Una mañana tranquila, todos tranquilo, el apartamento tranquilo, solo se encuentra a Touji descansado en la habitación, Itsuki por otro lado se encuentra en la cocina.

— esto debería de tener de mejores ánimos a Touji — dice nerviosa — se ve demasiado bueno, me gustaría comerlo, pero no quiero echarlo a perder.

Itsuki se encontraba cocinando el desayuno, está vez solo cocinaba para Touji, estaba concentrada en preparar un platillo.

— esto debería darle ánimos — dice con orgullo — después de lo ocurrido ayer, tengo mi fé en alto.

(Mientras tanto en otra parte).

— Itsuki me dice que debería de ir a verlo, después de nuestro último encuentro no creo que esto resulte.

Komori tomaba las llaves de su auto mientras miraba unos retratos.

*Suspira*

— como las extraño...

Komori iba con una actitud nuestra, solo pensaba en Touji y su hermana.

(Mientras tanto Itsuki).

— bien, esto ya está listo, iré a despertar a Touji.

Itsuki camina lento, su mirada era fria y carecía de brillo.

— está medida es demasiado drástica — dice en su mente — saldrá para bien, confío en que podremos solucionar el problema.

*Entra en la habitación*

— Touji, despierta dormilón, ven, he preparado tu desayuno.

Touji solo seguía dormido, al no reaccionar Itsuki se acerca y se recuesta a su lado.

— el desayuno está listo, levántate — susurra con una dulce voz.

— eh... que hora es?... — dice cansado.

— son las 8:00, ya es hora de que... Touji?... — pregunta confusa.

— que sucede gordis — responde confuso.

— es que tus ojos están rojos — dice preocupada.

Itsuki se acerca inspeccionando su cara.

— a si, no es nada, solo no he dormido lo suficiente.

— es que no entiendo porque están así, no creo que sea cansancio — mira con detalle

— créeme, no es eso.

Itsuki observa algo molesta.

— me estás mintiendo, sabes que no es eso, solo hay una razón por la cual pueden estar así.

— y cuál es tu diagnóstico doctora Itsuki — dice en burla.

— usted paciente estuvo...

*Cambia su tono de voz*

— estuviste llorando...

Touji baja la mirada al escuchar la respuesta, Itsuki sin decir nada de recuesta en su hombro.

— cuando vas a dejar de mentir — dice triste — cuéntame tus penas.

— no es nada — dice sin emociones.

— sabes que no es así, algo te debe estar pasando algo.

— a veces pienso si lees mi mente — dice con una risa apagada.

— no leo mentes, solo te conozco bien, y conozco tus miradas.

Touji cambia su actitud y dirige su mirada hacia ella sosteniendo su mano.

— perdón por dejar el tema inconcluso, pero necesito que cierres los ojos...

— pero no me...

Touji tapa los ojos de Itsuki.

— me prometes que no abrirás los ojos — dice un poco nervioso.

— yo creo que si...

— no le convence mucho — dice decepcionado — da igual.

Touji se dirige al armario, de el saca una prenda, con un nudo en la garganta, trata de decirle a Itsuki que abra los ojos.

— Itsu... ki... — dice con una voz temblorosa.

— si?...

— abre... los ojos mi amada — dice con miedo.

Itsuki al abrir los ojos ve un hermoso vestido blanco de novia, demasiado largo, tan confeccionado, con una flor en la cintura.

— sorpresa... es para ti... — dice sonriendo con nerviosismo.

— To... To... Touji — responde con voz  temblorosa.

— que opinas.

Itsuki se levanta lentamente y toma el vestido, lo inspecciona en su totalidad.

— Itsuki...

Luego se ver el vestido, lo guarda en el armario en silencio.

— que dices sobre...

— ¡ES HERMOSO! — grita con felicidad y lágrimas.

Al gritar se lanza como gata hacia Touji besando su mejilla.

— ¡GRACIAS! — dice llorando.

— no creí que te encantaría — dice con un poco de felicidad.

— es perfecto — responde dulcemente.

Itsuki y Touji disfrutaban del momento, pero Touji estaba deprimido por dentro, sentía que no merecía todo el cariño y agradecimiento de Itsuki.

— todo su amor y aprecio... lo merezco? — dice Touji dudoso.

(Mientras tanto Komori).

— talvez deberías de mirarlo a la cara y pedir disculpas... —dice nerviosa — porque piensas eso Komori, no va a querer verte después de aquello.

Komori hablaba sola, mientras conducía solo hablaba sola, el silencio hacia que sus pensamientos se volvieran más fuertes.

— será capaz de verme a los ojos de nuevo o solo me escuchará.

Sus pensamientos la hacían dudar cada vez más, llena de nerviosismo y miedo ante como actuaría Touji.

Komori conduce a lo largo de la ciudad, solo pensaba en su hermana.

— cuántas personas más...
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— perderé...

(Mientras tanto Touji).

— hace unos días tenía claro todo... no es así?...

Touji comía en silencio con Itsuki, el solo pensaba mientras que Itsuki le hablaba, las respuestas de el eran demasiado cortas para lo que era habitualmente...

— tu sucede algo Touji — dice un poco inquieta — debes estar nervioso por lo del vestido.

— si.... — dice nervioso — es que me hace muy feliz saber que te haya encanta.

Con una sonrisa falsa le daba seguridad a Itsuki.

— me alegra muchísimo, pues... — cambia su tono.
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— ya quiero que llegue el momento de casarnos...
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— eso...
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— era.... — dice Touji nervioso en su mente.

La mente de Touji queda en blanco, solo pensaba en esa frase.

(Flashback).

— ya quiero que llegue la hora, nuestro momento, quiero que llegue el momento de casarnos... — dice aquella voz dulce.
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—  acaso.... tengo miedo de amar?...

(Mientras tanto Komori).

Ha pasado un tiempo, Komori se encuentra con una mirada fría, sin expresión, viendo dos tumbas.

Los pensamientos se hacen fuertes, y solo puede escuchar aquellas voces y repasar recuerdos.

— porque... tengo que estar sola... — dice deprimida.

Komori con dos fotos y flores procede a dejarlas en las tumbas.

— a veces pienso que solo voy a cualquier lugar sin un camino definido, que solo voy recorriendo hasta el final del viaje.

Una voz interrumpe.

— y eso es lo bello de la vida, disfrutar del viaje y recorrido hasta nuestro destino, a veces bajarnos en una estación para disfrutar de la vista y belleza que nos ofrece ese lugar y seguir hasta nuestro destino — dice con motivación aquella voz.

— y tú cómo siempre queriendo ser sabio — dice riendo.

Lo que era un ambiente de silencio y absoluta soledad se transformo.

— que tal has estado Ralf — dice neutra.

— esa pregunta es para ti, que tal has estado tu — pregunta fríamente.

Ambos se miran, se siente la poca emoción en sus miradas, ambos observan lo que dice el otro.

Ralf se acerca a Komori y le da un abrazo.

Lo único en lo que pensaba Komori era el todas aquellas emociones del pasado, y solo recordar a sus dos hermanas, ella con una voz quebrada habla con Ralf.

— algún día podré ser felíz?...

Ralf abraza con fuerza a Komori, ella solo escucha el latido de Ralf y la calidez del abrazo.

— eso lo sabrás con el pasar el tiempo — dice Ralf fríamente.

— me gustaría que ellas estén acá, y mostrarles lo que he podido ser.... — dice triste — a veces pienso que mi vida tiene un dramaturgo, convirtiéndose en un fracaso.

Ralf deja de abrazar a Komori para dejar las flores que llevaba en sus manos.

Solo se puede sentir el gran silencio que hay, la tristeza y soledad.

— a veces también pienso que mi vida es un obra de teatro, escrita por alguien con sueños frustrados, y a veces siento que es una comedia trágica.

Ralf habla con burla mientras se rie de aquella idea.

— y creo que es verdad, mi vida esta llena de tragedia, que he intentado ocultar con una mentira, y eso está mal, pues porque deberia ocultar mi aprendizaje, acepto aquello para demostrar lo que valgo, mi pasado puede decir mucho de mi... pero nosostros somos los escritores de si hacer de aquello una vida miserable o seguir y convertir el fracaso en una vida valiosa.

Al escuchar estás palabras, algo despierta dentro de Komori.

— tienes razón, gracias Ralf — dice algo acelerada.

Komori tomas las llaves de su auto y se va.

— parece que si funcionó.... ve con todo — dice algo felíz.

El gran silencio que queda en el cementerio deja el sentimiento de tristeza y felicidad impregnados en Ralf.

— espero algún día encontrarte de nuevo... Racel...

(Mientras tanto Komori).

— Ralf tiene razón, como quiero arreglar las cosas si solo quiero sepultarlo.

Ella conduce a toda velocidad.

— la única forma de ser felíz... es perdonar mis errores.
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— hacer las pases con el pasado...