
01
En una de las cárceles más asegurada de California, en una de las celdas se encontraba Min Yoongi, un asesino serial psicópata que simplemente, no conoce la culpa.
Y parado justo en frente de esa celda se encontraba Jung Hoseok, un psicólogo, muy atractivo, de unos veintitrés años de edad.
—Te diré lo que necesitas saber de Min Yoongi— un oficial, en compañía de un mayor empezó.
—Te escuchó.
—Tiende a ser manipulador, irritable, explosivo, violento y abusa de los demás. Evita mucho contacto visual con él, se dice por ahí que puede robar tu alma...
—Eso es estúpido— interrumpe.
—Solo se dice. Ya para finalizar, solo puedo desearle suerte.
—Mayor Jeon, se lo que hago y hago a la perfección mi trabajo— mira a el mayor luego de la pequeña "charla" con el oficial.
—Bien, le creo Jung. El oficial Park estará aquí, si le hace algo no dude ni un segundo en avisarle ¿Entendido?
—¿Que podría hacerme? Tiene una camisa de fuerza.
—Nunca se sabe lo que puede venir de alguien como él.
—¿No cree que sería mejor que alguien más me acompañé?— pregunto temeroso Park.
—En un rato llegará el oficial Kim, solo espera un poco Park.
—¿Puedo empezar con mi labor?— pregunto Hoseok cansado.
—Claro.
—Bien Yoongi, me presentaré. Soy Ho...
—Shh, no me digas Yoongi, no me gusta— interrumpe.
—¿Que prefieres?
—Llamame Suga.
—¿Te recuerda a tus días de gloria?
—Aun sigo en mis días de gloria.
—Estas atrapado en una horrible celda ¿De verdad crees que es la gloria?
—Pero estás tú— una sonrisa coqueta apareció en sus labios.
—Mira Min, no creo que sea momento de coqueteos ¿Entiendes? Vine a ayudarte no a enamorarte— la sonrisa de Yoongi solo crecía más.
—Esta bien Hoseok, empecemos— dijo con voz ronca, tan... Sexy.
—Señor Hoseok, para tí.
—Como gustes cariño.
—Tengo algo en mente para tu primera terapia.
—Yo no tengo nada en mi mente— una estruendosa carcajada proveniente de él se escucha.
—Primero, quiero que me cuentes de tí.
—¿Que quieres que te diga?
—Todo— lo mira fijamente.
—¿Que es todo?— se acerca un poco.
—Todo de tí— susurra casi inaudible.
—Veinticinco años de locura pura, coqueto, encantador, el hombre de tus sueños quizás— sonríe.
—¿Ah si?— dijo con el entrecejo fruncido.
—Por supuesto.
—¿A qué se debe la extravagante manera de asesinar a tus víctimas?
—Diversión— se encoge de hombros.
—¿Solo eso?— estaba confundido.
—Cariño, amo lo que hago, a diferencia de muchos. Pueden decir que estoy loco y tal vez si, pero hago lo que me gusta.
—¿Insinuas algo hacía mi?
—Claro que no— un tono lleno de sarcasmo.
—Yo amo lo que hago.
—Repitelo hasta que te lo creas— sonríe.
—Eres difícil, pero no imposible de tratar.
—No si yo trato contigo antes— una sonrisa aparece en los labios de Jung.
—Imposible, mi querido terroncito de azúcar.
—Ya veremos— se para y comienza a caminar en círculos al rededor de la mesa y silla donde se encuentra Hoseok.
—¿Por qué te gusta asesinar a lo loco?
—Es entretenido, ya te lo dije.
—No me refiero a eso, quiero decir... Armaste una masacre en el cumpleaños de una niña de cinco años.
—Ese payaso no me quería dar un globo en forma de perrito, para algo le pagan ¿No?
—¿Y era necesario matarlo?
—Si.
—¿Que hay del padre y la madre de la niña?
—Nadie los llamo, ellos solitos se aparecieron.
—¿Y las niñas presentes?
—Les hice un favor.
—¿Por qué lo dices?
—Ellas lloraban mucho, yo simplemente hice que dejarán de hacerlo.
—Tu manera de pensar es perturbadora.
—Yo no pienso.
—Entiendo lo que quieres decir.
—¿Hay algo que me quieras decir de tí, lindo?
—No hay mucho que contar.
—Entonces yo te diré lo que se de ti.
—¿Y que dices tú saber?
—Veintitres años, estudiaste en una de las universidades más prestigiosas del país, pero según tu puntaje de ingreso te viste obligado a estudiar psicología, tu madre está enferma de diabetes y la única razón por la que aceptas tratarme es porque te pagarán muy bien ¿Me equivoco? No, claro que no me equivoco.
—Tengo estás pastillas, le avisaré al oficial Kim tus horarios, vendre en una semana para ver tu avance.
—¿Tan rápido se va Jung Hoseok?
—Adiós Yoongi.
—Fue un gusto verte Hoseok.
Jung sale muy confundido de la celda, encontrandose a los dos oficiales.
—¿Le hizo algo?— pregunta Kim.
—Para nada, simplemente es alguien difícil.
—Debo admitir que usted es muy valiente Jung, el loco Suga es alguien de quien temer.
—No se le puede catalogar a alguien loco sin conocerlo mucho, pero tengo una pastilla que deberán darle cada doce horas, pues son fuertes, por una semana. Yo vendre y veré si ha avanzado.
—¿Solo eso?— Kim Taehyung estaba confundido.
—Solo eso— repite lentamente— y no Park, yo no le tengo miedo a Mi Yoongi.
Y sin agregar nada más, Jung Hoseok se retira de el lugar, dejando muy desconcertados a los oficiales.
Holaaaa
Está historia realmente es una de mis favoritas😍 es una adaptación a él romance entre el Wason y Harley y por eso me encanta...
Está historia es corta, unos cuantos capítulos más y ya se termina 🙈😁
¡Los quiero!
Nos leemos😘
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro