Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 12

Estaba terminando de guardar el delantal para marcharme, Kook me había mandado un mensaje diciendo que me estaba esperando fuera, por lo que quería apresurarme para no hacerlo esperar. Acomodé mi camisa y ya estaba dispuesto a salir cuando el señor Kang apareció.

Desde hace un mes que me está acosando, me da regalos caros y flores. Ya hemos discutido varias veces porque él no quiere acabar de entender que tengo novio y lo amo.

Estás hermoso hoy, Jimin —dijo con su típico tono "seductot"—, como siempre.

Hmm si, gracias —musité y pasé por su lado para irme, pero él terminó agarrando mi brazo para impedirlo.

—¿A dónde vas tan rápido? ¿No crees que es muy temprano aún?

Ya mi turno terminó señor Kang —espeté seriamente—. Mi novio me está esperando.

—¿Y si te digo que si no te quedas voy a despedirte? ¿Qué harías, precioso?

¡Suélteme! —intenté safarme pero el apretó su agarre con fuerza, llegando a lastimarme.

Hoy por fin voy a probar tus lindos labios, Jimin —masculló acorralándome contra la pared.

Un frío intenso recorrió toda mi columna vertebral ante sus palabras. Si bien había estado sobrepasándose conmigo, no lo creí capaz de llegar a tanto.

¡No, suélteme! —grité mientras forcejeaba, pero él era bastante fuerte.

—¡Cierra la boca! —alzo la mano y me golpeó en el rostro, lastimando la comisura de mis labios—. Ves, eso te pasa por ser un niño malo.

Su lengua pasó por la comisura de mis labios limpiando un fino hilo de sangre, mientras yo intentaba con todas mis fuerzas alejarlo de mi cuerpo, sintiendo las lágrimas acumularse en mis orbes al sentirme tan inútil para siquiera defenderme. Él era mucho más alto y fuerte que yo.

Hoy voy a disfrutarte entero, precioso.

Me besó de una forma realmente asquerosa, provocándome arcadas; sentía la bilis raspar y subir hasta mi garganta. En mi interior solo rezaba para que alguien me pudiera sacar de esta situación. Ya mis lágrimas corrían por mis mejillas mientras sentía sus labios pasar por mi cuello, su toque se sentía demasiado asqueroso. Cerré los ojos con fuerza, deseando poder ser lo suficientemente fuerte para que esto no me sucediera. Si no fuera tan inútil esto no estuviera pasando.

De pronto sentí que se alejó de forma brusca y luego un fuerte ruido. Al momento abrí los ojos, viendo a Jungkook encima de él golpeandolo una y otra vez con la cara enrojecida y las venas de su cuello y brazo marcándose.

¡Voy a matarte, maldito hijo de puta! —vociferó con sus ojos inyectados en pura rabia.

Ví como la cara del señor Kang comenzaba a llenarse de sangre con cada nuevo golpe. El estúpido se merecía morir, pero no iba a dejar que Kookie arruinara su vida por una escoria de su clase.

Ya detente —me acerqué, abrazándolo por la espalda, y al sentirme rápido se detuvo.

¿Estás bien? ¡Dime qué no te hizo daño! —sus manos temblaban mientras acariciaban mis mejillas, y de sus ojos salían lágrimas que estaba consciente eran de impotencia, tal vez por no haber llegado antes—. ¡Voy a matarlo! —exclamó iracundo cuando vio la herida en mi labio, y se volteó dispuesto a volver a golpearlo nuevamente, pero lo detuve.

Estoy bien, gracias a ti.

Me muero si te pasa algo, Jiminie —me abrazó con fuerza y ese simple hecho hizo que la tensión en mi cuerpo, que ni siquiera había notado, desapareciera como por arte de magia. Me sentía tan seguro entre sus fuertes brazos, tan inexpugnable.

Estoy bien, ahora lo estoy.

[...]

—Jimin —Jungkook salió del cuarto revolviendo su cabello, haciendo que el pelirosa dejara de lado ese recuerdo—, perdón por lo que sucedió en la mañana, me iré ahora.

—Espera —lo detuvo—, dijiste que ya no estabas consumiendo...

—Estaba estresado —respondió cortante, sabiendo por donde iba la conversación.

—¿Es eso? ¿O es que ya no puedes dejarlas? —preguntó con desconfianza, conocía mejor que nadie al menor, por lo que sabía claramente que le estaba mintiendo.

—Me pareció haberte dicho que si no ibas a estar en mi vida no opinaras.

—Jungkook ¿sabes las consecuencias que conlleva usar esa porquería? Puedes morir de una sobredosis —articuló preocupado—. Mírame

Se acercó a él, tomando su rostro entre sus pequeñas manos, observando sus ojos oscuros y brillantes.

—Si en verdad me amaste alguna vez ya deja eso, por mi —pidió.

—No utilices mi amor hacia tí para manipularme Jimin. ¡Haré lo que me de la gana! —apartó enojado las manos del pelirrosa de su rostro y salió del apartamento dando un fuerte portazo.

[...]

—Oye tú, quiero hablar contigo —mencionó colérico, acercándose al chico.

—¿Qué tenemos que hablar nosotros? —preguntó con una ceja alzada, sorprendido de verlo allí.

—De Jungkook, obviamente —respondió como si fuera algo que daba por sentado—. Aléjate de él, no me importa si no tienes un futuro. Puedes hacer lo que te dé la gana con tu vida, pero no arrastres a Jungkook al fango contigo. Él es un chico inteligente, uno de los mejores de su carrera, pero desde que te conoció todo ha ido marcha atrás.

—Yo no le estoy dando nada, no ha probado ni la más mínima pizca de mi parte —dijo serio, sintiéndose ofendido por la acusasión—, la dejó hace días ya.

—¡No ha dejado nada idiota! Se fue de mi apartamento hace unas horas. ¡Lo llevé porque estaba drogado en la universidad!

—¿Qué? ¡No es posible! Escondí todo lo que me quedaba.

Jimin resopló, contando hasta diez para no perder la paciencia y darle un golpe a Yugyeom.

—Es obvio que la encontró —masculló empujándolo para entrar en la casa—. ¿Dónde la escondiste?

Yugyeom caminó en dirección a la cocina, siendo seguido por el pelirrosa que no estaba para nada cómodo con él; pero debía soportarlo, todo por el bien del amor de su vida.

—¡¿Qué?! ¡Estaba aquí! —exclamó pasando una mano por su cabello—. Había mucha, si se la llevó toda...

—¿Qué? ¿Qué pasa?

—Tenía XTC guardado aquí —mencionó con inquietud, mordiendo su labio inferior.

—¿Qué es eso?

—Éxtasis.

Jimin abrió mucho los ojos. No sabía mucho de ese mundo, pero tampoco era un idiota. Sabía claramente que era muy peligrosa. En ese momento no pudo evitar que la preocupación se adueñara de su cuerpo, llenándose de pensamientos pesimistas, solo pidiendo para que Jungkook no tocara eso.

Un teléfono comenzó a sonar, y tardó un poco para darse cuenta de que era el suyo. Lo tomó, viendo el nombre de Yoongi en la pantalla.

—¿Qué sucede? —preguntó llevando el teléfono a su oreja.

—Tengo una sorpresa para ti —escuchó la voz emocionada de su novio a través de la línea—. Tw aseguro que te va a gustar mucho.

—Ahora no puedo, Yoongi —inquirió de forma seca y colgó. Su preocupación por Jungkook era mayor que esa sorpresa.

—¿Discutieron antes de que se fuera de tu apartamento? —preguntó Yugyeom.

—Algo así... ¿por qué?

—Cuando pelea contigo es cuando más busca alejarse de la realidad.

Suspiró, las palabras de Yugyeom habían calado de forma profunda en su alma. Aún le parecía increíble la forma en la que el pelinegro había tornado su vida en un absoluto desatre, estaba tirando todo su esfuerzo a la basura.

—Dios, no conoces para nada a Jungkook, tiene ese carácter autodestructivo cuando se siente culpable.

—Se arrepiente de haberte dejado y por hacerte sufrir —mencionó con pesar—. Por más que quiera negarmelo, es obvio que sigue enamorado de ti, y lo estará siempre.

—Yo... también lo amo —musitó jugando con la punta de su zapato en el suelo.

—¿Y por qué estás con ese otro chico?

—Miedo a la ¿soledad?... mi familia está en Busán, soy solo yo aquí en Seúl y a pesar de que pasaron unos años aún no me acostumbro a estar... solo.

—Umm, ambos son un desatre estando separados —suspiró—. Sé que no nos llevamos bien, te odio, y estoy seguro de que tu también me odias, pero vamos a ayudar a Jungkook, juntos.

—Bien, pero- —unos toques en la puerta le interrumpieron.

—Voy a abrir —el pelinegro caminó a la puerta, encontrándose con un chico pálido de ojos gatunos que se le hacía muy conocido.

—¿Donde está Jimin? —preguntó en tono serio.

—¿Cómo sabías que estaba aquí? —cuestionó parándose al lado del pelinegro, mirándolo con cara de póker.

—Por tu ubicación —dijo entrando a la casa.

—Wow, eso sonó muy acosador de tu parte —dijo Yugyeom interrumpiendo su conversación.

—¡Cierra la boca! —ordenó Yoongi, enojado—. Te llamé muchas veces y te envié un montón de mensajes, no me contestaste.

—¿Pensaste qué tal vez no quería hablar contigo? —interrumpió nuevamente el pelinegro llevándose una mirada furiosa de ambos.

—¡Cierra la boca! —Esta vez fue Jimin quien le mandó a callar.

—En primer lugar ¿por qué viniste aquí? ¿Acaso no puedo salir sin decirte a dónde iré? ¡Te dije que estaba ocupado! —le reprochó el pelirrosa.

—Pensé que te habías enojado conmigo. ¿Por qué no podías decirme que estabas con un amigo? Así no-

—¡Hey! No somos amigos —le cortó Yugyeom con rostro ofendido.

—¡Qué cierres la boca! —gritaron ambos haciendo que se encojiera en su lugar.

—Ay ya, no tienen que gritarme —resopló y fue hacia la cocina para darles un poco de privacidad.

Sintió una vibración en su bolsillo, sacó su celular viendo que Jungkook lo estaba llamando.

—¿Kook?

—¡Yug, hola! —gritó eufórico—. ¿Tienes un poco más de esta maravilla?

—¿Jungkook estás drogado?

—¡No! ¿Cómo crees? —lo escucho reír.

—¿Dónde estás ahora? —preguntó preocupado, revolviendo su cabello con frustración.

—En... en... —soltó una carcajada—. ¡No lo sé! ¿En mi casa?

—¡Voy para allá, espérame! —colgó y fue hacia donde se encontraba la pareja discutiendo.

—Lamento interrumpir, pero Jungkook acaba de llamar, está en su apartamento —avisó y Jimin rápido se dispuso a salir, pero fue detenido por Yoongi.

—¿De esto se trataba? ¡¿Todo esto es por el imbécil ese?! —reclamó enojado, apretando sus puños hasta dejar sus nudillos extremadamente blancos.

—Ahora no puedo hablar, nos vemos después.

—¡No, si te vas con él lo nuestro termina aquí!

Lo miró sorprendido, no se esperaba que él mayor le diera ese ultimátum. Miró a Yugyeom, quien le hizo señas para que se apresurara, y regresó su vista a su novio.
Debía decidir, Jungkook o Yoongi, el amor de su vida o su novio. Suspiró, seguro de su respuesta. Ni tenía que pensarlo siquiera, era obvio a quien iba a elegir

—Lo lamento —le dijo antes de salir de la casa seguido por Yugyeom.

—¡Cierra antes de salir! —le gritó el pelinegro a Yoongi en tono divertido, siguiendo al pelirrosa rumbo a casa de Jungkook.




















La historia ya está llegando al final, solo faltan dos o tres capítulos más.

He leído unos cuantos comentarios pidiendo que ya junte a Jimin y Jungkook, pero esos dos aún no están listos para volver, no tendría sentido que los junte ahora sin haber cumplido el objetivo que tenía Jungkook al separarse de él en primer lugar.

Si recuerdan en el segundo capítulo Namjoon le dijo que ambos debían reflexionar acerca de su relación y madurar, cosa que ninguno de los dos ha hecho, Jimin acaba de confesar que no puede estar solo, y su relación con Yoongi fue solo como un remplazo para lo que tenía con Jungkook. Y de Jungkook mejor ni hablar, es un desastre. Ambos necesitan reparar su vida por sí mismos antes de volver a estar juntos, sino será todo igual que antes.

Bueno solo quería aclarar eso
Besitos a todxs 😘

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro