Caminando por los pasillos, se hacían largos y tediosos, sentía que le ahogaba y le apretaba la armadura, con tanto vigor tenía en mente su desicion ya fija en todo momento, estaba muy dichoso, porque había pasado la noche más hermosa de su vida a lado de su hermoso ángel, quien se mantenía en su habitación real, sin que nadie pudiera tocarlo o separarlo de su lado, sus pasos seguían y el sol cada minuto deslumbraba a cada torre del castillo, al seguir su camino hacia el patio principal, se cruza con el príncipe Nam...

—¿A donde vas con esa armadura mi Rey?

—¡Voy a empezar mi entrenamiento!

—Entonces, ¿estas decidido a ese duelo tan absurdo?

—Es mi beber cumplir con mi palabra, ¡soy un caballero!

—No quiero que te haga daño Jungkook...

—Ya es tarde para sermones, lo haré y punto...

—Será que lo haces, por ese campesino...

—No es un campesino, es el hombre que amo, ¡no lo entiendes Nam! jamás entenderás el verdadero amor💜...

—Si lo entiendo, tan solo si fuera correspondido por tu amor💜, ¡luchare porque asi sea!

—Ya habíamos hablado de eso Nam, Kim Taehyung es el dueño de mi corazón♥ entiéndelo por favor, no insistas en que te ame, porque no lo haré...

—Al menos déjame acompañarte a tu entrenamiento, yo estoy de tu lado y lo que menos quiero, es que te pase algo, mi amado rey...

—Esta bien, ¡vamos!

Yoongi a la espera de su rey, se dispone a esperar a su llegada, quien lo ve llegar con el pelidorado...

—Jin que haces con el aquí, se supone que es privado tu entrenamiento, no puedes mezclar a más personas...

—Tranquilo Yoongi, solo vino apoyarme—mientras que su mente pensaba lo contrario, al saber sus verdaderas intensiones de Nam...

—Vamos amigo, debemos seguir.

El rey toma su caballo, el cual era de sangre pura, blanco como el algodón y fuerte como cualquier potrillo que tuviera una buena vida en el reino, lo acaricia preparándolo para el duelo, Yoongi en cambio tenía un caballo más pequeño de lo habitual, era café y macho también, al estar listos los dos, se disponen a una cabalgata de enfrentamiento, se ponen sus cascos llevando consigo sus respectivas espadas, al chocar ambos empezaron a luchar, pero Jin no tenía aún la suficiente fuerza y Yoongi le ganó enseguida...

—Mi rey, debes concentrarte más, así te ganaran enseguida...

—Debo mantenerme firme—expresó el pelirosado con firmeza...

—Jin empecemos de nuevo—hechandole ánimos el príncipe Nam.

Con un grito, Jin decidido sale valiente de nuevo hacia Yoongi, quién estaba a la guardia ante cualquier amenaza de consentracion firme de su rey, el pelirosado fue el que atacó primero y lo mantuvo hasta seguir con el entrenamiento ambos.

Mientras que en la habitación real, Jimin aparecen ante la presencia de su gran amigo, quien aún dormía en esa lujosa y grande cama real...

—Tae Tae, ¡despierta! soy yo Jimin, tu amigo.

Al despertar vio a Jimin ante sus ojos con vergüenza de verlo desnudo por completo, cubriéndose con las sábanas, sólo agachó la mirada ante su pureza...

—No te avergüences ante mí, se que has amado y eres correspondido a ese amor💜tan puro que tienes, con ese  hermoso rey...

—De verdad me comprendes amigo—dando un suspiro de tranquilidad...

—Claro que si, por eso estoy aquí, para ayudarte...

—Como, ¿que pasa Jimin? debe de ser algo muy grave, para haber bajado a la tierra...

—Quieren destruir tu felicidad, ¡no puedo permitirlo!

—De verdad, ¿harías eso por mi?

—Por supuesto, eres como mi hermano pequeño y mi deber es protegerte de la maldad humana, que se desata por ahí...

—¿Quienes pretender tal atrocidad?

—Lo sabrás a su tiempo, solo te puedo decir que me quedaré un rato a tu lado, siendo un príncipe real.

El peliplateado se trasforma en un hermoso príncipe, con un traje real que convinaba muy bien con su hermoso cabello...

—Te ves hermoso Jimin, pareces un verdadero príncipe...

—Es un alago que me lo digas amigo, veré que puedo hacer por ti, por lo mientras, alistate para estar a lado de tu rey, se esta esforzando mucho por entrenar y ganar ese duelo a como de lugar...

—Con tus poderes, no puedes hacer nada por mi rey...

—No puedo Tae, acuérdate que fuimos creados para ser guerreros celestiales y no tenemos ese deber encomendado...

—De acuerdo, estaré listo en un momento...

Jimin sale de la habitación esperando por su amigo, quien se alistaba para salir, al sentir una mano en su hombro, enseguida voltea para saber de quien se trataba...

—Ahhh...¡Eres tu Jungkook!—haciendo una reverencia como tal...

—Buenos días príncipe, ¿porque tan solito por el pasillo principal del castillo?

—Bueno, solo quise caminar un poco—diciendo con firmeza el peliplata...

—Bueno, yo no tengo nada que hacer, así que podemos conocernos mejor, ¡te parece!

—Deberías ir a entrenar tu también Jungkook, ya que el rey lo está haciendo en estos momentos...

—¡Que haga lo que quiera! yo no necesito de entrenamiento, ya que soy muy experto en eso...

—No deberías confiarte, Jin no es tan débil como crees y te puede dar una gran sorpresa...

—Lo conozco muy bien y se que es mucho más débil que yo, por la forma de su carácter es muy inestable ante sus emociones y eso me dará la ventaja para ganarle...

—Eres muy seguro de ti mismo, ¡verdad! 

—Lo se, me alaga que me lo recalques, sobre todo tu hermoso príncipe que has llegado de la nada, solo para que te conociera—acercando su rostro de Jimin, viendo sus labios sensuales...

—Discúlpeme príncipe, pero es mucha tentación para mí...

—Que tiene que me acerque, ¡se que te agrado!

—Me acabas de conocer Jungkook, no sabes nada de mi, ya casi me quieres besar...

—Es que me deslumbra mucho tu belleza y necesito besarte—sin alejarse de los labios de Jimin...

—Eres también muy apuesto y me agradas, solo que debemos conocernos mejor.

Al sentir la acercanía de Tae, Jungkook enseguida se aleja de Jimin, quién se da cuenta enseguida de lo que pasaba entre ellos...

—Estoy listo Jimin, ¡vámonos!

—Esperen, ¿ustedes dos se conocen?

Ambos ángeles se ven a los ojos y trata de resolver la duda Jimin, enseguida responde...

—No, sólo que me encargo Jin que viniera por Tae, solicitó su presencia para ver el entrenamiento...

—Entonces voy con ustedes—nos les quedó remedio, más que acceder a la petición del pelicafe.

Mientras caminaban los tres a la plaza principal, Jungkook se acerca a Tae, con un poco de sutileza...

—¿Donde estabas Tae, te extrañé mucho?

—Bueno fui a caminar un rato.

—Entonces, ¿porque te escondes de mi—dándole señas el peliplata de su atrevimiento...

—No me preguntes más Jungkook, tengo que llegar con mi rey, ¡con permiso!—dando pasos largos al caminar...

—Se fue, ¡huye de mi! por Jin siempre...

—¿Estas enamorado de Tae? Jungkook...

—Antes de conocerte, estaba enamorado de Tae...

—Entonces, no puedo seguir platicando contigo...

—¿Estas celoso Jimin?

—Claro que no, ni siquiera te conozco, para sentir ese sentimiento extraño en mi...

—¡Creo que me gustas mucho!

—Tu también me agradas Jungkook, pero debo ir con los demás, no te importa verdad...

—Sera un placer acompañarte.

El príncipe Jungkook toma de la mano a Jimin, quien no dejaba de palpitar su corazón❤️ante los encantos del pelicafe.

Todo parecía un reto bien definido, su frente empezó a sudar al manteniéndose firme y su ritmo en su cuerpo empezó agotarse, Yoongi siguió con otra vuelta más para enfrentar a su Rey, quien no bajaba la guardia ante la lucha, Tae no podía ver el panorama, su mente divago por un instante al ver a su amado agotado y sin fuerzas...

—¡Basta! se acabo el entrenamiento, esta muy débil, Yoongi.

Jin al ver a su ángel le da una sonrisa y deja caer la espada tan pesada, agachando la mirada, sin dejar de agitarse su corazón...♥

—No te preocupes mi ángel, estoy bien—casi callendose del caballo.

Nam intervino y pudo bajarlo del caballo, sentado por instante, Nam no quería quitarse de su lado, hasta que Jin quería que su amado estuviera ahi...

—Deja que Tae este a mi lado Nam...

—Si mi rey está bien, a lo que tú ordenes y mandes—dándole una cara de reto al pelirubio...

—¡Aquí estoy mi rey! para lo que necesites...

—Es suficiente por hoy, llévame a mi habitación...

—Tiene razón Jin, llevalo a su habitación a que descanse Tae—exclamó Yoongi, algo preocupado por su situación.

Tae y Jin se van y llegan Jimin y Jungkook juntos, Yoongi se puso un poco celoso y le dijo al ángel peliplata...

—¿Que haces con este engreído Jimin?

—Quiso venir acompañarme...

—Solo vine asegurarme de que Jin, no aguantara el entrenamiento...

—¡Callate Jungkook! que no ves que por tu culpa, Jin esta en peligro—defendiendo Yoongi a su rey...

—Nadie lo reto, al contrario, ¡me reto a mi!

—Ya callate, no te quiero seguir escuchando—cruzando los brazos de lado a lado.

El peliplata solo mira a los dos y nota, que hay un extraño comportamiento extremo de ambas partes, Yoongi noto su molestia, al verlo junto a Jungkook y este se alejo enseguida al ver a su amigo Tae, no sabía con exactitud qué es lo pasaba y se dio a la tarea de seguir descubriendo sus comportamientos.

Mientras que el pelidorado estaba furioso, porque Jin le dio la prioridad de nuevo a Tae, dando pauta a que su odio creciera más por el.

Al estar este trío de enamorados, Jungkook tuvo una idea para ganarle a Yoongi con Jimin...

—De verdad quiero conocerte mejor Jimin...

—Yo también quiero conocerte mejor, ¡eres muy simpático!

Yoongi se sorprendio mucho ante la respuesta de Jimin, que dejó de cruzar los brazos...

—¿Que estas haciendo Jimin?—susurrandole en el oído...

—No te preocupes confía en mí, está todo bajo comtrol...

—Estas seguro, de lo que estás haciendo...

—Por supuesto, sólo sígueme la corriente...

—Está bien confío en ti Jimin, espero que no te enamores de ese sin vergüenza de Jungkook...

—Claro que no, todo está bajo control...

—Ven Jimin, vamos a dar un paseo, por aquí hay presentes que nos oyen...

—Esta bien, ¡te veo mas tarde Yoongi!

—Eres muy simpático y me agradas mucho, Jimin.

Yoongi ve como Jungkook queda impactado con la belleza que deslumbraba aquel joven de cabello plateado, con una carita tan dulce, tierna y esos ojos rasgados que desaparecían cuando sonreía, no podía resistirse ambos a sus encantos, preguntándose Yoongi—¡no debo estar celoso, Jimin jamás le haría caso a un tipo como Jungkook, no debo preocuparme por eso!—cruzando de nuevo los brazos.

Cada uno por su lado, se quedaron pensando en sus planes entre el lado bueno y malo del AMOR ETERNO, que se tenían el rey y el ángel.

Al llegar a su habitación, Tae le quito enseguida la herradura pesada que tanto le estorbaba, preparando la tina de baño, hizo que se relajara y descansará ante dicho esfuerzo que le había provocado ese duelo...

—Me duele verte asi mi rey, ¡te vez muy agotado!

—No te preocupes mi vida, estoy bien solo me agite de mas...

—Te daré un masaje en el cuerpo, mientras te metes a la tina.

Al ver meterse a la tina completamente desnudo, sus ojos brillaron como destellos de luz y le da un rico y suave masaje en todo su hermoso cuerpo, dando con éxito a que su rey lo estuviera disfrutando, con mucho gozo y alegría.

Bueno mis lectoras, con este capítulo concluyó por hoy mis actualizaciones, sigan disfrutando del cumpleaños de mi Jin hermoso, gracias por leer y dejenme su apoyo y sus comentarios, las veo pronto☺️🎊🎁🎇🎉☺️🌺😭💜🥧🍰🎂