-estas emocionado por tu primer día en la preparatoria?-le pregunté a Harry, mientras salíamos del comedor, para ir a clases.
-en realidad no-admitió-pero lo haré por ti.
-bien-sonrei-nos vemos a la salida entonces-dije para luego darle un pequeño pico y entrar a mi salón de clases.
-buenos dias alumnos!-el profesor thatch nos saludó a medida que entraba-hoy hablaremos de los viajes en el tiempo-sacó un collar dorado con un dije raro en medio-alguien sabe que es esto?-Cody levantó la mano -si, señor Pan, sabe que es?
-es un giratiempo profesor-respondió-y como su nombre lo indica, nos permite viajar en el tiempo.-explicó.
-exacto-sonrio orgulloso.
-profesor, ese artefacto en verdad funciona?-pregunté curiosa
-si, pero para seguridad de los alumnos no dejamos que lo utilizen-dijo con obviedad.
La clase continuo, pero no había prestado atención, pues una idea se me habia ocurrido, solo espero que Harry quiera colaborar.

-amor, que estamos haciendo?-preguntó mi novio mientras entrabamos a escondidas en el salón de clases.
-necesito de tus habilidades como ladrón-explique
-que quieres robar?-sonrió con maldad.
-un girartiempo-caminé hasta el armario del fondo.
-un gira... qué?-frunció el ceño confundido
-giratiempo, es para viajar en el tiempo.
-quieres...?-sus ojos se abrieron como platos-estas loca?, podríamos causar una catastrofe o peor podríamos dejar de existir-hizo una mueca de espanto, rodeé mis ojos divertida
-asustado Hook?
-para nada-con su garfio abrió la cerradura. Me metí y saque el collar
-estas listo?-pregunté pasando la cadena por nuestros cuellos, el dije quedo en medio de ambos.

-si-murmuró.
-dime, cuantas vueltas le doy?
-no lo sé-se encogió de hombros
Decidí darle diez vueltas.
El tiempo empezó a retroceder muy rápido, ya me estaba empezando a sentir mareada, la verdad.
Cuando todo paró, noté que estabamos en una pequeña aldea en lo que parecía Francia. Junto con Harry empezamos a caminar por el prado, que nos llevó a un camino de tierra. Ya llevamos unos diez minutos cuando escuché a lo lejos un relinche de un caballo, segui el sonido hasta que encontré al pobre animal que estaba asustado. Estiré una mano y a paso lento me acerqué, su cabeza golpeó mi palma suavemente para que lo acariciara.
-hola amiguito, te perdiste?-le pregunté, algo estúpido teniendo en cuenta que no iba a contestarme por que es un animal.
Me subí en su lomo y coloqué la capa que traia puesta sobre mi cabeza, regresé por donde vine, parando junto frente a Harry.
-sube Vaquero... o debería decir pirata?-dije burlona
-déjame ir adelante, como todo un caballero-pidió, suspiré y me moví hacia atras dejando ese espacio para el.
Seguimos el camino hasta que llegamos a un castillo, lleno de guardias vestidos con los colores del país en el que estabamos.
-en donde estamos, Britt?-preguntó el castaño, mientras me ayudaba a bajar del caballo.
-creo que es el castillo de mi padre, antes de conocer a mi madre.-comencé a caminar hacia las rejas
-pero que haces?-tomó mi brazo deteniendome
-quiero verlo-dije obvia.
-estas loca-dijo burlón.
-cállate o me regresaré sin ti-reí
-se que no lo harías-me atajó hacia el
-esta bien, tienes razón-tomé sus brazos que descansaban en mi cintura y los quité-vamos?

Logramos pasar inadvertidos, lo que fue bueno, por que sino no se que le diría a quién seria mi padre en unos cuantos años, quién era.
Las puertas principales se abrieron dejando ver al Rey Adam, el general de la tropa se acercó velozmente hacia el.
-señor, que puedo hacer por usted?
-solo vigilar-miró hacia este lado, justo cuando Harry tomaba mi brazo y me atria hacia el, detrás de la pared para que no nos vieran.-presiento algo.
-si señor-respondió el pelinegro.
-casi te ve-gruñó Harry
-tranquilo-intenté que se relajara acariciando su brazo-traigo puesta una capa, no puede verme el rostro.
En cuanto la tropa se distrajo, con nuestros dones como perdidos, nos infiltramos en el castillo.
-vivir en la isla, tiene sus beneficios-dijo el castaño cuando estuvimos dentro
-si tienes razón.-miré hacia los lados-en donde estará la alcoba de mi padre.
-hay Dios, espero salir vivo de esta-murmuró, como lo oí, golpeé su hombro molesta
-eres un idiota!-exclamé en un susurro
-tu idiota, amor-sonrió socarrón.
-ahora no-rodee mis ojos con fastidio
Sali del escondite y caminé hacia donde creía podia estar la futura Bestia.
-así que este campesino se perdió y terminó aquí en mi palacio?-gruñó molesto Adam.
-Señor, el hombre esta enfermo, no podemos dejarlo en la calle, que pensarían los demas de usted?-era el jefe de la tropa.
-es un campesino, D'Artagnan!-exclamó enojado-no debería estar en este palacio.
-permitame que se lo diga, pero esta siendo un egoísta y tirano con ese hombre
-soy tu Rey, tenme respeto, sino quieres que te devuelva tu antigua vida en la prisión, con tu amiguita de hierro-amenazó
-si señor, lo siento-sus zapatos se escucharon cerca por lo que me escabullí en una de las habitaciones con Harry por supuesto.
-el hombre del que hablaban era tú abuelo, no?
-si-pensé en mi padre-el no se ve como una bestia-fruncí mi ceño-pero si actúa como tal.
-hay alguien ahí?-preguntó una voz detras de la puerta, miramos hacia todos lados
-el armario-susurró el pirata, nos ibamos a meter, pero noté que estaba un poco corrido
-mira una puerta secreta-movimos el mueble y nos metimos, era un pasadizo que lleva por unas escaleras al que supuse era el segundo piso. Salimos por una de las paredes de una habitación, muy lujosa, con una cama de dosel y otras cosas que no miré.
-es la habitación real-dije mirando a mi alrededor.
-estaré en mi alcoba si necesitan algo-oímos al Rey
-Harry, bajo la cama-asintió y rodamos debajo de esta.
Adam entró y miró el escritorio al final de la habitación, había una caja de madera y una nota.
Leyó todo, para luego abrir la caja, sacó una mascara de hierro?, se la acercó al rostro y se la puso pero algo debió pasarle por que la quitó rapido y la guardó, que signifacaba eso?

-Rey adam-D'Artagnan se asomó por la puerta
-que quieres?-lo miró con desprecio
-encontramos a alguien husmeando en el castillo, quizás quiera verla-informó.
-traiganla-ordenó.
Al cabo de unos minutos una chica castaña apareció siendo sujetaba por dos guardias
-que tenemos aquí?-preguntó con una sonrisa socarrona en el rostro-quien eres?
-me llamó Bella-respondió, se notaba molesta-su majestad-gruñó al final.
-y que haces husmeando en MI palacio?-resaltó el "mi".
-vengo por mi padre-admitió.
-el anciano, que presumía de ser inventor y que se perdió?-rió burlón
-no presume, es un inventor-lo defendió.-dejelo ir, por favor.
-mm... no, no lo creo-se volteó hacia la ventana-el morirá en las mazmorras por atreverse a entrar a mi palacio y creo que tú lo acompañaras.
-es usted una Bestia!-chilló con lágrimas en los ojos
-lo sé querida y créeme, me importa muy poco-hizo un gesto con sus manos y los guardias la comenzaron a arrastrar hacia la puerta
-esperé por favor-suplicó-dejelo ir... me-se calló unos segundos-me quedó aquí por él-sugirió.
-bueno... es una oferta tentadora-mi padre se acercó y acarició su cabello observandola-puedes ser mi amante.-se separó y miró a los guardias-dejen ir al anciano y lleven a la chica a su nueva habitación-ordenó.
Cuando Adam salió, nosotros nos deslizamos fuera de nuestro escondite
-mi padre si era una bestia-comenté indignada
-si te hace sentir mejor, mi padre era un pirata tirano, creo que en cierta forma, el también fue un villano-dijo haciendo referencia al Rey.
-si-murmuré al salir de la habitación.
-que haremos ahora?-preguntó
-recorramos un poco el castillo-sonreí y tiré de su mano para luego correr por los pasillos sin que nos vean.
-has escuchado que el baile se pasó para esta noche?-comentó una de las doncellas que hacían la limpieza a otra.
-ya se cual seran nuestros planes de esta noche-sonrio con malicia.
-ay no-murmuró Harry asustado.

-no puedo creer que tenga que usar esto-dijo el pirata mirandose, no pude evitar reír
-lo victoriano no te queda-frunci mi nariz con una sonrisa burlona
-wow!-dijo viendome-de donde sacaste eso?

-del mismo lugar que tu sacaste eso-alisé el vestido con las manos-el corsé es terriblemente molesto.-gruñí
-no creo que hayas encontrado eso en el armario del Rey-sonrió pícaro
-hiciste que?-mis ojos se abrieron como platos-lo tenias que tomar de la lavandería.
-oops!-se encogió de hombros con una sonrisa
Llegamos al salón y estaba lleno de personas con máscaras que intimidaban mucho
-Harry, esto da miedo-le murmuré al chico que traía agarrado de la mano.
-verdad que si?-miró hacia todos lados-mira tus padres estan allá bailando-giré mi cabeza y en efecto estaban en medio de la gente danzando.
-bailemos, asi podremos acercarnos-acomodé mi mano sobre su hombro mientras la otra sujetaba la de harry y con el restante abrazaba mi cintura.
En un mal movimiento pisé a Adam, pegó un grito y la música dejo de sonar.
-que crees que haces?-me gruñó
-lo siento pa... su majestad-dije mirando el piso avergonzada.
-guardias!-cuatro aparecieron dos sujetaron a Harry y los que quedaban me tomaron a mi, el Rey me quitó la mascara-eres una niña-frunció el ceño.-llevensela.
-no, por favor-supliqué.
-el es tú acompañante?-miró a Harry, asentí asustada-lo quiero muerto-miró a quienes lo sujetaban
-no!-grité-por favor-supliqué.
Iba a responder pero vio algo que lo atemorizó, salió huyendo del salón, todos quedamos impresionados.
-que hacemos ahora?-preguntó uno de los que tenían a Harry a D'Artagnan.
-no lo sé, iré a hablar con él.
Pasaron como unos veinteminutos, hasta que apareció, pero estaba diferente, no en físico sino en personalidad, pues se puso frente a mi y me miró con compasión, con una dulce sonrisa.
-que hacemos con ella, su majestad?
-dejenla y al chico también-ordenó
-Adam, estas bien?-preguntó mi madre
-si, es una niña, Bella, no la lastimaré.
Cuando estuvimos libres, Harry me arrastró hacia la salida.
-que acaba de pasar?-preguntó confundido
-no lo sé, pero aquí hay gato encerrado-dije pensativa mientras miraba la puerta detras de nosotros.