Capítulo Cuatro.
Un día más, una mañana, un desayuno y un regaño más.
SeokJin se levantó al día siguiente con evidentes ojeras al no poder conciliar el sueño, las palabras de su hijo seguían resonando en su mente cada que cerraba los ojos si es que no se distraía con algo tonto.
Su hijo SooBin asistía al kínder, JungKook dormía aún en su habitación y después de dejarle una nota diciéndole que saldría y no regresaría más tarde de lado de su plato con desayuno, salió directo a su auto.
Condujo hasta el centro de Seúl y después de encontrar estacionamiento se dirigió a la calle principal donde NamJoon y él habían acordado encontrase para solucionar lo del ingreso de JungKook a un nuevo colegio.
Finalmente lo vió de lejos, era imposible no verlo no solamente porque era bastante alto, sino porque era muy atractivo y su buen gusto por la moda de señor cuarenton empresario era también muy bueno llamando la atención de la mayoría quienes sólo se detenían a verlo por unos segundos y seguir con su camino.
- Buenos días- saludó el moreno entregándole un café a Jin quien le sonrió agradecido.
- Buenos días- contestó empezando a caminar a un lado del menor-.¿Esperaste mucho?
NamJoon negó.
- Llegues un poco antes para comprar café, sé que no te gusta beberlo en frente de SooBin así que pensé que necesitabas uno.
- Piensas muy bien, cómo siempre- los dos rieron y siguieron su camino hacia su destino.
El destino se llamaba escuela secundaria Whimoon, era una de las escuelas privadas más antiguas y prestigiosas de Corea del Sur, si no es que las más prestigiosa de todo el país.
NamJoon y SeokJin la habían descartado desde un incio, no porque no pudieran pagarla, sino por el hecho de que quedaba lejos de casa y sería todo un lío llevarlo y traerlo.
Cuando JungKook cursaba su primer año de secundaria era más joven y Jin sentía miedo de dejarlo ir solo, pero ahora cursaba el último año y pensaba que estaba bien si tomaba el transporte o incluso lo dejaban manejar con un permiso especial. ya en casos extremos podían ponerle un chofer.
Y no faltaba mucho para que el año terminara pero era el único colegio que al ser privado podía resivirlo si de dinero se trataba.
Asi que ahí estaban, charlando con el director, riendo con gracia fingida por su parte y repitiendo el lema sé un gran hombre cuando el director lo decía.
Después pagaron la inscripción, mensaulidad y todo lo demás que por poco deja en bancarrota a toda la ciudad y el día siguió.
SeokJin suspiró pesado saliendo del lugar y NamJoon lo siguió un poco más detrás.
- Creo que hemos sido estafados- comenzó el mayor y NamJoon rió asintiendo-. Su lema es sé un gran hombre y el mío es deja de ser una sanguijuela.
- Creo que nunca había fingido tanto una risa, pensé que debía hacerlo sólo contigo y tus malos chistes y que eso se terminaría después del divorcio. Fuí muy avaricioso después de todo.
- ¡Oye!- se quejó el mayor dejándo un leve golpe en el brazo del moreno que fingió dolor mientras reía-. Mis chistes son muy buenos, tú tienes poco sentido del humor.
- Cómo sea- le restó importancia-. No te preocupes por el dinero, debería preocuparme cuando entre a la univerisad.
- Debería entrar a una pública, metimos a JungKook a un colegio prestigioso para cuidar tu imagen en la prensa pero no en uno tan prestigioso porque no quería criarlo como alguien presumido.
- Creo que SooBin a sus casi cuatro años es más presumido que JungKook, lo criaste bien mientras que a SooBin lo chiqueaste mucho. No te preocupes por eso.
Jin hizo una mueca antes de encogrse de hombros y seguir con su camino a lado del menor.
Y después de un gran viaje, por fin regresaron a la enorme vivienda donde JungKook los esperaba ya despierto y aún en pijama.
- ¿Otra vez papá NamJoon?- preguntó el menor y Jin volvió a cruzarse de brazos.
- ¿Otra vez de grosero? Saluda a tu padre quien gasto tu herencia en un nuevo colegio- bueno, Jin había cometido errores pero aún así no dejaría que fuera grosero con el padre que no tenía culpa de nada.
De todos modos JungKook agachó la mirada y se dirigió al moreno para abrazarlo en un saludo mientras le susurruaba un gracias.
- No te preocupes- restó importancia NamJoon-. Empezarás el lunes de la próxima semana en lo que tienen tu uniforme listo y tus papeles. Entrarás al Whimoon.
Dicho esto JungKook alzó la vista asombrado de escuchar el prestigioso nombre del prestigioso colegio.
- ¿No es muy cara esa escuela?- preguntó y NamJoon volvió a restarle importancia con una sonrisa.
Pero a comparación de él, Jin se atravesó en su mirada con cara seria.
- Es muy cara, y sabes que no me gusta que seas presumido ni tampoco malcriado, así que en cuannto te gradúes de la universidad trabajarás de sol a sol para pagarle a tu padre.
JungKook viró los ojos negando levemente, mientras NamJoon lo sostenía de los hombros y le daba un leve apretón. Era su lenguaje para tirar como loco a Jin.
- No te preocupes por eso- volvió a interrumpir el moreno-. Sólo quiero que te diviertas estos últimos ocho meses antes de que tengas que escoger una universidad.
- ¿Puedo tener un año sabatico?
- Sí- contestó NamJoon.
- No- contestó SeokJin.
Y JungKook rió levemente por la pelea tonta contagiando a los mayores con una leve sonrisa.
- Amor Después del Divorcio –
Lunes por la mañana, JungKook se observó frente al espejo de cuerpo completo. Vestido con ese unoforme nuevo quien definitivamente lo hacían ver mas prestigoso. Todo lo contrario a lo que su padre Jin quería que fuera.
Suspiró pesado antes de salir de la habitación y encontrarse a sus dos padres en la barra americana platicando y bebiendo algo en una taza. Café no, porque SooBin estaba ahí así que seguramente era jugo de naranja o té.
- Buenos días- saludó llamando la atención de los dos contarios quienes voltearon a verlo.
- Buenos días- contestaron al mismo tiempo.
- ¿Qué están tomando?
- Leche- volvieron a contestar al mismo tiempo y JungKook rió levemnte. Una por ser tan cordinados y dos por ser tan infantiles tomando leche para darle el ejemplo al menor de sus hijos.
Todo había empezado cuando SooBin bebió de la taza de café de Jin cuando tenía dos años y terminó en el hospital por la descarga de adrenalina gracias a la cafeína. Así qué el café ya no estaba permitido en esa casa.
Finalmente siguió.
- Papá Jin- llamó y el nombrado volteó a verlo mientras dejaba un plato con fruta en frente de él-. Quería pedirte algo...
Jin arqueó una de sus cejas.
- ¿Ocurre algo?
- Sí... bueno, estaba pensando en qué tal vez pudiera ir solo al colegio.
Jin volteó de inmediato hacia su ex esposo quien se encogio de hombros y siguió dándole de comer a SooBin.
- ¿Solo? ¿A qué te refieres con eso?- Contestó y JungKook asintió levemente.
- Ayer estuve investigando y hay rutas de transporte que pasan en frente del condominio y me dejan igual en frente del colegio.
- Pues... no lo sé. Queríamos dejarte en tu primer día, por eso tu padre NamJoon vino hoy también.
- Lo sé- interrumpió encarándolo de una vez por todas-. Sólo que no quiero ser más una carga con todo este problema y quería hacer algo por mí mismo.
SeokJin tragó pesado ante los ojitos de bambi de su hijo y prosiguió.
- Pues... no sé- dudó una vez más-. Deberías pedirle permiso a tu padre NamJoon, él es la figura pública aquí y no sé si está bien que vayas en transporte público cuando ingresas a un colegio privado y más prestigioso que el anterior.
Tanto JungKook cómo SeokJin voltearon al moreno quien ante las miradas penetrantes de su familia dejó el bocado a medio camino y a SooBin con la boca abierta esperando por el.
- ¿Yo?- preguntó con miedo y los dos contrarios asintieron-. Pues... supongo que está bien.
- ¿No está mal por lo de tu empresa?- preguntó Jin y NamJoon negó levemente esta vez dándole ahora sí el bocado a SooBin quien ya fruncía el celo e inflaba sus mejillas con coraje por no ser atendido.
- No- aseguró-. Y si hubieran quejas por algo soy dueño de mi propia empresa y mi jefe a la misma vez. No porqué mi hijo vaya en transporte público significa que las ventas bajen.
- ¿Pero y la imagen?- esta vez fue JungKook-. Ya hay de que hablar después del anuncio donde dejo de ser parte del colegio anterior y estoy siendo mal visto.
- No te preocupes- siguió Nam-. Siempre hay escándalos y obviamente no prefiero el que diran antes que la felicidad de mi hijo.
Ante esas palabras JungKook sonrió alegre y después de dar mil gracias a su padre se apresuró a terminar su desayuno y darse los últimos detalles en el baño.
- Gracias- murmuró SeokJin agradecido y NamJoon le guiñó un ojo confidencial.
Ya verán cómo la relación de NamJoon y Jin cambia de un momento a otro, será cuando menos se lo esperen.
Y también JungKook en el nuevo colegio tiene su desarrollo de personaje con ya saben quién.
Y si no saben con quién pueden adivinarlo aquí.
En lo personal se viene mi parte favorita de toda la historia >•<
-Kim_SeokJin_05.
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