. ― Si Tae ya había cedido una vez, el también podría. Además, así se ahorraría muchos problemas, es solo que pensó que Taehyung saltaría por todos lugares de felicidad queriendo presumir su noviazgo con el Omega. Otra vez se equivocaba con respecto a él.

Ambos se mantenían abrazados en el sillón, Tae acariciaba las hebras castañas de su novio.

―Extrañaba mucho pasar tiempo contigo. ― La vocecita de Jungkook sacó de sus pensamientos al Alfa.

―Yo también, discúlpame por como me comporte, no maneje bien el rechazo.

―No tienes porque disculparte, yo fui quien actuó mal, pero ahora ya todo esta bien.

El alfa miro su reloj ya era un poco tarde.

―Tengo que hacer los deberes, ¿has hecho los tuyos?

―No ― Gimió un poco en queja porque no quería apartarse de su cuerpo y porque realmente no había hecho nada.

―Ya, bueno deberíamos volver a ello.

Jungkook asintió, aquello estaba mucho mejor de lo que pensó, tenía novio y ahora podría continuar con sus deberes para obtener su auto.

Porque Jeon Jungkook aun quería ese auto.

Y no se confundan no es que el Omega de lindos ojos por eso quisiera ser novio del Alfa de sonrisa peculiar, pero si aparte de novio podía tener un hermoso auto, ¿Quién era el para negárselo?

Ambos volvieron a los deberes ese día, y a comenzar un noviazgo a escondidas. Ese día se despidieron con besos y abrazos, Jungkook se sentía pleno y satisfecho.

Pero no así Taehyung, porque eso que dijo era cierto; Uno no olvida de la noche a la mañana.

Y el ciertamente no había olvidado lo que el Omega hermoso, pero cruel le había hecho pasar.