Me desperté temprano, estaba lloviendo y las patas se me estaban congelando, los truenos retumbaban por la ciudad y los relámpagos hacian que el cielo se iluminara.
Eran las 7 am y como estamos en horario de invierno, aquí es de noche todavía a estas horas.

— Uhh, que hace frío... — me levanté y me coloqué un pantalón para abrigarme.
Me puse una bata y me fuí a hacer un café para pasar el frío.
A los minutos me regreso a mi cama y me pongo a revisar mis mensajes de WhatsApp.
Me metí al grupo de natación y los chicos simplemente estaban mandando stickers...
Les mandé este...

Seguí revisando y al entrar al chat de John me di cuenta que estaba en línea, por lo que para pasar el rato le mandé un mensaje.

— Que haces despierto a esta hora...?

No me contestó, pero me dejó el visto...

— Y a este que le pasa— decía un poco molesto por lo que decidí llamarlo.

Llamando...

— Alo? Archie, que te pasa porque llamas tan temprano...?

— Amigo, porque estás en línea.

— Que estás hablando si yo tenía mi celular cargando. —en eso revisa su celular y ve que tenía 6%

— Alo...?

—Mierda no lo enchufé! Bueno amigo ya que me despertaste que quieres.

— Era para ver porque estabas conectado.

— Ah ya, tonces te dejo, chao.

— Chao... Me colgó!

Apague mi teléfono y lo puse a cargar.

Me recosté más dentro de mi cama y me volví a quedar dormido.
En eso me despierta el sonido de mi teléfono unas cuantas horas después...
Era John.

— Hola?

— Archie, como estas...?

— Durmiendo.

— Ja, no te gustó llamarme a las 7 de la mañana.

— Adiós!— le colgué y me intenté dormir de nuevo, pero el lobo me volvió a llamar y le contesté.
.
.
.
— ¿Qué quieres?

— Idiota despierta que son las dos de la tarde.

— Nah no te creo...— revisé mi celular y efectivamente eran las dos de la tarde.

— Ya despierta que estoy seguro que no has arreglado nada.

— No.

— Además estoy aquí afuera, ábreme.

— Y qué haces aquí?

— Te vine a dejar algo. Ya abre que hace frío y vengo empapado.

— Ya voy.

Le colgué y me coloqué la bata, luego le abrí.

— Gracias al cielo que abriste.— decía el lobo un poco molesto.

— De nada. — le respondía mientras me frotaba los ojos.

— Puedo prender el aire acondicionado?

— Sí, claro. Por cierto que me trajiste?

— Nada. Es que en mi casa estaban preparando un almuerzo que no me gusta y me vine aquí a robarte comida.

— Te puedes ir de mi casa?

— Pero amigo...

— No es mi culpa que te vayas a morir de hambre.

— Recuerda que tenemos que irnos al terminal y si yo no te voy a dejar quien más lo hará?

— No lo sé... Quizás un autobús?— le decía sarcásticamente.

— Ahg... Mira, supongo que nos has comido, así que yo preparo el almuerzo para los dos ok.

— Bueno, yo por mientras me voy a ir a bañar.

— Genial amigo.

Me metí al baño y me desvestí para bañarme, comencé a pasarme el jabón por todo mi cuerpo y el shampoo también.
El agua caliente recorría todo mi grisáceo cuerpo mientras el frío se me iba quitando.
Unos minutos después salí del baño seco con una toalla atada a mi cintura y en eso John me habla.

— Ya casi está listo el almuerzo.

— Tan rápido?

— Estuviste 20 minutos ahí dentro.

— Shet... Tengo que empezar a mejorar mis tiempos ahí.

— Sep... Ya apúrate.

— Ya voy, ya voy...— entré a mi habitación y me vestí rápidamente.
Salí con mis pantuflas puestas mientras me sentaba en la mesa.

— Oula! Un rico plato de spaghetti bañados en una salsa de tomates naturales con toques de orégano, sal y pimienta.

— Fideos con salsa... Me esperaba algo mejor a decir verdad.

— Que desagradecido.— decía John irónicamente.

— Que no se te olvidé que está es mi casa.

— Bueno, bueno, jeje.

— Je... — decía con una sonrisa pequeña en mi rostro.

Nos demoramos unos 10 minutos en finalizar y yo me dispuse a lavar los platos.
John por su parte me ayudaba a guardar todas mis cosas para los 3 días que nos quedaríamos en el hotel.

— El entrenador me habló y me dijo que serían 3 habitaciones, dos parejas y uno dormirá solo.

— Oh ok.— por mientras guardaba mis últimas prendas en el bolso.

— Supongo que dormiremos juntos no?

— Supongo... Mientras no empieces con tus homosexualidad es todo bien.

— Cállate, que no se te olvidé que tú eras el que me quería abrazar todo el tiempo.

— No es mi culpa que tu cuerpo sea más caliente que el mío— le decía molesto a John, obviamente bromeando.

— Je, gracias por el cumplido.

En eso me di cuenta de lo que dije y me volteo con una cara sería.

— Sabes que no me refería a eso.

— Je, ah no?

— Que no... — le decía un poco molestia John.

— Je, okey okey... Igual tú pelaje es suavecito.

— El tuyo igual.

— Je... Ok, esto es un poco incómodo.

— Seh... Mira, gracias por la ayuda.

— De nada.

— Y tú ya tienes tus cosas listas.

— Las tengo en el auto.

— Amigo, si vas a ir en auto al terminal donde lo vas a dejar después.

— Eh, pues...

— Amigo, tienes que tomar el autobús.

— Uh, si es cierto.

— Vas a tener que dejar el auto en tu casa entonces.

— Si, mira, vamos a dejar el auto y nos vamos juntos en el autobús.

— Eso te iba a decir

— Vale.

Las horas pasaron y entre serie y serie que veíamos llegaron las ocho.
Era hora de irnos.

— John son las ocho.

— Ok, bajemos... Por lo menos la lluvia paró.

Nos dirigimos al estacionamiento y nos fuimos a casa de John, el se despidió de sus padres los cuales nos deseaban la mejor de las suertes.

Agarramos unos paraguas por si la lluvia volvía, pero por suerte no pasó nada.

Unos minutos después en el paradero llegó el autobús el cual nos dejó afuera del terminal de buses.
Al entrar Jordan estaba sentado solo y nos acercamos a saludar.

— Jordan!— le grité para que se despegará del teléfono, el reaccionó y se acercó.

— Chicos!

— Y Mike?

— Viene con el entrenador a dos cuadras de aquí.

— Que bien.

— Y ustedes, cómo se vinieron?

— En autobús...— respondió John

— Yo me tuve que venir en un taxi, no pasaba ningún bus cerca de mi casa.

Unos 5 minutos después Mike y el entrenador se acercaron por la izquierda y nos saludamos.

—Hola chicos! El bus se supone que partirá en 20 minutos.
Por cierto, en el hotel nosotros pudimos reservar 3 habitaciones por lo que dos tendrán que dormir juntos.

— Ok.

— Nosotros ya lo habíamos pensado y vamos a dormir los dos juntos. — Dijo John refiriéndose a los dos.

— Oh ok... Jeje— dijo el entrenador mientras nos levantaba las cejas.

— Porque todo se tiene que ir a lo sexual?!— dijo John un poco nervioso.

— Yo no he dicho nada...— decía el entrenador a John con una sonrisa pícara.

— Puedes callarte idiota— molesto le golpeé el brazo a John

— Je je...

— Bueno Mike quieres dormir conmigo o con Jordan.

— Y porque no puedo dormir solo?

— Ah, quieres dormir solo!

— Bueno no sé...

— Yo preferiría dormir solo, cuando estoy en la cama me muevo mucho.— dijo Jordan mientras revisaba su celular.

— Bueno, Mike dormirás conmigo.

— Ok tío...

— Cuidado y no te viole... — dijo John con una cara burlesca.

— A veces eres muy infantil sabes...— le decía a John mientras le volvía a golpear el brazo.

— Mierda! Golpeas duro...— me decía mientras se sobaba el brazo.

— Chicos vamos a llegar aproximadamente en 2 horas a la capital por lo que vamos a tener que tomar un autobús al hotel ok.

— Ok...

Entre charla y charla el autobús indico que todos nos teníamos que subir.
John y yo nos sentamos juntos, yo en la ventana.
Atrás de nosotros Mike y Jordan y al final el entrenador.
Unas cuantas personas más se subieron igualmente.
No éramos más de 20 personas las que íbamos a bordo.

El bus empezó su recorrido y yo me puse mis audífonos.
A los 30 minutos John se había quedado dormido en mi hombro y se veía muy tierno a decir verdad...
Aproveche de sacarle unas cuantas fotos para después burlarme de él.
Me pase todo el trayecto mirando por la ventana mientras escuchaba mi música.
.
.
.
Cuando llegamos al terminal de la capital tuve que despertar a John el cual me tenía todo el hombro lleno de saliva.

— John, llegamos— le quité mi hombro y su cabeza chocó con el palo que divide los asientos.

— Auuh!

— Jajajajaja...— comencé a reírme muy fuerte y toda la gente en el bus me quedo mirando de forma rara, pero valió la pena.

— ¿Qué pasó?— dijo Jordan desde el asiento de atrás.

— Me pegué...— John lo dijo con un puchero mientras se sobaba la frente.

— Creo que te quedó un huevo ahí...

— Lamentable...

El bus se detuvo y los 5 salimos a recoger nuestras maletas.
Unos minutos después tomamos un Uber el cual nos dejó en las afueras del Hotel.
John al ser el más pequeño tuve que sentarse en las piernas de Mike.

Al entrar al hotel el entrenador hablo con el recepcionista el cual nos pasó las llaves de cada uno de los 3 apartamentos.

John y yo nos fuimos a la última del pasillo, la 287, Jordan en la 285, y los tigres la 286.
Simplemente entramos y dejamos la maleta en el suelo.

— Todavía me duele.

— Ponte un poco de hielo, en la nevera a de haber.

— Aquí hay de esos cubos de plásticos congelados.

— Genial, quédate un rato ahí mientras hago la cama.

— Vale.

No me demore más de 3 minutos en hacer la cama y llamé a John para que nos acostáramos.
Ambos quedamos en ropa interior y nos tapamos con las sábanas.

— Quieres dormir abrazados?— me preguntó John.

— Está bien... Ven. — le extendí mis brazos y John se sorprendió.

— Oh, pensé que sería al revés.

— Que más da... Ven.

John se acostó en mi pecho y comencé a acariciarle su cabeza. En donde se golpeó le pasaba mi mano suavemente para que no le doliera.

POV JOHN

No pensé que Archie me dejaría dormir en su pecho, es muy suave y me encanta como me acaricia la cabeza.
Poco a poco sentí como Archie se detenía y al final se quedó dormido.
.
.
.
Durante estos últimos meses, es decir desde el día lluvioso en febrero los sentimientos que siento por Archie han ido aumentando.
No sé si sea una atracción rara o algo por el estilo, pero siempre que estoy con Archie me siento feliz.
Desde esa noche de febrero la mayoría de mis sueños han sido relacionados con Archie y eso me da mala espina, siento que me estoy enamorando, pero no lo quiero creer porque no quiero que Archie se sienta incómodo si sabe esto.
Supongo que por todos estos nuevos sentimientos me he puesto "raro" cuando estoy cerca de Archie, por ejemplo lo de su habitación esta mañana o lo que pasó en el terminal.
Muchas noches me he puesto a pensar que pasaría si Archie fuera algo más que un amigo y todo lo que veo me fascina.
Me veo a él y a mí en mi próxima casa, viviendo juntos, felices... Pero cuando el mundo real me golpea ignoro esos pensamientos y me pongo a pensar en cosas más importantes.

Muchas veces he preferido quedarme en casa de Archie solo para dormir con él y sentir su calor en mi pecho mientras le hago caricias... Me encanta y me gusta mucho que ahora el sea el que me haya acariciado, se siente muy bien.
Pero, a decir verdad no sé cómo reaccionar si Archie descubre mi secreto, supongo que me sentiría mal por tener que hacer que mi amigo se sienta avergonzado por mi...

— John...— Archie hablo de sorpresa y me saco de mis pensamientos.

— Archie... — sin quererlo me sonroje, pero por suerte el tenía los ojos cerrados.

— En que estás pensando?

— En nada, en absolutamente nada.
.
.
.
._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._

Bueno chicos este ha sido el episodio de hoy espero les haya gustado y si es así recuerden votar y comentar.

Con eso dicho me despido...

Bye <3