Como ya dije, Esta historia es una remasterización de otra historia Shinokana que hice en mi primer cuenta, habrán cosas diferentes pero en general la trama es la misma. La historia se llama Amor de mariposas por si quieren buscarla

El sol comenzaba a descender en el horizonte, bañando la finca mariposa en un cálido resplandor dorado. Las flores en el jardín vibraban con vida, sus colores brillantes contrastaban con el suave verde del campo. En ese tranquilo refugio, Kanao Tsuyuri se encontraba en el patio, jugando distraídamente con una moneda que giraba entre sus dedos.

La moneda, un regalo de su hermana fallecida Kanae Kocho, tenía un significado especial para Kanao. Cada vez que la sostenía, recordaba las lecciones que su le había enseñado sobre la perseverancia y la fuerza. La moneda brillaba a la luz del atardecer, y Kanao, absorta en sus pensamientos, no podía evitar que su mente divagara hacia Shinobu.

Mientras lanzaba la moneda al aire, observó a Tanjiro Kamado, Inosuke Hashibira y Zenitsu Agatsuma entrenar en el campo cercano. Sus risas y gritos resonaban en el aire, llenando el espacio con una energía vibrante. Tanjiro, siempre tan decidido y optimista, dirigía el entrenamiento con una pasión que inspiraba a todos a su alrededor. Kanao sonrió al ver la forma en que se esforzaban, pero al mismo tiempo, una sensación extraña comenzó a burbujear en su interior.

- ¿Por qué estoy pensando tanto en la maestra Shinobu? - se preguntó Kanao, frunciendo el ceño mientras atrapaba la moneda en el aire. Su rostro se iluminó con la luz dorada del sol, pero su mente estaba en una lucha interna. Kanao se sintió confusa, un torbellino de emociones luchando por salir a la superficie.

Mientras observaba a Tanjiro y los demás, recordó los momentos que había pasado con Shinobu y los que están por venir. Su risa melodiosa, su inquebrantable determinación, la forma en que siempre estaba dispuesta a ayudar a los demás. Pero había algo más, un sentimiento que no podía identificar del todo. No era solo admiración; había un matiz de deseo, de conexión, que la hacía sentirse vulnerable.

- Tal vez estoy demasiado obsesionada con ella - murmuró Kanao para sí misma, girando la moneda entre sus dedos de nuevo. Sin embargo, cada vez que pensaba en Shinobu, su corazón latía más rápido, una reacción que no podía ignorar. Se preguntó si esa sensación era normal, si otros habían experimentado algo similar.

En ese momento, Tanjiro se detuvo para tomar un trago de agua, y Kanao se dio cuenta de que lo estaba mirando con demasiada intensidad. Al notar su mirada, Tanjiro sonrió y le hizo un gesto con la mano.

- ¡Kanao! ¿Quieres unirte a nosotros? ¡Podemos entrenar juntos! - Grito el pelirrojo al ver a Tsuyuri sola recostando su espalda contra el muro

Kanao se sonrojó ligeramente, no porque se sintiera incómoda, sino porque sabía que su lugar estaba en la lucha, pero su corazón aún anhelaba algo más. Con un ligero movimiento de cabeza, se negó. La verdad era que su mente estaba ocupada en otro lugar.

- No, estoy bien - respondió, tratando de sonar despreocupada. En su interior, sentía un tirón hacia Shinobu, como si su presencia la llamara. Kanao miró hacia el campo de entrenamiento, y la risa de Inosuke resonó, rompiendo sus pensamientos.

- ¡Venga aqui señorita rara ¡No seas tímida! - gritó Inosuke, su energía desbordante siempre contagiaba a los demás.

Sin embargo, la mirada de Kanao se desvió de ellos hacia el rincón donde Shinobu suele entrenar. La cazadora de demonios era imponente y elegante, y Kanao la admiraba por su habilidad y gracia. A veces, Kanao deseaba tener la misma confianza y determinación que ella, y el hecho de que sus pensamientos giraran en torno a Shinobu solo aumentaba su confusión.

Decidió que necesitaba aire fresco, así que se levantó y se alejó un poco del patio, dirigiéndose hacia un pequeño sendero bordeado de flores. Mientras caminaba, giró la moneda entre sus dedos, sintiendo el frío metal contra su piel. La suave brisa acariciaba su rostro, y cada paso la acercaba más a sus pensamientos.

- ¿Por qué siento esto? - susurró Kanao a las flores que la rodeaban. Cada pétalo parecía un recordatorio de la belleza de Shinobu y de cómo ella siempre la está apoyado. La imagen de la cazadora sonriendo y ofreciendo su mano, siempre dispuesta a levantarse de nuevo, la llenó de calidez.

Kanao llegó a un claro donde el viento hacía que las mariposas danzaran en el aire, y se sentó en el suelo, rodeada de colores vivos. Cerró los ojos por un momento, tratando de calmar su mente agitada. Pero al cerrar los ojos, la imagen de Shinobu se hizo más clara, como si la misma luz del sol la estuviera envolviendo.

La risa de Tanjiro y sus amigos se desvaneció a lo lejos, y en su lugar, el eco de la voz de Shinobu resonó en su mente.

—Kanao, tienes que seguir tu corazón. La vida es corta y las oportunidades son efímeras.

Las palabras de Shinobu la llenaron de una mezcla de nostalgia y anhelo. Kanao sabía que sus sentimientos eran profundos, pero la inseguridad la mantenía atrapada. ¿Qué pasaría si se acercaba a Shinobu y su amiga no sentía lo mismo? ¿Y si arruinaba su amistad y hermandad?

- No puedo dejar que el miedo me detenga - murmuró, sintiendo una nueva determinación surgir en su pecho. Era un paso pequeño, pero importante. Tal vez debía encontrar una forma de expresar lo que sentía, en lugar de esconderlo detrás de la confusión.

Kanao se levantó, sacudiéndose el polvo de su traje de cazadora y peinado con un broche de mariposa en su costado, Miró al cielo, donde las nubes comenzaban a tomar tonos anaranjados y rosas. Con un profundo suspiro, se dirigió de regreso al patio, decidida a enfrentar sus sentimientos.

Al regresar, vio que Tanjiro había reunido a todos para una pequeña pausa. La atmósfera era de camaradería y alegría, y Kanao sintió que su corazón se aceleraba nuevamente. A lo lejos, vio a Shinobu, sus ojos brillando con una luz propia. La cazadora sonreía mientras conversaba con Tanjiro, sus gestos elegantes y seguros.

Kanao se detuvo por un momento, observando cómo Shinobu se movía con gracia, riendo y compartiendo historias. Su corazón latía con fuerza, y comprendió que la conexión que sentía iba más allá de la admiración.

- Tal vez sea hora de arriesgarme - se dijo a sí misma, sintiendo el calor de la determinación en su interior. A pesar de su timidez natural, algo en su interior la impulsaba a acercarse a Shinobu.

Con cada paso que daba hacia el grupo, la moneda en su mano brillaba bajo el sol. Cuando finalmente se unió a ellos, Kanao se sintió diferente. Había una nueva resolución en su corazón. Aunque el miedo aún estaba presente, también lo estaba la esperanza.

Tanjiro la saludó con una sonrisa amplia. - ¡Kanao! Nos alegra que te unas a nosotros. Estábamos a punto de comenzar de nuevo. -

Shinobu la miró, y su expresión se suavizó. - Me alegra verte, Kanao. ¿Cómo te va? - preguntó, su voz era dulce y melodiosa.

Kanao sintió su rostro arder, pero reunió el valor necesario para sonreírle. - Bien, estaba... pensando en algunas cosas -

- Siempre es bueno pensar, pero a veces es mejor actuar - dijo Shinobu, guiñándole un ojo de manera juguetona. Kanao sintió un escalofrío recorrer su espalda. Había algo en la forma en que Shinobu la miraba que la hacía sentir viva.

La risa de Zenitsu interrumpió sus pensamientos. - Kanao, ¿por qué no te unes a nosotros en el entrenamiento? - Necesitamos a todos los guerreros que podamos para ser más fuertes.

Kanao miró a Tanjiro, luego a Shinobu, sintiendo el empuje de la camaradería. - Está bien, quiero intentarlo - respondió, sintiendo que su voz era más firme de lo que esperaba.

- Eso es lo que quiero escuchar - dijo Tanjiro con entusiasmo, y antes de que Kanao pudiera dudar, se unió a ellos en el campo de entrenamiento.

Mientras comenzaban a entrenar, Kanao se sintió más ligera, como si el peso de sus preocupaciones se desvaneciera. Y aunque su corazón seguía latiendo rápido al pensar en Shinobu, ahora había una mezcla de emoción y esperanza. Tal vez el futuro que deseaba no estaba tan lejos como pensaba.

Mientras se movía, la moneda en su mano recordaba a Kanao que estaba lista para enfrentar su destino. Y con cada golpe, cada movimiento, se prometió a sí misma que, algún día, encontraría el valor para abrir su corazón y dejar que su amor por Shinobu salga a la luz

Final del capitulo 1

Advierto que esta historia tendra 1 capítulo lemon y que Shinobu sera la G!P en el. (Solamente en ese capítulo sera futa Shinobu, en el resto de la historia sera normal, aclaro por si acaso)