•[Bonita]•

«¿Cambiar o mejorar?»

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El androide volvió al departamento y aterrizó en la alcoba del lugar en el que había dejado a su presa.

El reloj indicaba las 10 de la mañana, había dejado por un buen tiempo a la mujer descansar de su presencia, la caza se hizo divertida por lo que tardó un tiempo.

A paso ligero, entró a la sala de estar y observó que la mujer estaba durmiendo en un sofa, arropada y acompañada de ese extraño gato. Su cabello marrón saltaba a la vista, lo más notorio; la mitad de su rostro estaba oculto por la manta y también su cuerpo.

Chasqueó la lengua y se acercó despacio a ella, apoyó una rodilla en el suelo y con el rostro cerca de ella, gritó.

—¡Despierta! — gritó cerca de su rostro.

—¡Ah! — por inercia, la chica se levantó rápidamente golpeando su rostro con el del androide y quedando a centímetros de él.

Ella parpadeó varias veces, el androide estaba muy cerca de ella y no era la primera vez que pasaba algo así, se nota que no respeta el espacio personal...

Espera, el respetaba nada.

Ella se quedó estática pensando en lo peor, que la golpearía o la obligaría a dormir con ratones otra vez, tragó seco y solo se dedicó a mirarlo.

El androide la examinaba con la mirada, sentía su respiración acelerada, con sólo ver sus ojos podía descifrar que estaba muerta de miedo, sonrió levemente y se levantó.

—No recuerdo haber dado el permiso para que puedas dormir— 17 se sentó a su lado en el sofá recuperado su seriedad.

—Lo siento... — ella imitó su acción y se sentó un poco alejada del él.

Un silencio incómodo, 17 no sabía que más decir y ella no se atrevía a hablar, el miedo la callaba. La chica miró de reojo al androide y se encontró con la mirada profunda de él, ella tragó fuerte y volteó su mirada a otro lado.

Esta acción fue tomada como una ofensa para 17, ¿voltearle la cara?, humana idiota.

—Será mejor que te prepares para esta noche, me darás un grato espectáculo — ella abrió los ojos asustada, ¿a que se refería con eso?. Comenzó a toser y toser al pasar saliva sin ser consciente.

Número 17 bufó, esta chica no podía ser más débil.

—No te mueras antes de tiempo — 17 golpeó su espalda suavemente y su tos se calmó, ella respiró hondo varias veces.

El androide no quitó su mano de la espalda de (Tn), su mirada estaba fija en el subir y bajar de su mano al sentir la respiración humana. Su cuerpo tenía una temperatura cálida y sin dificultad sentía sus frágiles huesos de su espalda.

Ella notó que el azabache no había quitado su mano, sentir contacto con el androide era sumamente incómodo y repudiable, odiaba sentir sus manos asesinas.

—Ya puedes quitar tu mano... —habló tímidamente.

Él frunció el ceño y la apartó con brusquedad. Se levantó del sofá y llegó hasta el balcón, había una caja ahí y lo que había dentro era una gran sorpresa...

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—¡Por favor!, ¡dejame en paz!, ¡te lo ruego! — gritaba la mujer desesperada, estaba colgando de una alcoba hacia el vacío atada de manos y pies.

— Te ves bien "debilucha" — reía el androide, ella gritaba y gritaba esperando que el androide la ayude, no había ni una pizca de piedad en él.

—¡Por favor! — gritó (Tn), 17 se acercó a ella.

—¿Quieres que te ayude, "debilucha"?— preguntó de manera cínica.

—... — sólo lo observó llorando, la mano del androide se dirigió a la cuerda y la cortó un poco. Ella abrió los ojos al máximo.

—¡No! — gritó e hizo un movimiento para apartar al androide.

—¿No que? ¿Esto? — cortó más la cuerda.

(Tn) en su desesperación se movió de una manera muy brusca haciendo que la cuerda se rompa por completo y se suelte.

Solo vio como se alejaba de 17 y su cabello cubría su rostro, no grito ni pidió ayuda, no valía la pena. Así que solo cerró sus ojos esperando el impacto, no creía posible que él la salve, mejor dicho, no quería ser salvada por un asesino.

Pero, a veces el destino te da la contra.

—Ni siquiera pedirá ayuda— pensó 17, tomó vuelo hacia bajo y justo antes que ella choque contra el suelo, él la atrapó.

(Tn) colgaba de un brazo de número 17, desmayada. El androide bufó y la dejó en el suelo, se sentó de cuclillas y con brusquedad desató sus manos y pies que, al quitar la cuerdas, pudo distinguir marcas rojas en sus muñecas y tobillos, pequeñas heridas por el fuerte amarre de la soga.

—Tan débil... — susurró el androide, observando las heridas.

Una lluvia fuerte comenzó a caer , mojando el cabello negro de 17 como también su ropa. El azabache chasqueó la lengua, apartó su cabello mojado del rostro y tomó a (Tn) del suelo para cargarla en su hombro sin delicadeza alguna y la llevó de vuelta al lugar en el que siempre la dejaba.

Entró al departamento, encontrándose con el gato feo en un sofá, mirándolo con la cabeza ladeada, extrañado de ver a su dueña encima de él.

El androide no le tomó importancia y decidió dejarla en el sofá que siempre reposaba, pero, justo cuando la iba a dejar reposar, ella sostuvo la camiseta de 17 con fuerza. Él levantó una ceja, ¿que estaba haciendo esta humana?, la miró con más detalle y se fijó que ella seguía dormida, la reacción era producto de los sueños que estaba teniendo.

Él se deshizo de su agarre y se acercó curioso a ella, ¿podía tener un tipo de reacción como esta al dormir?. Él no sabía de eso, nunca dormía, no era necesario.

Llevó una mano hasta el rostro de ella para apartar el cabello que la cubría, sus largas pestañas y sus labios tiritaban. Él pensó, ¿será frío o una pesadilla?, los humanos eran tan extraños, ella era tan rara, tan..

Tan bonita.

Ha sido capaz de ver distintas mujeres, ninguna con rasgos llamativos a su gusto, o tal vez no ha sido capaz de ver con más detalle, esta era la primera vez que estaba en contacto con una mujer a la que podía ver de muy cerca.

Su mano dudosa se posó en la mejilla de ella, y que, al hacer esto, ella calmó el temblor de su cuerpo y emitió una pequeña sonrisa en sus labios, otra reacción por parte de ella, otra curiosidad más para 17.

Él quitó su mano y salió del departamento bruscamente, ya tuvo suficiente por hoy, no debería estar perdiendo su tiempo en tonterías como las que había estado pensando hace un segundo.

Necesitaba entretenerse y también debía buscar a 18, no la había visto en todo el día y quería poner en marcha la caza en un día lluvioso, era un espectáculo de película.
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Espacio de la escritora:

Nuevo capítulo, espero que sea de su agrado y no olviden votar y comentar qué tal les pareció ❤️, nos vemos, byeee💖

•Vale-1817•