•[¿Estás bien?]•

«¿Cambiar o mejorar?»

••••••••

10 años después:

—Tia Alice, no te preocupes por mi— dijo la joven con una sonrisa —Estás en todo tu derecho de hacer lo que quieras en tu vida, yo ya puedo velar por mi misma—

La bella joven de tan solo 18 años se encontraba en el aéreo puerto, despidiéndose de su amada tía, quien se iría a vivir a otro país por una propuesta de trabajo la cual no quería rechazar.

—Lo sé, pero no puedo evitar pensar que estoy siendo egoísta— confesó la mujer, con algunas lágrimas en el rostro.

—Tranquila, yo ya puedo seguir adelante sola, tú tienes que hacer tu vida— dijo la chica, abrazando a su tía quien correspondió con tristeza.

—Has sido como una hija para mi, no lo olvides (Tn). Prometo estar en contacto contigo— dijo Alice sin soltar las manos de su sobrina.

—Lo sé, te quiero mucho tía, has tu vida junto al hombre que amas— la mujer asintió y ambas volvieron a abrazarse por última vez.

—Alice, cuídate mucho— dijo un joven, rodeando a (Tn) por los hombros.

—Claro, tú también cuídate Patrick, espero que sean felices los dos— comentó la mujer alegre y abrazó al joven.

Alice junto a su pareja tuvieron que ir al llamado del vuelo, alejándose de los dos jóvenes y despidiéndose con la mano sin dejar de sonreír.

Ambos los vieron desaparecer a través de la puerta a la que debían ir los pasajeros, apresurados y entusiasmados por su nuevo comienzo.

—La voy a extrañar mucho— confesó la muchacha, derramando las lágrimas que había luchado por ocultar.

—Es nuevo comienzo para ella, tiene que hacer su vida— respondió Patrick, dándole un cálido abrazo a su pareja al cual ella correspondió feliz.

—Ahora...solo soy yo contra el mundo, me da un poco de temor— dijo la joven, caminado con su novio a la salida del aéreo puerto.

—No, somos los dos contra el mundo. Voy a estar contigo, afrontaremos ese temor juntos— dijo el muchacho, con una sonrisa.

Ella se sonrojó y se lanzó a él para cubrirlo de besos. (Tn) solo escuchaba la risa de Patrick, quien agarraba su cintura fuertemente, manteniéndola en el aire.

Dos jóvenes enamorados.

••••••••

2 años después:

—¿Te has comunicado con Lara?— preguntó Patrick, empacando sus cosas.

—No, no puedo comunicarla hace tres días, tampoco sé nada de mi tía Alice— respondió la muchacha, preocupada.

Se había escuchado hace mucho tiempo, sobre un ataque en Japón, al cual nadie le tomó importancia, ya que solo era por esos lugares. Ahora el ataque se ha expandido por todo el mundo, dando una alerta mundial.

Lara era la mejor amiga de (Tn), que viajó a otra región para culminar sus estudios como arqueóloga. (Tn) había escuchado de un ataque en la región que estaba ella, y le preocupaba mucho no poder comunicarla.

Su tía Alice estaba igual, tampoco podía comunicarla, y eso era demasiada preocupación para (Tn).

Temía que algo malo les haya pasado a ambas.

—Date prisa amor, saldremos por la frontera norte, conseguí un auto todo terreno, se nos hará más fácil llegar— dijo Patrick, empacando todo lo posible.

—Lupy, no juegues con eso— (Tn) arrebató de las garras de Lupy un bolso de cuero —¿Tus padres también se irán?— preguntó la chica y notó que el joven puso una expresión de tristeza.

—Se los he advertido toda esta semana, ellos insisten en que no van a llegar hasta aquí, yo ya no puedo hacer nada más, es decisión de ambos— respondió con decepción.

(Tn) suspiró derrotada, esos señores eran completamente testarudos. Sentía mucha pena por Patrick, no merecía unos padres así.

—"Los androides número 17 y 18 han llegado a la capital del oeste. Abandone la zona de un modo ordenado, se requiere evacuar, repito, se requiere evacuar"— (Tn) tragó fuerte al escuchar la radio, no le agradaba para nada ese aviso.

—Démonos prisa— Patrick salió de la casa y colocó las mochilas en el maletero del auto.

La chica sacudió su cabeza varias veces para no pensar en lo peor, tenía que ser positiva. Tomó una maleta y salió de la casa con dirección al auto, repitiendo en su mente la imagen de su casa, para saber si no se olvidaban de algo.

Con las maletas y el dinero listo, ambos pusieron en marcha el auto, sin saber lo que les esperaba en el futuro.

••••••••

Actualidad:

El androide estaba acostado en el pasto y giraba su pistola despreocupadamente, observando el cielo. La etapa de otoño había arrasado con el bosque.

Algo que caracteriza al otoño es el corto periodo de duración de los días, la caída de hojas en los árboles caducos, el cambio de clima y de temperaturas.

Las hojas de los árboles tienen tonos amarillos y naranjas, en su pigmentación, que se revelan durante esta época. Durante el otoño las hojas de los árboles se debilitan por la disminución de la clorofila hasta que, ya amarillas o marrones, se caen y cubren el pie de los árboles.

También se podía escuchar los sonidos de animales, como aves migrando por el cambio de estación y osos, que se preparaban para su hibernación, está era una etapa del año importante para ellos.

—¿Umm?— 17 observó a su costado al escuchar un ruido. Era el gato.

Lupy había ido a buscarlo al no verlo en casa. El animal lo miraba con la cabeza ladeada y las orejas erguidas, sin comprender que hacía tirado en el suelo.

—Hola gato— saludó 17 y volvió a mirar el cielo, pero Lupy lo interrumpió jalándole el cabello con su pata.

—¡¿Que te pasa?!— exclamó el androide al ver el atrevimiento del animal, lo cual era bastante extraño.

Lupy consiguió que 17 se ponga de pie y comenzó a ir y venir tratando de que el androide comprendiera lo que él quería. El animal necesitaba que 17 lo siga.

El androide arqueó una ceja extrañado y agarró al animal para volar hasta la casa de (Tn), Lupy parecía muy desesperado porqué el androide entre a su hogar.

—¿Que es lo que quieres, gato?— preguntó 17. Eran las 8 de la mañana y él estaba acostumbrado a visitar a (Tn) a partir del medio día o por la tarde.

Refunfuñando, quiso tomar vuelo para alejarse de ahí, pero el sonido de un vomito lo detuvo. Volteó la mirada y abrió la puerta rápidamente.

Llegó hasta la puerta del baño, la cual estaba cerrada. Al otro lado de la puerta se escuchaba como (Tn) vomitaba y eso lo angustió.

—¿Debilucha?— musitó 17, pero no obtuvo respuesta.

Frunció el ceño y entró al baño. Ella estaba sentada en el suelo, con la cabeza pegada a las rodillas y apoyada en la pared. El androide se preocupó al verla en ese estado por lo que se apresuró y se puso de cuclillas frente a ella.

(Tn) levantó la vista al escuchar su voz. Ahí estaba él, con una expresión de clara preocupación. Ella sonrió levemente, jamás rompía su promesa.

Siempre estaba ahí cuando lo necesite.

—¿Estás bien?— preguntó con voz suave, llevando una mano a la mejilla de la chica. Era increíble la manera en la que cambiaba su comportamiento cuando se trataba de ella.

—Si, solo comí algo que me cayó mal— se excusó la muchacha con voz débil.

El androide la observó directamente, por el gesto débil que tenía, no podía descifrar si le estaba mintiendo o no, por lo que solo decidió creerle.

—Hueles a café— dijo entonces el androide y observó la polera de (Tn).

Ella asintió en silencio, no había podido dormir muy bien y se levantó a tempranas horas de la mañana. Al momento en el que se estaba sirviendo el desayuno la atacó unas inmensas ganas de vomitar. Fueron tan repentinas que no tuvo tiempo de dejar la taza de café en la mesa y cayó sobre ella, manchando toda su ropa.

El androide suspiró y negó con la cabeza.

Con ayuda de 17, se levantó del suelo. El azabache, un poco avergonzado, la ayudó a deshacerse de toda esa ropa sucia y con cuidado, ayudó a (Tn) entrar a la bañera.

A (Tn) le dio poca importancia que 17 la viera desnuda, ya se habían visto antes, ademas no podía ni pensar en eso, se sentía tan débil que solo quería tomar un baño caliente y enterrarse en su cama para no saber nada del mundo.

—La temperatura a bajado, y conociendo lo débil que eres, te enfermarás rápido— dijo el androide, buscando en los cajones de un ropero, una pijama polar que (Tn) quería.

—Es de color blanco y tiene ositos de color rosado— informó la chica, envuelta en su toalla y sentada en la cama, pasando por alto el comentario de 17.

—¿Esta?— preguntó, sacando un enterizo blanco el cual se veía grande y muy abrigador.

—Si— asintió la joven.

(Tn) sonrió con melancolía al observar la pijama, la cual estaba muy bien conservada. Se lo había regalado su tía Alice cuando tenía 17 años. Recuerda haber reído junto a ella cuando se percataron que la pijama era muy grande, pero Alice se excusó diciendo "en un par de años más te quedará perfectamente"

No sucedió ya que ella se quedó del mismo tamaño, lo único que desarrolló fue su anatomía como mujer.

El androide le entregó la pijama a (Tn) y ella la recibió abrazándola, aún mantenía ese olor a uvas.

—Vístete ya, está haciendo frío— ordenó el androide y la chica asintió.

—¿Te vas a quedar aquí?— preguntó ella, antes de sacarse la toalla.

—No te voy a hacer nada...— respondió con voz grave, mirando hacia la ventana con una leve sonrisa. La chica frunció el ceño y lo miró con suspicacia.

Suspiró y se quitó la toalla, su puso sus braguitas negras sin dejar de vigilar al androide, tomó el enterizo y se lo puso lo más rápido que pudo. Se enterró en la cama e hizo señas para que el androide ya pudiera voltear.

El androide volteó y se sentó a un lado de la cama. (Tn) acomodó su cabello mojado, colocándolo hacia un lado.

—Descansa un rato, recuerda que no has comido nada— musitó 17, acercándose a la chica. Tomó la manta y la arropó más, el androide sonreía por sus adentros, se veía graciosa.

—Si lo sé, gracias por ayudarme— dijo ella, con voz suave.

Con su cabello, trataba de esconder su sonrojo. Verlo allí preocupándose por ella, atacó drásticamente su corazón, haciéndolo latir rápidamente. No lo esperaba.

Ella se quedó un momento en silencio, observando al androide, quien le decía muchas cosas, pero ella no lo escuchaba, se había quedado en estado de trance. Solamente dedicándose a contemplar a 17.

—¿Está bien?— dijo 17, terminando su discurso —¿Debilucha?— llamó 17 y ella reaccionó al escuchar su apodo.

—¿Que?— preguntó ella, volviendo a la realidad.

—No me escuchaste...— pronunció 17, con un tic en el ojo. Se había esforzado en decirle todo eso por su bien y su salud sin tener que sonrojarse por la vergüenza.

—¡No!, quiero decir si...te escuché— balbuceó ella, haciendo una mueca de confusión, ya ni sabía que decir —Solo que me distraje mirándote....¡No!—

No podía ser más torpe, tapó sus ojos con una mano para no ver la arrebatadora sonrisa que le daba 17. Sentía que se iba a desmayar de la vergüenza.

—¿Enserio?— preguntó 17, cambiando su tono de voz, a un tono grave y seductor.

—Yo...— mordió su labio inferior sin destapar sus ojos. Optó por no decir nada más, sentía que de su boca solo salían babosadas.

Y de pronto, sintió una respiración muy cerca de su oído.

—Tranquila, tienes toda la libertad de mirarme, no es que me moleste— pronunció con lujuria, y dejó un suave beso en el lóbulo de su oreja.

(Tn) contuvo un jadeo y quitó sus manos de sus ojos, y las entrelazó entre sí, necesitaba calmarse, estas sensación de nerviosismo era algo nuevo para ella. El androide bajó sus besos de su oreja a su cuello, y dio suaves y lentos besos en esa parte. Una mano de él buscó la mano de (Tn), al encontrarla, la entrelazó con la suya, mientras seguía disfrutando y besando a su chica.

—17...— jadeó ella, con los ojos cerrados, tratando de controlar las inmensas sensaciones y emociones que estaba sintiendo su corazón en estos momentos.

Finalmente 17 se separó, observando con una leve sonrisa el rostro abochornado de (Tn), los papeles se habían intercambiando.

Ahora él estaba al mando.

—Duerme ya, debilucha— fue lo último que dijo. Depositó un fugaz beso en los labios de la joven y se marchó de la habitación dejando a una avergonzada (Tn), quien solo se tapó el rostro con la sábana.

Cerró la puerta de la habitación y se sentó en el sofá al lado de Lupy, pensando que puede hacer el resto del día.

Molestar al gato no estaría mal...

••••••••

Espacio de la escritora:

Hoy vimos parte del pasado de (Tn) con Patrick, un muchacho noble, sencillo y alegre, que estaba dispuesto a todo por la chica que amaba, lamentablemente no pudieron quedarse juntos o simplemente su destino no era estar unidos.

Por otra parte, vimos un momento algo exótico y romántico entre 17 y (Tn). Si vemos bien, los papeles se han intercambiando. Ya no es 17 quien se pone nervioso, si no es ella. Ahhhhh❤️❤️❤️

Aquí les traigo la promoción de la historia, lo cual me encantó😜👌🏻💖💖💖. Excelente forma de describir lo que se debe resolver❤️.

Saluditos a lucerovella ❤️, gracias por la promoción🤗

Bueno con todo esto dicho, espero que les haya gustado el capítulo❤️

Nos vemos, bye💖🤗

•Vale-1817•