.-Capítulo 46
•[Acechados]•
«¿Cambiar o mejorar?»
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—¡Ustedes tienen la culpa par de inútiles!— señaló Gina amenazadoramente a los dos hombres a su lado, que miraban asustados y sorprendidos como su auto estaba hecho fuego.
—¡Te juro que el auto no tenía ninguna complicación Gina!—
—¡No me digas!, de seguro fue un rayo quien lo destrozó— respondió la mujer irónicamente a su pareja.
—¡Será mejor apagarlo cuanto antes, puede provocar un incendio en este bosque!— comentó Abdul, tirando un balde de agua hacia el auto.
—¡Encárguense ustedes!, ¡no pienso mover un dedo por un desastre que no ocasioné!, haber si con eso dejan de ser tan inútiles— sentenció Gina y ambos hombres asintieron temerosos, ya tenían muy en claro que jamás le ganarían una discusión a Gina.
—Ya lo sabemos Gina— respondió Abdiel rodando los ojos.
—A primera hora de la mañana vamos a darle caza a esa mocosa, no pienso seguir perdiendo el tiempo, tengo unas inmensas ganas de ejecutarla, ¡oyeron!—
La mujer chasqueó la lengua y se dio media vuelta para regresar a la cabaña y seguir durmiendo.
Cerró la puerta de la habitación y se arropó nuevamente con las sábanas, esperando poder recuperar aquel sueño hermoso que estaba viviendo en la noche.
Si quiera en sus sueños aún podía verlo, solo en sus sueños.
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—¿Cual es la prisa de destrozar esta ciudad 17?, aún hay muchas cosas con las que podemos divertirnos, pensé que te gustaría jugar con esos modernos autos deportivos— interrogó la androide confundida.
Su hermano tenía un rostro en que se reflejaba una gran furia y a la vez una gran tristeza, cosa que nunca había visto en él.
—Solo acaba con todo esto y ya, pasemos a otra ciudad— respondió el azabache, observando a las personas correr y tratando de escapar del lugar en el que estaban encerrados, como gallinas en un corral.
—Como digas— 18 alzó una mano, y antes de que pudiera disparar, se escuchó un último grito de agonía para después solo observar la sangre correr en ese espacio y las personas agonizando.
Ambos androides salieron de ese lugar y tomaron rumbo a un edificio en especial, era un lugar en los que los androides habían tomado como "refugio" en las noches, ya que este dichoso lugar, contenía muchos videojuegos.
17 quería buscar algo con que borrar la horrible imagen que había visto, aún no podía creer que ella tuviera a alguien más.
—Sabes algo 17, he escuchado que la ciudad capital se ha vuelto la más segura por lo qué hay demasiadas personas refugiándose ahí, ¿deberíamos darle caza no crees?— la voz de su hermana a su lado lo sacó de sus pensamientos, él solo chasqueó la lengua, la ciudad capital estaba muy cerca de ella y después de lo que vio, no tenía la fortaleza para verla a la cara.
—¡Oh vamos!, será divertido, te lo aseguro— volvió a proponer la androide, con el brillo de la emoción resaltando en sus ojos color agua marina que compartía con su hermano.
Este lo pensó, necesitaba relajar su mente, necesitaba distraerse, tenía que volver a ser el de antes.
—Has lo que quieras— murmuró el androide y ella sonrió complacida por su respuesta, destruir todo sin su hermano no era la misma diversión.
Que gusto tan sádico...
—Entonces iremos al medio día— informó la rubia.
Ambos hermanos volvieron a tomar sus mandos de videojuego y comenzaron una nueva partida en la que los dos en sus adentros deseaban ser el ganador.
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(Tn) había hecho de ese gran árbol un tipo de refugio, tenía en claro que no podría regresar a su casa y tampoco tenía cómo llegar a la ciudad.
—Mierda...— lamentó ella, comiendo otro bocado de manzana, lo único de lo que podía alimentarse.
Lupy regresó a su lado, trayendo en su osico un pájaro muerto, el animal había ido de casa por un buen rato.
—Come tu, come tu— dijo la joven, alejando al serval que insistía en dejarle el pájaro a ella.
Finalmente, Lupy decidió comerse el pájaro, acostándose al lado de la muchacha, no iba a desaprovechar su presa.
Aproximándose el medio día, (Tn) se levantó a estirar un rato las piernas junto a Lupy. Tomó su mochila y empezó su rumbo. Patentado las hojas del suelo y una que otra rama. Observando los arboles y escuchando los sonidos que emitían los animales del bosque.
No pensó que alguna vez ese sonido la cansaría...
Deseaba volver a su casa, deseaba darse un baño y acostarse en su cama, jamás en su vida había pasado por tal necesidad.
Entonces algo la sorprendió, un sonido en los arbustos, tanto ella como Lupy se pusieron alerta, esto no era normal en el bosque...
De pronto, los nervios la traicionaron y ella dio un pequeño grito por el sonido de una rama caer. El individuo escondido en el arbusto salió al acecho, rugiendo y gruñendo.
Un puma.
Animales comunes en el bosque, ¡¿Como lo había olvidado?!, ahora si tenía un gran problema.
Un puma de bosque no era de un tamaño intimidante, un poco más grande que un Serval, sin embargo, la fuerza y destreza de ese animal era lo que más asustaba.
Ella dio un paso atrás, estaba realmente nerviosa, buscando algo en el suelo para tomarlo como arma, sin embargo, su vista estaba nublada y no se encontraba en sus cabales. El miedo la había invadido.
Lupy y el puma comenzaron a gruñirse mutuamente, amenazando con lanzarse el uno contra el otro, el puma por defender su territorio e instinto salvaje y Lupy por defender a aquello que amaba.
El puma corrió hacia ellos y Lupy no esperó más para abalanzarse sobre él, rugidos y mordidas, vueltas y vueltas era la pelea de esos dos animales, lamentablemente el animal del bosque tenía una gran ventaja, era más grande que el serval.
Lupy recibió daño en su espalda, siendo mordido por el puma.
—¡DÉJALO!— gritó (Tn), después de un buen rato de shock, reaccionó al escuchar los lloriqueos de su Lupy.
Tomó piedras y las lanzó al puma, atinando contra uno de sus ojos, haciendo retroceder al animal salvaje, Lupy aprovechó su despiste y mordió fuertemente la frente del animal, haciéndolo chillar.
El puma rasguñó a Lupy en el pecho, haciéndolo caer de nuevo, (Tn) volvió a lanzar piedras contra el puma y logró que este huyera.
—Lupy, ¡Lupy no!— (Tn) se acercó a su serval, que estaba acostado y adolorido en el suelo, votando sangre de su espalda.
—Vamos— (Tn) se deshizo de su abrigo y envolvió a Lupy en este. Sacando fuerza del miedo, levantó a Lupy en sus brazos, corriendo de ese lugar, llorando y rogando porque su bebé se pueda recuperar.
Sin saber que al alejarse, estaba tomando el camino de regreso a la cabaña, siendo presa fácil para los desquiciados que la buscaban.
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Espacio d e la escritora:
¡Nuevo capítulo e inesperado acto!, los pumas son animales comunes en los bosques, no son de un gran tamaño, aunque de todas formas, sin (Tn) lo más probable es que Lupy hubiera sido asesinado y comido por ese puma salvaje.
Ahora se encuentra muy herido, en los brazos de (Tn), buscando algo de ayuda. Sin saber que con Lupy herido, (Tn) se enfrentará a esos tipos ella sola.
La cosa está brava.
Bueno chicas, espero que este capítulo les haya gustado, no se olviden votar y comentar qué tal les pareció🤗.
Nos vemos, bye💖❤️💖
•Vale-1817•
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