El maldito invierno - Réquiem
ADVERTENCIA: El siguiente capítulo NO representa el tratamiento realista de enfermedades mentales ni sirve como referencia para tales propósitos. Si se encuentra en una situación similar a la que se va a mostrar a continuación, ir con un profesional de salud mental. Se recomienda discreción para la siguiente lectura.
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—Cierra los ojos, Lupe. Imagina, ¿Dónde quisieras estar ahora? ¿Dónde te sientes más cómoda?
—...Frente a mi televisor, con un control en la mano, jugando mi videojuego favorito.
—Bien. Siéntete libre de estar ahí durante el resto de la sesión. Si te llegas a sentir incómoda, avísamelo y me detendré.
—Está bien...
—Primero...
LEVEL 1-1: Lupe, la imagen.
—¿Quién eres tú? ¿Cómo es el personaje que controlas en la pantalla? Dime cómo se ve, cómo es, lo que le gusta, lo que no le gusta, cuéntamelo todo.
—¡Oh! Bueno, Lupe es una chica de piel morena, de un metro sesenta de estatura, pelo castaño, tengo unas cuantas pecas en el rostro, y siempre me peino con un fleco de tubo, igual que mi mamá. La gente dice que soy muy amable, servicial, y motivada, ¡Pero no es para tanto! También dicen que soy algo intensa, impulsiva y que me meto demasiado en la vida de los demás. Me gusta hacer deporte, las historias de amor que no sean muy largas, y Cosmos, mi videojuego favorito. No me gusta ni las matemáticas, ni las sardinas, ni los secretos, porque no soy muy buena manteniéndolos.
—Ya veo. Me das la impresión de que eres una muchacha agradable, pero también es cierto que nuestro ser no solo termina en nosotros, sino que es también producto de cómo nos relacionamos con quienes nos rodean, y en ese conjunto, hay personas que poseen mayor importancia que otras. En tu caso, ¿Quiénes son esas personas?
—Pues veamos...¡Primero, mi mamá! ¡Ella es la persona que más amo en el mundo! ¡No podría pedir una mejor mamá! ¡También quiero muchísimo a Fabi, mi hermano! A veces, me gusta joderlo, ¡Pero tampoco podría vivir sin él!
—Me alegro de que te sientas tan feliz con tu familia, Lupe. Ahora bien, ¿Hay otras personas importantes fuera de tu círculo familiar? Pueden ser amigos, parejas, personas de confianza...
—Eeh...sí. Tenía un grupo de amigas con las que he andado desde que entré al cole: Alejandra, una de mis mejores amigas, y Loretta...mi mejor amiga...pero, con ella, tuve una pelea, y pienso que no quiere volver a ser mi amiga. También está Gabriel, un chico que recién conocí este año, pero que me ha enseñado tantas cosas y se ha vuelto tan cercano a mí que también lo considero uno de mis mejores amigos, pero a él...a él también le hice daño.
—Entiendo. Pongamos un clip en eso que me dijiste; lo discutiremos en un momento. Antes de eso, quiero que me respondas una última pregunta: ¿Qué piensas ser cuándo seas grande? O déjame plantearlo de otra manera: ¿Cómo te vez a ti misma en un futuro? No tiene que ser en muchos años, sino tan lejos como quieras llegar.
—Pues...me veo terminando el cole y...metiéndome a estudiar música o algo así en alguna universidad. Después de eso, la verdad es que no sé.
LEVEL 1-2: Lupe, la idea.
—Los personajes de los videojuegos se hacen más poderosos conforme avanzan en su aventura, aprendiendo habilidades nuevas, mejorando las que ya tenían al principio y cambiando conforme la situación. Entonces, ¿Qué tanto crees que has cambiado, Lupe? Podríamos poner tu primer año de colegio como punto de partida.
—Está bien. Cuando entré, solo andaba con Loretta, y me costaban mucho las materias en el colegio. Traté de estudiar bastante para apenas pasar raspando; creo que no debía esperar nada más, jeje...
¿Recuerdas si Loretta se encontró con las mismas dificultades?
—No, para nada, ella sí es lista.
¿Y no pensaste en pedirle ayuda?
—Algunas veces, pero solo si realmente no sabía que hacer, porque no quería molestarla. No tiene que atrasarse solo porque yo soy lerda aprendiendo, pero...creo que he mejorado, y ya no me siento tan mal por estudiar junto a ella.
—Es bueno cuando una amistad te suma a tu persona, ¿Hay otro caso igual que se te venga a la mente?
—¡Oh, claro! Ale, por ejemplo, me ha ayudado mucho a aprender a vestirme decente, con todo lo que sabe de moda. Ella es tan buena en lo que hace que hasta unos cuantos maes me han pedido bailar con ellos, pero les digo que no, no vaya a ser que me vean sin vestido y maquillaje y les dé un infarto, jajaja.
—¿Estás segura de que es solo por el trabajo de tu amiga? Al fin y al cabo, sigue siendo a ti a la que se están acercando.
—Tal vez haya alguno que otro visco al que le guste, pero ¿Aquellos chicos? Completamente embobados por la ropa.
—Entiendo. ¿Qué hay acerca del tal Gabriel? ¿Qué me puedes decir de él?
—¡Es una gran persona! A veces, puede parecer gruñón y antipático, pero es mucho más sensible de lo que quiere admitir. Además de cosas de Cosmos, él es alguien muy maduro, igual que Lore. Algo que también aprecio de él es que nunca va con todo contra mí, desde la primera vez que peleamos hasta la última, solo para no hacerme sentir mal.
—Ahora bien, veo que aprecias mucho a tus amigos, pero también me dices que los lastimaste. ¿De qué manera los lastimaste?
—Mmm, ¿Cómo le explico? ...Verá, de un tiempo para atrás, yo presentía que Lore y Gabo se gustaban entre ellos y pues, me dispuse a juntarlos a cómo diera lugar, ¡Y sentí que estaba cerca! Pero, de un pronto a otro, todo empezó a salir mal. Fui a un viaje con Lore, y tuvimos momentos muy extraños, y luego, se emborrachó de la nada, y me besó por accidente-.
—¿Por accidente, dices?
—¡Pues claro! ¡Ni modo que me hubiera querido besar a mí! ¡Es mi mejor amiga y ambas somos chicas! ¡Las amigas no se besan! En el estado en el que estaba, de seguro pensó que era Gabriel, ¡Y después con él, ocurrió otro problema! Empecé a salir en citas con él, pensando que solo era para que practicar una cita de verdad de él con Lore, pero después, fue él que se me declaró y eso, ¡Eso no tenía ni pinga de sentido! ¿Por qué a mí y no a Lore? ¿O a Ale? A ella siempre se le declaran, pero a mí no.
»Debía estar haciéndome una broma, obviamente, pero, si era de verdad y le decía que no...le rompería el corazón, ¡Y él no se lo merece! Y después...todo se arruinó. Y ahora, ambos deben odiarme.
—¿Te dijeron eso? ¿Qué te odian?
—...
LEVEL 1-3: Lupe, la ilusión
—Lupe, en tu juego, en lo que ves en la pantalla, hay muchos personajes, de distintos lugares y pasados, con ideales muy diferentes unos de otros, y formas completamente opuestas de ver el mundo. En ese videojuego tan basto, ¿Por qué piensas que no puedes ser del gusto de alguien?
—No es que no pienso que yo pudiera gustarle a alguien, pero...¿Por qué se conformarían conmigo? Las hay más lindas, más atléticas, más listas, más altas, más...¡Todo! Eso yo lo entiendo, y no necesito que alguien me mienta diciendo que solo tiene ojos para mí, con que quiera que seamos amigos, yo estoy feliz.
—Entonces, ¿Eres feliz ahora?
—¡No, pero es diferente!
—¿Y por qué crees que lo es?
—¡No lo sé! ¿Ok? ¡No lo sé! ¡Por eso vine con usted! ¡Para que me diga que está mal conmigo!
—Lo que está mal contigo...Lupe, devuélvete a un nivel anterior, a uno que se parece a este momento, ¿Puedes recordar algo que se le compare?
—...Sí, una vez en la escuela. Traté de juntar a dos compañeros: Ana y Miguel, ¡Y lo logré!
—Y cuando los lograste emparejar, te sentiste feliz, ¿Verdad?
—¡Claro que—NO— sí! ...¿Ah?
—¿Sucede algo?
—N-no, nada, me distraje un poco.
¿Por qué querías juntarlos?
—¡Hacían linda pareja! Ana era amiga mía, y ella me había dicho que le gustaba Miguel—TAMBIÉN— ¡¿Qué?! ¡¿Por qué dice que me gustaba también?!
—Yo no he dicho nada, Lupe. ¿Te gustaba el muchacho?
—T-tal vez un poco...¡Pero Ana era la mejor opción! En cuanto me dijo que le gustaba, supe que era así, y...tal vez lloré un poco, pero al final, valió la pena. Sé que piensa que estoy loca por decir eso, pero es la verdad...
—"Loca", huh...he aprendido mucho sobre ti hasta ahora, Lupe, y tu juego está lleno de muchos objetivos secundarios y niveles secretos, pero hay algo que me ha estado inquietando durante este tiempo y es que, me dijiste que querías estudiar música, mas, no logro ver que esta tenga mayor impacto que el resto de cosas que rodean tu vida. Entonces, ¿Por qué música?
—...Mi madre estuvo en una banda, antes de tenerme.
—¿Ella te ha exigido que te introduzcas en el mundo de la música?
—...No, no realmente...Cuando estaba en el kínder, me encantaba ver películas y fábulas. Ya había DVDs en ese tiempo, pero no teníamos plata para uno, así que nos la jugábamos con un VHS viejo que teníamos. Un día que mamá estaba durmiendo, quise ver una película, y tomé una de las viejas cintas sin saber de qué era. Se trataba de una grabación vieja de uno de sus conciertos, pero, al final, se cortaba y pasaba a otro video que habían quemado en la misma cinta.
»Era mi mamá, con el maquillaje esparcido por su cara, hablando a la cámara. Ahí, ella cuenta que su novio, alguien que llamaba "Cañoto", la había dejado, a ella...y a una bebé. Mi mamá entonces dice que la única razón por la que se dejó embarazar fue porque su novio le había dicho que lo criarían juntos. Cuando mis abuelos se dieron cuenta, la echaron de la casa; también explicaba que con la banda no ganaba lo suficiente para mantener una hija. Decía que no estaba lista para ser una madre soltera, y dejar todo por lo que tanto había trabajado, y...y-y al final, dice "si ese bebé nace, mi vida se acabará" ...Y yo estoy aquí.
LEVEL 1-4: Lupe, la mentira.
Lupe, ¿Me estás tratando de decir que te sientes responsable de acabar con los sueños de tu mamá? ¿Es por eso por lo que quieres ser música?
—¡Es lo mínimo que puedo hacer!—ES LO ÚNICO QUE PUEDO HACER.
Te culpas por algo de lo cual no podías interferir ni controlar. Estás siendo injusta contigo.
—LO MEREZCO—¡No lo entiende! ¡Sí interferí! ¡Sí soy responsable!
¿Cómo pudiste interferir cuando aún no habías nacido?
—¡No en eso! ¡Sino...con mi papá! ¡El que se casó con mi mamá después!
¿Qué fue lo que sucedió con tu papá, Lupe?
—Él—FUI YO— murió cuando yo era pequeña, ahogado en el mar.
¿Qué fue lo que sucedió? ¿Por qué dices que interferiste?
—Había dos chicos en la playa, el oleaje fuerte los alejó de la costa—YO LOS VÍ—. Mi papá, él era un buen nadador—LOS SALVÓ— , pero mi mamá me dijo que él—SÍ SALIÓ— no pudo salir del agua...p-pero yo no lo recuerdo así—ESCAPÉ DEL CARRO—. Estaba...cerca—CORRÍ HACIA ÉL—...y después...recuerdo que había agua—RESBALÉ—. Recuerdo su voz, gritándome desde arriba—NADA, HIJA—. Recuerdo que me agarró—AGÁRRALA—y mi mamá estaba ahí—UNA OLA—, y después...—ANDRÉS—¿Q-qué pasó—PAPÁ— después? ¡¿Por qué no—MAMÁ MINTIÓ— lo recuerdo?! ¿Qué...?—ELLA SABE— No...—FUI YO—no, —FUI YO—no—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—FUI YO—¡NOOOOO!—LO MATÉ.
LEVEL 1-5: Lupe, la que no debería existir.
Lupe, ¿Qué ves en la pantalla?
—La imagen está muy pixelada y sin color, pero...veo un aula de mi colegio, vacía. También hay un texto: "En un lugar de aprendizaje, no hay lugar para niñas tontas y malas estudiantes".
Cambia la pantalla. ¿Qué ves ahora?
—Una tienda de ropa. También hay otro mensaje: "Nada aquí hará que las feas se vean menos feas".
¿Qué ves ahora?
—Un televisor, un par de sillas, y dos controles: "Un control más no hará la diferencia si nadie quiere jugar contigo"
¿Qué ves ahora?
—Mi celular; voy a contestar. Se escuchan voces de baja calidad; las reconozco todas: "Llevamos tanto tiempo andando con Lupe que se nos olvida que ella también es una rarita", "No quiero NI necesito tu lástima", "¡¿Acaso eres bruta?!", "Si esa bebé nace...mi vida se acabará", "Esto que te está pasando, te lo mereces"...
Lupe, mira a la pantalla una última vez. ¿Qué aparece ahora?
—Ojos...miradas rojas que me rodean, todos hablan al mismo tiempo, con voces de la gente que más quiero:
—Eres un error, un accidente, debiste haberte quedado sola en la mar. Puedes estar entre nosotros, pero tu existencia solo nos causa sufrimiento. ¡Tienes que compensarnos! ¡Haznos felices cada día de tu vida! ¡Solo así, podrás justificar que sigas viva! Deja de hacer eso, y dejarás de tener valor para nosotros. NUNCA LO OLVIDES.
—Todo es cierto. Solo por estar viva, le causó mucho dolor a la gente que amo, y lo único para lo que vivo es para pagar por eso que les hago, pero no puedo ignorar la verdad: Sería mejor para ellos...si yo ni existiera.
...Lupe, los videojuegos son un fascinante medio de expresión artística, igual que cualquier otro. Igual que un libro o película, estos de sumergen en un mundo de emociones y sensaciones ajenas al que ya habitamos, sin embargo, al final del día, la película va a terminar, tendremos que cerrar el libro, apagar la consola...y ver el mundo como realmente es. Lupe, piensa en todo lo que has vivido hasta ahora, y en las personas que has conocido: ¿Piensas que realmente no ven por encima de las cosas que haces por ellos? ¿Es que ellos solo ven cada uno de tus errores cuando te miran a los ojos?
—No importa lo que vean, porque les miento. Finjo ser buena para que alguien me quiera tener cerca, para justificar que vivo sin propósito.
Es una forma de racionalizar nuestras buenas acciones; el simple deseo de pertenecer, pero hay personas que nos aman incluso antes de que hayamos hecho algo por ellos, ¿No? Incluso cuando ya nos aceptan, buscamos hacerles bien, aunque no nos lo pidan. Querer pertenecer no puede ser el fin de todo. Piénsalo, ¿Acaso no has amado a alguien sin esperar nada de ellos?
—Que yo pueda amar no significa que alguien me ame de vuelta. Tan solo están siendo amables.
¿Y eso no es una forma de amor? Piensas que le debes algo a todos para que quieran, por ende, piensas que como no tienes nada que ofrecer, nadie te quiere, pero solo falta que vuelvas a repasar tu camino. ¿En verdad es tan absurdo que Loretta y Gabriel te amen? ¿Por qué alguien como tú no podría hacerlos sentir amor?
—¿Po...podría ser que todos sus gestos eran verdaderamente solo para mí? Las miradas, las palabras, los gestos...¿Para mí?
Dudas de lo que ves porque sigues bajo la sombra de esa gran mentira en la que te refugiaste, que es que le arruinaste la vida a tu madre. Tu niña interna aún no puede reconciliar la imagen de aquella cinta sea la misma mujer de la que creías tenías su amor incondicional, y tu ansiedad te guío a identificar a esa cinta como si fuera la verdadera naturaleza de tu madre, no obstante, te pregunto: La de la cinta...¿Sigue siendo tu madre? ¿Que no ha cambiado en su parecer desde entonces? ¿Sientes que no te ama?
—...No...¡NO! ¡Mi mamá sí me quiere! ¡Y me quiere muchísimo! ¡Soy una hija tonta, fea, y mala, pero ella aún me quiere! ¡¿Por qué pensaría que ella me miente cuando dice que me ama?!
Es ahí donde quería llegar. No ignoras que aquellos que te rodean te aman de verdad, pero hay algo en eso que te genera ansiedad, y es el dolor, el dolor que tu misma has sentido, y el que piensas que le provocarás a los demás ya sea tarde o temprano, como paga a aquellos que te quisieron sin esperar nada a cambio...¿Es algo así lo que sientes, Lupe?
—...Creo que sí.
Bien, es hora de volver a poner los pies sobre la tierra, a ver el mundo por lo que realmente es: Sin cuartos, sin pantallas, sin pixeles y sin control. Sal de esa prisión, Lupe.
LEVEL 2-1: Lupe, la que, a pesar de todo, quiere vivir.
Lupe, ¿En dónde estás ahora? ¿Qué ves frente a ti?
—Estoy...en una playa. El agua y el cielo son del mismo color, la boca me sabe un poco sal, y las gotitas de las olas que pegan contra las rocas se sienten bien al caer sobre mí; me da un poco de cosquillas...¿Por qué me siento bien estando aquí?
Porque tus miedos no están en el mar, Lupe. Algunos piensan que querer no existir es lo mismo a querer morirse, pero no es así. Tu deseo no es dejar este mundo, si no dejar de hacerle daño a los demás. Como seres humanos, nuestra experiencia en nuestra vida siempre estará limitada a una pequeña burbuja de toda la existencia, donde los sueños y aspiraciones de aquellos con quienes compartimos el mundo nos eluden. Aunque no lo queramos, nuestra búsqueda de felicidad terminará haciendo fricción con la de alguien más, y ahí es donde surge el dolor: Solo uno puede comprar el último helado en un día caluroso, no todos pueden llevarse la copa a casa, y por cada "Sí" que llena el corazón de emoción, hay un "No" que hace todo lo contrario. "Ser" y "desear" nos hace personas, capaces de sentir dolor y provocarlo; capaces de ganar, y de perder.
—Si quiero vivir con aquellos que amo, ellos me herirán...y yo los heriré a ellos.
Lupe, en esta playa, eres libre de todo eso: Del eterno ciclo de deseo y sufrimiento que nos mueve a todos. Aquí, podrás vivir en paz, sabiendo que no volverás a herir a nadie nunca más. Tan solo di lo que quieres, y la historia termina aquí. ¿Quisieras quedarte aquí?
[¿QUEDARTE AQUÍ?]
[SÍ] [NO]
[SÍ] >>>[NO]
—¡No lo acepto! ¡No quiero quedarme sola sin ver nunca más a los que quiero! ¡No seré la más bonita, pero no soy fea! ¡Tal vez me cuesten un toque los estudias, pero no es porque sea bruta! ¡A veces hago cosas malas y crueles! Pero ¡¿Quién no?! ¡No significa que yo sea así! ¡Y es verdad! Me da miedo saber que, por más que intente evitarlo, le causaré dolor a la gente que más quiero en el mundo, y ellos me lastimarán también, pero...si el sentimiento es sincero, serán muchas más las veces en donde me sentiré agradecida de tenerlos a mi lado...y ellos, a mí. ¡Quiero vivir en este mundo y ver mi historia hasta el final! ¡Quiero darme la oportunidad de cumplir mis sueños! Y...¡Y quiero amar a la persona que quiera sin restringirme! ¡Respuesta definitiva!
En ese caso, abre los ojos.
—¿Qué?
—Que con eso acabamos por hoy, Lupe —aclaró el psicólogo de barbas blancas, desde el costado de la chiquilla.
—Oh...
—...¿Sucede algo?
—No...¡N-no, nada! ¡Estaba un poco desubicada, es todo! —De pronto, una cinta acuosa se asomó sobre los párpados inferiores de Lupe, y sin pensarlo, se lanzó a abrazar al experto, tomándolo por sorpresa— ¡Muchísimas gracias por todo!
—Parece que hicimos bastante progreso. No creo que sea necesaria otra sesión, pero si te vuelves a sentir mal, no dudes en llamar, que la salud mental siempre es importante.
—¡Trataré de no olvidarlo! ...Peeero, no hago promesas —carcajeó la muchacha— ¡Hasta luego!
—Adiós, hija.
Ver el mundo por lo que es puede ser doloroso; no es un cuento de hadas, no siempre hay héroes que llegan al último momento, ni siempre hay un final feliz, sin embargo, la belleza de esas historias de fantasía también se encuentra aquí para aquellos dispuestos a buscarla a través de un camino lleno de lodo y espinas. Guadalupe no se había convertido en una persona capaz de transitar dicho camino, sino que entendió que ya lo era, pero que incluso así, todos ocupamos soltar peso en el camino si deseamos llegar al final. Aquí comienza el final de "Amor entre perdedores".
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